ES/690103 - Clase BG 04.01-6 - Los Angeles

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



690103BG-Columbus, 3 enero 1969 - 45:40 minutos



Prabhupāda: ¿Dónde está el libro? Está bien. ¿Qué página?

Madhudviṣa: Página 108.

Prabhupāda: ¿Qué página?

Madhudviṣa: Ciento ocho. El principio del Capítulo Cuatro.

Prabhupāda: Está bien. Comienza. Lee.

Madhudviṣa: Capítulo Cuatro: “El conocimiento trascendental”.

Verso 1: “El Señor Bendito dijo: Yo le enseñé esta imperecedera ciencia del yoga a Vivasvān, el dios del Sol, y Vivasvān se la enseñó a Manu, el padre de la humanidad, y Manu a su vez se la enseñó a Ikṣvāku” (BG 4.1).

Prabhupāda: El conocimiento trascendental. Hay dos tipos de conocimiento: El conocimiento mundano y el conocimiento trascendental. El conocimiento mundano consiste en cómo mantener este cuerpo, āhāra-nidrā-bhaya-maithunam (Hitopadeśa 25), para satisfacer las demandas de este cuerpo. ¿Cuáles son las exigencias de este cuerpo? Que necesitamos para comer algo. Comer, dormir. Necesitamos descansar después de trabajar duro. Después de comer abundantemente, es necesario dormir. Comer, dormir y dormir, a veces mientras dormimos, soñamos, y tememos o sin sueño, también tememos. Por lo tanto, tomamos medidas de protección. Mientras dormimos, cerramos nuestras puertas. De modo que, comer, dormir, temer y aparearse, la satisfacción de los sentidos. Así que para concretar todas estas necesidades de vida del cuerpo, el conocimiento que se requiere se denomina conocimiento mundano.

Así como en la moderna civilización materialista, tenemos muy buenos arreglos para comer, para dormir, para defendernos y para la satisfacción de los sentidos. La moderna civilización material se basa simplemente en este conocimiento mundano, pero no hay ningún arreglo o universidad para impartir el conocimiento trascendental. No hay ninguna sección en la universidad, en la práctica, que... de lo que se llama brahma-jijñāsā, la ciencia para conocer el alma espiritual. Eso se llama conocimiento trascendental.

Por lo tanto, estamos muy ocupados con el conocimiento mundano, pero la parte más importante del conocimiento es conocimiento trascendental. “¿Qué soy yo? ¿De dónde he venido? ¿Cuál es mi posición constitucional? ¿Soy este cuerpo o estoy más allá de este cuerpo?”. Esto es el conocimiento trascendental. Así que Kṛṣṇa está comenzando el conocimiento trascendental. Sigue.

Madhudviṣa: Significado: “Aquí encontramos la historia del Bhagavad-gītā a partir de una época remota en que le fue entregado a la orden real de todos los planetas, comenzando con el planeta Sol. Los reyes de todos los planetas tienen la principal función de proteger a los habitantes de los mismos, y, por lo tanto, la orden real debe entender la ciencia del Bhagavad-gītā, a fin de ser capaz de gobernar a los ciudadanos y protegerlos del cautiverio material de la lujuria. La vida humana está hecha para el cultivo del conocimiento espiritual en una relación eterna con la Suprema Personalidad de Dios, y los mandatarios de todos los Estados y de todos los planetas están obligados a impartirles a los ciudadanos ese conocimiento, por medio de la educación, la cultura y la devoción. En otras palabras, todos los jefes de Estado tienen la función de propagar la ciencia del proceso de conciencia de Kṛṣṇa, de modo que la gente pueda sacar provecho de esta gran ciencia y pueda seguir un sendero triunfante, haciendo uso de la oportunidad que brinda la forma de vida humana”.

Prabhupāda: Sí. En el Bhagavad-gītā se afirma...

(bebés haciendo ruido) Ah, deben llevárselos, sí.

evaṁ paramparā-prāptam imaṁ rājarṣayo viduḥ (BG 4.2).

Este conocimiento, este conocimiento trascendental se impartía anteriormente a los reyes, porque los reyes eran muy responsables del bienestar de los ciudadanos. Cuando los reyes dejaron de ser responsables, entonces poco a poco se introdujo el gobierno por el pueblo. De lo contrario, anteriormente, los reyes eran muy responsables, sobre todo para el adelanto del conocimiento trascendental de los ciudadanos.

