ES/690113 - Carta a Madhavi Lata escrita desde Los Angeles

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



Enero 13, 1969


Mi querida Madhavi Lata,

Por favor, acepta mis bendiciones. He recibido tu reciente carta (sin fecha) y he tomado nota de su contenido.

Has tratado de explicar las razones de tus recientes viajes, pero no hay necesidad de explicarlas; la razón es que estás inquieto. Yo quería que concentraras tu mente en pintar y utilizar tus talentos al servicio de Krishna, pero no me escuchas. Cualquier lugar donde quieras vivir, está bien, pero ¿por qué no utilizas tus talentos? Eso no puedes hacerlo, y es tu desventura. Aquí hay algunas sugerencias para que empieces a hacer hermosas pinturas. Si puedes llevar a cabo estas cinco sugerencias sin perder tu valioso tiempo será muy satisfactorio.

1. Devaki embarazada está sentada en una habitación del palacio y de su cuerpo sale una resplandeciente refulgencia. Casi cerca del techo de la habitación, los semidioses la rodean y rezan por la aparición del Señor Krishna. Algunos de los semidioses le arrojan flores.

2. Devaki está sentada en otra sala del palacio y Visnu, con Sus cuatro manos (caracola, maza, rueda, loto), vestido de amarillo aparece ante ella. En esta escena, Devaki y Vasudeva se inclinan ante el Señor Visnu y rezan.

3. Krishna está acostado felizmente en el regazo de Devaki como si fuera un niño ordinario.

4. Preparación de la escena: Vasudeva vio que todas las puertas estaban abiertas y que los porteros dormían, así que salió de la casa y llegó a la orilla del Yamuna. Vio que el río estaba lleno por el agua de la estación lluviosa y pensó: "¿Cómo cruzaré?". Entonces vio a un chacal cruzando el río y Vasudeva se dio cuenta de que el río era poco profundo y sólo le llegaba hasta los tobillos. Así que Vasudeva, con el pequeño Krishna en brazos, sigue al chacal a través del río Yamuna. Esta escena nocturna de cruzar el río y seguir al chacal es la cuarta imagen.

5. Al otro lado del río Yamuna, Vasudeva llegó a la casa de Nanda Maharaja, donde Yasoda yacía dormida con su bebé niña. La quinta imagen es de Vasudeva intercambiando bebés con la dormida Yasoda.

Cuando vuelva a Nueva York, probablemente en abril, me complacerá de ver estos cuadros bien pintados. Cuando haya terminado con este encargo, te pido me lo comuniques para que pueda asignarte otros. Espero que goces de buena salud.

Tu eterno bienqueriente,

A.C. Bhaktivedanta Swami