ES/750713 - Clase SB 06.01.28-29 - Filadelfia

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda


750713SB-Filadelfia, 13 julio 1975 - 29:24 minutos



Nitāi: Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. (Prabhupāda y los devotos repiten) Śrīmad-Bhāgavatam, Sexto Canto, Primer Capítulo, versos 28 y 29. (dirige el canto del verso, etc.)

sa pāśa-hastāṁs trīn dṛṣṭvā
puruṣān ati-dāruṇān
vakra-tuṇḍān ūrdhva-romṇa
ātmānaṁ netum āgatān
dūre krīḍanakāsaktaṁ
putraṁ nārāyaṇāhvayam
plāvitena svareṇoccair
ājuhāvākulendriyaḥ
(SB 6.1.28-29)

(05:07)

“Ajāmila vio entonces a tres individuos de aspecto extraño, de rostros feroces y retorcidos, con cuerpos deformes cubiertos de vellos erizados. Traían cuerdas en las manos y habían ido para llevárselo a la morada de Yamarāja. Ajāmila se sintió muy confuso al verles y, llevado del apego, llamó a voces a su hijo, que jugaba a muy poca distancia. Fue así como, por una u otra razón, cantó el santo nombre de Nārāyaṇa con lágrimas en los ojos”.

Prabhupāda: ¿”Tres veces” dice?

Nitāi: Decía en el manuscrito. El manuscrito decía “tres veces”.

Prabhupāda: ¿Quién dijo en el manuscrito? No hay tres veces. No dice “Nārāyaṇa” tres veces. Una vez: “Oh Nārāyaṇa”, eso es todo. Entonces, ¿dije “tres veces”? ¿Mmm? No, no lo dije. Debes corregirlo. Una vez: “Oh Nārāyaṇa”, eso es todo. No hay razón para llamarlo tres veces. No se menciona aquí. Una vez es suficiente. (risas) Hum.

sa pāśa-hastāṁs trīn dṛṣṭvā
puruṣān ati-dāruṇān
vakra-tuṇḍān ūrdhva-romṇa
ātmānaṁ netum āgatān
dūre krīḍanakāsaktaṁ
putraṁ nārāyaṇāhvayam
plāvitena svarupena
ājuhāvākulendriyaḥ
(SB 6.1.28-29)

Uccair ājuhāva, en voz muy fuerte: “¡Nārāyaṇa!”. Así. Eso es todo. Uccair ājuhāva ākulendriyaḥ. Mmm. ¿No lo has editado todavía?

Nitai: No.

Prabhupāda: Por lo tanto, debes poner exactamente lo que dice aquí.

Esta es la situación en la hora de la muerte. A veces vemos que el moribundo está llorando, ākulendriyaḥ, ojos llenos de lágrimas. No se puede expresar. No tiene práctica. Pero se le dio la oportunidad. Kṛṣṇa le dio la conciencia cuando el niño nació para que le diera el nombre Nārāyaṇa. Esa es la misericordia de Kṛṣṇa, que: “Este sinvergüenza era Mi devoto, y ahora ha caído tan bajo. Está bien, siente atracción por sus hijos”. Así que Él le dio la conciencia: “Dale el nombre de Nārāyaṇa a tu hijo”. Sarvasya cāhaṁ hṛdi sanniviṣṭaḥ. Kṛṣṇa está en el corazón de todos. Mattaḥ smṛtir jñānam apohanaṁ ca (BG 15.15). Kṛṣṇa dice: “De Mí viene todo— el recuerdo y el olvido”. A quienes quieren olvidar a Kṛṣṇa, Kṛṣṇa les ayuda a olvidarlo: “Está bien, olvídame”. Él no da. Él no dice nada desde el interior. Y aquel que es necio y se mantiene en malas compañías, desafortunadamente olvida a Kṛṣṇa, entonces Kṛṣṇa le da la oportunidad. Los ofensores están en una situación difícil. Kṛṣṇa… A quienes cometen grandes ofensas, contra guru-vaiṣṇava, se encuentran en una situación muy difícil. Pero, si por casualidad, si uno olvida a Kṛṣṇa, Kṛṣṇa no le olvida.