Evaṁ paramparā-prāptam imaṁ rājarṣayaḥ. Rājarṣayaḥ significa “los sabios entre los reyes”. A pesar de que estaban en la orden real, eran personas muy santas. Hay muchos ejemplos, tales como Mahārāja Yudhiṣṭhira y Parīkṣit Mahārāja. Eran los emperadores del mundo, pero aun así, tan piadosos, tan religiosos y tan avanzados en el conocimiento trascendental que no hay punto de comparación. Es especialmente significativo que esto se enseñaba a los reyes, a la orden real que eran muy piadosos y avanzados en conocimiento espiritual. Continúa.

Madhudviṣa: Verso 2: “Esta ciencia suprema se recibió así a través de la cadena de sucesión discipular, y los reyes santos la entendieron de ese modo. Pero en el transcurso del tiempo la sucesión se rompió, y, por ello, la ciencia tal como es parece estar perdida” (BG 4.2).

Verso 3: “Esta antiquísima ciencia de la relación con el Supremo te la expongo hoy a ti, porque tú eres Mi devoto así como también Mi amigo, y puedes por ello entender el misterio trascendental de la misma” (BG 4.3).

Significado: “Existen dos clases de hombres: el devoto y el demonio. El Señor escogió a Arjuna como receptor de esta gran ciencia, porque Arjuna era un devoto del Señor; pero al demonio no le es posible entender esta gran y misteriosa ciencia. Existen muchas ediciones de este gran libro de conocimiento. Algunas de ellas tienen comentarios escritos por los devotos, y otras tienen comentarios escritos por los demonios. El comentario de los devotos es auténtico, mientras que el de los demonios es inútil”.

Prabhupāda: Porque aquí se dice que: “Ésta muy antigua ciencia de la relación con el Supremo es hoy Te la explico porque eres mi devoto”, así que esta ciencia trascendental no puede entenderse simplemente mediante la educación académica. No es posible. Hay un secreto. Así como en el campo educativo ordinario, nadie está autorizado a estudiar derecho a menos que tenga un graduado escolar. Por lo menos en la India es así la ley. Nadie puede ser admitido en la universidad de derecho a menos que haya terminado el graduado escolar porque si no, no será capaz de entender.

Así mismo, en los Vedas se dice también: “A menos que uno haya adquirido las cualificaciones brahmínicas, no debe estudiar los Vedas”. Así que en cada sección, si quieren tomar la educación de línea particular, tienen que cualificarse para poder entrar en la escuela o el colegio. Del mismo modo, si quieren estudiar el Bhagavad-gītā, entonces deben volverse devotos. Simplemente las cualificaciones académicas educativas no les ayudarán, porque fue hablado para los devotos.

Kṛṣṇa dice que: “Esa antigua ciencia de la relación con el Supremo hoy Te la explico, porque eres mi devoto”. ¿Cómo la pueden entender los no-devotos? Los no-devotos no la pueden entender. Y ¿quién es un devoto? Y ¿quién es un no-devoto? Devoto significa aquel que acepta la supremacía del Señor Supremo, y está convencido de su relación eterna con Dios.

Tal como el Señor Jesucristo. Fue amenazado con la pena de muerte. Fue crucificado. Aun así, estaba convencido de su relación con Dios. Aquí hay un devoto, un ejemplo de devoto. Devoto significa que está firmemente convencido de su relación con Dios. ¿Y cuál es esa relación? Esa relación se realiza sobre la base de amor. El devoto ama a Dios y Dios ama al devoto. Esta es la única relación. Eso es todo. Dios ama al devoto y el devoto ama a Dios. Esta es la relación.

Así que uno tiene que establecer esta relación. Así como Arjuna está en relación con Kṛṣṇa como un amigo, del mismo modo, pueden estar en relación con Dios como un amante. Pueden estar en relación con Dios como amo y sirviente. Pueden estar en relación con Dios como padre e hijo. Existen tantas relaciones. Así como tenemos relaciones en de este mundo material, que son sólo reflejos pervertidos de esas cinco relaciones con Dios. Pero lo hemos olvidado. Este movimiento de conciencia de Kṛṣṇa consiste en revivir esa conciencia. No es nada nuevo. Olvidarse de Dios es una condición anormal y tener relación con Dios es la condición normal. Así que esta conciencia de Kṛṣṇa significa restablecerse en nuestra condición normal de vida. Sigue. “Arjuna es...”.

Madhudviṣa: “Arjuna es reconocido por el Señor como un devoto. Por lo tanto, aquel que sigue la línea de Arjuna en la comprensión del Gītā se beneficiará de ello. De lo contrario uno simplemente perderá su valioso tiempo en leer comentarios. Arjuna acepta a Śrī Kṛṣṇa como la Suprema Personalidad de Dios, y cualquier comentario que se le haga al Gītā siguiendo los pasos de Arjuna, es verdadero servicio devocional que se le presta a la causa de esta gran ciencia. Los hombres demoníacos, no obstante, no aceptan al Señor Kṛṣṇa tal como es Él. Los demonios inventan algo de su imaginación sobre las instrucciones de Kṛṣṇa. Aquí se da una advertencia acerca de esos senderos engañosos. Uno debe tratar de seguir la sucesión discipular que procede de Arjuna y, de ese modo, beneficiarse con esta gran ciencia del Srīmad Bhagavad-gītā”.

