ES/741219 - Clase SB 03.26.07 - Bombay


His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda


741219SB - Bombay, 19 diciembre 1974 - 40:05 minutos



Nitāi: Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. (Prabhupāda y los devotos repiten) (dirige el canto del verso, etc.) (cortado)

tad asya saṁsṛtir bandhaḥ
pāra-tantryaṁ ca tat-kṛtam
bhavaty akartur īśasya
sākṣiṇo nirvṛtātmanaḥ
(SB 3.26.7)

(cortado)

“La conciencia material es la causa de la vida condicionada, en la cual la energía material impone una serie de condicionamientos a la entidad viviente. Aunque el alma espiritual no hace nada y es trascendental a esas actividades, se ve de este modo afectada por la vida condicionada”.

Prabhupāda:

tad asya saṁsṛtir bandhaḥ
pāra-tantryaṁ ca tat-kṛtam
bhavaty akartur īśasya
sākṣiṇo nirvṛtātmanaḥ
(SB 3.26.7)

Karmasu kriyamāṇeṣu guṇair ātmani manyate (SB 3.26.6). El alma condicionada… decimos “condicionada”. No estaba condicionada, pero ahora está condicionada, pāra-tantrya.

kṛṣṇa bhuliya jīva anādi-bahirmukha
ataeva māyā tāre deya saṁsāra-duḥkha
(CC Madhya 20.117)

Este verso del Caitanya-caritāmṛta. Kṛṣṇa bhuliyā, dice que habiendo olvidado a Kṛṣṇa, la jīva, la entidad viviente, anādi-bahirmukha… anādi… ādi significa el comienzo de la creación y anādi significa antes de la creación. Anādi. Nadie sabe cuándo ha comenzado. La creación… hay muchas creaciones. Bhūtvā bhūtvā pralīyate (BG 8.19). Como este cuerpo, por ejemplo: ha sido creado, todo el mundo lo sabe. Ha sido creado por el padre y por la madre. Y a su debido tiempo será aniquilado por obra de la naturaleza. Del mismo modo, cualquier cosa material… el universo entero, la manifestación cósmica, también ha sido creada. Se trata de un cuerpo más grande, eso es todo, cuerpo virāṭ. Y permanece durante millones y millones de años durante la vida de Brahmā. Tenemos información acerca de cuánto dura un día de Brahmā, sahasra-yuga-paryantam ahar yad brahmaṇo viduḥ (BG 8.17). Somos incapaces de calcular ni siquiera un día de Brahmā. Uno de esos días se refiere a doce horas; luego hay otras doce horas de la noche. Con estos días se forma un mes, un año, cien años, los cien años que vive Brahmā. Y esta manifestación cósmica, brahmāṇḍa, el universo, permanecerá hasta ese momento. No hay diferencia en la manipulación entre este cuerpo y el cuerpo de Brahmā. El principio es el mismo. Bhūtvā bhūtvā pralīyate. Esto es saṁsṛtiḥ, anādi-bahirmukha.

En esta creación… no solo está creación... estamos en el mundo material. Quizás… “Tal vez sea un hecho que hemos estado en muchas otras creaciones. Por eso nuestro olvido de Kṛṣṇa es lo que se llama anādi. Anādi significa antes de la creación. Esta creación está en marcha. Antes de eso, hubo otra creación, en donde sucedía lo mismo. Ahora, esto se llama saṁsṛtiḥ, saṁsāra, saṁsāra-bandhana, atados por saṁsṛtiḥ. Anādi karama-phale, paḍi 'bhavārṇava-jale. Bhaktivinoda Ṭhākura dice en su canción: “Debido a mis actividades fruitivas antes del comienzo de esta creación, ahora me encuentro sumergido en el océano material”. Anādi karma-phale, paḍi 'bhavārṇava-jale taribāre nā dekhi upāy: “No encuentro ningún medio para salir de aquí”. Esto es conocimiento. Cuando la persona está muy ansiosa, cuando es muy seria en su deseo de salir de este saṁsṛtiḥ, de este nacimiento y muerte que se suceden continuamente, nacimiento y muerte, nacimiento… la gente no tiene conocimiento. Tad asya saṁsṛtir bandhaḥ. Eso es el cautiverio. El verso anterior, explicaba:

karmasu kriyamāṇeṣu
guṇair ātmani manyate
evaṁ parābhidhyānena
kartṛtvaṁ prakṛteḥ pumān
(SB 3.26.6)

