ES/CC Madhya 6.157


Su Divina Gracia A. C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada


TEXTO 157

hlādinī sandhinī samvit
tvayy ekā sarva-saṁśraye
hlāda-tāpa-karī miśrā
tvayi no guṇa-varjite


PALABRA POR PALABRA

hlādinī — la potencia de placer; sandhinī — la potencia de eternidad; samvit — la potencia de conocimiento; tvayi — en Ti; ekā — una potencia espiritual (cit); sarva-saṁśraye — el refugio de todo; hlāda — placer; tāpa-karī — causar desagrado; miśrā — mezclado; tvayi — en Ti; na u — no; guṇa-varjite — libre de todas las cualidades materiales.


TRADUCCIÓN

«La Suprema Personalidad de Dios es sac-cid-ānanda-vigraha (Bs. 5.1). Esto significa que, en Su forma original, tiene tres potencias: la potencia de placer, la potencia de eternidad y la potencia de conocimiento. Juntas reciben el nombre de potencia cit, y se manifiestan en plenitud en el Señor Supremo. Para las entidades vivientes, que son partes integrales del Señor, la potencia de placer en el mundo material es a veces desagradable y a veces mixta. No ocurre lo mismo con la Suprema Personalidad de Dios, pues Él no Se halla bajo la influencia de la energía material ni de sus modalidades».


SIGNIFICADO

Como se ha explicado anteriormente, el Śvetāśvatara Upaniṣad (3.19) dice:


apāṇi-pādo javano grahītā
paśyaty acakṣuḥ sa śṛṇoty akarṇaḥ
sa vetti vedyaṁ na ca tasyāsti vettā
tam āhur agryaṁ puruṣaṁ mahāntam


Este mantra védico afirma claramente: puruṣaṁ mahāntam. La palabra puruṣa significa «persona». En el Bhagavad-gītā, Arjuna confirma que esa persona es Kṛṣṇa al dirigirse a Kṛṣṇa con las palabras puruṣaṁ śāśvatam: «Tú eres la persona original» (Bg. 10.12). De modo que ese puruṣaṁ mahāntam es Śrī Kṛṣṇa. Sus brazos y piernas no son mundanos, sino completamente trascendentales. Sin embargo, cuando hace Su advenimiento, los necios Le consideran una persona corriente, avajānanti māṁ mūḍhā mānuṣīṁ tanum āśritam (Bg. 9.11). Quienes no poseen conocimiento védico, quienes no han estudiado los Vedas con un maestro espiritual genuino, no conocen a Kṛṣṇa. Por lo tanto, son mūḍhas. Semejantes necios toman a Kṛṣṇa por una persona corriente (paraṁ bhāvam ajānantaḥ). No saben realmente quién es Kṛṣṇa. Manuṣyāṇāṁ sahasreṣu kaścid yatati siddhaye (Bg. 7.3). Para entender a Kṛṣṇa no basta con estudiar perfectamente los Vedas. Se necesita la misericordia de un devoto (yat-pādam). Sin la misericordia de un devoto, no se puede entender a la Suprema Personalidad de Dios. Así lo confirma Arjuna en el Bhagavad-gītā (10.14): «Mi Señor, es muy difícil entender Tu personalidad.» Los hombres de poca inteligencia no pueden entender a la Suprema Personalidad de Dios si no reciben la misericordia de Su devoto. Por eso el Bhagavad-gītā contiene otro mandamiento (Bg. 4.34):


tad viddhi praṇipātena paripraśnena sevayā
upadekṣyanti te jñānaṁ jñāninas tattva-darśinaḥ


Debemos acudir a un maestro espiritual genuino y entregarnos a él. Sólo entonces podremos entender que la Suprema Personalidad de Dios es una persona.