ES/741006 - Clase SB 01.08.26 - Mayapur

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



741006SB-Mayapur, 6 octubre 1974 - 43:52 minutos



Nitāi: Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. (los devotos repiten) (dirige el canto del verso, etc.)

janmaiśvarya-śruta-śrībhir
edhamāna-madaḥ pumān
naivārhaty abhidhātuṁ vai
tvām akiñcana-gocaram
(SB 1.8.26)

(cortado)

Traducción: “Mi Señor, Tu Señoría es fácilmente accesible, pero únicamente para aquellos que están exhaustos de lo material. Aquel que está en la senda del progreso [material], tratando de mejorarse con un linaje respetable, gran opulencia, educación elevada y belleza física, no puede acercarse a Ti con un sentimiento sincero”.

Prabhupāda:

janmaiśvarya-śruta-śrībhir
edhamāna-madaḥ pumān
naivārhaty abhidhātuṁ vai
tvām akiñcana-gocaram
(SB 1.8.26)

Akiñcana. Akiñcana significa na kiñcana. Kiñcana significa “algo”. Y na kiñcana significa “quien no tiene nada que poseer”. Esa persona recibe el calificativo de na kiñcana. O quien está plenamente convencido de que “nada me pertenece”, él es akiñcana. Aquí, en el mundo material es todo lo contrario. Todo el mundo piensa: “Tengo algo”. Lo he visto hace muchísimo tiempo, tal vez hace cincuenta años ya, en la estación de Howrat. No me acuerdo adónde iba, y había una persona que llevaba por equipaje un poco de leña a medio quemar y unas pocas basuras. Su equipaje era un poco de leña a medio quemar. Él pensaba: “Esto es lo que tengo. Estos son mis bienes, lo que he ahorrado”. Y se los llevaba a su casa. Esto significa que todo el mundo, por insignificante que pueda ser, todo el mundo piensa: “Yo tengo algo”. Ésa es la enfermedad material.

Y ésta es la ilusión. Y el śāstra dice: ato gṛha-kṣetra-sutāpta-vittair janasya moho ýam. Janasya moho yam ahaṁ mameti (SB 5.5.8). Cómo una persona se enreda en este mundo material, todo esto se describe en el Śrīmad-Bhāgavatam. Puṁsaḥ striyā mithunī-bhāvam etam. Este mundo material significa atracción sexual, mithunī-bhāva. El hombre busca a la mujer; y la mujer busca al hombre. Esto es la vida material, en la vida humana, en las vidas de los animales, de los pájaros... Como esos gorriones –están tratando de hacer un nido en esta lámpara para disfrutar del sexo y poner huevos. Y para ello necesitan un lugar. El principio básico es la vida sexual. En primer lugar, la vida sexual, después otras necesidades. En primer lugar, el hombre y la mujer se ven. Después, cuando se unen, puṁsaḥ striyā mithunī-bhāvam etaṁ tayor mitho gṛdaya-granthim āhuḥ (SB 5.5.8). Cuando se unen y tienen hijos, el fuerte nudo del corazón: “Ella es mi esposa, él es mi marido. No podemos separarnos…”. Un fuerte nudo. Hṛdaya-gṛanthi. Ya existe la atracción. Y esa atracción se estrecha cada vez más después de la unión. Después necesitamos un lugar dónde vivir juntos, “hogar dulce hogar”. Sí, muy dulce. (risas) Trabajar todo el día y toda la noche. Y eso es moha. Él trabaja noche y día sin parar. No tiene ni un momento libre, y aun así piensa: “Dulce hogar”. Esto es ilusión.

