ES/660406 - Clase BG 02.51-55 - Nueva York

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



660406BG-Nueva York, 6 abril 1966 - 58:46 minutos



Prabhupāda:

karma-jaṁ buddhi-yuktā hi
phalaṁ tyaktvā manīṣiṇaḥ
janma-bandha-vinirmuktāḥ
padaṁ gacchanty anāmayam
(BG 2.51)

Ahora, en nuestra última reunión estábamos hablando sobre este verso, que karma-jam, que cada acción, cada una de las actividades en las que estamos ocupados, tiene una reacción. Cualquier actividad tiene una reacción. Y esa reacción es otra atadura para mí. Ahora estoy ocupado en una acción y estoy produciendo otra reacción. Ahora, en la actualidad estoy atado por una clase de actividades y estoy produciendo otra clase de actividades. Tal como en los carretes cinematográficos, hay cientos y miles de imágenes. Una imagen que ha pasado, una imagen que está presente y otra imagen que está por venir. Todas las imágenes, cuando se ponen en la máquina, representan alguna actividad. Nosotros estamos atados por las leyes de la naturaleza de tal manera... ¿Por qué sólo por las leyes de la naturaleza? Incluso por las leyes del Estado, estamos atados por tantas leyes.

Ésta es nuestra situación. Esto se denomina el estado condicionado de vida. No hay libertad. La supuesta libertad... Afirmamos que: “Pertenezco a esta nación libre. Soy libre”. Todo esto son simplemente especulaciones mentales. No hay libertad. Mientras esté atado por las condiciones de la naturaleza, no hay libertad. Ahora, aquí hay una oportunidad... El Señor Kṛṣṇa dice: karma-jaṁ buddhi-yuktā. Ahora, aquí hay una oportunidad para ustedes. En su forma humana de vida, tienen la suficiente inteligencia y el Señor Mismo está ante ustedes para iluminar su inteligencia cada vez más. Aquí está el libro. En este libro, lo que habla el Señor Kṛṣṇa y Kṛṣṇa no es diferente. Porque Kṛṣṇa, o el Señor, está en el plano absoluto. No piensen que Kṛṣṇa está ausente. Kṛṣṇa está presente aquí. Hay un verso en el Bhāgavata, tatra tiṣṭhāmi nārada yatra gāyanti mad-bhaktāḥ: “Yo... Mi querido Nārada,...”. Nārada es un gran devoto. Tal vez ustedes, que están habituados a las literaturas védicas, han escuchado el nombre de Nārada. Nārada es un gran devoto, y el Señor le asegura: “No piensen que vivo en el reino de Dios, o que vivo en el corazón de un gran místico, o en alguna otra parte, en alguna otra parte... La gente puede pensarlo. Pero Yo vivo en aquel lugar donde mis sinceros devotos se reúnen para hablar sobre Mí”.

Aquí tenemos que entender que si sinceramente y de forma seria aceptamos el mensaje del Bhagavad-gītā tal como es, sin ninguna, quiero decir, adulteración... A veces está adulterado por... Porque el Bhagavad-gītā es un libro muy autoritativo, y es muy popular por todo el mundo, algunas veces la gente se aprovecha de este libro y presentan sus propias teorías de una forma adulterada. Ni que decir de otros... Les puedo decir francamente, que incluso en nuestro país, el más grande, quiero decir, el político más santo, Mahatma Gandhi, postuló una filosofía de no-violencia. Tal vez lo saben, cada uno de ustedes, que el postuló la no-violencia y quiso probar la no-violencia con el Bhagavad-gītā. Él tiene un comentario del Bhagavad-gītā y trató de probar que el Bhagavad-gītā es la prueba de la no violencia. Pero en realidad el Bhagavad-gītā se habló en un campo de batalla, donde todo el mundo estaba dispuesto para comenzar la violencia. Sólo por un momento, cuando Arjuna tenía su mente perturbada: “¿Cómo puedo luchar contra mis familiares y amigos, hijos y nietos y tantas otras cosas?”. Con mis relaciones corporales. Y se habló el Bhagavad-gītā. Esto es algo práctico que el Bhagavad-gītā se habló prácticamente para inducir a Arjuna a emprender la violencia. Ahora, Mahatma Gandhi, su filosofía era la no-violencia. ¿Cómo pudo probar que el Bhagavad-gītā da evidencia de no-violencia? No. Por lo tanto, nadie, ni Mahatma Gandhi ni nadie que tenga su propia segunda intención para probarla con los contenidos del Bhagavad-gītā, puede adulterarlo. Pero éste no es el proceso de leer el Bhagavad-gītā. El Bhagavad-gītā, cómo leer el Bhagavad-gītā, se afirma en el Bhagavad-gītā. Cuando lleguemos al capítulo cuarto lo sabremos. De todas maneras además del proceso de... Pero pueden estar seguros que aquí hablamos el Bhagavad-gītā tal como es. No vamos a añadir, añadir en él algo para satisfacer nuestra propia filosofía, nuestros propios puntos de vista.