Prabhupāda: Sí. Si queremos estudiar el Bhagavad-gītā, entonces seguimos los principios. Tal como hemos explicado en la introducción, que cuando se toma un frasco de medicina, hay algún tipo de dirección tal como: “Dos tabletas dos veces al día, después de las comidas”. Así que hay que seguir las instrucciones. Entonces, pueden obtener los beneficios. No pueden tomar ninguna instrucción sobre cómo tomar este medicamento de un amigo o de un experto pedagogo. No tienen que tomar la dirección únicamente de un médico. Él es el experto en esa línea.

Del mismo modo, aquí está la dirección, del frasco del Bhagavad-gītā. Kṛṣṇa dice, “debe entenderse mediante el devoto, o tienen que entender el Bhagavad-gītā de un devoto”. Esta es la instrucción de este frasco de medicina. ¿Cómo se puede hacer de otra manera? Así no obtendrán el beneficio. Esto se explica.

Madhudviṣa: Verso 4: “Arjuna dijo: Vivasvān, el dios del Sol, nació antes que Tú, por lo cual es mayor que Tú. ¿Cómo puedo entender que en el principio Tú le hayas enseñado esta ciencia a él? El Señor Bendito dijo...” (BG 4.4).

Prabhupāda: Sí. Ahora, aquí Arjuna... Kṛṣṇa dijo que: “Hace mucho, mucho tiempo, Yo hablé esta ciencia, el conocimiento trascendental, al dios del Sol”. Ahora, por lo general, si yo digo que: “El otro día estaba hablando el Bhagavad-gītā en el planeta solar”, oh, ustedes van a entender de inmediato que: “Swamiji es un hombre loco”. ¿Lo ven? “Usted estaba hablando al dios del Sol”. Sí. Eso es natural. Ahora, Kṛṣṇa dice que: “Yo hablé al dios del Sol”. Así que otros dirán: “Oh, este Kṛṣṇa es otra persona demente”. Eso es natural. Así que para aclarar esta idea, Arjuna está preguntando: “¿Cómo es que Tu hablaste esta ciencia al dios del Sol? Porque sé que naciste, digamos, hace setenta u ochenta años”. Cuando Kṛṣṇa habló este Bhagavad-gītā, no tenía menos de noventa años de edad. Él permaneció en la Tierra durante 125 años. Por lo tanto Arjuna fue su contemporáneo, su amigo y su primo-hermano.

Por lo tanto, se sorprende: “Kṛṣṇa, ¿cómo estás diciendo que hablaste esta ciencia al dios del Sol?”.

Se trata de hace millones y millones de años porque si tomamos, si aceptamos esta declaración, eso significa que el Bhagavad-gītā fue hablado no hace menos de cuarenta millones de años. Vivasvān manave prāha. Porque “el dios del Sol se lo explicó a su hijo, Manu”, y si uno simplemente calcula la edad de este Manu, Vaivasvata Manu, son cuatro cientos millones de años o más. Por lo tanto, él se sorprendió. Así que está esclareciendo esta cuestión: “¿Cómo lo hablaste?”. Continúa.

Madhudviṣa: Verso 5: “La Personalidad de Dios dijo: Tanto tú como Yo hemos pasado por muchísimos nacimientos. Yo los puedo recordar todos, pero tú no, ¡oh, subyugador del enemigo!” (BG 4.5).

Prabhupāda: Sí. La diferencia es que Arjuna, que es el constante compañero de Kṛṣṇa, también estaba presente cuando Kṛṣṇa le habló al dios del Sol, pero lo ha olvidado. Pero Kṛṣṇa, siendo la Suprema Personalidad de Dios, no lo ha olvidado. Tal como un..., mi hijo. Yo le dije: “Mi querido niño, hace veinticinco años te caíste y te hiciste daño de esta manera”. A pesar de que el niño lo ha olvidado, el incidente es una realidad. El padre lo sabe. Del mismo modo, Kṛṣṇa, el padre supremo, lo sabe todo, y Arjuna pude haberlo olvidado. Porque se ha olvidado, uno no puede dar detalles. Así como hemos tenido muchos, muchos nacimientos antes de este cuerpo, pero los hemos olvidado. Esto no significa que no se llevara a cabo. Tuvimos que pasar por millones y millones de nacimientos. El otro día lo estaba explicando. Jalajā nava-lakṣāṇi sthāvarā lakṣa-viṁśati. Simplemente hemos tenido que vivir en el agua y pasar a través 900.000 especies de vida. Dos millones de especies de plantas y árboles. De esta forma lo hemos pasado. Así que podemos haberlo olvidado, pero que no significa que no tuvo lugar. Continúa.

