ES/720531 - Clase SB 02.03.14-15 - Los Angeles

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



720531SB-Los Angeles, 31 mayo 1972 - 40:20 minutos



Pradyumna: Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Página 142, texto número 14. (dirige el canto del verso) Ya cantamos ayer, así que cantaré todas las líneas. (Prabhupāda y los devotos repiten)

etac chuśrūṣatāṁ vidvan
sūta no 'rhasi bhāṣitum
kathā hari-kathodarkāḥ
satāṁ syuḥ sadasi dhruvam
(SB 2.3.14)

Prabhupāda: ¿Alguien? ¿Siguiente, alguien más? Mujeres. Eso es todo.

etac chuśrūṣatāṁ vidvan
sūta no 'rhasi bhāṣitum''
kathā hari-kathodarkāḥ
satāṁ syuḥ sadasi dhruvam
(SB 2.3.14)

¿Ahora el significado de las palabras?

Pradyumna: etat —esto; śuśrūṣatām —de aquellos que están ansiosos de oír; vidvan —¡oh, eruditos!; sūta —Sūta Gosvāmī; naḥ —a nosotros; arhasi —que lo hagas; bhāṣitum —solo para explicarlo; kathāḥ —temas; hari-kathā-udarkāḥ —que da como resultado los temas acerca del Señor; satām —de los devotos; syuḥ —pueda ser; sadasi —en la asamblea de; dhruvam —ciertamente.

“¡Oh, erudito Sūta Gosvāmī! Por favor, sigue explicándonos esos temas, porque todos estamos ansiosos de oír. además, los temas que dan como resultado que se discuta acerca del Señor hari, sin duda que deben discutirse en la asamblea de devotos”.

Prabhupāda: (al lado) ¿Qué es esto? Detén todo esto. Escucha atentamente. No desvíes tu atención de esa manera. Hum. ¿Entonces?

Pradyumna: “Tal como lo indica la cita del Bhakti-rasāmṛta-sindhu de Rūpa Gosvāmī que presentamos antes, hasta las cosas mundanas, si se acoplan con el servicio del Señor Śrī Kṛṣṇa, se considera que son trascendentales. Por ejemplo, las epopeyas o las historias del Rāmāyana y del Mahābhārata, que se recomiendan especialmente para las clases poco inteligentes (las mujeres, los śūdras y los hijos indignos de las castas superiores), también se aceptan como literatura védica, porque se han recopilado en relación con las actividades del Señor”.

“El Mahābhārata se considera que es la quinta división de los Vedas, después de sus cuatro primeras divisiones, a saber, Sāma, Yajur, Ṛg y Atharva. La gente poco inteligente no acepta el Mahābhārata como parte de los Vedas, pero grandes sabios y autoridades lo aceptan como la quinta división de los Vedas. El Bhagavad-gītā también es parte del Mahābhārata, y está lleno de instrucciones que el Señor da para la clase de hombres poco inteligentes”.

“Algunos hombres poco inteligentes dicen que el Bhagavad-gītā no es para la gente casada, pero esos necios hombres olvidan que el Bhagavad-gītā se le explicó a Arjuna, un gṛhastha (un padre de familia), y lo habló el Señor en Su papel de gṛhastha. Así que, aunque el Bhagavad-gītā contiene la elevada filosofía de la sabiduría védica, no obstante es para los principiantes en la ciencia trascendental, y el Śrīmad-Bhāgavatam es para los graduados y posgraduados en la ciencia trascendental. Por consiguiente, obras tales como el Mahābhārata, los Purāṇas y otras obras literarias similares que están llenas de los pasatiempos del Señor, son todas Escrituras trascendentales, y se deben discutir en la sociedad de grandes devotos con toda confianza”.

“La dificultad que se presenta es que, dichas Escrituras, cuando las discuten hombres que lo hacen como profesión, parecen ser literatura mundana tal como la historia o las epopeyas, puesto que en ellas hay muchísimos datos históricos. Por eso se dice aquí que esa clase de obras literarias deben ser discutidas en la asamblea de devotos. A menos que las discutan los devotos, esas obras no pueden saborearlas los hombres de la clase superior. La conclusión es, entonces, que en última instancia el Señor no es impersonal. Él es la Persona Suprema, y tiene diferentes actividades. Él es el líder de todas las entidades vivientes, y desciende a voluntad y mediante Su energía personal, para rescatar a las almas caídas. Así pues, Él actúa exactamente igual que los líderes sociales, políticos o religiosos”.