Aquí el Señor Kṛṣṇa dice, que si quieren deshacerse de este enredo de… ¿Cuál es este enredo? Janma-bandha, janma-bandha. Oh, es un gran enredo. La gente no lo toma muy seriamente. El nacimiento. Nacimiento quiere decir que tan pronto como el nacimiento... Sólo una palabra ha sido usada aquí, janma. Janma quiere decir nacimiento. Pero nacimiento quiere decir también otras cosas. Nacimiento quiere decir muerte. Nacimiento quiere decir vejez. Nacimiento quiere decir enfermedad. Siempre que se produce el nacimiento todas las otras cosas son corolarios. Le acompañarán. Su nacimiento quiere decir... Un hijo nace. Oh, están muy contentos: “Tengo un hijo”. Pero si lo estudian filosóficamente, no, no es el nacimiento. No ha nacido. La muerte ha nacido. Debido a que el crecimiento del niño quiere decir que está muriendo. Está muriendo. Es el proceso de morir. Desde el mismo día, desde el mismo momento que el niño nace comienza el proceso de morir. Pero no sabemos que no es el nacimiento, que es la muerte. Esto se llama māyā. Esto se llama ilusión, porque la muerte ha nacido y nosotros estamos tan felices de que tenemos el nacimiento de un niño. Esto se llama māyā. Así, en todo, desde el principio de nuestro nacimiento estamos en ilusión, en ilusión. Y esta ilusión es tan fuerte, que es muy, muy difícil salir de ella. Todo es ilusión. El nacimiento es una ilusión. Este cuerpo es una ilusión. Y las relaciones corporales, el país es ilusión. El padre es ilusión. La madre es una ilusión. La esposa es ilusión. Los hijos son ilusión. Todo es ilusión. Y estamos encerrados en esta ilusión. Pensamos que somos muy eruditos y muy avanzados y tantas otras cosas que nos imaginamos. Pero tan pronto como la muerte llega, el hecho real, el comienzo de la muerte, entonces olvidamos todo. Podemos olvidar nuestro país. Olvidamos nuestros familiares. Olvidamos nuestra esposa, hijos, padre, madre —todo se va. ¿Lo ven? Si es una realidad que yo soy alma, eterno, entonces también es una realidad que en mi vida anterior tuve un país. Tuve unos hijos. Tuve una casa. Tuve un padre y tuve todo. ¿Pero pueden recordar alguna de estas cosas, dónde estaban en su vida anterior? Tanto como seres humanos, una vida en la que nacimos como seres humanos o en una vida animal, no pueden... Muerte quiere decir olvido. Lo hemos olvidado todo. En realidad no hay muerte para el alma. Tal como ustedes son... Por la noche van a dormir. De modo que esto es una muerte corta. Y de nuevo se levantan por la mañana. La muerte es algo así. La muerte consiste en dormir por siete meses. Eso es todo. Sin ninguna conciencia. Por tres, tres meses, sin ninguna conciencia. O digamos, por siete meses. Muerte quiere decir olvido. Tal como cuando dormimos, olvidamos todo, qué soy, dónde estoy durmiendo, quién soy, cuál es mi identidad, todo se olvida. Luego de nuevo, tan pronto como levanto en la mañana, recuerdo: “Oh, yo soy tal y tal funcionario. Soy tal y tal padre, tal y tal marido y tengo que hacer tal y tal cosa”. Todo se recuerda. Pero durante su sueño lo olvidan todo. De forma similar, muerte quiere decir desde el momento en que dejan este cuerpo y entran en el vientre de otra madre, y mientras el otro cuerpo no está desarrollado, permanecen inconscientes. Y tan pronto como el otro cuerpo se desarrolla dentro del vientre de la madre y llega el tiempo de salir, entonces de nuevo recuerdan.

Prácticamente no existe la muerte. La muerte quiere decir cambiar el cuerpo. Ya hemos hablado sobre este punto. Ahora... Pero este janma, este nacimiento, oh, se afirma aquí que es una atadura. Janma-bandha. Bandha significa atadura. Hay una similitud práctica en inglés. Se llama bandha. Y en inglés, “bond”, atadura. Hay una similitud de sonido. Janma-bandha. Este janma, mientras que, mientras que su mente esté absorta en las actividades de este mundo material, es seguro que nacerán de nuevo. Estas actividades, tienen que ser purificadas mediante la inteligencia, de tal forma, para que dejen de afectarles. Para que dejen de afectarles. Ésta es la táctica. Esta táctica... Tenemos que ser muy serios. Tenemos que ser muy serios, porque muchas, muchas vidas, hemos pasado muchas, muchas vidas, pero no había oportunidad de salir de estas tribulaciones del nacimiento, la muerte, la vejez y las enfermedades. Ahora, aquí está la oportunidad. Aquí está la oportunidad en la forma humana de vida. Todos los hombres inteligentes deben aprovecharse de ello y pueden conseguir ayuda de estos libros autorizados, del Bhagavad-gītā y del Śrīmad-Bhāgavata. Y también un consejo experto, conocimiento. De modo que, no debemos perder esta oportunidad. Y entonces, la pregunta es: “Supongamos que mi, después de este, después de dejar este cuerpo, el cuerpo actual, ya no tengo más, janma. ¿Qué me pasará?”. Eso es... Esto también se afirma aquí. Janma-vi..., janma-bandha-vinirmuktāḥ padaṁ gacchanty anāmayam. Anāmayam. Āmayam. Āmayam quiere decir contaminación. Āmayam, contaminación. Esta vida contaminada, tan pronto como dejamos esta vida contaminada, somos promovidos a una atmósfera sin contaminación, anāmayam. Anāmayam. Anāmayam quiere decir Vaikuṇṭha. Vaikuṇṭha quiere decir allí donde no hay ansiedad. Creo que sobre esta ansiedad ya les hemos explicado en nuestra última reunión.

