ES/SB 9.24.65
TEXTO 65
- yasyānanaṁ makara-kuṇḍala-cāru-karṇa
- bhrājat-kapola-subhagaṁ savilāsa-hāsam
- nityotsavaṁ na tatṛpur dṛśibhiḥ pibantyo
- nāryo narāś ca muditāḥ kupitā nimeś ca
PALABRA POR PALABRA
yasya—cuyo; ānanam—rostro; makara-kuṇḍala-cāru-karṇa—adornado con pendientes en forma de tiburón y con hermosas orejas; bhrājat—brillante y adornada; kapola—frente; subhagam—proclamando toda opulencia; sa-vilāsa-hāsam—con sonrisas de disfrute; nitya-utsavam—siempre que se Le ve, es como una fiesta; na tatṛpuḥ—no podían hallar satisfacción; dṛśibhiḥ—por ver la forma del Señor; pibantyaḥ—como si bebiesen con los ojos; nāryaḥ—todas las mujeres de Vṛndāvana; narāḥ—todos los devotos varones; ca—también; muditāḥ—plenamente satisfechos; kupitāḥ—enfadados; nimeḥ—el momento en que el parpadeo de los ojos les molesta; ca—también.
TRADUCCIÓN
Kṛṣṇa tiene el rostro adornado con pendientes en forma de tiburón y otras alhajas. Sus orejas son muy hermosas, Sus mejillas, brillantes, y Su sonrisa, atractiva para todos los seres. Quien ve al Señor Kṛṣṇa, contempla un festival. Su cara y Su cuerpo satisfacen plenamente a todo el que los ve, pero los devotos están enfadados con el creador por la molestia que les causa el momentáneo parpadeo de los ojos.
SIGNIFICADO
En el Bhagavad-gītā (7.3), el propio Señor afirma:
manuṣyāṇāṁ sahasreṣu
kaścid yatati siddhaye
yatatām api siddhānāṁ
kaścin māṁ vetti tattvataḥ
«De entre muchos miles de hombres, puede que uno se esfuerce por alcanzar la
perfección; y de entre aquellos que han logrado la perfección, difícilmente uno
Me conoce en verdad». Solo quien se ha cualificado para entender a Kṛṣṇa puede
apreciar debidamente la presencia de Kṛṣṇa en la Tierra. De entre los Bhojas, Vṛṣṇis,
Andhakas, Pāṇḍavas y muchos otros reyes íntimamente ligados a Kṛṣṇa, la relación
íntima que unía a Kṛṣṇa con los habitantes de Vṛndāvana merece una consideración
especial. Esa relación se explica en este verso con las palabras nityotsavaṁ na tatṛpur
dṛśibhiḥ pibantyaḥ. Los pastorcillos de vacas, las vacas, los terneros, las gopīs, los
padres de Kṛṣṇa y los demás habitantes de Vṛndāvana eran especiales, pues, aunque
veían los hermosos rasgos de Kṛṣṇa constantemente, nunca estaban del todo satisfechos. En este verso se dice que ver a Kṛṣṇa es nitya-utsava, un festival diario. Los
habitantes de Vṛndāvana veían a Kṛṣṇa casi a cada instante, pero, cuando Kṛṣṇa salía
de la aldea para sacar a las vacas y terneros a pastar, las gopīs sufrían mucho, porque
veían a Kṛṣṇa caminando sobre la arena, y pensaban que los pies de loto de Kṛṣṇa, que
ellas no se atrevían a poner sobre sus senos por no considerarlos lo bastante suaves,
estaban sufriendo los pinchazos de los guijarros del camino. Solo de pensarlo, las
gopīs se afligían y lloraban en sus hogares. Esas gopīs, que eran fervientes amigas de
Kṛṣṇa, veían a Kṛṣṇa constantemente, pero llegaron a condenar al creador, el Señor
Brahmā, porque los párpados las molestaban cuando miraban a Kṛṣṇa. En este verso
se describe, entonces, la belleza de Kṛṣṇa, y en especial la belleza de Su cara. Al final
del Noveno Canto, en el capítulo veinticuatro, hallamos un indicio de la belleza de
Kṛṣṇa. Ahora vamos a entrar en el Décimo Canto, que se considera la cabeza de
Kṛṣṇa. En su conjunto, el Śrīmad-Bhāgavata Purāṇa manifiesta la forma de Kṛṣṇa,
y el Décimo Canto es Su cara. Este verso nos da un indicio de la gran belleza de Su
rostro. Las gopīs observaban hasta el último detalle de la sonriente cara de Kṛṣṇa, con
Sus mejillas, Sus labios, los adornos de Sus orejas, la forma en que mascaba nueces de
betel, y de ese modo disfrutaban de tanta felicidad trascendental que nunca se sentían
completamente saciadas de ver la cara de Kṛṣṇa, y llegaron a condenar al creador del
cuerpo por haberle puesto párpados que interrumpían su visión. Por lo tanto, las gopīs
estaban mucho más atraídas por la belleza del rostro de Kṛṣṇa de lo que pudieran
estarlo Sus amigos los pastorcillos de vacas, o incluso Yaśodā Mātā, quien también se
deleitaba en adornar el rostro de Kṛṣṇa.