ES/690201 - Carta a Nara Narayana escrita desde Los Angeles

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda




1 febrero 1969

Mi querido Nara Narayana,

Por favor, acepta mis bendiciones. Estoy muy animado por tu propuesta, tal y como se indica en tu carta del 25 de enero de 1969, de construir casas en Nueva Vrindaban por una estimación de unos 1.000 dólares. Este dinero se asegurará de una manera u otra y se invertirá en Nueva Vrindaban para construir las cabañas propuestas. Estas cabañas no necesitan tener un acabado de muy alta calidad. Simplemente queremos protección; eso es todo. Pueden tener un acabado muy tosco. Por favor, envíame los planos que has mencionado, y comenzaremos este plan de viviendas en abril. Estamos de acuerdo en invertir el dinero en este proyecto, y las personas que tú querías se unirán a ti cuando realmente comiences el trabajo.

Mientras tanto, si creen que se pueden hacer deidades de bronce en Nueva York, por favor, hazme saber cuál será el costo por par. Si no son de 24" de altura, deberían ser del mismo tamaño que tenemos en Nueva York. Cuando estuviste aquí me dijiste que el costo sería de unos 40 dólares. Si puedes fabricarlas incluso por 50 dólares el par, deberías fabricar inmediatamente cinco o seis pares, y yo te proporcionaré el dinero. Pero primero asegúrate de cuál será el precio real y si podrás hacerlo. Después de terminar con este asunto de las murti, puedes comenzar inmediatamente el trabajo de construcción en Nueva Vrindaban.

En lo que respecta al equipo de kirtana, has sugerido muy bien dirigir el equipo bajo la buena dirección de Rsi Kumar. Él es un devoto muy experto, y el equipo de kirtana puede ser bien dirigido bajo su guía, y bajo la cooperación de Brahmananda.

Deberías leer también, además de asistir a clases, siempre que tengas tiempo, el Bhagavad-gita tal como es. Entonces podré recomendar a la junta de reclutamiento que eres un estudiante muy serio del Bhagavad-gita bajo mi supervisión.

Espero que esta te encuentre con buen ánimo y buena salud.

Tu eterno bienqueriente,

A.C. Bhaktivedanta Swami