Nosotros somos, somos elevados, somos elevados a una vida donde no existe el nacimiento, ni la muerte ni la enfermedad, ni la vejez. Y eso quiere decir, que volvemos a nuestra vida normal. Es algo que queremos de forma normal. Nadie quiere la enfermedad. Nadie quiere la muerte. Nadie quiere la vejez. Nadie quiere sufrir el suf..., quiero decir, las miserias del nacimiento. Oh. Hay miserias muy grandes cuando están en el vientre de una madre, herméticamente empaquetados en una bolsa, una bolsa que nos ahoga. No sabemos ni cómo podemos vivir. Y si nos ponemos de nuevo en esa situación, sería muy difícil. No podríamos sobrevivir ni por algunos segundos. Pero por el arreglo de la naturaleza, o de Dios, vivimos en el vientre de nuestra madre durante diez meses en esa situación. Sin embargo lo hemos olvidado. Pero simplemente imagínense en cuántas dificultades estuvieron. Esto es... en estas cosas se tiene que pensar. Estos son pensamientos inteligentes. Ahora, aquí está la oportunidad de deshacerse de estas, todas estas miserias —las miserias del nacimiento, las miserias de la muerte, las miserias de la vejez y las miserias de, quiero decir, de la enfermedad.

Ahora, esto.. Ahora estamos hablando un resumen; el Bhagavad-gītā, este Segundo Capítulo es un resumen de lo que va a explicarse más detalladamente. No más detalladamente, sino con mayor claridad, que se va a explicar en los capítulos posteriores. Ahora, el Bhagavad-gītā es el estudio preliminar del Śrīmad-Bhāgavatam. Tal como una introducción, un estudio introductorio. Ahora, ¿cómo podemos en la práctica realizar actividades que no nos aten, quiero decir, a una reacción? Esto se explica en el Śrīmad-Bhāgavatam:

sa vai puṁsāṁ paro dharmo
yato bhaktir adhokṣaje
ahaituky apratihatā
yayātmā suprasīdati
(SB 1.2.6)

Ātmā suprasīdati. Ātmā quiere decir el ser. Nuestra situación actual es que no somos felices. Estamos siempre llenos de ansiedades. Ésta es nuestra situación actual. Ahora, aquí, exactamente se usa la palabra contraria, yayā ātmā suprasīdati. Si realmente quieren, si realmente quieren ser felices, estar llenos de felicidad, deben buscar su ocupación de tal manera que ésta les dirija hacia el servicio devocional del Señor Supremo. Sa vai puṁsāṁ paro dharmaḥ. Para quiere decir el más elevado, o el trascendente. Estamos ocupados en alguna clase de actividades. Nadie está libre de actividades. Incluso una hormiga, una hormiga también está ocupada en actividades. Y el elefante. La hormiga es la más, quiero decir..., que de acuerdo con nuestra visión, la hormiga es muy pequeña y el elefante es muy grande. Pero todo el mundo, comenzando desde la hormiga y hasta llegar el elefante, en lo que a nuestra experiencia se refiere... Hay otros grandes animales también. No los hemos visto. Pero podemos ver por la descripción de las Escrituras que existen peces en el océano que reciben el nombre de timiṅgila. Así, timiṅgila... Ustedes tal vez conocen el pez que en sánscrito es llamado, timi matsya, o ballena, muy grande, algunas veces de cien pies de largo. Pero existen otros peces que son los timiṅgila. Estos peces se tragan a estos otros, estos de cien pies de largo. Ahora simplemente imagínense cuál es el largo del cuerpo de este pez. ¿Lo ven?