Ataḥ gṛha. Tan pronto como hombre y mujer o macho y hembra, ya sean pájaros, animales o seres humanos, o semidioses, todos... Entonces necesitan un hogar, gṛha, y tierra para producir comida, gṛha-kṣetra, luego niños. Gṛha-kṣetra. Porque cuando un hombre se casa, la vida social, si no tiene hijos, eso significa un hogar vacío. Putra-hīnaṁ gṛhaṁ śūnyam. Cāṇakya Paṇḍita ha dicho: avidyaṁ jīvanaṁ śūnyam: “Una persona que no ha recibido educación, su vida es cero”. Avidyaṁ jīvanaṁ śūnyam. Y diśaḥ śūnyā abāndhavāḥ: “Si quieres ir a un lugar desconocido, y ese lugar al que vas no es un lugar sagrado…”. Porque en el sistema védico, cuando se sale de viaje, se visitan lugares sagrados, tīrtha-sthāna, o se visita la casa de un amigo. “Si vas al extranjero y allí no tienes amigos ni devatā, entonces es inútil”. Diśaḥ śūnyā abāndhavāḥ. O putra-hīnaṁ gṛhaṁ śūnyam: “Estás casado pero no tienes hijos. También eso es vacío, cero”. Putra-hīnaṁ gṛhaṁ śūnyam. Sarva-ṣūnyā daridratā: “Pero si eres pobre, entonces todo es cero”. Su vidyā es cero. Su hogar es cero. Y Sus amigos son cero porque nadie los va a cuidar.

Pero lo verdadero es putram. Ato gṛha-kṣetra-suta. Suta significa putra. Y de acuerdo con... (al lado) (refiriéndose a las aves) Conducirlas. Y se necesita, la vida de casado necesita hijos. Si no es un vacío. El Bhāgavata dice: ato gṛha-kṣetra-sutāpta-vittair janasya moho ´yam (SB 5.5.8): “Yo tengo...”. En otro pasaje se dice que nos sentimos muy seguros: “Tengo un cuerpo hermoso, fuerte y robusto. Todos los días por la mañana hago ejercicio y me mantengo sano”. Ataḥ... ¿Este verso cuál es? Deha-kalatrādi. “Tengo una buena esposa...”. Sainya significa ātma-sainya, su asatsu, ātmā... Pensamos: “Estoy en la vida familiar. Soy muy feliz. Estoy muy seguro. Tengo una buena esposa, tengo mis buenos hijos, tengo tantas cosas... Tengo una buena cuenta corriente. Así que estoy seguro”. El śāstra' dice: pramattaḥ tasya nidhanaṁ paśyann api na paśyati.

Dehā-patya-kalatrādiṣu. Se me olvidaba. Deha y apatya. Deha significa este cuerpo, y apatya significa niños. Dehāpatya-kalatra. Kalatra significa esposa. Dehāpatya-kalatrādiṣu ātma-sainyeṣu (SB 2.1.4). Es como cuando un rey va a la guerra, tiene soldados, de la misma manera nuestra vida en el mundo material es simplemente como una guerra. Siempre hay algún peligro. Como dice Kuntī: vipadaḥ santu śaśvat tāḥ (SB 1.8.25). Simplemente llena de peligros. Y cuando hay peligro tenemos que luchar. Eso es la vida material. Eso se llama la lucha por la existencia. Y ¿cómo luchamos? Dehāpatya-kalatrādiṣv ātma-sainyeṣu (SB 2.1.4). Este es nuestro soldado. “Yo tengo un bonito cuerpo, tengo un cuerpo sano, y tengo a mis hijos, mis hijos adultos. Tengo mi buena esposa”. Ādi. Esto es el ādi. Ese es el comienzo del pensamiento de “yo tengo...”. Kiñcana. Eso es kiñcana: “Tengo algo”. Dehāpatya-kalatrādiṣu. A ellos se les considera ātma-sainya: “Ellos son mis soldados. Cuando yo esté enfermo me ayudarán. Y si salgo, ¿quién me va a ayudar? Si abandono mi hogar y me enfermo, ¿quién va a cuidar de mí? No, no, no me voy de casa”. Dehāpatya-kalatrādiṣv ātma-sinyeṣu. Ése es mi soldado. Luchamos con soldados, acompañados por soldados.