Madhudviṣa: Significado: “En el Brahma-saṁhitā (5.33), se encuentra la información de que hay muchísimas encarnaciones del Señor. Allí se dice: 'Yo adoro a Govinda (Kṛṣṇa), la Suprema Personalidad de Dios, quien es la persona original, absoluta, infalible y sin comienzo. Aunque Él se expande en una cantidad ilimitada de formas, aun así es la misma persona original, el más antiguo y la persona que siempre se ve como un joven lozano. Esas eternas, bienaventuradas y omniscientes formas del Señor, por lo general no las entienden ni los mejores eruditos védicos, pero siempre se les manifiestan a los devotos puros'.

“También se afirma en la misma Escritura (5.39): 'Yo adoro a Govinda (Kṛṣṇa), la Suprema Personalidad de Dios, quien siempre se encuentra en diversas encarnaciones, tales como Rāma y Nṛsiṁha, así como también en muchas encarnaciones secundarias, pero quien es la Personalidad de Dios original, conocido como Kṛṣṇa, y quien, además, se encarna personalmente'.

“También en los Vedas se dice que el Señor, aunque es aquel que no tiene igual, se manifiesta en infinidad de formas. Él es como la piedra vaidūrya, que cambia de color y, aun así, sigue siendo la misma. Todas esas múltiples formas las entienden...”.

Prabhupāda: Existe una valiosa piedra preciosa. Si la giran, encontrarán muchas coloridas manifestaciones, aunque esa piedra es siempre una. De igual forma, aunque Dios es uno, puede manifestarse de muchas formas. Esa es la prerrogativa de Dios. Goloka eva nivasaty akhilātma-bhūtaḥ (BS 5.37). Él puede expandirse en millones y billones de formas; aun así, Él es uno. El mismo ejemplo: la piedra vaidūrya, esta joya, aunque es una, encontrarán en ella muchos colores al mismo tiempo. Por lo tanto, este ejemplo es muy bueno. Continúa.

Madhudviṣa: Continuación: “Todas esas múltiples formas las entienden los devotos puros, pero no se pueden entender mediante un simple estudio de los Vedas. Devotos tales como Arjuna son compañeros constantes del Señor, y cuando quiera que el Señor se encarna, los devotos asociados también se encarnan, para poder servir al Señor de diferentes maneras. Arjuna es uno de esos devotos, y de este verso se deduce que, unos millones de años atrás, cuando el Señor Kṛṣṇa le habló el Bhagavad-gītā al dios del Sol, Vivasvān, Arjuna también estaba presente, haciendo otro papel. Pero la diferencia que hay entre el Señor y Arjuna es que el Señor recordaba el incidente, mientras que Arjuna no lo recordaba. Ésa es la diferencia que hay entre la entidad viviente parte integral, y el Señor Supremo”.

Prabhupāda: Sí. Aquí está... Hoy en día hay muchos dioses. Especialmente cualquiera que viene de India, en nombre de tantas personas santas, y que afirman que son dioses. Todos dicen: “Yo soy Dios”. O bien, alguien dice: “Todo el mundo es Dios”. Pero aquí está la diferencia entre Dios y la entidad viviente. ¿Cuál es? Dios no olvida pero nosotros si olvidamos. Si les pregunto: ¿Exactamente a esta hora, qué estaban haciendo ayer por la tarde? tendrán que recordarlo. Lo han olvidado. ¿Y qué decir de hace una semana o hace un año? Esa es nuestra naturaleza, el olvido.

Aquí Arjuna y Kṛṣṇa, aunque están en el nivel de la amistad, uno es Dios y el otro es una entidad viviente común. Dios no olvida, pero la entidad viviente olvida. Esta es la distinción. ¿Cómo pueden decir que son Dios? Son tan olvidadizos que no se pueden decir lo que estaban haciendo hace unas pocas horas, y ¿afirman que son Dios? Han hecho de Dios algo muy barato. Todo el mundo afirma: “Yo soy Dios”. No saben lo que es Dios.

Ahora, aquí traten de comprender cuál es la diferencia entre Dios y un perro. Un perro se olvida. Un perro viene a su lugar para comer algo. Le dan una bofetada. Él se va, vuelve de nuevo. Se olvida que lo golpearon. ¿Lo ven? Esa es la naturaleza de un perro. Pero la naturaleza de Dios es diferente.