En la creación de Dios hay tantas cosas maravillosas. No las hemos visto todas. Pero todo el mundo está dedicado a alguna clase de ocupación para su subsistencia. Nadie está silencioso. Nadie está silencioso. De acuerdo a su naturaleza, a las modalidades de la naturaleza y su posición, todo el mundo está ocupado. Ahora, el Bhāgavata dice: sa vai puṁsāṁ paro dharmaḥ. Todo el mundo está ocupado, pero cuando uno está ocupado en un trabajo que nos lleva al servicio devocional del Señor, esa tarea, esa ocupación es la más elevada. Esa ocupación es la más elevada. Sa vai puṁsaṁ paro dharmaḥ. Para quiere decir la más elevada. Y esta clase de ocupación debe ser sin ningún motivo. En todo lo que se hace, en todo lo que se hace, en lo que a nuestros deberes se refiere —existe un motivo. Hago esto porque quiero esto. De modo que hay una causa y un efecto. Pero esta clase de tarea, esta clase de ocupación que nos lleva al servicio devocional del Señor, no tiene causa. Ahaituki. No tiene causa. ¿Por qué no tiene causa? Tal como un amante, o digamos, amante, amado, déjenlo de lado. Tal como una madre. Una madre ama a su hijo. No hay causa. Ella no sabe: “Por qué lo estoy amando”. Automáticamente. Ella ama automáticamente. De forma similar, tenemos nuestra relación con la suprema conciencia. Nosotros somos conciencia. Esto se acepta. Ahora, existe una suprema conciencia también. Simplemente vamos a tener algún cálculo de lo que es la suprema conciencia. Ahora, la suprema conciencia... La conciencia se describe en el Bhagavad-gītā: yena sarvam idaṁ tatam. La conciencia se distribuye por todo el cuerpo. Con esto podemos hacer un experimento. Pero esta conciencia no, quiero decir..., se expande por toda la manifestación cósmica. Esto es también una realidad. Mi conciencia se expande por mi cuerpo. Su conciencia se expande por su cuerpo. Yo no sé lo que están pensando ahora y ustedes no saben lo que yo estoy pensando. Por lo tanto, mi conciencia es individual, y su conciencia es individual. Pero existe la Superalma que sabe lo que yo estoy pensando, lo que ustedes están pensando, lo que él está pensando y lo que todo el mundo está pensando. Ésta es la superconciencia.

De modo que la superconciencia y la conciencia individual. Nuestra relación entre la superconciencia y la conciencia individual es eterna, eterna. No pueden estar, quiero decir, separados. Por lo tanto mi posición es... Tal como hay alguien que es superior y alguien que es inferior. Aquel que es inferior está subordinado a quien es superior, y aquel que es inferior debe actuar conforme a lo que le indica quien es superior. Tal como aquí se enseña que Kṛṣṇa es la superconciencia; Él está tratando de convencer a Arjuna de que: “Actúa conforme a Mi dirección. Porque tú eres conciencia individual, subordinado a Mí, y Yo soy la Superconciencia”. Y en la última fase del Bhagavad-gītā, verán que Él resume, el Señor Kṛṣṇa resume, sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja: (BG 18.66). “Simplemente entrégate a Mi”. Ésta es la suma y substancia de todo. Por eso, la conclusión es que la conciencia individual debe entregarse a la suprema conciencia y actuar en consecuencia. Ésta es la posición para mantenerse en el plano consciente. Ésta es la posición del plano consciente. Y el Bhagavad, el Śrīmad-Bhāgavatam también dice: sa vai puṁsāṁ paro dharmaḥ, las actividades, la ocupación, las tareas que nos conducen a esta conciencia, esta conciencia que: “Yo soy subordinado a la suprema conciencia”, y voy a actuar conforme a la suprema conciencia, sin ningún motivo, ahaituki, sin... “¿Por qué voy a actuar?”. No hay posibilidad de tal pregunta. Es automático, es automático. Tal como un hijo pequeño y la madre... El hijo pequeño está automáticamente subordinado a la madre. Cualquier cosa que la madre dice, el niño lo hace. El niño es completamente dependiente. De forma similar, tan pronto como hacemos que nuestra conciencia esté completamente ocupada en el servicio de la suprema conciencia, estamos en nuestra posición liberada. Estamos en nuestra posición liberada. Y en esta posición liberada, en cualquier cosa que hagamos no habrá reacción. Ésta es la posición trascendental.

¿Qué es lo que Śrī Kṛṣṇa dice aquí? Que karma-jam, karma-jam (BG 2.51), que: “Cualquier trabajo que realicen, va a generar una reacción para su futuro disfrute o sufrimiento. Pero si actúan de forma inteligente, en colaboración con la suprema conciencia, quedarán libres de la atadura del nacimiento, la muerte, la vejez y las enfermedades, y en su siguiente vida... Éste es un período de entrenamiento. Esta vida será un período de entrenamiento, y tan pronto como están totalmente entrenados, el siguiente resultado será que después de dejar este cuerpo vendrán a Mi reino”. Tyaktvā dehaṁ punar janma naiti mām eti kaunteya (BG 4.9). En esto consiste todo el proceso.

