ES/SB 4.28.12
TEXTO 12
- tasyāṁ sandahyamānāyaṁ
- sapauraḥ saparicchadaḥ
- kauṭumbikaḥ kuṭumbinyā
- upātapyata sānvayaḥ
PALABRA POR PALABRA
tasyām—cuando aquella ciudad; sandahyamānāyām—estaba ardiendo; sa-pauraḥ—junto con todos los ciudadanos; sa-paricchadaḥ—junto con todos los sirvientes y seguidores; kauṭumbikaḥ—el rey, que tenía muchos parientes; kuṭumbinyā—junto con su esposa; upātapyata—comenzó a sufrir el calor del fuego; sa-anvayaḥ—junto con los descendientes.
TRADUCCIÓN
Cuando la ciudad comenzó a arder, todos los súbditos y sirvientes del rey, además de sus familiares, hijos, nietos, esposas y demás parientes, estaban dentro del fuego. El rey Purañjana se sintió entonces muy desdichado.
SIGNIFICADO
El cuerpo tiene muchas partes, como los sentidos, las extremidades, la piel, los músculos, la sangre, la médula, etc., y en este verso se las representa simbólicamente como hijos, nietos, ciudadanos y subordinados. Ante el ataque de viṣṇu-jvāra, la fiebre es tan abrasadora que a veces la persona entra en coma. Eso significa que el cuerpo está sufriendo un dolor tan fuerte que la persona pierde la consciencia y no siente los sufrimientos por los que está pasando el cuerpo. En verdad, a la hora de la muerte, la entidad viviente está tan desamparada que, aunque no lo desea, se le obliga a abandonar un cuerpo y entrar en otro. En el Bhagavad-gītā se afirma que el hombre, mediante el progreso científico, puede mejorar las condiciones temporales de vida, pero no puede evitar los sufrimientos del nacimiento, la vejez, las enfermedades y la muerte, que estan bajo el control de la Suprema Personalidad de Dios por intermedio de la naturaleza material. Los necios no pueden entender un hecho tan simple. Ahora la gente está muy ocupada tratando de encontrar petróleo en medio del mar. Están muy ansiosos de proveerse de reservas de petróleo para el futuro, pero no hacen el menor intento de mejorar las condiciones del nacimiento, la vejez, las enfermedades y la muerte. La persona que está bajo la influencia de la ignorancia, sin saber nada acerca de su propia vida futura, está condenada al fracaso en todas sus actividades.