Por eso en el Bhagavad-gītā se dice:

api cet sudurācāro
bhajate mām ananya-bhāk
sādhur eva sa mantavyaḥ
samyag vyavasito hi saḥ
(BG 9.30)

Práctica… estamos acostumbrados a tantos malos hábitos vida tras vida en este condicionamiento material. A veces, alguien que se ocupa en el servicio devocional del Señor puede, debido a prácticas antiguas, cometer algunas actividades pecaminosas. Kṛṣṇa lo perdona. Él sabe que es sincero, pero debido a sus antiguas prácticas, ha cometido un error. Hay un verso que dice: saḥ pāda-mūlaṁ bhajatāṁ priyasya. De una u otra forma, Kṛṣṇa les reconoce, priya. Kṛṣṇa puede saber que: “Él está tratando de hacer algo sinceramente para rendir...”. Kṛṣṇa no requiere su servicio ni el mío. Él es autosuficiente. Si ofrecemos servicio, eso es para… eso es bueno para nosotros. Kṛṣṇa lo reconoce: “Oh, ha comenzado de nuevo el servicio. Eso es bueno”. A esa persona Kṛṣṇa le disculpa. Saḥ pāda-mūlaṁ bhajatāṁ priyasya. He olvidado este verso. Hay un verso como ese.

Ajāmila, cuando era joven, debido a su relación con una prostituta, perdió sus buenas cualidades y comenzó a mantener a la prostituta robando, engañando, sin parar. Así que por error o por su edad, se vio cautivado por aquella prostituta. Kṛṣṇa estaba mirando. Y por eso, Él le dio esa oportunidad de que, llevado de su cariño por el niño, ahora por lo menos repetiría “Nārāyaṇa, Nārāyaṇa”. ”Nārāyaṇa ven. Nārāyaṇa ven a comer. Nārāyaṇa siéntate”. Bhāva-grāhi-janārdanaḥ (CB Ādi-khaṇḍa 11.108). Kṛṣṇa es tan bondadoso que acepta el propósito o la esencia. Porque el santo nombre tiene su efecto. Y, aunque este Ajāmila, llevado por su necedad, estaba apegado al cuerpo material de su hijo, pero debido a que cantaba el nombre de “Nārāyaṇa”, Kṛṣṇa estaba tomando esa esencia, eso es todo, que: “De una forma u otra, él está cantando”. Es tanta la importancia de cantar. Así que no dejen de cantar. Entonces Kṛṣṇa los protegerá. Este es el ejemplo. Si practican: “Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa”. De forma natural, cuando estén en peligro, dirán: “Hare Kṛṣṇa”. Esto es lo que hay que hacer. Si práctican para hacer algo, cantando Hare Kṛṣṇa, entonces están a salvo.

De modo que no es difícil. Canten sinceramente. Traten de evitar las ofensas. No prueben a caer a propósito para complacer los sentidos. Eso es muy peligroso. Él… No cayó a propósito. Debido a las circunstancias entró en contacto con una prostituta, no pudo contenerse. Así que circunstancialmente cayó, no por voluntad propia. Esto debe tenerse en cuenta. Hacerlo a propósito, eso es una ofensa muy grande. Pero llevados de las circunstancias tenemos muchas posibilidades, porque somos muy caídos y acostumbrados a las malas prácticas vida tras vida. Vida material significa vida pecaminosa. Vean a toda la gente. A ellos no les importa. Ellos ni siquiera saben que incluso esto es pecaminoso. Nosotros decimos: “Nada de vida sexual ilícita, no comer carne, nada de intoxicación y nada de juegos de azar”. Entonces, los occidentales piensan: “¿Qué tontería es esta? Esas son las cosas básicas para un ser humano, y este hombre viene a negárnoslas”. Ellos ni siquiera lo saben. Algunos de nuestros discípulos han dejado nuestra institución. Ellos pensaron: “Swāmījī nos niega las necesidades básicas de la vida”. Son tan lentos que no pueden entender que esto es pecaminoso. No solo los seres humanos comunes y corrientes, incluso grandes personalidades, Lord Zetland en Inglaterra. Uno de mis hermanos espirituales fue a predicarle, y Lord Zetland, el Marqués de Zetland… Era conocido como Lord Ronaldsay. Era el gobernador de Bengala. En nuestros días de universidad vino a nuestra universidad… Él era escocés. Era todo un caballero e inclinado a la filosofía. Y le preguntó a este hermano espiritual: “¿Puedes convertirme en brāhmaṇa?”. Él le dijo: “Sí, ¿por qué no? Siga usted estas reglas y regulaciones, se volverá un brāhmaṇa“. Entonces, cuando escuchó cuales eran las reglas y regulaciones—no sexo ilícito, no comer carne, no juegos de azar, no intoxicarse— dijo: “Oh, es imposible. No es posible”. Se negó rotundamente, dijo: “En nuestro país es imposible”.