De modo que esa clase de actividades que nos lleven a esa posición en la que estemos vinculados, en la estemos vinculados con la suprema conciencia... Tal como esta mañana estaba dando un ejemplo. Es tal como un coche que pasa a una velocidad de sesenta millas y hay un ciclista que también está pasando. Si el ciclista se agarra del coche, él puede avanzar con la misma velocidad, a una velocidad de sesenta millas sin ni siquiera pedalear. De forma similar, si podemos unir nuestra conciencia con la conciencia suprema, entonces toda nuestra vida se vuelve exitosa. Éste es el punto. Ahora, ¿cómo unirnos? La religión. Todos los procesos religiosos en el mundo son lo mismo, quiero decir, se trata de experimentales... o fórmulas o rituales, para que uno puede unirse con la suprema conciencia. Todas las religiones. Pero si uno se siente atraído sólo por los rituales o las fórmulas y se pelea sobre ese punto: “Oh, mi Biblia dice esto” o yo digo: “No, mis Vedas dicen así”, y los musulmanes, los musulmanes, dicen: “No, mi Corán dice esto, el tuyo no está correcto”, entonces, nos volvemos apegados sólo a los rituales. Nos olvidamos, nos olvidamos del verdadero propósito. El verdadero propósito es... Todo el proceso consiste en cómo vincularse, cómo yo puedo vincularme con la suprema conciencia. Ir a la iglesia no es una formalidad, sino que lo real es poder elevarme gradualmente para vincularme con la suprema conciencia de Dios. Ésta es la verdadera fórmula. Kṛṣṇa dice: karma-jaṁ buddhi-yuktā hi. Cuando estamos ocupados de esta manera, nos libramos de este: janma-vinirmuktāḥ. Y el siguiente śloka es, yadā te moha-kalilaṁ, gantāsi nirvedaṁ śrotavyasya śrutasya ca (BG 2.52): “Cuando se elevan a este plano, cuando se vinculan con la suprema conciencia, ya no hay más requisitos para entender las Escrituras o los rituales o los procesos religiosos. Tienen... son trascendentales a todo ello, a toda esta parafernalia”. Yadā te moha-kalilaṁ buddhir vyatitariṣyati: “Cuando su conciencia se vincula en cooperación con la suprema conciencia, son trascendentales a la posición de este estado ilusorio”. Yadā te moha-kalilaṁ buddhir vyatitariṣyati, tadā gantāsi nirvedam: “En ese momento se vuelven indiferentes a todos estos rituales porque su posición y sus actividades ya están establecidas”. Śrotavyasya śrutasya ca: “Todo lo que han escuchado y todo lo que tienen que escuchar en el futuro, todo se acaba”.

Por lo tanto, todo depende de cómo se adaptan con la suprema conciencia. Y si no podemos... El siguiente verso en el Śrīmad-Bhāgavatam dice que:

dharmaḥ svanuṣṭhitaḥ puṁsāṁ
viṣvaksena-kathāsu yaḥ
notpādayed yadi ratiṁ
śrama eva hi kevalam
(SB 1.2.8)

Śrama eva hi kevalam. Si por realizar todos los rituales religiosos muy bien y muy perfectamente, no conseguimos adaptarnos con la suprema conciencia, entonces todo nuestro trabajo al realizar estos rituales y ceremonias religiosas es sólo una obra de amor. No produce nada substancial, nada substancial. Nanu niṣkarmāṇi karmāṇi kurvata me.(?) Ésta es la pregunta de Arjuna, que: “Cuando sea autorrealizado por realizar actividades sin ningún resultado fruitivo, ¿cuál será la situación de mi autorrealización?”.

Esto, en respuesta a esta pregunta: “Cuando seas indiferente a todos los rituales religiosos y a los mandamientos de las Escrituras y simplemente te ocupes en el... en actividades que te unan con la superconciencia, entonces estarás en una posición trascendental a todos los rituales religiosos y todos los conceptos de las ceremonias religiosas y de todo”. Así es. Pero en el principio, necesitas de todas estas cosas. Por lo tanto el Bhāgavata dice que aquel tipo de religión que los eleve a esta clase de conciencia, es el tipo supremo de religión:

śruti-vipratipannā te
yadā sthāsyati niścalā
samādhāv acalā buddhis
tadā yogam avāpsyasi
(BG 2.53)

Ésta es la posición del yoga. Yoga, samādhi. Samādhi quiere decir estar siempre en el.... situado en la superconciencia, situado en las actividades de vincularse con la superconciencia. Eso se llama samādhi. Bhagavad-gītā. Śruti-vipratipannā te yadā sthāsyati niścalā. Cuando no se desvían ni siquiera por escuchar tantas otras cosas. Si no se desvían, esa posición se denomina samādhi y esa posición es la más elevada posición de su vida.