Conforme a las órdenes de la naturaleza material, actuamos de alguna manera y por lo tanto creando otra acción resultante, lo cual significa otro cuerpo. Así ocurren las cosas. Eso se llama saṁsṛtiḥ. Tad asya saṁsṛtir bandhaḥ pāra-tantryam. Svātantrya, y la palabra opuesta es pāra-tantrya, “bajo la dirección de otra persona”, pāra-tantrya. Como el perro y su amo. El perro es pāra-tantrya, dependiente de su amo. De manera similar, nosotros ahora somos perros de la naturaleza material, pāra-tantrya. No podemos ir más allá de las reglas y las regulaciones, el condicionamiento, de la naturaleza material. Y eso es lo que se llama pāra-tantrya, no svātantrya. Es como los que tratan de ir al planeta lunar, pero debido a que están sometidos al condicionamiento de la naturaleza material, no les resulta nada fácil ir. No pueden. Vuelven de nuevo, una y otra vez tratan de ir allí. Ese es también el mundo material. Incluso en el mundo material, dependemos tanto de las reglas y regulaciones de la naturaleza. Y ¿qué decir de ir al mundo espiritual? Pāra-tantrya, lo admitamos o no, existe. No somos svātantrya, no somos independientes. Somos dependientes. Bhavaty akartur īśasya sākṣiṇo nirvṛtātmanaḥ.

Nosotros somos almas condicionadas, pero la Súperalma… los filósofos māyāvādīs no admiten la existencia de la Súperalma. Piensan que solo hay un alma. Ellos hablan de nuestra vida condicionada como si fuese un līlā. No es buena esa filosofía. Recibimos un cuerpo de cerdo y nos alimentamos de excremento, y los filósofos māyāvādīs dicen que es un līlā. Dios comiendo excremento, es un līlā. ¡Solo miren que filosofía! Nosotros hablamos de kṛṣṇa-līlā… Kṛṣṇa, la Suprema Personalidad de Dios, baila con las gopīs o juega con los pastorcillos de vacas o actúa como hijo de Madre Yaśodā. Nosotros decimos que eso es līlā. Pero los filósofos māyāvādīs… debido a que no conocen el dos. Su filosofía es uno. Ellos piensan que el cerdo que come excremento también es līlā. Que Kṛṣṇa dance con las gopīs, también es līlā, y como ellos no conocen el dos, por lo tanto, ellos dicen… nosotros no podemos decirlo, por supuesto. Ellos dicen que el cerdo que come excremento es Dios también… que se ha convertido en cerdo, que eso también es līlā. Esa es la ofensa más grave que se puede cometer a los pies de loto del Señor, reducirlo al estado de un ser viviente ordinario que no es independiente. Dependiente, se dice claramente. Por lo tanto, inventan estas palabras, “daridra-nārāyaṇa”, “este Nārāyaṇa”, “ese Nārāyaṇa”, porque no hacen ninguna diferencia entre Nārāyaṇa y la entidad viviente ordinaria. Esa es su filosofía.