Es una labor muy difícil, pero si somos capaces de abandonar estas actividades pecaminosas, nuestra vida entonces se vuelve muy pura. Se purifica. Y a menos que nos purifiquemos, no podemos ni cantar Hare Kṛṣṇa, ni entender la conciencia de Kṛṣṇa.

yeṣāṁ tv anta-gataṁ pāpaṁ
janānāṁ puṇya-karmaṇām
te dvandva-moha-nirmuktā
bhajante māṁ dṛḍha-vratāḥ
(BG 7.28)

Kṛṣṇa dice: ”Aquel que ha puesto fin al proceso de actividades pecaminosas y se ha dedicado a actividades piadosas, esa persona puede convertirse en un devoto firme”. Deben seguir estos cuatro principios, que hemos aconsejado. No es algo opcional: “Puedo hacerlo, puedo no hacerlo”. No, deben hacerlo. De lo contrario, el progreso no se producirá. Kṛṣṇa no los dejará. Como el caso de Ajāmila: su progreso se detuvo, pero debido a que no lo hizo deliberadamente, Kṛṣṇa le dio una oportunidad. Tan pronto como fue posible, de nuevo le capturó. Porque no había hecho nada a propósito. Esa es la primera condición, es algo circunstancial. Por eso, Kṛṣṇa fue muy bondadoso. Él le dio un hijo: “Llámalo. ¿Sientes cariño por tu hijo? Muy bien, canta 'Nārāyaṇa' cuando llames a tu hijo”. Le dio esta oportunidad.

Debido a sus actividades pecaminosas, tuvo que ver el aspecto terrible de estos alguaciles, o Yamadūtas. Así ocurre. Si uno no es un ofensor, entonces ni siquiera tiene la posibilidad de ver a los Yamadūtas. Pero debido a que él voluntariamente o no voluntariamente se ocupaba en actividades pecaminosas, se relacionaba con la prostituta, y para mantener a la prostituta planeaba tantas actividades pecaminosas, engañando y tomando el dinero de otros y disfrutando, por esa razón, tuvo que verlos. Y si permanecen puros, no tienen por qué verlos. Esa es la diferencia.

Tenemos que pagar por los actos resultantes de la vida pecaminosa. Como Yudhiṣṭhira Mahārāja. Kṛṣṇa le aconsejó a Yudhiṣṭhira Mahārāja: “Ve a Droṇācārya y dile una mentira”. “¿Qué mentira?”. “Dile que 'Tu hijo Aśvatthāmā ha muerto'”. Porque Droṇācārya tenía una bendición de que no moriría a menos que estuviera conmocionado por la muerte de su hijo. Así que Kṛṣṇa tuvo que tomar esta medida diplomática, porque era cuestión de política. Así que Kṛṣṇa… Porque Droṇācārya no iba a creer a nadie. Sabía que Mahārāja Yudhiṣṭhira era la persona más piadosa; él nunca diría una mentira. Así que, si Mahārāja Yudhiṣṭhira iba y le decía: “Tu hijo ha muerto”, entonces le creería. De lo contrario, Kṛṣṇa podría haber ido personalmente, pero sabe que la gente no le cree. (risas) Es muy tramposo. (risas) Por eso, no hay ningún hombre por astuto que sea que pueda superarlo. Una persona puede ser muy astuta, muy inteligente, pero no podrá superar a Kṛṣṇa. Él es sumamente astuto. Como en Su infancia, Kṛṣṇa era muy travieso, así que Su mamá decidió atarlo. Y Kṛṣṇa también actúo con astucia. La madre primero trajo una cuerda y la ató, y cuando tenía que hacer el nudo, vio que la cuerda quedaba corta. Y luego unió otro pedazo de cuerda. Al final ató todas las cuerdas que tenía en casa, las trajo uno tras otra, pero al final, al hacer el nudo, también quedaba corta… ¿Cómo se dice?

Devotos: Pulgadas.