Por lo tanto, si aumentamos nuestra memoria, entonces nos acercamos a la naturaleza divina. En esta era estamos reduciendo nuestra memoria. Anteriormente, cuando este Bhagavad-gītā fue escrito por Vyāsadeva, antes de eso, la gente tenía una memoria tan aguda que no había necesidad de publicar libros. Tan pronto como se escuchaba del maestro espiritual de alguna instrucción, lo recordaban de por vida. Ahora, poco a poco, la memoria está disminuyendo. Eso significa que no estamos prosperando. Estamos disminuyendo nuestra duración de vida. Estamos disminuyendo nuestra memoria. Estamos reduciendo nuestra prosperidad.

Hay ocho tipos de procesos de disminución en esta era. De ellos, la memoria irá disminuyendo más y más, y la duración de la vida también se reducirá. Ahora, pueden tomar la historia de los últimos años. Sus antepasados vivían ochenta años, noventa años, cien años. Ahora, en general, viven sesenta años, setenta años. Y, progresivamente se irá reduciendo tanto. Estas son las declaraciones del Śrīmad-Bhāgavatam -que si un hombre vive de veinte a treinta años, se considerará como un hombre muy viejo. ¿Lo ven? Ese tiempo también vendrá muy pronto. Realmente no estamos mejorando. No estamos mejorando. Estamos disminuyendo en todos los sentidos y estamos tan orgullosos del progreso de la civilización. Continúa.

Madhudviṣa: Continuación: “Aunque a Arjuna se le trata aquí como el poderoso héroe que podía subyugar a los enemigos, no obstante es incapaz de recordar lo que había ocurrido en sus diversos nacimientos pasados”.

Prabhupāda: Sí. Nos tratan como Dr., Ph. D., D. A. C., pero si les preguntan al Ph. D., D. A. C., “Mi querido señor, ¿quién es usted?, ¿de dónde ha venido?, ¿hacia dónde se dirige?”. Ah, él no puede contestar. Del mismo modo, a Arjuna se le trata aquí como el más poderoso, pero no es capaz de recordar. Continúa.

Madhudviṣa: Continuación: “De modo que, una entidad viviente, por grande que pueda ser desde el punto de vista material, nunca puede ser igual al Señor Supremo”.

Prabhupāda: Sí. No lo pueden ser. Nadie puede ser igual a Dios. Otro nombre para Dios es asamordhva. Es un nombre sánscrito. Asama significa que nadie es igual a Dios, y ūrdhva que nadie es más grande que Él. Es decir, que todos son inferiores a Él. Uno puede ser muy grande en la estimación de nuestros conocimientos, pero nadie puede ser igual a Dios. Dios es grande. Esa es la verdadera versión: “Dios es grande”. y nadie puede ser más grande. Entonces no sería Dios. Si alguien se vuelve más grande que Dios, entonces, ¿qué clase de Dios es? Dios es grande. Sí. Continúa.

Madhudviṣa: Continuación: “Cualquiera que sea un compañero constante del Señor es sin duda una persona liberada, pero no puede ser igual al Señor”.

Prabhupāda: Pueden ser muy elevados, pueden ser muy... Pueden estar totalmente liberados. Aun así, no pueden ser iguales a Dios. Dios siempre es más grande. Continúa.

Madhudviṣa: Continuación: “En el Brahma-saṁhitā se describe al Señor como infalible (acyuta), lo cual significa que Él nunca se olvida de Sí, a pesar de estar en contacto con lo material”.

Prabhupāda: Los filósofos māyāvādīs dicen que: “Yo soy Dios, pero he olvidado, que yo soy Dios”. Entonces, ¿cómo es que Dios puede olvidar? Aquí está la prueba. ¿Cómo Dios puede olvidar? Si olvidan, entonces no son Dios, inmediatamente. No hay ningún otro argumento. Dios no puede olvidar. Dios recuerda siempre. Acyuta. Acyuta significa infalible. Dios no puede ser atrapado por māyā. Los filósofos māyāvādīs dicen que: “Yo soy Dios. Ahora estoy bajo la ilusión de māyā. He olvidado que yo soy Dios, y mediante la meditación me volveré Dios”. Todo esto es absurdo. Nadie... Dios no puede olvidarse de Sí Mismo. Entonces, Él no es Dios, de forma inmediata. Dios no puede olvidarse de Sí Mismo. Continúa.