“Debido a que esos papeles culminan finalmente en la discusión de los relatos del Señor, todos esos relatos preliminares también son trascendentales. Esa es la manera de espiritualizar las actividades cívicas de la sociedad humana. Los hombres tienen inclinación por estudiar historia y mucha otra literatura mundana —cuentos, obras de ficción, dramas, revistas, periódicos, etc.—; así pues, que todo esto se acople con el servicio trascendental del Señor, y todos ellos se volverán hacia los temas de los que disfrutan los devotos”.

“La propaganda que dice que el Señor es impersonal, que Él no tiene actividad alguna y que es una muda piedra sin ningún nombre ni forma, ha alentado a los hombres a convertirse en ateos e infieles demonios, y cuanto más ellos se apartan de las trascendentales actividades del Señor, más se acostumbran a las actividades mundanas que únicamente les despejan su camino al infierno, en vez de regresarlos al hogar, de vuelta a Dios”.

“El Śrīmad-Bhāgavatam comienza a partir de la historia de los Pāṇḍavas (con las actividades sociales y políticas necesarias), y, sin embargo, se dice que el Śrīmad-Bhāgavatam es la Paramahaṁsasaṁhitā, o la Escritura védica para el más elevado de los trascendentalistas, y en él se describe el paraṁ jñānam, el conocimiento trascendental supremo. Los devotos puros del Señor son todos paramahaṁsas, y son como los cisnes, los cuales conocen el arte de extraer leche de una mezcla de leche y agua”.

Y una nota al pie de página: “Incluso hasta hace cincuenta años, la estructura social de todos los hindúes estaba organizada de modo tal, que ellos no leían nada que no estuviera relacionado con las actividades del Señor, no presentaban ningún drama que no estuviera relacionado con el Señor, no organizaban ninguna feria o ceremonia que no estuviera relacionada con el Señor, ni tampoco visitaban ningún lugar que no fuera sagrado y que no hubiera sido santificado por los pasatiempos del Señor. Por lo tanto, hasta en las aldeas el hombre común hablaba acerca del Rāmāyaṇa y el Mahābhārata, del Gītā y el Bhāgavatam, incluso desde su misma infancia. Pero por influencia de la era de Kali, ellos han sido arrastrados hacia la civilización de los perros y los cerdos, para trabajar por pan sin ninguna idea acerca del conocimiento trascendental”.

Prabhupāda: Sí. En nuestra infancia, hemos visto que en todos los pueblos, en todas las aldeas, en todas las ciudades, había conocimiento trascendental. Cualquier persona común podría hablar sobre el Rāmāyaṇa, el Mahābhārata, el Señor Kṛṣṇa. Y el sistema era —es un sistema que todavía existe, pero ahora prácticamente ha quedado cerrado— el sistema era al atardecer, en los pueblos, todos debían reunirse en un lugar para escuchar los mensajes del Mahābhārata, el Rāmāyaṇa, sobre todo, porque estos dos libros puede entenderlos el hombre común. No se discutía la filosofía Vedānta.

Mis tíos maternos vivían en las afueras de Calcuta, a unos dieciséis kilómetros de nuestra casa. Y, a veces, cuando íbamos a visitarles, al anochecer, después de cenar, a las ocho en punto, ellos iban a reunirse a un determinado lugar donde escuchaban acerca del Rāmāyaṇa, Mahābhārata, Bhāgavata. Y mientras regresaban a casa hablaban de esto, y se iban a la cama pensando en ese recuerdo. De modo que cuando dormían también soñaban con el Rāmāyaṇa y Mahābhārata. Sí, soñaban con Rāmāyaṇa y Mahābhārata. ¿Lo ven? Ese era el sistema. Sadā tad-bhāva-bhāvitaḥ (BG 8.6).