Ahora, Arjuna está preguntándole a Kṛṣṇa: “¿Cuáles son los síntomas de una persona que ya está en esa posición de vincular la conciencia individual con la superconciencia? ¿Cuáles son los síntomas?”.

arjuna uvāca
sthita-prajñasya kā bhāṣā
samādhi-sthasya keśava
sthita-dhīḥ kiṁ prabhāṣeta
kim āsīta vrajeta kim
(BG 2.54)

Ahora, Arjuna dice: “Mi querido Kṛṣṇa, ¿puedes por favor explicar cuál es el lenguaje? ¿Cómo habla una persona que ya está en la posición trascendental? ¿Cómo actúa? ¿Y cómo vive? ¿Cómo se mueve?”. Todas estas cosas. Porque en nuestra vida actual tenemos que actuar. Las actividades no pueden detenerse. Las actividades tienen que ser vinculadas simplemente de cierta manera para que puedan unirnos con la superconciencia. Ahora, cuando esto se lleva a cabo, cuando realmente uno está vinculado con la superconciencia, ¿cuáles son los síntomas de su vida? Esto es lo que está preguntando Arjuna. Y el Señor Kṛṣṇa, śrī bhagavān uvāca. Verán siempre en el Bhagavad-gītā que aunque Kṛṣṇa está hablando, se usa la palabra “Bhagavān”. Porque Kṛṣṇa es, Kṛṣṇa... La misma palabra quiere decir, la Suprema Personalidad de Dios. Tal como, hemos recitado el śloka:

īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ
sac-cid-ānanda-vigrahaḥ
anādir ādir govindaḥ
sarva-kāraṇa-kāraṇam
(BS 5.1)

Kṛṣṇa y Bhagavān son idénticos. Aquí verán en el Bhagavad-gītā, en lugar de decir que Kṛṣṇa dijo... Cuando Arjuna habla, se dice claramente que: “Arjuna dijo”, pero cuando Kṛṣṇa está hablando, se dice: śrī bhagavān uvāca: “La Personalidad de Dios está hablando”.

Ahora Śrī Kṛṣṇa responde cuales son los síntomas de una personalidad auto-realizada. ¿Cuáles son? El primer síntoma es:

prajahāti yadā kāmān
sarvān pārtha mano-gatān
ātmany evātmanā tuṣṭaḥ
sthita-prajñas tadocyate
(BG 2.55)

El primer principio o el primer síntoma de un alma autorrealizada, es que no hace ningún plan para su prosperidad. Porque estamos siempre ocupados haciendo planes: “Ahora, después de esto vamos a hacer esto”. Pero aquel que es autorrealizado, no tiene planes. Debido a que se ha vinculado con la suprema conciencia, de modo que no tiene nada que hacer para sí mismo. Él simplemente depende. Simplemente depende de la suprema conciencia. Es un estado muy elevado. Pero, se entrega completamente y... Pero no podemos, quiero decir, imitar esto. Esto por supuesto se habla para la etapa más elevada. Pero debemos... Sin haber llegado a la etapa más elevada, no debemos imitarlo. Cuando a Kṛṣṇa se le pregunta, Él debe dar la respuesta apropiada; de modo, que está dando esta respuesta: prajahāti yadā kāmān sarvān pārtha mano-gatān. Debido a que nuestra mente es una fábrica para crear tantos planes, tantos planes. Pero aquel que ya se ha vinculado no tiene nada que ver con la creación de planes, porque todo lo emprende la suprema conciencia. Él simplemente tiene que seguir. Por lo tanto, para sí mismo no tiene ningún plan. Éste es el primer síntoma. Pero sin haber alcanzado este estado no debemos presentarnos como: “No tengo nada que pensar. No tengo nada que decir del futuro, del pasado o de nada”. No. Gradualmente llegaremos a esta etapa en donde todo se hará automáticamente. Pero en la actualidad, en la actualidad, debemos abandonar el hacer planes y debemos emprender el plan de la suprema conciencia. Personalmente no debemos hacer ningún plan, sino que debemos recibir el plan de la suprema conciencia. Ésta será nuestra posición. Tal como un aprendiz. Él está trabajando, está trabajando en el aprendizaje. No debe presentar su propio plan, sino que tiene que aceptar los planes y trabajar para su superior. Entonces aprenderá. Y cuando ya esté habituado, cuando sea elevado, entonces podrá hacer sus planes independientes. Aunque no es siempre independiente, porque incluso hasta lo altos oficiales, todo el mundo tiene que consultar a las autoridades superiores. De forma similar, esto quiere decir que no voy a hacer ningún plan de forma independiente, sino que debo aceptar el plan estándar que viene directamente de la suprema conciencia a través de un canal. A través de un canal. Tienen que buscar ese canal.

Este canal es llamado... Lo encontrarán en el Bhagavad-gītā, en el Capítulo Cuarto, paramparā, paramparā, sucesión discipular. Sucesión discipular. Las palabras, el plan y las instrucciones que vienen directamente de Kṛṣṇa, es lo que debemos de aceptar. No debemos hacer nuestro propio plan. Ésta es la forma de progresar. Ahora esta sucesión discipular, tal como la hemos aceptado, esta sucesión discipular viene de Kṛṣṇa. Tal como Kṛṣṇa está instruyendo a Arjuna. Kṛṣṇa está instruyendo a Arjuna, y tenemos que entender tal como Arjuna entendió a Kṛṣṇa. Y si seguimos el entendimiento de Arjuna, entonces estamos siguiendo el sistema paramparā o la sucesión discipular. Éste es el proceso. Ahora, en el Capítulo Décimo, en el Capítulo Décimo verán cómo Arjuna entendió a Kṛṣṇa. Después de escucharlo, no todo, pero al menos el setenta y cinco por ciento de las instrucciones del Bhagavad-gītā, la valoración de Arjuna se establece en el Capítulo Décimo. Él dice que... Pienso que puedo... (larga pausa, páginas que van pasando). Aquí. Arjuna, después de entender a Kṛṣṇa, después de Su instrucción, dijo que..., él dijo automáticamente:

paraṁ brahma paraṁ dhāma
pavitraṁ paramaṁ bhavān
puruṣaṁ śāśvataṁ divyam
ādi-devam ajaṁ vibhum
(BG 10.12)