Dehāpatya-kalatrādiṣv ātma-sainyeṣv asatsv api (SB 2.1.4). Asat. Son cosas que no van a permanecer. Tengo experiencia de ello. Todo el mundo la tiene. Yo era un niño ustedes han sido niños. Yo tenía un padre que me protegía u otros parientes, amigos. Pero ahora se han ido. Asatsu. Todo se ha terminado. Y estos soldados, el padre o el hijo, el padre se ha ido y al hijo también le llegará el final. Asatsu api. Dehāpatya-kalatrādiṣv ātma-sainyeṣv asatsv api, teṣāṁ pramatto nidhanam. Esos soldados van a ser matados. Teṣāṁ pramatto nidhanaṁ paśyann api na paśyati. Lo sabe, tiene experiencia. Sin embargo, permanece ciego: “Estos soldados no van a poder protegerme. Cuando venga la muerte, no podrán protegerte. Pero mi verdadera condición miserable es el nacimiento, la muerte, la vejez y la enfermedad. Cuando me enferme, pueden ayudarme. Están ansiosos por ayudarme. Pero no pueden darme una verdadera ayuda”. Eso debemos de entenderlo, ṇtma-sainyeṣv asatsv api. Morirán. La verdadera protección viene de Kṛṣṇa. Eso no lo sabemos.

Y mientras poseamos todas estas cosas... Eso se explica aquí: janma, aiśvarya, śruta, śrī. Estas son buenas posesiones materiales: nacer en una familia elevada, una familia aristocrática, o en una familia brāhmaṇa, o de kṣatriyas. Eso se considera un buen linaje. Pero hoy todo el mundo es ṣūdra. Eso es otra cosa. Nadie puede estar orgulloso de su nacimiento. Janma y aiśvarya. Si poseemos tierras, hogar e hijos, esposa, una cuenta bancaria, eso se llama aiśvarya. Janmaiśvarya-śruta. Y educación: “Soy filósofo, soy científico, soy poeta”. Educación. Eso se llama śruta. Śruta. Sobre todo el conocimiento védico, śruti. Janmaiśvarya-śruta-śrībhiḥ. Y śrī, belleza. Y a menos que una persona sea muy feliz o nacido en una familia buena, a no ser que..., él no puede tener belleza física. Janmaiśvarya-śruta-śrībhir edhamāna, edhamāna-madaḥ (SB 1.8.26). Cuanto más poseemos estas cosas, más nos embriagamos con ellas. Ya es ilusión. Gṛha-kṣetra-sutāpta-vittaiḥ (SB 5.5.8). Y esta ilusión se vuelve cada vez más fuerte. Y a esto se le llama madaḥ.

Pero no tienen interés en el cultivo de la conciencia de Kṛṣṇa. Ésa es la situación ahora mismo. Todo el mundo se esfuerza: “Quiero tener una buena posición en el mundo material”. La gente dirá: “Oh, que casa tan bonita tiene”. Todo el mundo se esfuerza en recibir una buena educación para conseguir dinero. En Occidente, estas cosas tienen un gran predominio, janmaiśvarya-śruta. No están demasiado interesados por el janma, pero aiśvarya y śruta sí les interesa, y śrī. Y en todas partes más o menos, así es como... Y estas cosas son una descualificación para el cultivo de la conciencia de Kṛṣṇa. Materialmente están muy cualificados, progresan en la civilización material. Pero aquí Kuntī dice: janmaiśvarya-śruta-śrībhir edhamāna-madaḥ pumān, naivārhati (SB 1.8.26): “Él no desea”. Na eva, naiva, arhati.

Por eso la civilización védica consiste en abandonar voluntariamente, abandonar voluntariamente. Mahārāja Bharata era un rey muy poderoso, era el emperador del mundo entero, Bhārata varṣa. A él debe su nombre Bhārata varṣa. A los veinticuatro años de edad abandonó el reino, abandonó a su joven esposa. Hay muchísimos ejemplos. Eso es volverse voluntariamente akiñcana: “No tengo nada, no poseo nada”. Aquí en el mundo material, todo el mundo trata de tener más --más riquezas, más educación, más belleza, más prestigio familiar, aristocracia. Eso es materialismo. Y espiritualismo significa todo lo contrario. Por eso la gente no se siente atraída por el espiritualismo. Les he contado que en un sueño pensaba: “Guru Mahārāja me pide que vaya, y yo iba…”. ¿Les he contado esta historia? Sí. Y yo estaba asustado: “Oh, voy a tener que abandonar mi familia. Y, ¿tengo que volverme sannyāsī? Y, ¿tengo que ir tras mi Guru Mahārāja? No, no, eso es horrible”. Yo pensaba así. Pero él me obligó. Él es tan bueno que de una forma u otra me obligó. Eso es misericordia. Ahora me doy cuenta de lo misericordioso que fue mi Guru Mahārāja al forzarme a aceptar esta vida.