Pero las cosas no son así. El verso dice: tad asya saṁsṛtir bandhaḥ pāra-tantryaṁ ca tat-kṛtam. Pāra-tantrya: “Bajo el dominio de las leyes de la naturaleza material”. ¿Cómo podría Dios estar bajo las garras de la naturaleza material? Ellos explican: “Se trata de un līlā ”. Pero no se trata de eso. Aquí se dice pāra-tantrya: “Se ven forzados a aceptar un cierto tipo de cuerpo”. Eso se llama pāra-tantrya. Saṁsṛtiḥ. Ese es un castigo, saṁsṛtiḥ. ¿Por qué saṁsṛtiḥ? Por cuenta de… (aparte) ¿Qué es eso? Siéntate. Saṁsṛtiḥ. Saṁsṛtiḥ significa castigo. Samyak rūpeṇa sṛtiḥ, algo que continua, uno tras otro, uno tras otro, uno tras otro, saṁsṛtiḥ, saṁsāra. El saṁsāra no es una cosa muy agradable. Nuestros ācāryas vaiṣṇavas dicen que saṁsāra es como un fuego ardiente. No es muy agradable… Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā, duḥkhālayam aśāśvatam (BG 8.15). Entonces, ¿significa eso que el Señor Supremo, la Suprema Personalidad de Dios, ha venido a sufrir? Por la fuerza, todos en este mundo material están sufriendo saṁsṛtiḥ, y ¿él que es la Suprema Personalidad de Dios? Es una filosofía muy equivocada. No es así.

EL Bhagavad-gītā, el Śrīmad-Bhāgavatam dicen que no es posible reducirlo todo a uno. No. Kṛṣṇa dice: mamaivāṁśo jīva-bhūtaḥ (BG 15.7): “Jīva es Mi aṁśa, Mi parte, una partícula, partícula muy pequeña”. Mientras que Kṛṣṇa, el Señor Supremo, es vibhu. Ya hemos hablado de todo esto. Vibhu, es más grande que lo más grande y más pequeño que lo más pequeño. Y el más pequeño que lo más pequeño significa… aṇor aṇīyān mahato mahīyān (Kaṭha Upaniṣad 1.2.20). Mahato mahīyān es el Señor Supremo, mientras que nosotros somos aṇu, partículas muy pequeñas, aunque somos lo mismo, expansiones del Supremo. Pero ambos somos individuos, no que hoy entre nosotros hay diferencias, pero que cuando nos liberamos nos volvemos uno. No. No es eso. Mamaivāṁśo jīva-bhūtaḥ jīva-loke sanātanaḥ (BG 15.7). Sanātanaḥ significa eternamente nosotros somos vibhinnāṁśa.

Nuestro pāra-tantrya, nuestra dependencia de la naturaleza material es pāra-tantryaṁ ca tat-kṛtam. Tat-kṛtam. Nosotros hemos querido esa separación. Esa es la causa de nuestra vida condicionada aquí. Es nuestra elección. Kṛṣṇa-bhuliya jīva bhoga vāñchā kare. Cuando hemos querido disfrutar de la vida de forma independiente, con la supuesta independencia, porque no podemos ser independientes. Tenemos que depender, ya sea de la naturaleza material o de la naturaleza espiritual. Pero no es posible. Por eso, el Bhagavad-gītā dice: mahātmānas tu māṁ pārtha daivīṁ prakṛtim āśritāḥ (BG 9.13). Tienen que refugiarse, āśraya, de cualquiera de las prakṛtis, parā-prakṛti o aparā-prakṛti. Aparā-prakṛti es la naturaleza material y parā-prakṛti es la naturaleza espiritual. Por eso, la jīva-śakti recibe el calificativo de taṭastha. Taṭastha. Antaraṅga, bahiraṅga, taṭastha. Parāsya śaktir vividhaiva śrūyate (Śvetāśvatara Upaniṣad 6.8), (CC Madhya 13.65). La Verdad Absoluta tiene múltiples potencias, que pueden resumirse en tres. Primero es parā-prakṛti, la naturaleza espiritual, después la naturaleza material, y otra naturaleza, la prakṛti -también nosotros somos prakṛti- entre las dos, taṭastha. Como la playa está entre la tierra y el mar. La playa a veces está cubierta por el agua y otras veces está descubierta, el agua está lejos. Cuando no está cubierta, la llamamos playa, y cuando está cubierto, lo llamamos mar. De manera similar, nuestra posición es así, la situación de las entidades vivientes. Aunque por naturaleza somos parā-prakṛti, somos espíritu, espíritu, pero debido a que tenemos la tendencia a disfrutar de la naturaleza material, hemos venido a esta naturaleza material. Por eso, nuestra posición es intermedia, entre la naturaleza espiritual y la naturaleza material, taṭastha. Taṭastha significa en el medio, intermedio.