Madhudviṣa: Continuación: “Luego el Señor y la entidad viviente nunca pueden ser iguales en todos los aspectos, ni siquiera si la entidad viviente está tan liberada como Arjuna. Aunque Arjuna es un devoto del Señor, a veces olvida la naturaleza del Señor, pero, por la gracia divina, un devoto puede entender al instante la condición infalible del Señor, mientras que un no devoto, o un demonio, no puede entender esa naturaleza trascendental. Así pues, estas descripciones del Gītā no las pueden entender los cerebros demoníacos”.

Prabhupāda: Hay seis opulencias, que son la cualificación trascendental de Dios. Una de ellas es que está lleno de conocimiento. Por lo tanto, si Dios está lleno de conocimiento, ¿cómo puede estar en el olvido? Eso es imposible. Continúa.

Madhudviṣa: Continuación: “Kṛṣṇa recordaba actos que había realizado millones de años atrás, pero Arjuna no podía recordarlos, pese al hecho de que tanto Kṛṣṇa como Arjuna son de una naturaleza eterna. También podemos destacar aquí que una entidad viviente olvida todo debido a su cambio de cuerpo”.

Prabhupāda: Sí. Otra cosa que hay que destacar aquí es, ¿por qué olvidamos? Las entidades vivientes, ¿por qué olvidamos? Es un hecho que de mi vida pasada he transmigrado a este cuerpo. Ahora, no puedo decir cuál era mi cuerpo en mi vida pasada. Esta es mi naturaleza, porque cambio mi cuerpo. Tal como pueden recordar algunos años, digamos, veinte años, veinticinco años. O supongamos que ahora tengo una edad de setenta y tres años. Puedo recordar algún accidente cuando sólo tenía tres años, y esto, debido a que es en esta vida. Pero no puedo recordar lo que era en mi vida pasada.

Esto significa que si usted cambia su cuerpo, entonces olvida. Pero Kṛṣṇa lo recuerda. Esto significa que Kṛṣṇa no cambia Su cuerpo. Este es otro argumento. Que Kṛṣṇa recuerda significa... Y se dice... Lo encontrarán en el Bhagavad-gītā. Él dice: tadātmānaṁ sṛjāmy aham: “Yo aparezco. Aparezco tal como soy”, ātma-māyayā, “por mi propia energía interna”. Así como yo aparezco o cualquier entidad viviente aparece en este mundo material. Eso no está bajo mi control. Tan pronto como abandono este cuerpo, estoy totalmente bajo el control de la naturaleza. La naturaleza me ofrecerá un tipo particular de cuerpo en función de mi trabajo. Esa es la manera. Prakṛteḥ kriyamāṇāni guṇaiḥ karmāṇi sarvaśaḥ (BG 3.27).

Así como tienen estos cuerpos, cuerpos americanos, yo tengo este cuerpo de India y el perro tiene su cuerpo de perro. Todos estos han sido fabricados por las leyes de la naturaleza. Conforme a mi mente, de acuerdo con mis actividades, el cuerpo se desarrolla. Pero el cuerpo de Kṛṣṇa no es así. Él aparece. No hay distinción alguna entre Su cuerpo y Él Mismo. Lo mismo. Los no-devotos no pueden entender. Ellos no pueden entender que no hay diferencia entre Kṛṣṇa y Su cuerpo. Nosotros somos diferentes. Yo soy un alma, pero soy distinto de este cuerpo. Estas cosas se explicarán en este capítulo del conocimiento trascendental. Continúa.

Madhudviṣa: Continuación: “El Señor recuerda porque no cambia Su cuerpo sac-cid-ānanda. Él es advaita”.

Prabhupāda: Un cuerpo sac-cid-ānanda. Sat significa eterno. Cit significa lleno de conocimiento. Sat, cit, ānanda. Ānanda significa dichoso. Esto es Su cuerpo. Nuestro cuerpo es justo lo contrario. No es sat, no es eterno. Es temporal. Y no está lleno de conocimiento. Estamos llenos de ignorancia. No sabemos qué hay más allá de esta pared. Por lo tanto, está lleno de ignorancia. Estamos orgullosos de nuestros ojos. Si se va la electricidad inmediatamente dejamos de ver. De modo que vemos y actuamos en virtud de algunas condiciones ofrecidas por la naturaleza material. No somos plenamente conscientes de todo, ni nuestro cuerpo es eterno, ni somos dichosos. Este cuerpo es la fuente de tantas enfermedades. El cuerpo está sometido al nacimiento y la muerte. El cuerpo es olvidadizo. El cuerpo sufre la vejez. Así que este no es un cuerpo gozoso. Pero el cuerpo de Kṛṣṇa es justo lo contrario. Su cuerpo es dichoso, lleno de conocimiento y eterno. Así pues, ¿cómo pueden compararse con Kṛṣṇa? No es posible. Continúa.