Si piensan en Kṛṣṇa las veinticuatro horas del día, se volverán completamente conscientes de Kṛṣṇa y sus vidas serán un éxito. No permitan nada. Esto necesita un poquito de práctica, abhyāsa-yoga-yuktena cetasā nānya-gāminā (BG 8.8). No debo permitir a mi mente que piense en ningún otro tema que no sea Kṛṣṇa. Ahora tenemos tantos libros. Así que siempre que encuentren tiempo... deben encontrar tiempo. Hay tanto tiempo. Así que lean todos estos libros o canten. Pero cuando tengan hambre, tomen prasādam. Cuando tengan sueño, echen una cabeceada. No mucho, solo para refrescarse. Y continúen, ya sea cantando con las cuentas o leyendo los libros o hablando de Kṛṣṇa. De esa manera, permanezcan siempre conscientes de Kṛṣṇa. Smartavyaḥ satato viṣṇuḥ. Conciencia de Kṛṣṇa significa recordar a Viṣṇu siempre, veinticuatro horas del día, de una forma u otra. Pueden escribir a máquina para Kṛṣṇa, escribir para Kṛṣṇa, salir a la calle para Kṛṣṇa, hacer grupo de saṅkīrtana, vender libros para Kṛṣṇa, traer dinero para Kṛṣṇa, gastar dinero para Kṛṣṇa. Kṛṣṇa. Nada más. Todo Kṛṣṇa. Eso es conciencia de Kṛṣṇa.

Satataṁ kīrtayanto māṁ yatantaś ca dṛḍha-vratāḥ (BG 9.14), este verso lo encontrarán en el Bhagavad-gītā. Tuṣyanti ca ramanti ca. Necesitamos ciertas satisfacciones y cierto disfrute, porque esa es nuestra naturaleza. Ānandamayo 'bhyāsāt (Vedānta-sūtra 1.1.12). Almas espirituales. Dios está lleno de bienaventuranza, y nosotros como partes integrales de Dios, también estamos llenos de bienaventuranza. Lo único que queremos es ānanda, placer. Esa es nuestra naturaleza. Pero ese ānanda, ese placer, no lo pueden disfrutar de forma independiente. Eso no es posible. Deben disfrutarlo con Kṛṣṇa. Eso se llama rāsa-līlā. Kṛṣṇa y las gopīs se reúnen. Del mismo modo, nosotros somos partes integrales... es como si somos partes integrales de una gran máquina, cuando las partes están unidas, la máquina funciona. Si las partes integrales están dispersas, entonces no sirve de nada, es un simple trozo de hierro, nada más. Pero cuando están unidas, eso tiene significado. De manera similar, nosotros somos todos partes integrales de Kṛṣṇa. De modo que, debemos estar unidos. Kṛṣṇa en el centro. Kṛṣṇa en el centro.

Este movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa es... como esta casa, la casa donde estamos viviendo. Y en la casa de al lado, también vive gente. ¿Qué diferencia hay? La diferencia es que aquí, el centro es Kṛṣṇa. Eso es todo. Y por ello, es un templo. Y la casa de al lado, una casa. Esa es la diferencia entre casa, una casa ordinaria y un templo. No hay diferencia. Esta casa está hecha de ladrillos y piedras y madera, y la otra casa también está hecha de ladrillos y piedras. También viven, también cocinan, también comen. En la práctica, es todo lo mismo. Pero la diferencia está en que ahí no está Kṛṣṇa, y aquí está Kṛṣṇa. Esa es la diferencia. Eso es conciencia de Kṛṣṇa. Y, cuando camino por la calle y voy a cualquier parte, simplemente pienso en estos bonitos bungalós y casas, pero aun así, la gente no están satisfechos. “Se vende”. ¿Lo ven? ¿Por qué? Porque no hay Kṛṣṇa. Aprāṇasyeva dehasya maṇḍanaṁ loka-rañjanam. Es como un cuerpo, un cuerpo muy hermoso que está tendido en la calle muerto, a nadie le importa, porque la vida no está en él. El alma espiritual no está ahí. Y a nadie le importa.

Del mismo modo, bhagavad-bhakti-hīnasya jātiḥ śāstraṁ japas tapaḥ (CC Madhya 19.75), (Hari-bhakti-sudhodaya 3.11). Una gran nación. Ustedes, los estadounidenses, son una gran nación. Pero bhagavad-bhakti... no hay conciencia de Kṛṣṇa. Jāti, gran nación. Jāti significa gran nación. Bhagavad-bhakti-hīnasya jātiḥ japaḥ, sus actividades, tapaḥ, tapasya... están tratando de inventar tantas cosas buenas a nivel científico, a nivel mecánico. O inventan máquinas. De todo. Jātiḥ śāstraṁ japas tapaḥ kriyā. Son muy metódicos en sus actividades. Por las carreteras hay las luces indicativas. Todo está muy bien. Pero si falta la conciencia de Kṛṣṇa, entonces es... ¿qué es?