Pero debido a que hemos escogido este pāra-tantrya, hemos preferido estar condicionados por la naturaleza material, en cualquier condición somos dependientes, ya sea que dependamos de la naturaleza espiritual o de la naturaleza material. Y si preferimos estar bajo el control de la naturaleza material, eso se llama duḥkhālayam aśāśvatam (BG 8.15). Mientras que, si estamos bajo el control de la naturaleza espiritual, eso es asaṅgo 'yaṁ puruṣaḥ. Raso vai saḥ, labdhānandī (Taittirīya Upaniṣad 2.7.1). Entonces vamos a alcanzar una vida bienaventurada, una vida bienaventurada y eterna. Eso lo decidimos nosotros. O están bajo la naturaleza espiritual o están bajo la naturaleza material. Esa es nuestra pequeña independencia, es como ustedes quieran. Ye yathā māṁ prapadyante tāṁs tathaiva bhajāmy aham (BG 4.11). Así lo dice Kṛṣṇa. Kṛṣṇa es muy bondadoso. Si quieren permanecer bajo la influencia de la naturaleza material y disfrutar de esta mal llamada complacencia material de los sentidos, pueden hacerlo. En el Bhagavad-gītā se explica:

yānti deva-vratā devān
pitṟn yānti pitṛ-vratāḥ
bhūtejyā yānti bhūtāni
mad-yājino 'pi yānti mām
(BG 9.25)

Si quieren permanecer en el mundo material, bhūtejyā, ser un adorador de la energía material… esa es nuestra actual ocupación, somos adoradores de la energía material, de Durgā. Adoradores de la energía material. Cuando se realiza el Durgā-pūjā, en el Caṇḍi, lo que se pide es opulencia material, dhanaṁ dehi, rūpaṁ dehi, rūpavatī-bhāryāṁ dehi, yaśo dehi. Eso pueden hacerlo. Y todos nosotros, entidades vivientes dentro del mundo material, somos adoradores de la naturaleza material. También los científicos están tratando de encontrar medios para explotar los recursos de la naturaleza material. Eso también es un tipo de adoración. Porque a no ser que tengan éxito en descubrir cierta energía material, un nuevo tipo de energía material, con eso consiguen dinero. Ese dinero les da plenas facilidades, para complacer los sentidos. Esto es lo que se llama vida condicionada, condicionada por la materia… o bajo la ilusión de la energía material… tratan de descubrir nuevas formas de progreso material y ser felices gracias a ese progreso. Esto es lo que se llama vida material. Eso es pāra-tantrya. No es svātantrya. Pāra-tantrya. La entidad viviente es por naturaleza, svātantrya, asaṅgo 'yaṁ puruṣaḥ, pero debido a que hemos aceptado sentirnos satisfechos bajo el control de la naturaleza material, eso se llama pāra-tantrya, y eso se llama saṁsṛtiḥ. Saṁsṛtiḥ significa la repetición continuada del nacimiento, la muerte, la vejez y las enfermedades. Eso se llama saṁsāra.

