ES/SB 4.29.32
TEXTO 32
- duḥkheṣv ekatareṇāpi daiva-bhūtātma-hetuṣu
- jīvasya na vyavacchedaḥ syāc cet tat-tat-pratikriyā
PALABRA POR PALABRA
duḥkheṣu—en cuestión de sufrimientos; ekatareṇa—de un tipo; api—incluso; daiva—providencia; bhūta—otras entidades vivientes; ātma—el cuerpo y la mente; hetuṣu—a causa de; jīvasya—de la entidad viviente; na—nunca; vyavacchedaḥ—detener; syāt—es posible; cet—aunque; tat-tat—de esas miserias; pratikriyā—remedio.
TRADUCCIÓN
Las entidades vivientes tratan de neutralizar las condiciones miserables que les deparan la providencia, otras entidades vivientes y el cuerpo y la mente. Aun así, tienen que permanecer condicionadas bajo las leyes de la naturaleza, a pesar de todos sus esfuerzos por oponerse a ellas.
SIGNIFICADO
Tal como el perro que vaga de un lugar a otro para recibir un trozo de pan o ser apaleado, la entidad viviente vaga eternamente de un lugar a otro tratando de ser feliz y forjando muchos planes para remediar las miserias materiales. Esto es lo que se llama la lucha por la existencia. En la vida diaria podemos ver que realmente nos vemos obligados a hacer planes para alejar de nosotros las circunstancias miserables. Para liberarnos de una circunstancia miserable, nos tenemos que enredar en otra semejante. Un pobre sufre porque no tiene dinero, pero si quiere hacerse rico, tiene que hacer grandes esfuerzos. En realidad, esa no es una forma de solucionar el problema, sino otra trampa de la energía ilusoria. Si, en lugar de esforzarse por remediar la situación, se contentase con la posición en que se encuentra, sabiendo que ha llegado a ella por sus actividades pasadas, podría ocupar su energía en el cultivo de conciencia de Kṛṣṇa. Eso se recomienda en todas las Escrituras védicas:
tasyaiva hetoḥ prayateta kovido na labhyate yad bhramatām upary adhaḥ tal labhyate duḥkhavad anyataḥ sukhaṁ kālena sarvatra gabhīra-raṁhasā
«Las personas que son verdaderamente inteligentes y tienen inclinaciones filosóficas deben esforzarse únicamente por aquel objetivo que no se puede conseguir ni siquiera vagando desde el planeta más elevado [Brahmaloka] hasta el más bajo [Pātāla]. En cuanto a la felicidad que se deriva del disfrute de los sentidos, se puede obtener automáticamente con el transcurso del tiempo, tal como con el transcurso del tiempo obtenemos sufrimientos aunque no los deseemos» (Bhāg. 1.5.18). Simplemente debemos tratar de cultivar nuestra conciencia de Kṛṣṇa, y no perder el tiempo tratando de mejorar las condiciones materiales en que nos encontramos. En realidad, esas condiciones materiales no se pueden mejorar. Mejorar significa aceptar un sufrimiento de otro tipo. Sin embargo, si nos esforzamos por mejorar nuestra conciencia de Kṛṣṇa, los sufrimientos de la vida material desaparecerán sin necesidad de ningún esfuerzo adicional. Por esa razón, Kṛṣṇa promete: kaunteya pratijānīhi na me bhaktaḥ praṇaśyati: «¡Oh, hijo de Kuntī!, declara abiertamente que Mi devoto jamás perece» (Bg. 9.31). Quien emprenda el sendero del servicio devocional nunca será vencido, a pesar de todas las miserias del cuerpo y de la mente, y a pesar de todas las miserias que le deparen otras entidades vivientes y la providencia, miserias, todas ellas, que están fuera de nuestro control.