Aprāṇasya hi dehasya maṇḍanaṁ loka-rañjanam. Es como un cadáver, si lo decoran. Es como si tienen un cadáver y le aplicas una pomada y un bonito vestido y perfume, ¿Qué significa eso? Loka-rañjanam. Loka-rañjanam significa que pueden complacer a ciertas personas: “Oh, que bien estás decorando ese cadáver”, pero no tiene ningún significado. Es inútil, una pérdida de tiempo. De manera similar, esta gran nación, todo muy bien ordenado, muy bien organizado, la política, todo, pero si no hay conciencia de Kṛṣṇa, es exactamente lo mismo. Aprāṇasya hi dehasya maṇḍanaṁ loka-rañjanam.

Y por eso, sus hombres jóvenes, las muchachas jóvenes, están frustrados, a pesar de todas esas muestras de buena organización. La manera en que está organizado su país, no tiene comparación. Yo viajo por todo el mundo. Esas carreteras tan hermosas, todo tan bueno. Pero, ¿por qué se sienten frustrados y confusos? Debido a este aprāṇasya. Debido a que no hay vida.

La vida es la conciencia de Kṛṣṇa. Si realmente sienten algo por su país, por su comunidad, por su gente, tienen que propagar esta conciencia de Kṛṣṇa. Están muriendo. Si esparcen esta conciencia de Kṛṣṇa, ellos volverán a la vida y todo será realmente hermoso. Esa es mi petición. Yo he venido a su país con esta misión, que: “El pueblo estadounidense siente frustración. Si aceptan el proceso de la conciencia de Kṛṣṇa, serán felices y otros seguirán su ejemplo”. Ahora, algunos de ustedes, mis estudiantes más avanzados, han entendido la filosofía. Algunos de ustedes han tomado la orden de sannyāsa. Así que ir de pueblo en pueblo, de ciudad en ciudad y predicar esta conciencia de Kṛṣṇa. Devolverles la vida para que esa frustración se acabe. Los líderes de la sociedad, los políticos, deben preocuparse de esto, de cuidar hacia dónde van.

Este verso dice: kathā hari-kathodarkāḥ satāṁ syuḥ sadasi dhruvam. Por eso, si hablamos de este hari-kathā... estamos comentando este Śrīmad-Bhāgavatam, hari-kathā. Kathā, hari-kathā, udarkāḥ satāṁ syuḥ sadasi dhruvam. Cuando esto se habla entre devotos, entonces se puede entender. Este libro, el Śrīmad-Bhāgavatam, es valioso entre los devotos. Y a otros, los demás tal vez lo compren. Ven que: “¿Qué es esto? Versos sánscritos, algo escrito. Para ellos es un trozo de papel”. Es como para nosotros este periódico, para nosotros es un trozo de papel. No nos importa. Pero ellos lo guardan con mucho cuidado en su pecho: “Oh, qué bueno que es”. (risas) (risas)

Los periódicos en occidente son tan populares. Un caballero me contó un día la historia de que un sacerdote cristiano había ido a predicar la religión cristiana en Sheffield. Sheffield, ¿dónde está? ¿En Inglaterra? Así que a los obreros, a los trabajadores, les predicaba diciéndoles que: “El Señor Jesucristo los salvará. Si no se refugian en el Señor Jesucristo, irán al infierno”. Lo primero que le preguntaron a él...: “¿Quién es ese Jesucristo? ¿Qué número tiene?”. Eso significa que ellos pensaron: “Jesucristo debe ser uno de los trabajadores y cada trabajador tiene un número, así que, ¿cuál es su número?”.

El sacerdote les contesto: “No, Jesucristo es el hijo de Dios. No tiene un número. No es un obrero”. Entonces le preguntaron: “¿Qué es el infierno?”. Les explico: “El infierno es un lugar muy húmedo, muy oscuro”, y así sucesivamente. Y ellos guardaron silencio, porque eran mineros, trabajaban en las minas, y es un lugar siempre oscuro y húmedo. (risas) (risas) Entonces, ¿cuál es la diferencia entre el infierno y la mina? Ellos guardaron silencio. Pero cuando el sacerdote les dijo: “No hay periódico”. “¡Oh, que horrible!”. (risas) “No hay periódico”. (risas) Por eso, en su país, hay tantos periódicos, quiero decir, se distribuyen un montón de periódicos.