Por eso Yudhiṣṭhira Mahārāja preguntó... Hay un verso en el Śrīmad-Bhāgavatam... Es una pregunta que Parikṣit Mahārāja le hizo a Śukadeva Gosvāmī: “Su Señoría, vemos todo lo contrario, que el que es devoto del Señor Viṣṇu, el esposo de la Diosa de la fortuna, cada vez se vuelve más pobre”. Porque un vaiṣṇava, por lo general, siempre son pobres y humildes como los brāhmaṇas. “Mientras que el adorador del Señor Śiva...”. El Señor Śiva significa que acepta voluntariamente toda pobreza. Su esposa es Durgā devi, tan poderosa. Sṛṣṭi-sthiti-pralaya-sādhana-śaktir ekā. Ella es tan poderosa que puede hacer un universo nuevo. Pero esta apareja, Śiva y Pārvatī, ni siquiera tienen una casa en donde vivir. Viven bajo un árbol, son tan pobres, no tienen ni tan siquiera una casa donde vivir. “Y el que se hace devoto del Señor Śiva obtiene opulencia material. Se hace rico. Obtiene una buena esposa. Obtiene toda clase de bienes materiales. Pero el que se hace devoto de Viṣṇu, el esposo de la Diosa de la fortuna, se vuelve pobre. ¿A qué se debe esta contradicción? Es una contradicción. El que adora al Señor de la Diosa de la Fortuna se vuelve más pobre, y el que adora al vagabundo, al que ni siquiera tiene una casa, que vive bajo un árbol de bael... Tampoco eso es bueno. Y su devoto adquiere tanta opulencia material. ¿A qué se debe esta diferencia?”. Estas son las afirmaciones que he comentado varias veces.

Y Śukadeva Gosvāmī dijo a Parīkṣit: “Esta misma pregunta se la hizo tu abuelo, Mahārāja Yudhiṣṭhira al Señor Kṛṣṇa, y yo te voy a decir lo que Él le contestó”. Y en relación con esto contestó a Kṛṣṇa. Mahārāja Yudhiṣṭhira para saber, preguntó a Kṛṣṇa: “¿Por qué tenemos que pasar tantos problemas, por qué hemos tenido que perder nuestro reino? Ahora vivimos en el bosque. Han insultado a nuestra esposa. ¿Por qué?”. La respuesta fue: yasyāham anugṛhṇāmi hariṣye tad-dhanaṁ śanaiḥ (SB 10.88.8). Significa... Kṛṣṇa dice: “Cuando quiero favorecer especialmente a alguien, le quito todas sus riquezas para que sea niṣkiñcana”. Niṣkiñcana significa que la persona queda prácticamente sumida en la miseria. Nadie se preocupa de él. Entonces se entrega plenamente a Kṛṣṇa. Como dice Narottama dāsa Ṭhākura:

hā hā prabhu nanda-suta, vṛṣabhanu-sutā-juta
koruṇā karoho ei-bāro
narottama-dāsa koy... koruṇā...
nā ṭheliho rāṇgā pāy
tomā bine ke āche āmāra

Explica como esta posición es muy buena, niṣkiñcana. “Lo he perdido todo. Ahora ni mi familia ni mis amigos se preocupan de mí. Así que lo he perdido todo. Por eso me veo obligado a venir a Ti y a tomar refugio en Ti. Por favor no me eches de Tu lado. Por favor, dame refugio porque no tengo otro refugio”. Tomā bine ke āche āmāra: “No hay nadie más que pueda cuidar de mí más que Tu Señoría”. A esto se llama niṣkiñcana.

En realidad esa es la situación. Mientras pensemos que: “Para protegerme voy a hacer esto. Haré este arreglo para...”. Esto no es niṣkiñcana. Niṣkiñcana significa cuando yo piense, cuando realmente llegue a entender que me encuentre que: “Realmente no tengo otra protección que Kṛṣṇa”, entonces me entrego plenamente, ésa es la mejor cualidad para el cultivo de conciencia de Kṛṣṇa. Por eso las Escrituras dicen: naivārhaty abhidhātuṁ vai tvām: “A Ti”. ¿Quién eres Tú? Akiñcana-gocaram: “Sólo puede entenderte la persona que lo ha perdido todo, que lo ha perdido todo”. La intención de Kuntī era: “Cuando lo perdimos todo, Tú estabas con nosotros. Y ahora tenemos un reino, prestigio. Tenemos tantas cosas. ¿Ahora Tú te vas a Dvārakā?”. Tvām akiñcana-gocaram.