“Kṛṣṇa, ahora entiendo que Tú eres Paraṁ Brahman”. Paraṁ Brahman quiere decir el Supremo, la suprema identidad espiritual. Cada uno de nosotros es Brahman. Ustedes son Brahman. Yo soy Brahman. Cada entidad viviente es Brahman. Porque no somos esta materia, somos almas espirituales. Quienquiera que sea alma espiritual, recibe el nombre de Brahman. Pero a Kṛṣṇa aquí se le llama Paraṁ Brahma. Tal como recitamos este śloka, el verso, īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ (BS 5.1). Īśvara, cada uno de nosotros es īśvara. La traducción de la palabra īśvara es “dios”. Ahora, dios, dios significa, īśvara quiere decir controlador. Cada uno de nosotros es un controlador, pero Kṛṣṇa es el supremo controlador. Él no tiene nadie que lo controle. Yo soy controlador, soy Brahman, pero al mismo tiempo, tengo un controlador superior por encima de mí. Pero Kṛṣṇa es llamado Paraṁ Brahma, o el īśvara parama, el supremo controlador, porque no tiene ningún controlador por encima de Él. Esto es lo que Arjuna acepta. Ésta es la manera de estudiar el Bhagavad-gītā. Si no lo interpretamos a nuestra propia manera. Si realmente queremos estudiar el Bhagavad-gītā, aquí Arjuna está confirmando cómo él entiende a Kṛṣṇa después de escuchar el Bhagavad-gītā. No sólo eso, también... En el Capítulo Once verán que Arjuna va a pedir a Kṛṣṇa que le muestre Su gigantesca forma universal. Porque él, Arjuna, tal como es, aceptó que Kṛṣṇa es Dios sin ninguna duda. Pero la gente en el futuro podría pensar que Kṛṣṇa y Arjuna eran dos amigos. Y que debido al aprecio amistoso, Arjuna podría haber aceptado a Kṛṣṇa como la Suprema Personalidad de Dios, pero ¿cuál sería la evidencia para nosotros? Ahora, aquí, cuando Kṛṣṇa, Arjuna le pide: “Kṛṣṇa, por favor, muéstrame la forma gigantesca, la gigantesca forma universal”. Y Él la mostró. Eso también se describe.

La idea es, que puede haber muchas imitaciones de Dios. Hoy en día se ha vuelto una moda. No en su país; al menos en India, se ha vuelto una moda que todo el mundo sale a declararse a sí mismo: “Yo soy Dios. Yo soy Dios”. Como si Dios se hubiera vuelto algo muy barato y se pudiera comprar en un mercado o donde quiera que vayamos. ¿Lo ven? Esto no es así. Dios no es algo tan barato. La descripción de Dios es... se da en el Brahma-saṁhitā,

yasyaika-niśvasita-kālam athāvalambya
jīvanti loma-vilajā jagad-aṇḍa-nāthāḥ
viṣṇur mahān sa iha yasya kalā-viśeṣo
govindam ādi-puruṣaṁ tam ahaṁ bhajāmi
(BS 5.48)

Dios... Esta creación material... Tenemos esta información de las Escrituras autorizadas. Esta creación material ¿cómo se ha llevado a cabo? La ha llevado a cabo el Señor Supremo en Su forma de Mahā-Viṣṇu, que está descansando en el Océano Causal y en un estado de sueño y con la respiración de Sus fosas nasales, tantos universos nacen en forma de semilla. Y cuando Él vuelve a respirar, inhala, todo vuelve de nuevo a Él. Ésta es la posición de Dios, que mediante Su respiración surgen todos los universos y mediante Su respiración... La existencia del universo abarca Su período respiratorio, el período respiratorio de Mahā-Viṣṇu. De modo que este Mahā-Viṣṇu se describe como:

yasyaika-niśvasita-kālam athāvalambya
jīvanti loma-vilajā jagad-aṇḍa-nāthāḥ
viṣṇur mahān sa iha yasya kalā-viśeṣaḥ
(BS 5.48)

Este Mahā-Viṣṇu es también una porción plenaria de Kṛṣṇa, Govinda. Este Mahā-Viṣṇu tampoco es el original. La Personalidad de Dios original es Kṛṣṇa.