Madhudviṣa: Continuación: “Él es advaita, que significa que no hay diferencia alguna entre Su cuerpo y Él Mismo. Todo en relación con Él es espíritu, mientras que el alma condicionada es diferente de su cuerpo material. Y como el cuerpo y el ser del Señor son idénticos, Su posición siempre es diferente a la posición de la entidad viviente ordinaria, incluso cuando Él desciende al plano material. Los demonios no pueden acomodarse a esta naturaleza trascendental del Señor, que el propio Señor explica en el verso siguiente”.

Prabhupāda: Por lo tanto, si tratamos de entender a Dios por nuestro limitado conocimiento, será un fracaso. Tenemos que comprender a Dios desde Dios. Entonces será un conocimiento perfecto. Por lo tanto, este Bhagavad-gītā es la ciencia de Dios, donde Dios está hablando de Sí Mismo. Y esto es aceptado por todos los grandes sabios, filósofos, y, me atrevería a decir, por los religiosos, y por todos. Continúa.

Madhudviṣa: Verso 6: “Aunque soy innaciente y Mi cuerpo trascendental nunca se deteriora, y aunque soy el Señor de todas las entidades vivientes, aun así aparezco en cada milenio en Mi trascendental forma original” (BG 4.6).

Prabhupāda: Sí.

Madhudviṣa: Significado: “El Señor ha hablado acerca de la peculiaridad de Su nacimiento: aunque puede que Él aparezca como una persona ordinaria, recuerda todo lo relacionado con Sus muchísimos “nacimientos” pasados, mientras que un hombre común y corriente no puede recordar lo que ha hecho ni siquiera unas cuantas horas antes. Si se le pregunta a alguien qué hizo exactamente a la misma hora el día anterior, al hombre común le sería muy difícil responder de inmediato. Seguramente que tendría que escarbar en su memoria para recordar qué estaba haciendo exactamente a la misma hora el día anterior. Y, no obstante, a menudo los hombres se atreven a declarar que son Dios, o Kṛṣṇa. Uno no debe dejarse engañar por esas pretensiones sin sentido. Y, además, el Señor explica Su prakṛti, o Su forma. Prakṛti significa “naturaleza”, y también significa svarūpa, o “la forma de uno mismo”. El Señor dice que Él aparece en Su propio cuerpo. Él no cambia de cuerpo, como sí lo hace la entidad viviente común, que cambia de un cuerpo a otro. Puede que la entidad viviente tenga una clase de cuerpo en el nacimiento actual, pero en el siguiente nacimiento tendrá un cuerpo diferente. En el mundo material, la entidad viviente no tiene un cuerpo fijo, sino que transmigra de un cuerpo a otro. Sin embargo, el Señor no hace eso. Cuando quiera que Él aparece, lo hace en el mismo cuerpo original, por medio de Su potencia interna. En otras palabras, Kṛṣṇa aparece en este mundo material en Su eterna forma original, con dos manos y sosteniendo una flauta”.

Prabhupāda: Sí. En la Biblia también se dice que: “El hombre está hecho a imagen de Dios,” no que Dios se hace a imagen del hombre. La clase atea dice que “Ha creado un Dios de acuerdo a su propio aspecto”, pero ninguna Escritura lo dice así. Dios tiene dos manos eternas, dos piernas. Así el hombre... Dios es tan bondadoso que el hombre también está hecho de acuerdo a Su forma. Esta es una facilidad especial que se le da al hombre. No es que alguien se imagina a Dios: “Porque el hombre tiene dos manos, Dios tiene que tener dos manos”. No. Esa no es la realidad. Aquí se explica muy bien. Continúa.