Por eso, Śrīla Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura, dice: saṁsāra-dāvānala-līḍha-loka. Este saṁsṛtiḥ, esta repetición del nacimiento, la muerte, la vejez y las enfermedades, en el seno de la naturaleza material, en busca de la felicidad material… todo el mundo tiene un cierto nivel de felicidad material. El hombre tiene un nivel de felicidad material; el perro tiene un nivel de felicidad material; los semidioses también tienen su propio nivel de felicidad material. Todo el mundo tiene el suyo. Pero en realidad no es felicidad, es simplemente una condición miserable. Y debido a que no apreciamos esta miserable condición, seguimos pensando que somos felices. Eso es lo que se llama māyā, la ilusión. Eso se llama saṁsṛtiḥ. Aunque estamos continuamente en una condición de sufrimiento, en una condición de miseria, a cada momento, a cada segundo… así es este lugar. No lo decimos nosotros, lo dice Kṛṣṇa. Kṛṣṇa dice duḥkhālayam. Tienen que sufrir continuamente. Pero nos hemos habituado tanto a este sufrimiento que no aceptamos que sea sufrimiento. Lo consideramos algo muy agradable, porque no tenemos ni idea de en qué consiste verdaderamente la felicidad. Sukham ātyantikaṁ yat tad atīndriyaṁ grāhyam (BG 6.21). ¿En qué consiste la verdadera felicidad? Sukhaṁ yat. Entonces, ¿qué es sukham? Es algo que los sentidos materiales no pueden percibir. Sukham ātyantikam. Ātyantikam significa supremo. Cualquiera que sea la supuesta felicidad que podamos obtener en el mundo material, esta depende de tantas circunstancias. No es ātyantikam. Ātyantikam significa felicidad suprema. Eso es diferente de la felicidad material. Pero no tenemos información acerca de su gusto, no podemos probarla, porque hemos sido condicionados para muchas, muchas creaciones, anādi. Es como una persona que padece una enfermedad durante muchos, muchos años, se acaba por habituar. Ya no considera que su sufrimiento sea sufrimiento. Piensa que eso es lo natural.

Nos hemos acostumbrado a estos hábitos de los inconvenientes materiales. No tenemos información acerca de la vida espiritual. Por eso, el śāstra dice que deberíamos esforzarnos… esta vida, la vida humana no está destinada al sufrimiento, sino para esforzarnos por poner fin al sufrimiento. Eso es la vida humana. La vida humana no es para sufrir como los animales. Como la vida de los cerdos. ¿Es buena esa vida? Todo el día y toda la noche están buscando excremento: “¿Dónde hay excremento? ¿Dónde hay porquería?”, porque ellos disfrutan de esa manera. De hecho, si le dan de comer a un cerdo halavā y, al mismo tiempo al lado, excremento, él preferirá el excremento que la halavā. Porque está habituado a ese tipo de comida. Por eso Ṛṣabhadeva dice que la vida humana… Él estaba instruyendo a Sus hijos, les decía: “Mis queridos hijos, no sean como cerdos. Tienen que ser simplemente como seres humanos”. Nāyaṁ deho deha-bhājāṁ nṛloke kaṣṭān kāmān arhate viḍ-bhujāṁ ye (SB 5.5.1): “Mis queridos hijos, no traten de obtener la felicidad como los cerdos, y los perros”. Kaṣṭān kāmān. Trabajando sin parar, así obtienen algo de comida y luego disfrutan de la vida sexual. Yan maithunādi-gṛhamedhi-sukhaṁ hi tuccham (SB 7.9.45). La vida material significa trabajar muy duro día y noche, así conseguir algo de dinero y comer suntuosamente. Coman, beban, diviértanse y luego disfruten de la vida sexual. Eso es todo. Ṛṣabhadeva dice: “Mis queridos hijos, este tipo de nivel de vida está disponible en la vida de los cerdos”. Kaṣṭān kāmān arhate ye viḍ-bhujām. Viḍ-bhujām significa que comen excremento.