Prabhupāda: Le quedaba corta. Ella… Kṛṣṇa pensó: “Madre, a Mí nadie me puede atar, pero como he aceptado ser tu hijo, ¿estás tratando de atarme? Está bien, trae todas tus cuerdas. Nunca podrás atarme”. Así es Kṛṣṇa. Pero Madre Yaśodā es la más grande devota. Y cuando Kṛṣṇa vio que: “Mi madre está exhausta, está sudando. Muy bien, puedes atarme”. Este es el… Lo han visto en el libro de Kṛṣṇa. Ye yathā māṁ prapadyante tāṁs tathaiva bhajāmy aham (BG 4.11). Si se ponen con artimañas con Kṛṣṇa, Kṛṣṇa haciendo artimañas no lo puede superar nadie. Nunca podrán. Ese es nuestro error, pensamos que: “Soy tan inteligente que puedo hacer algo sin el conocimiento de Kṛṣṇa”. Esa es nuestra necedad. Kṛṣṇa dice: sarvasya cāhaṁ hṛdi sanniviṣṭaḥ (BG 15.15): “Yo estoy en el corazón de todos”. ¿Cómo pueden engañarlo? No es posible. No intenten engañar a Kṛṣṇa. No intenten engañar al guru. No intenten engañar a Kṛṣṇa. Entonces tienen asegurado su progreso. Guru-kṛṣṇa-kṛpāya pāya bhakti-latā-bīja (CC Madhya 19.151). Lo cantamos cada día, śrī-guru-caraṇa… ¿Cómo es? Sri-guru

Devotos: Śrī-guru-caraṇa-padma, kevala-bhakati-sadma.

Prabhupāda: No, eso…

Devoto: ¿Guru-mukha?

Prabhupāda: Guru-mukha-padma-vākya, cittete koriyā aikya. No traten de engañar al guru, porque eso impedirá el progreso.

ācāryaṁ māṁ vijānīyān
nāvamanyeta karhicit
na martya-buddhyāsūyeta
sarva-devamayo guruḥ
(SB 11.17.27)

Ācāryaṁ māṁ vijānīyān. Kṛṣṇa dice: “Yo soy ācārya“. Nāvamanyeta karhicit: “No trates de menospreciarme”. Na martya-buddhyāsūyeta: “No consideres al ācārya, al maestro espiritual, un ser humano común y te vuelvas envidioso”. Estas cosas se advierten. Ācāryaṁ māṁ vijānīyān nāvamanyeta karhicit, na martya-buddhyāsūyeta. La familiaridad engendra desprecio. Eso no es bueno. Similarmente… Porque por la misericordia del ācārya, por la misericordia del guru, obtendrán a Kṛṣṇa. Canten eso todos los días, kṛṣṇa-prāpti jāhā hoite, ¿cómo es?

Devoto: Kṛṣṇa-prāpti hoiya jānā.

Prabhupāda: Kṛṣṇa-prāpti jāhā hoite. ¿Cómo es en el lenguaje?

Kṛta-kṛta: Que por su misericordia nos acerca a Kṛṣṇa.

Prabhupāda: No, no, ¿cómo es en el lenguaje bengalí? No puedes… ¿No lo cantas todos los días?

Kṛta-kṛta: Prema-bhakti jāhā hoite, avidyā vināśa jāte.

Prabhupāda: Ah. Avidyā vināśa jāte, kṛṣṇa-prāpti haya… Esto es lo que ocurre. Avidyā vināśa jāte. Avidyā significa ignorancia. Estamos llenos de ignorancia. El deber del guru es abrir los ojos del discípulo, y abriéndole los ojos les da a Kṛṣṇa. Ese es el proceso. Por lo tanto, debemos tener mucha precaución de no engañar a Kṛṣṇa, de no engañar al guru, ser muy sinceros y seguir. Entonces lo tenemos garantizado. Guru-kṛṣṇa-kṛpāya pāya bhakti-latā-bīja (CC Madhya 19.151). Se necesitan dos cosas. No pueden saltar hacia Kṛṣṇa, dejando aparte al guru. Entonces están acabados. Si quieren dar un salto hacia Kṛṣṇa sin el favor del guru… Kṛṣṇa no es tan fácil. Hay que observar atentamente estas cosas. No cometer ofensas. Seguir atentamente. Entonces Kṛṣṇa los protegerá, y su progreso en la conciencia de Kṛṣṇa, que los lleva de regreso al hogar, de vuelta a Dios, estará asegurado, asegurado.

Esta persona en determinadas circunstancias cayó. Kṛṣṇa lo está salvando. Kṛṣṇa lo está salvando y él se salvará. Lo veremos en los siguientes pasajes.

Muchas gracias.

Devotos: Jaya Prabhupāda. (fin).