Y, si para la ciudad de Los Ángeles, que no es más que un punto en el mundo... hay muchas ciudades, y hay tantísimos periódicos. No solo una edición, sino que tienen dos, tres ediciones. Y si ellos desde este punto diminuto, pueden dar tantas noticias, ¿cuántas noticias tenemos nosotros? Eso es el Śrīmad-Bhāgavatam, desde el mundo espiritual. Pero no hay compradores. Esa es la dificultad. Porque por lo demás, es un libro con unas enseñanzas tan valiosas, con tanta información, todo real, dhruvam. Dhruvam significa real, no ficticio. De modo que tendría que haber muchísimos compradores. Pero debido a que no hay conciencia de Kṛṣṇa, debido a que no hay cultura, estas Escrituras no son apreciadas. Entonces, ¿qué sigue? Otro verso.

Pradyumna: (dirige el canto del verso)

sa vai bhāgavato rājā
pāṇḍaveyo mahā-rathaḥ
bāla-krīḍanakaiḥ krīḍan
kṛṣṇa-krīḍāṁ ya ādade
(SB 2.3.15)

Prabhupāda: ¿Siguiente? ¿Sí? (los devotos cantan) Muy bien. Siguiente. (más devotos cantan) Muy bien. Hermoso.

sa vai bhāgavato rājā
pāṇḍaveyo mahā-rathaḥ
bāla-krīḍanakaiḥ krīḍan
kṛṣṇa-krīḍāṁ ya ādade
(SB 2.3.15)

De modo que, estas son las cualidades de Parīkṣit Mahārāja. Sa vai bhāgavato rājā, no era un rājā ordinario. Rājā significa rey. Bhāgavataḥ. Bhāgavata significa gran devoto, un devoto de primera categoría, bhāgavata. Pāṇḍaveya. Y ¿cómo llego a ser bhāgavata? Porque hijo y nieto, todos pertenecían a la dinastía de los Pāṇḍavas. Parīkṣit Mahārāja era el nieto de Arjuna. Arjuna era amigo de Kṛṣṇa y era bhāgavata. Por desgracia, el hijo de Arjuna murió en la Batalla de Kurukṣetra. También él era bhāgavata. Era el hijo de Subhadrā. Arjuna... la hermana de Kṛṣṇa, era Subhadrā, que está aquí sentada con Jagannātha, el hijo de Subhadrā fue Abhimanyu, pero murió en el campo de batalla de Kurukṣetra, a los dieciséis años. Por fortuna, su esposa, Uttarā, estaba embarazada. Parīkṣit Mahārāja estaba en el vientre de Uttarā y se salvó. Todos los demás murieron. Pāṇḍaveyaḥ, “los descendientes de la dinastía de los Pāṇḍavas”. Por eso, el bhāgavataḥ.

Era mahā-rathaḥ: podía luchar contra miles de guerreros al mismo tiempo, mahā-ratha. Al kṣatriya que puede luchar en solitario, contra otros mil kṣatriyas, se le da el calificativo de mahā-ratha. De modo que, el volverse bhāgavata, el volverse devoto, no significa que uno tiene que dejar todas las demás actividades. No. Este verso utiliza la expresión mahā-ratha. Mahā-ratha significa un gran general.

De modo que un gran general también puede llegar a ser un bhāgavata, un gran comerciante también puede ser bhāgavata, y un gran brāhmaṇa, un gran sabio erudito, también puede ser bhāgavata. No hay ninguna restricción. No es que simplemente el vedantista, el que es un gran sabio erudito, puede ser bhāgavata. No. El sistema social estaba tan bien organizado que todos podían ser bhāgavata. El brāhmaṇa podía ser bhāgavata, un kṣatriya podía ser bhāgavata, un vaiśya podía ser bhāgavata, o un śūdra también podría convertirse en un bhāgavata. Striyaḥ śūdrās tathā vaiśyāḥ. Kṛṣṇa dice personalmente: “No importa si son mujeres, śūdra o vaiśya”, te 'pi yānti parāṁ gatim, “todos ellos pueden ir de regreso al hogar, de vuelta a Dios”. ¿Cómo? Māṁ hi pārtha vyapāśritya ye 'pi syuḥ pāpa-yonayaḥ (BG 9.32): “Simplemente tienen que refugiarse en Mí seriamente. Nada más. No importa lo que sean”. Te 'pi yānti parāṁ gatim.