Entonces, ¿qué es la vida humana? Si esto no es vida, entonces, ¿cuál es la verdadera vida? Eso es lo que nos aconseja, tapo divyaṁ putrakā yena śuddhyet sattvam (SB 5.5.1). Sattva, su sattva, su existencia ahora es impura. Está cubierta por la naturaleza material, y por eso es impura. Tienen que purificarla, y esa es la verdadera vida. Y purificarla significa tapasya. Tapo divyam. Tapasā brahmacaryeṇa (SB 6.1.13). Esa es la manera. Esa es la civilización védica. La civilización védica, o pueden llamarla civilización india o civilización hindú. En realidad, es la civilización védica. Por eso, encontrarán en la India, en la historia de la India, Mahābhārata, La Gran India, que muchas personas, se ocupaban en tapasya. Una parte de la vida debe dedicarse a la tapasya. Bharata Mahārāja, que dio nombre este planeta Bhārata-varṣa… encontrarán su vida en el Quinto Canto del Śrīmad-Bhāgavatam. Disfrutó de su reino, pero después lo abandonó voluntariamente. Al final de su forma de vida material, dividió sus propiedades entre sus hijos y se fue. Y vivía solo en Pulahāśrama, cerca de Haridwar, y se sometía a rigurosas penitencias, tapasya. Y eso es vida humana, aceptar tapasya. Tapo divyaṁ putrakā yena śuddhyet sattvaṁ yasmād brahma-saukhyam anantam. Están buscando felicidad, pero ¿por qué no ven que en la vida material su felicidad es condicionada? No es algo que viene o que fluye fácilmente. Hay muchas condiciones. Si quieren ser millonarios, antes de llegar a millonarios tendrán que pasar por tantas circunstancias. Eso no es felicidad. Y pasamos por tantos condicionamientos, y una vez que lo hemos hecho, ¿que obtenemos?

Para llegar a esa supuesta felicidad material condicionada tenemos que pasar por tantas dificultades, y cuando alcanzamos esa posición… supongamos que después de trabajar muy, muy duro, obtengo un millón de dólares, no se me permitirá disfrutar de este millón de dólares todos los días. Aśāśvatam. Duḥkhālayam aśāśvatam (BG 8.15). Kṛṣṇa dice que este lugar está lleno de miserias. Para ganar ese millón de dólares hay que pasar por muchas condiciones miserables. E incluso si lo consiguen… y quizás no lo consigan. Todos lo intentan, pero no pueden… no todo el mundo lo consigue. Quien está destinado a ganarlo, lo gana, no todo el mundo, porque… no porque una persona trabaja sin parar, tiene garantizado que obtendrá ese millón de dólares. No puede ser así. En realidad, aquel que está destinado a alcanzarlo por su destino. Ese es el śāstra. De hecho, esta es la realidad.

Por eso, la civilización védica no recomienda que desperdicien du valiosa vida simplemente por la supuesta felicidad del desarrollo económico… mejorar du situación económica. Porque no es posible que todo el mundo que intenta mejorar su condición económica, acabe siendo millonario. No, eso no es posible. No pueden obtener ni más ni menos de lo que el destino les reserva. De no ser así, todos seríamos millonarios, todos. En Bombay hay tanta gente que trata de conseguirlo. La gente se esfuerza, trabaja muy duro día y noche. Aun así, alguien vive en edificios palaciegos muy bonitos y alguien vive en el jhupaṛa, o lo que es una condición más abominable, en la ciudad de Bombay. ¿Por qué? Porque uno lo tiene destinado.