Ésta es la comprensión de Kuntī. Janmaiśvarya-śutra-śrībhir edhamāna-madaḥ... (SB 1.8.26). Por eso para progresar espiritualmente, la persona que está interesada, no debe estar demasiado apegada a las cosas materiales si quiere progresar en la vida espiritual. Janmaiśvarya... Porque eso será un enredo. Cuanto más pensemos: “Esto es mío, esto es mío”. Ahaṁ mameti (SB 5.5.8). Eso es ilusión. Nada le pertenece, pero por ilusión pensará: “Esto es mío, esto es mío”. Es como nosotros que tenemos este enorme y hermoso edificio. Pero si pensamos: “Este edificio es mío” o “mi edificio”, entonces nos confundiremos. Mi Guru Mahārāja personalmente dijo: ”Cuando vivíamos en una casa alquilada, si podíamos recaudar doscientas o trescientas rupias...Vivíamos tan bien en Ultadanga. Y desde entonces –Jayadvaita nos ha dado este palacio de mármol, la Gauḍīya Maṭha– desde entonces hay fricción entre nuestros hombres: ‘¿Quién va a ocupar esta habitación? ¿Quién va a ocupar esta otra habitación? ¿Quién va a ser el propietario de esta habitación?’ ”. Tīrtha Mahārāja... Kuñjabāba estaba dando una tarjeta diciendo: “Ésta es...”. Cada uno hacía un plan distinto. Guru Mahārāja dijo... Él en persona me instruía: “Si pudiera vender el mármol de este templo, conseguir un poco de dinero y así imprimir algunos libros, eso habría sido mejor. Eso habría sido mejor”.

Por eso yo estoy tan empeñado en los libros. Si olvidamos nuestra posición, si nos volvemos personas de dinero, propietarios, entonces Kṛṣṇa se acabará, porque Kṛṣṇa es akiñcana-gocara. Por eso siempre debemos recordar que si tenemos esta hermosa casa no es por nuestra propia comodidad, pero la gente vendrá porque no están acostumbrados. Si nosotros invitásemos a la gente: “Vengan y siéntense aquí en el suelo, en Māyāpur”, no, no lo podemos hacer. Por eso debemos tener un hermoso templo de Kṛṣṇa para que la gente venga y podamos predicar. Ésa es la filosofía, no que porque ahora tenemos esta hermosa casa, vamos a estar muy apegados a ella. Tiene que haber apego por el servicio a Kṛṣṇa. El templo debe estar muy limpio. Todo debe estar muy bien organizado. ¿Para qué? Para atraer a los devotos. Ése es el objetivo, no por nuestro beneficio personal. Así se hace. Mi Guru Mahārāja introdujo estos grandes palacios, templos. Ésta es la aportación de Bhaktisiddhānta Sarasvatī Ṭhākura, porque los Gosvāmīs adoraban a Kṛṣṇa con un método distinto –fueron a Vṛndāvana y vivían bajo los árboles, una noche la pasaban bajo un árbol, la noche siguiente bajo el árbol siguiente. Pero este vairāgya no es posible para los occidentales. Y por eso necesitamos este edificio. Ésa es la contribución. Si no viven bien, no podrán. Y tenemos que predicar por todo el mundo.

