ES/SB 6.5.42


Su Divina Gracia A. C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada


TEXTO 42

yan nas tvaṁ karma-sandhānāṁ
sādhūnāṁ gṛhamedhinām
kṛtavān asi durmarṣaṁ
vipriyaṁ tava marṣitam


PALABRA POR PALABRA

yat—lo que; naḥ—a nosotros; tvam—tú; karma-sandhānām—que seguimos estrictamente las ceremonias rituales fruitivas conforme a los mandamientos védicos; sādhūnām—que somos honestos (pues buscamos honestamente un elevado nivel de comodidad física y social); gṛha-medhinām—aunque tenemos esposa e hijos; kṛtavān asi—has creado; durmarṣam—insoportable; vipriyam—daño; tava—tuyo; marṣitam—perdonado.


TRADUCCIÓN

Yo, aunque vivo con mi familia, mi esposa y mis hijos, sigo honradamente los mandamientos de los Vedas y me ocupo en actividades fruitivas para disfrutar de una vida libre de reacciones pecaminosas. He ejecutado todo tipo de yajñas, desde el deva-yajña al ṛṣi-yajña, el pitṛ-yajña y el nṛ-yajña. Esos yajñas reciben el nombre de vratas [votos], y por ello soy conocido con el nombre de gṛhavrata. Por desgracia, tú me has causado un gran disgusto al desencaminar a mis hijos y llevarles, sin razón alguna, hacia la senda de la renunciación. Eso puede tolerarse una vez.


SIGNIFICADO

Prajāpati Dakṣa quería dejar claro que había sido muy tolerante, pues no había dicho nada cuando Nārada Muni, sin razón alguna, indujo a sus diez mil inocentes hijos a seguir la senda de la renunciación. A veces se acusa a los casados de ser gṛhamedhīs, pues los gṛhamedhīs se sienten satisfechos con la vida familiar, sin ningún deseo de avanzar espiritualmente. No ocurre lo mismo con los gṛhasthas, quienes, aunque llevan vida de familia, con esposa e hijos, están deseosos de avanzar espiritualmente. Queriendo demostrar que había sido muy magnánimo con Nārada Muni, Prajāpati Dakṣa puso de relieve que no había tomado ninguna medida contra él, cuando este desencaminó a sus hijos mayores; había sido bondadoso y tolerante. Sin embargo, se sentía afligido, pues Nārada Muni había desencaminado a sus hijos por segunda vez. Por esa razón, quiso demostrar que Nārada, a pesar de vestirse como un sādhu, en realidad no lo era; él mismo, aunque era un hombre de familia, era más sādhu que Nārada Muni.