Madhudviṣa: Continuación: “Él aparece precisamente en Su cuerpo eterno, no contaminado por este mundo material. Aunque Él aparece en el mismo cuerpo trascendental y es el Señor del universo, aun así parece que Él nace como una entidad viviente ordinaria. Y aunque Su cuerpo no se deteriora como un cuerpo material, aun así parece que el Señor Kṛṣṇa crece de la infancia a la niñez y de la niñez a la juventud. Pero, lo que es muy sorprendente, nunca envejece más allá de la juventud. En la época de la Batalla de Kurukṣetra, Él tenía muchos nietos en casa, o, en otras palabras, Él ya había envejecido suficientemente según los cálculos materiales. Aun así, se veía tal como un hombre joven de veinte o veinticinco años. Nunca vemos un retrato de Kṛṣṇa en la vejez, porque él nunca envejece como nosotros, si bien es la persona más anciana de toda la creación —del pasado, del presente y del futuro—. Ni Su cuerpo ni Su inteligencia se deterioran o cambian alguna vez. Por consiguiente, queda claro que, a pesar de estar en el mundo material, Él es la misma e innaciente forma eterna de bienaventuranza y conocimiento, inmutable en lo que respecta a Su cuerpo e inteligencia trascendentales. De hecho, Su aparición y desaparición son como la salida del Sol, el movimiento de este ante nosotros y su subsecuente desaparición de nuestra vista. Cuando el Sol se pierde de vista, creemos que se ha puesto, y cuando el Sol está ante nuestros ojos, pensamos que se halla en el horizonte. En realidad, el Sol siempre está en su posición fija. Pero debido a nuestros sentidos insuficientes y defectuosos, hablamos de que el Sol aparece y desaparece en el cielo. Y como Su aparición y desaparición son completamente distintas de las de cualquier entidad viviente común y corriente, es obvio que Él es conocimiento eterno y bienaventurado, mediante Su potencia interna, y que nunca lo contamina la naturaleza material. Los Vedas también confirman que la Suprema Personalidad de Dios es innaciente, y que, sin embargo, parece nacer en múltiples manifestaciones. Las Escrituras védicas complementarias también confirman que, aunque el Señor parece nacer, aun así no cambia de cuerpo. En el Bhāgavatam, Él aparece en forma de Nārāyaṇa ante Su madre, con cuatro manos y los adornos de las seis clases de opulencias plenas. Su aparición en Su eterna forma original constituye Su misericordia sin causa, que se les otorga a las entidades vivientes de modo que puedan concentrarse en el Señor Supremo tal como es Él, y no en invenciones mentales o imaginaciones, que es lo que el impersonalista cree equivocadamente que son las formas del Señor. Según el diccionario Viśva-kośa, la palabra māyā, o ātma-māyā, se refiere a la misericordia sin causa del Señor. El Señor está consciente de todas Sus apariciones y desapariciones anteriores, pero una entidad viviente común, en cuanto obtiene otro cuerpo, olvida todo lo referente a su cuerpo pasado. Él es el Señor de todas las entidades vivientes, porque, mientras se encuentra en esta Tierra, realiza actividades maravillosas y sobrehumanas. Así pues, el Señor siempre es la misma Verdad Absoluta, y no presenta diferenciación alguna entre Su forma y Su ser, o entre Su calidad y Su cuerpo. Ahora pudiera surgir la pregunta de por qué el Señor aparece y desaparece en este mundo. Ello se explica en el verso siguiente”.

Prabhupāda: Está bien. Paramos. Vamos a comentar a continuación. Hare Kṛṣṇa. Muy bien. Está bien. ¿Alguna pregunta referente a este tema?

Balabhadra Kṛṣṇa: Yo pensé que Kṛṣṇa sólo tenía dieciséis años.

Prabhupāda: Sí.

Balabhadra: Pero en el Bhagavad-gītā, se dice que tenía veinte o veinticinco.

Prabhupāda: Sí. Tal como cuando ves el Sol, dices: “Las doce en punto, o el Sol es viejo”. Pero el Sol es siempre lo mismo. Ese es tu cálculo. El Sol a las doce de la mañana, al mediodía, no es más viejo que por la mañana, pero nuestro cálculo es, que el Sol es ahora, digamos, seis horas más viejo que cuando apareció. Ese es nuestro cálculo. Por lo tanto, Kṛṣṇa siempre tiene dieciséis, pero lo calculamos así.

Devoto: ¿Prabhupāda? ¿El Señor Jesucristo aparece en el cielo espiritual con el cuerpo que manifestó en la Tierra?

Prabhupāda: Sí. Si no, ¿cómo puede haber resurrección? El cuerpo normal no puede ser resucitado. Él apareció en su cuerpo espiritual, sin duda. Jesucristo dijo, creo recordar, que: “Señor, perdona a estas personas”, que le estaban crucificando. ¿No es así? Él sabía que: “Estos sinvergüenzas, me están matando, pero... Están ofendiendo, sin duda. Ellos no saben que yo no puedo ser matado, pero están pensando que me están matando”. ¿Lo ven? Pero eso era ofensivo, por lo tanto le rogó al Señor que los excusara porque Dios no puede excusar a los ofensores de los devotos. Él puede excusar a alguien que ofende a Dios, pero si alguien ofende a un devoto, Dios nunca lo excusa. Por lo tanto, él oró por ellos. Esta es la cualificación de un devoto. Él ora por todos, incluso por sus enemigos. Y no podía ser matado. Eso lo sabía. Pero aquellos sinvergüenzas, pensaron que estaban matando a Jesucristo.

Eso es todo. Está bien. Si no hay más preguntas, canten Hare Kṛṣṇa. (fin)