Ésta es una gran ciencia, qué es Kṛṣṇa —la ciencia de Kṛṣṇa. Esto es simplemente un resumen; el Bhagavad-gītā es sólo un resumen de la ciencia de Dios, que se explica más detalladamente en el Śrīmad-Bhāgavatam. Pero después de todo es una gran ciencia. Si la estudiamos muy seriamente, podemos entender... No debemos aceptar de una forma tan barata que: “Aquí hay un Dios, aquí hay un Dios, aquí hay un Dios”. No, no. Dios no es tan barato. Dios es uno y es muy grande. “Dios es grande”, tal como se dice en su lengua inglesa, y nadie puede ser ni más grande ni igual a Él. Ésta es la posición de Dios. Ahora aquí, Arjuna, acepta a Kṛṣṇa y dice: “Tu eres Paraṁ Brahman”. Paraṁ brahma paraṁ dhāma (BG 10.12). Dhāma significa aquello en lo que todo descansa. Nosotros estamos descansando, todo está descansado. Tal como... Esto es científico y práctico, como saben, que los innumerables planetas que pueden ver por la noche, como, quiero decir, las luminarias, las estrellas en el cielo, todas y cada una de ellas, más o menos, son todas diferentes clases de planetas. ¿Pero saben cómo están flotando en el espacio? Están flotando en la luz del Sol, en los rayos del Sol. Están flotando. Eso lo pueden ver. De forma similar la luz del Sol es la imitación del brahma-jyotir que sale del cuerpo del Señor Supremo. De modo que todo descansa en el brillo del Señor Supremo. Por lo tanto, recibe el nombre de paraṁ dhāma. Paraṁ dhāma quiere decir que “todo descansa en Ti”. Paraṁ brahma paraṁ dhāma pavitram (BG 10.12). Pavitram. Pavitram quiere decir sin contaminación. Porque nosotros, aunque somos Brahman, ahora estamos contaminados por este cuerpo material. Pero el Señor no tiene un cuerpo contaminado de esta existencia material. Ya hemos señalado, īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ sac-cid-ānanda... Sac-cid-ānanda-vigrahaḥ (BS 5.1). Sac-cid-ānanda-vigrahaḥ quiere decir que Su cuerpo está lleno, lleno de felicidad, lleno de conocimiento, y que es eterno. Esto es algo completamente diferente de este cuerpo. De modo que cuando se da una descripción del Señor, como que no tiene forma, que no tiene forma quiere decir que no tiene este tipo de forma. Él tiene una forma sac-cid-ānanda-vigrahaḥ (BS 5.1), un elemento diferente. Por lo tanto, recibe el nombre de pavitra. Y paramaṁ bhavān: “Tu eres el Supremo Original”. Puruṣaṁ śāśvataṁ divyam ādi-devam ajaṁ vibhum: “Tú eres puruṣa”. Puruṣa quiere decir disfrutador. “Acerca de Ti, en la literatura védica...”, āhus tvām ṛṣayaḥ sarve, “todos los grandes sabios Te aceptan como el Señor Supremo”. Āhus tvām ṛṣayaḥ sarve devarṣir nāradaḥ. Devarṣir nārada. Ya les he hablado sobre Nārada. Él también lo ha aceptado. Eso quiere decir las autoridades. Está citando a las autoridades. No es que: “Yo personalmente Te estoy aceptando como tal, pero además hay muchas autoridades, muchas autoridades”. Tenemos que entender la ciencia de Dios por Sus actividades extraordinarias y porque está confirmado por las autoridades y aceptado por las Escrituras reveladas. Entonces, tenemos que aceptarlo. ¿Lo ven? No de una forma ciega. De modo que Arjuna está dando estas evidencias. Asito devalo vyāsaḥ svayaṁ caiva bravīṣi me: “Tu eres aceptado por estas autoridades de esta forma y yo tengo la oportunidad de que estoy escuchando todo esto de Ti, directamente. Yo soy tan afortunado que me he vuelto Tu..., tengo una relación de amistad contigo y lo estoy escuchando”.

Aquí está la evidencia. Ahora, si quieren estudiar el Bhagavad-gītā tienen que aceptar todas estas afirmaciones de Arjuna. Porque el Bhagavad-gītā fue explicado directamente a Arjuna, y si no aceptan la valoración de la persona directa que escuchó el Bhagavad-gītā, ¿entonces a quién van a creer? Supongamos que yo he escuchado algo directamente de una persona. Y lo que yo digo, otra persona que no ha tenido una relación directa también lo está diciendo. ¿A quién van a creer? Tienen que creer a la persona que lo ha escuchado directamente. Aquí no hay duda sobre ello, que Arjuna escuchó directamente de Kṛṣṇa, y sus valoraciones están registradas aquí. Por lo tanto, si quieren estudiar el Bhagavad-gītā, tienen que aceptar la valoración de quien lo escuchó directamente, Arjuna. Si hacemos esto, podemos tener lo que es correcto. Pero si lo cambiamos por nuestras segundas intenciones, como algunos que han hecho tantos comentarios en el caso del Bhagavad-gītā, entonces no podremos entender lo que es el Bhagavad-gītā.

Está bien, vamos a tener algunas preguntas, si ustedes... (cortado) (fin)