Nirbandhaḥ kṛṣṇa-sambandhe (Bhakti-rasāmṛta-sindhu 1.2.255). Por Kṛṣṇa... Por eso en la India verán que hay muchos templos muy grandes y costosos, no casas personales. En toda la India no las encontrarán. Vayan a ver. En los templos han gastado grandes cantidades de dinero. Así era la civilización oriental. Es como los musulmanes, ellos construían mezquitas muy caras, pero ellos mismos vivían en chozas. Ésa era la intención. Cuando una persona tenía un poco de riqueza, encontraba la manera de gastarlo para Kṛṣṇa, no para el placer de sus propios sentidos. Es como el templo de Madana-mohana que fue construido por un gran comerciante. Fue a ver a Sanātana Gosvāmī: “Señor, ¿qué puedo hacer por ti? Quiero servirte”. Y Sanātana Gosvāmī dijo: “Mi Madana-mohana..., yo vivo bajo un árbol y tengo a mi Madana-mohana aquí colgado. Pero si tú puedes construir un templo para Madana-mohana”. Del mismo modo, Mahārāja Mansingh fue a ver a Rūpa Gosvāmī. Nunca construyeron enormes templos para vivir ellos mismos, sino para Kṛṣṇa. Así se hace. Para Kṛṣṇa debemos tener de todo muy suntuoso y muy opulento, de primera categoría, pero no para mí. Eso es akiñcana. Personalmente no debemos poseer nada, simplemente para Kṛṣṇa.

Y esa actitud debe mantenerse, porque este verso dice tvām akiñcana-gocaram (SB 1.8.26). Y Caitanya Mahāprabhu dijo niṣkiñcanasya. Aquí recibe el nombre de akiñcana. Y la misma palabra de una forma distinta, niṣkiñcana. Akiñcana. “A” significa negación, y “na” significa negación. Niskiñcana. Y Caitanya Mahāprabhu dijo: niṣkiñcanasya bhagavad-bhajanonmukhasya. Bhagavad-bhajana, progresar en la vida espiritual, ocuparse en el servicio devocional de Kṛṣṇa, es el objetivo de la vida. Ésa es la finalidad de la forma de vida humana. En lo que a él respecta, siempre debe permanecer niṣkiñcana. Niṣkiñcanasya bhagavad-bhajanonmukhasya (CC Madhya 11.8). Por eso Gaurakiśora dās Bābājī siempre se mantuvo niṣkiñcana. Y su discípulo, Bhaktisiddhānta Sarasvatī también se mantuvo toda su vida niṣkiñcana, aunque tenía tantos templos, porque nada era para su propia... sino para Kṛṣṇa.

Y alguien podría preguntar: “Tu Guru Mahārāja se quedaba sentado en el suelo de un lavabo municipal…”. Porque a él no le gustaba que nadie le perturbase, por eso se sentaba al lado de los servicios municipales. Porque había tanta gente que venía por darśana y āśīrvāda, y a él no le gustaba. A él no le gustaba que le molestasen con esos āśīrvāda. ¿Lo ven? Ellos no iban a aceptar ninguna instrucción, ninguna enseñanza espiritual. Ellos pensaban: “Aquí hay una persona santa, me va a bendecir. Y si ahora tengo mil, después tendré diez mil”. Eso era todo. Por eso iban a verle. No iban para recibir instrucción espiritual alguna. Por lo tanto era una molestia. Una molestia. Y a Gaura-kiśora Bābājī Mahārāja no le gustaba que le molestaran de esa forma. Él se situaba al lado de las letrinas municipales para que: “Esos sinvergüenzas ahora no vendrán a verme porque huele muy mal”. ¿Comprenden?

Mahārāja Mahīndrānandī era uno de... Había organizado un festival de saṅkīrtana y fue donde Gaura-kiśora dāsa Bābājī Mahārāja para invitarle. Y tras rogarle mucho tiempo, Gaura-kiśora dāsa Bābājī Mahārāja dijo: “Mahārāja, tu tienes muchos empleados. Tu eres Mahārāja. ¿Por qué quieres hacer de mí uno de esos empleados? Porque tu eres un hombre rico, quieres que... Así como tus empleados llevan a cabo tus órdenes, quieres que yo haga lo mismo. ¿Por qué eres tan...?”. “No señor, no. Tu eres mi señor. Todo lo que tu digas, yo lo haré”. “¿Lo harás?”. “¿Por qué no?”. Entonces le dijo: “No vuelvas a casa. Siéntate aquí y canta Hare Kṛṣṇa”. Salió corriendo. (risas) Ahí lo ven. Él tenía un gran sentido del humor también. Gaura Kiśora dāsa Bābājī le dijo: “Si tan obediente eres, entonces te pido que no vuelvas a casa, que te quites esas ropas y cantes Hare Kṛṣṇa aquí conmigo”.