Este Parīkṣit Mahārāja, en su infancia, fue bāla-krīḍanakaiḥ krīḍan. Él jugaba con Rādhā-Kṛṣṇa. Esa es la ventaja de nacer en una familia vaiṣṇava. Es como algunos de nuestros niños, juegan con Jagannātha, juegan con Rādhā-Kṛṣṇa. En la India, Sarasvatī, la hija de Śyāmasundara, ofrece ārati y me trae a mí el ārati. Y yo lo tomo. Si. (se ríe) Aprende. Como el niño, la madre ofrece reverencias y el niño lo hace también. Nosotros solíamos hacerlo así. Tuvimos esa oportunidad de un buen padre y una buena madre. Fuimos educados. Del mismo modo, también ustedes pueden educar a sus hijos. Esa es la perfección de su posición como padres y como madres. Porque de no ser así, los perros, los gatos y los cerdos, ellos también engendran hijos. Y son más expertos. Un cerdo puede engendrar hijos dos veces al año y, cada vez, trae al mundo más de una docena.

De modo que no pueden competir con eso. No es posible. (risas) A veces pueden engendrar dos hijos a la vez, pero no es competición. La competencia es hacer que sus hijos sean conscientes de Dios. Darles. Ellos juegan con Kṛṣṇa. En nuestro Nuevo Vrindavan, D-D-D el niño (Dvārakādhīśa), su padre le dio juguetes. Yo estaba presente. Pero el niño no tocó los juguetes. Dijo: “Eso es māyā”. (risas) Sí. “Es māyā”. Por eso todo debe enseñarse desde la infancia. Esa es la instrucción de Prahlāda Mahārāja. Kaumāra ācaret prājño dharmān bhāgavatān iha (SB 7.6.1). De modo que si desde el principio no hay enseñanza, no hay conciencia de Dios, entonces, ¿cuál será el resultado? Pueden enviarles a una universidad muy condecorada, pero el resultado será que serán hippies. Y nada más. No pueden esperar nada más. No pueden esperarlo.

Enséñenles desde el mismo comienzo cómo volverse conscientes de Kṛṣṇa. Entonces encontrarán una población muy buena, una población hermosa, una atmosfera pacífica, condición social muy buena, sistemática, todo el mundo es feliz. Y en esa felicidad, están todos cantando conscientes de Kṛṣṇa. Cantando Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, en cada casa se escucha un tintineo de campanas, “Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa”. (risas) Tienen que hacer de esto Vaikuṇṭha. Esa es mi petición. Enséñenles desde el mismo comienzo de la vida. Tal como aquí bāla-krīḍa. Bāla-krīḍanakaiḥ krīya (SB 2.3.15). Jugando se vuelven conscientes de Kṛṣṇa. Pueden ir a ver nuestro gurukula en Dallas. Hagan todo esto... salven a todos estos niños, a todos esos niños que han venido a su refugio. Ese es el deber del padre y de la madre. Es el deber de los tutores salvar a los dependientes del peligro inminente de muerte, del ciclo de nacimientos y muertes repetidos. Y, si no pueden salvar a esos niños, entonces es inútil. Sálvenlos.

Tenemos nuestro centro en Dallas. Todos los niños deben ir allí, y las jóvenes más avanzadas, deben ir allí y cuidarlos. Simplemente produzcan una nueva generación, como Parīkṣit Mahārāja. Produzcan una nueva generación, bāla-krīḍanakaiḥ, desde la misma infancia pensando en Kṛṣṇa, jugando con Kṛṣṇa, comiendo de Kṛṣṇa, Kṛṣṇa, Kṛṣṇa... entonces no podrán ser de otra manera. Por eso, Prahlāda Mahārāja, era un niño, un niño de cinco años, y enseñaba a sus compañeros de clase. Y lo rechazaban diciéndole: “Prahlāda, ¿por qué te molestas con esto? Cuando seamos mayores, pensaremos en ese Kṛṣṇa”. “No”, él insistió. “No”. Kaumāra ācaret prājño dharmān bhāgavatān iha, durlabhaṁ mānuṣaṁ janma... (SB 7.6.1). “No podrán tener de nuevo esa oportunidad. Así pues, comenzar inmediatamente. Trata de volverte consciente de Kṛṣṇa inmediatamente”.

Muy bien, kīrtana.

Devotos: Jaya. Todas las glorias a Śrīla Prabhupāda. (los devotos ofrecen reverencias) (cortado) (fin)