ES/SB 4.29.23-25
TEXTOS 23-25
- ādhayo vyādhayas tasya sainikā yavanāś carāḥ
- bhūtopasargāśu-rayaḥ prajvāro dvi-vidho jvaraḥ
- evaṁ bahu-vidhair duḥkhair daiva-bhūtātma-sambhavaiḥ
- kliśyamānaḥ śataṁ varṣaṁ dehe dehī tamo-vṛtaḥ
- prāṇendriya-mano-dharmān ātmany adhyasya nirguṇaḥ
- śete kāma-lavān dhyāyan mamāham iti karma-kṛt
PALABRA POR PALABRA
ādhayaḥ—perturbaciones de la mente; vyādhayaḥ—perturbaciones del cuerpo, enfermedades; tasya—de Yavaneśvara; sainikāḥ—soldados; yavanāḥ—yavanas; carāḥ—seguidores; bhūta—de las entidades vivientes; upasarga—a la hora de la aflicción; āśu—muy pronto; rayaḥ—muy poderoso; prajvāraḥ—llamado Prajvāra; dvi-vidhaḥ—dos tipos; jvaraḥ—fiebre; evam—así; bahu-vidhaiḥ—de muchos tipos; duḥkhaiḥ—con sufrimientos; daiva—por la providencia; bhūta—por otras entidades vivientes; ātma—por el cuerpo y la mente; sambhavaiḥ—producidos; kliśyamānaḥ—expuesta a sufrimientos; śatam—cien; varṣam—años; dehe—en el cuerpo; dehī—la entidad viviente; tamaḥ-vṛtaḥ—cubierta por la existencia material; prāṇa—de vida; indriya—de los sentidos; manaḥ—de la mente; dharmān—características; ātmani—al alma; adhyasya—atribuyendo erróneamente; nirguṇaḥ—aunque trascendental; śete—yace; kāma—de disfrute sensorial; lavān—en fragmentos; dhyāyan—meditando; mama—mío; aham—yo; iti—así; karma-kṛt—el ejecutor.
TRADUCCIÓN
Los seguidores de Yavaneśvara [Yamarāja] son los soldados de la muerte, y representan las diversas perturbaciones que afligen el cuerpo y la mente. Prajvāra representa los dos tipos de fiebre: la temperatura muy alta y la temperatura muy baja, es decir, la fiebre tifoidea y la pulmonía. La entidad viviente que yace en el cuerpo se ve perturbada por los muchos sufrimientos que le deparan la providencia, otras entidades vivientes y su propio cuerpo y mente. A pesar de todo ese sufrimiento, la entidad viviente, sometida a las necesidades del cuerpo, de la mente y de los sentidos, y afectada por distintos tipos de enfermedades, se ve arrastrada por infinidad de planes debido a su intenso deseo de disfrutar del mundo. Aunque es trascendental a la existencia material, por ignorancia acepta todas esas miserias materiales, que se sustentan en los supuestos del egoísmo falso («yo» y «mío»). De ese modo, vive durante cien años en el interior del cuerpo.
SIGNIFICADO
En los Vedas se afirma: asaṅgo hy ayaṁ puruṣaḥ. La entidad viviente en realidad está aparte de la existencia material, pues el alma no es material. En el Bhagavad-gītā se dice también que la entidad viviente es energía superior, y que los elementos materiales —tierra, agua, fuego, aire, etc.— son energía inferior. De los elementos materiales se dice también que son bhinna, es decir, energía separada. Cuando la energía interna, que es la energía superior, entra en contacto con la energía externa, queda sometida a muchos sufrimientos. En el Bhagavad-gītā (2.14), el Señor dice también: mātrā-sparśās tu kaunteya śītoṣṇa-sukha-duḥkha-dāḥ: Debido al cuerpo material, la entidad viviente tiene que soportar muchas molestias, causadas por el aire, el agua, el fuego, el calor y el frío excesivos, la luz del sol, los excesos en la comida, los alimentos insalubres, los desajustes de los tres elementos del cuerpo (kapha, pitta y vāyu), etc. Los intestinos, la garganta, el cerebro y las demás partes de cuerpo se ven afectadas por todo tipo de enfermedades, tan poderosas que pueden causar a la entidad viviente sufrimientos insoportables. La entidad viviente, sin embargo, está aparte de todos esos elementos materiales. Los dos tipos de fiebre que se describen en este verso son, en lenguaje contemporáneo, la pulmonía y la fiebre tifoidea. Cuando alguien tiene una fiebre muy alta o muy baja, es porque está enfermo de fiebre tifoidea o de pulmonía. Esas fiebres vienen representadas con la figura de Prajvāra. También están las miserias que vienen de otras entidades vivientes. El gobierno recauda impuestos, y hay numerosos ladrones, maleantes y engañadores. Las miserias que vienen de otras entidades vivientes se denominan adhibhautika. Otras miserias vienen en forma de hambre, peste, escasez, guerra, terremotos, etc. Su causa son los semidioses y otras fuentes que escapan a nuestro control. En realidad, las entidades vivientes tienen muchos enemigos, y en estos versos se habla de ellos para señalar lo miserable que es la existencia material. Conociendo el carácter básicamente miserable de la existencia material, debemos sentirnos inducidos a salir de las garras de la materia y a regresar al hogar, de vuelta a Dios. En realidad, la entidad viviente no encuentra la más mínima felicidad en el cuerpo material. El cuerpo le hace pasar hambre y sed, y la somete a las influencias de la mente, las palabras, la ira, el estómago, los genitales, el recto, etc. Son muchas las miserias que rodean a la entidad viviente trascendental debido a su deseo de satisfacer sus sentidos en el mundo material. Sin embargo, si se retira de las actividades de complacencia de los sentidos y aplica sus sentidos al servicio del Señor, verá disminuir de inmediato todos los problemas de la existencia material; cuando avance en el sendero de conciencia de Kṛṣṇa, se liberará de todos los sufrimientos, y, tras abandonar el cuerpo, regresará al hogar, de vuelta a Dios.