Por lo tanto, el śāstra dice que no se preocupen por estas cosas. Tasyaiva hetoḥ prayateta kovido na labhyate yad bhramatām upary adhaḥ (SB 1.5.18). Debemos trabajar por aquello que no se puede obtener deambulando, bhramatām upary adhaḥ. Upary adhaḥ. ¿Qué significa eso? Eso es lo que purifica du existencia. Tasyaiva hetoḥ, por esa razón. Purificar significa, como lo hemos hablado en muchos ślokas, que ahora estamos cubiertos por la naturaleza material, sattva-guṇa, rajo-guṇa, tamo-guṇa, y nuestro esfuerzo debe ser cómo purificarnos. Tapo divyam. Tapo divyaṁ putrakā yena śuddhyet sattvam. Solo para purificar nuestra existencia. Y tan pronto como purificamos nuestra existencia, yasmād brahma-saukhyam anantam. Brahma-sukha. Brahman significa lo más grande, eterno. Aquí sukha, la felicidad no es brahma-sukha; es sukha material. Por eso, en otro pasaje de las Escrituras se dice: ramante yoginaḥ anante (CC Madhya 9.29). Los yogīs, los que son yogīs… yogī significa especialmente bhakta-yogī. Ellos también disfrutan. Ramante yoginaḥ anante.

Ahí es un disfrute ilimitado. Ānandāmbudhi-vardhanam (CC Antya 20.12). No hace más que aumentar, siempre aumentando. Nunca disminuye. Eso es lo que se llama ananta. No hace más que aumentar. Es como Kṛṣṇa. Kṛṣṇa y las gopīs, también ellos disfrutan. Las gopīs son expansiones de la potencia de placer de Kṛṣṇa. Están siempre aumentando su placer. Nunca disminuye. En el mundo material no puede hablarse de aumentar, siempre disminuye. Esa es la diferencia.

Por eso, los que son yogīs también disfrutan. Ramante yoginaḥ anante satyānande. Esa es la verdadera felicidad, que siempre aumenta. Lo que disminuye no es verdadera felicidad, es ilusión. Ramante yoginaḥ anante satyānande cid-ātmana. Cit, es espiritual, ānanda espiritual. Realmente queremos ānanda, la felicidad, la bienaventuranza. Ese es nuestro instinto natural. Ānandamayo 'bhyāsāt (Vedānta-sūtra 1.1.12). Pero buscamos ānanda en el mundo material, y lo explica este verso, saṁsṛtir bandhaḥ pāra-tantrya, bajo el condicionamiento material y cambiando de cuerpo, cuerpo tras cuerpo. Eso no es ānanda. Satyānande cid-ātmani. Ānanda puede encontrarse en el plano espiritual. Satyānande cid-ātmani. Ramante… iti rāma-padenāsau paraṁ brahma iti abhidhīyate (CC Madhya 9.29). Por eso, los yogīs disfrutan, ramaṇa, en el mundo espiritual. Esa ānanda se llama Rāma, Hare Rāma, Hare Kṛṣṇa. Kṛṣṇa es atractivo y Rāma es disfrute. Por eso, cuando adaptamos nuestras actividades a Rāma y a Kṛṣṇa, nuestra vida se vuelve feliz. Antes de eso hay solamente saṁsṛtiḥ.

Por eso, para entender esta ciencia, tenemos que ir… ese es el mandamiento védico, tad-vijñānārthaṁ sa gurum evābhigacchet (MU 1.2.12): “Uno debe acercarse a un maestro espiritual genuino y apropiado”. Y el maestro espiritual nos salvará de este fuego ardiente del ciclo de nacimientos y muertes. Por eso, Viśvanātha Cakravartī Ṭhākura canta:

saṁsāra-dāvānala-līḍha-loka-
trāṇāya kāruṇya-ghanāghanatvam
prāptasya kalyāṇa-guṇārṇavasya
vande guroḥ śrī-caraṇāravindam

El guru tiene la misión de liberar a su discípulo, śiṣya, del fuego ardiente del saṁsāra, saṁsṛti, bandha, la vida condicionada, salvarlo de esa situación y darle la felicidad eterna, brahma-saukhyam anantam (SB 5.5.1).

Muchas gracias.

Devotos: Hari bol. (fin)