Él era akiñcana. Del mismo modo… es como Rāmānanda Rāya. Era un gṛhastha, era muy opulento, era un gobernador. Y él también era akiñcana porque no tenía nada que fuera suyo, todo era de Jagannātha. Ésa es la diferencia. Por un lado Rūpa Gosvāmī, y por otro Rāmānanda Rāya. Y Rāmānanda Rāya era el devoto más íntimo de Caitanya Mahāprabhu, aunque era un gṛhastha, porque él era akiñcana, tan akiñcana como Rūpa Gosvāmī. Tenemos que volvernos akiñcana. Akiñcana. Entonces podremos entender a Kṛṣṇa. Por eso el verso dice akiñcana-gocaram: “Sólo puede entenderte la persona que no posea supuestas opulencias materiales”. Siempre debemos recordar que todo lo que estamos tratando de conseguir materialmente..., es todo para Kṛṣṇa, no hay nada para nosotros. Y la gente puede... Un templo grande significa que la gente se sentirá atraída por venir aquí, y nosotros les serviremos prasādam de Kṛṣṇa. El objetivo es de una u otra forma convertirles al proceso de conciencia de Kṛṣṇa. Entonces seguirán siendo akiñcana. Y si pensamos: “Ahora tenemos una casa muy grande. Vamos a vivir cómodamente y dormir plácidamente”, eso es na gocaram, entonces no podrán entender a Kṛṣṇa. Lo único que van a percibir va a ser esta comodidad, pero no Kṛṣṇa. Akiñcana-gocaram. Siempre debemos recordar esto. Esto es lo que está diciendo Kuntī devī: tvām akiñcana-gocaram (SB 1.8.26).

También Caitanya Mahāprabhu ha dicho: niskiñcanasya bhagavad-bhajanonmukhasya (CC Madhya 11.8). Bhagavad-bhajana, para el servicio de Kṛṣṇa, la persona que esté interesada en esto, no debe desear ninguna posesión material. Material... Anyābhilāṣitā-śūnyam (Brs 1.1.11). Niṣkiñcanasya bhagavad-bhajano... Y, ¿por qué se necesita el bhagavad-bhajana? Pāraṁ paraṁ jigamiṣor bhava-sāgarasya. Estamos pudriéndonos en el mundo material. Tenemos que atravesar el océano de nesciencia, e ir a Vaikuṇṭha. Esto es bhagavad-bhajana. Bhagavad-bhajana no significa aumentar nuestras posesiones materiales. Eso es darmārtha-kāma-mokṣa (SB 4.8.41). Eso son cosas materiales. La gente se vuelve religiosa más bien para aumentar sus bienes materiales, dharma artha, por lo general. Ellos quieren... Como hay tantas supuestas personas santas. Ellos anuncian: “Si me das uno, yo te daré diez”. Magia, fabricar oro, o les das un trozo de tela y te dan más... A la gente les gusta. Pero akiñcana. Nosotros no tenemos nada que dar. Y ellos no vienen a vernos.

Y Kṛṣṇa es akiñcana-gocaram. Siempre debemos recordar que si deseamos ser felices materialmente, y si pensamos: “Unos bienes materiales y un poco de prestigio en la sociedad y ser un sabio erudito... Voy a recibir cada vez más adoración de la sociedad. Voy a ser una persona importante”, entonces Kṛṣṇa se acabó. Kṛṣṇa se acabó. Kṛṣṇa es akiñcana-gocara. Ésa es la instrucción de este verso. Naivāarhaty abhidhātum. Esas personas, janmaiśvarya-śruta-śrībhir edhamāna (SB 1.8.26), que aumentan su opulencia material, no merecen estar más cerca de Kṛṣṇa. A Kṛṣṇa puede acercarse Narottama dāsa Ṭhākura cuando dice: tomā bine ke āche āmāra (Narottama dāsa Ṭhākura): “No me queda más opción que refugiarme a los pies de loto de Su Señoría. Por favor dame...”. Siempre debemos recordar esto. Entonces podremos progresar en la vida espiritual.

Muchas gracias.

Devotos: Jaya Prabhupāda. (fin)