ES/Prabhupada 0484 - Prema es la condición madura de bhava
Coferencia-- Seattle, 18 octubre 1968
Prabhupāda: ¿Hay alguna pregunta?
Jaya-gopāla: ¿Cuál es la diferencia entre bhava y prema?
Prabhupāda: Prema es la etapa madura de bhava. Es como si tenemos un mango maduro y un mango verde. El mango verde es la causa del mango maduro. Pero saborear el mango maduro es mucho mejor que saborear un mango verde. Del mismo modo, antes de alcanzar amor por Dios, tendrá que atravesar por diferentes etapas. Tal como ese mango pasa a través de diferentes etapas y entonces finalmente un día toma un hermoso color amarillo, madura plenamente y su sabor es tan agradable. Es el mismo mango. El mango no ha cambiado, sino que simplemente ha llegado a su etapa de madurez. El mango al principio es una flor, después gradualmente se transforma en una pequeña fruta. Y después empieza a crecer, se vuelve muy terso, verde y más tarde, gradualmente empieza a volverse más y más amarillento, hasta que madura plenamente. Este es el proceso que siguen todas las cosas. En el mundo material hay seis procesos y el último de ellos es la aniquilación.
Este ejemplo del mango o cualquier otro ejemplo material, podemos aceptarlo en algún sentido, pero el ejemplo material no es perfecto. Es como por ejemplo en el caso del mango, cuando está maduro alguien lo coge y se lo come, y está bien. De otra forma continúa madurando hasta que se pudre, se descompone, finalmente cae al suelo y se acabó. Esto es material. Pero en el campo espiritual las cosas no son así. Si algún día llegas a esta etapa del estado maduro del amor, entonces, esa etapa perfecta continúa eternamente y tu vida es exitosa. Premā pum-artho mahān. Hay muchos diferentes tipos de perfección en este mundo material, según las cuales uno piensa: “Esta es la perfección de la vida”. Los materialistas están pensando: “Si yo puedo disfrutar de mis sentidos al máximo, esa es la perfección de la vida”. Ese es su punto de vista. Y cuando están frustrados, entonces encuentran o tratan de encontrar algo mejor. Pero si no tienen ninguna guía, entonces algo mejor significa la misma cosa –sexo e intoxicación. Eso es todo. Simplemente volverse irresponsables. Eso es todo. Porque no hay ninguna guía. Está buscando algo mejor, pero puesto que no tiene ninguna guía, finalmente llega al mismo punto del sexo y la intoxicación –para olvidar. Por ejemplo un hombre de negocios, cuando fracasa, trata de olvidarlo todo bebiendo. Pero esto es un método artificial. No es realmente el remedio. Es como dormir, ¿por cuánto tiempo pueden dormir? De nuevo, finalmente se despertarán y otra vez se encontrarán en la misma posición. Ese no es el método. Pero si llegan a la etapa de amor por Dios, entonces de una forma natural olvidan todas esas tonterías. De una forma natural. Paraṁ dṛṣṭvā nivartate. Si consiguen algo más sabroso, más agradable, naturalmente abandonan todas las tonterías, que tienen un sabor tan desagradable.
La conciencia de Kṛṣṇa es así. Los lleva a un nivel en el cual pueden olvidar todas esas tonterías. Ésa es la verdadera vida. Brahma-bhūtaḥ prasannātmā (BG 18.54). Tan pronto como llegan a esa etapa, entonces el síntoma será que sentirán una gran alegría. Hay muchos ejemplos de esto. Así pues, cuando acepten este mundo material en relación con Kṛṣṇa, entonces podrán saborear ese amor por Dios, incluso en este mundo material. En realidad, el mundo material significa olvidar completamente a Dios, o Kṛṣṇa. Eso es el mundo material. De otro modo, si son plenamente conscientes de Kṛṣṇa, se encontrarán en el mundo espiritual, incluso aun estando en este mundo material. Es simplemente una cuestión de conciencia. Por ejemplo, es como cuando el rey y el chinche están sentados en el mismo trono, pero el chinche sabe que: “Mi trabajo es sacar un poquito de sangre”. Eso es todo. Pero el rey sabe que: “Yo soy el gobernador, tengo que gobernar este país”. Así pues, están sentados en el mismo lugar, pero la conciencia es diferente. De forma similar, si transforman su conciencia en conciencia de Kṛṣṇa, no importa donde estén, estarán en Vaikuṇṭha.