ES/SB 10.3.7-8
TEXTOS 7-8
- mumucur munayo devāḥ
- sumanāṁsi mudānvitāḥ
- mandaṁ mandaṁ jaladharā
- jagarjur anusāgaram
- niśīthe tama-udbhūte
- jāyamāne janārdane
- devakyāṁ deva-rūpiṇyāṁ
- viṣṇuḥ sarva-guhā-śayaḥ
- āvirāsīd yathā prācyāṁ
- diśīndur iva puṣkalaḥ
PALABRA POR PALABRA
mumucuḥ—derramaron; munayaḥ—todos los grandes sabios y personas santas; devāḥ—y los semidioses; sumanāṁsi—flores muy hermosas y fragantes; mudā anvitāḥ—sintiéndose muy dichosos; mandam mandam—con gran mansedumbre; jala-dharāḥ—las nubes; jagarjuḥ—resonaron; anusāgaram—en armonía con el sonido de las olas del mar; niśīthe—a altas horas de la noche; tamaḥ-udbhūte—cuando reinaba la más densa oscuridad; jāyamāne—cuando se produjo el advenimiento de; janārdane—la Suprema Personalidad de Dios, Viṣṇu; devakyām—en el vientre de Devakī; deva-rūpiṇyām—que entraba en la misma categoría que la Suprema Personalidad de Dios (ānanda-cinmaya-rasa-pratibhāvitābhiḥ); viṣṇuḥ—el Señor Viṣṇu, el Señor Supremo; sarva-guhā-śayaḥ—que Se encuentra en lo más profundo del corazón de todos; āvirāsīt—apareció; yathā—como; prācyām diśi—en el este; induḥ iva—como la Luna llena; puṣkalaḥ—completa en todos los sentidos.
TRADUCCIÓN
Los semidioses y grandes personas santas, muy alegres, derramaron lluvias de flores, y las nubes se reunieron en el cielo y tronaron mansamente, con un sonido como el de las olas del mar. Entonces, la Suprema Personalidad de Dios, Viṣṇu, que está en lo más profundo del corazón de todos, Se manifestó desde el corazón de Devakī como la Luna llena que surge en el horizonte oriental en la profunda oscuridad de la noche, pues Devakī pertenecía a la misma categoría que Śrī Kṛṣṇa.
SIGNIFICADO
La Brahma-saṁhitā (5.37) afirma:
ānanda-cinmaya-rasa-pratibhāvitābhis tābhir ya eva nija-rūpatayā kalābhiḥ goloka eva nivasaty akhilātma-bhūto govindam ādi-puruṣaṁ tam ahaṁ bhajāmi
Este verso indica que Kṛṣṇa y aquellos que Le acompañan participan de una misma potencia espiritual (ānanda-cinmaya-rasa). El padre de Kṛṣṇa, Su madre, Sus amigos los pastorcillos de vacas, y las vacas mismas, son expansiones de Kṛṣṇa, como se explicará en el brahma-vimohana-līlā. Cuando Brahmā se llevó a los compañeros de Kṛṣṇa para ver hasta qué punto era supremo el Señor Kṛṣṇa, el Señor Se expandió de nuevo en las formas de todos los terneros y pastorcillos de vacas, todos los cuales, según Brahmā pudo comprobar, eran viṣṇu-mūrtis. Devakī también es una expansión de Kṛṣṇa. Por esa razón, este verso dice: devakyāṁ deva-rūpiṇyāṁ viṣṇuḥ sarva-guhā-śayaḥ.
En el momento del advenimiento del Señor, los grandes sabios y los semidioses, complacidos, derramaron lluvias de flores. En las orillas del mar se escuchaba el manso sonido de las olas, y, por encima del mar, en el cielo, había nubes que tronaban de una forma muy agradable.
Cuando todo se conjugó de esta forma, en la oscuridad de la noche, el Señor Viṣṇu, que tiene Su morada en el corazón de todas las entidades vivientes, Se manifestó como Suprema Personalidad de Dios ante Devakī, que parecía una de las semidiosas. El advenimiento del Señor Viṣṇu en aquel momento puede compararse a la Luna llena que surge en el cielo desde el horizonte oriental. La objeción que podría plantearse es que el Señor Kṛṣṇa nació en el octavo día de Luna menguante, de modo que es imposible que por el horizonte saliese la Luna llena. Como respuesta, puede decirse que el Señor Kṛṣṇa advino en la dinastía que desciende de la Luna. Así, aquella noche la Luna no estaba crecida, pero se encontraba tan desbordante de júbilo por ver nacer al Señor en la dinastía de Sus descendientes que, por la gracia de Kṛṣṇa, pudo mostrarse en forma de Luna llena. La Luna menguante, para recibir a la Suprema Personalidad de Dios, se convirtió en Luna llena debido al júbilo que sentía.
En lugar de deva-rūpiṇyām, en algunas versiones del Śrīmad-Bhāgavatam se lee claramente viṣṇu-rūpiṇyām. En cualquiera de los dos casos, el significado es que Devakī tiene la misma forma espiritual que el Señor. El Señor es sac-cid-ānanda-vigraha, y Devakī también es sac-cid-ānanda-vigraha. Por lo tanto, nadie puede hallar el menor defecto en la forma en que la Suprema Personalidad de Dios, sac-cid-ānanda-vigraha, nació del vientre de Devakī.
Quienes no tienen pleno conocimiento del carácter trascendental del advenimiento y la partida del Señor (janma karma ca me divyam) se sorprenden a veces de que la Suprema Personalidad de Dios pueda nacer como un niño común y corriente. Sin embargo, el nacimiento del Señor nunca es corriente. La Suprema Personalidad de Dios está ya situado en lo más profundo del corazón de todos en la forma de antaryāmī, la Superalma. Por lo tanto, Él, que ya estaba presente con toda Su potencia en el corazón de Devakī, no tuvo dificultad en aparecer también fuera de su cuerpo.
Una de las doce grandes personalidades es Bhīṣmadeva (svayambhūr nāradaḥ śambhuḥ kumāraḥ kapilo manuḥ prahlāda janako bhīṣmaḥ). En el Śrīmad-Bhāgavatam (SB 1.9.42), Bhīṣma, una gran autoridad a quien los devotos deben seguir, dice que, del mismo modo que el sol puede brillar sobre la cabeza de todos, la Suprema Personalidad de Dios está en lo más profundo del corazón de todos. El hecho de estar sobre la cabeza de muchísimos millones de personas no significa que el sol ocupe posiciones distintas. Del mismo modo, la Suprema Personalidad de Dios tiene potencias inconcebibles, de forma que puede estar en el corazón de todos y, aun así, no variar de posición. Ekatvam anupaśyataḥ (Īśopaniṣad 7). El Señor es uno, pero, en virtud de Su potencia inconcebible, puede aparecer en el corazón de todos. Así, el Señor advino como hijo de Devakī, a pesar de que ya estaba en su corazón. Por todo ello, citando el Viṣṇu Purāṇa, el Vaiṣṇava-toṣaṇī explica que el Señor advino del mismo modo que el sol (anugrahāsaya). La Brahma-saṁhitā (5.35) nos confirma que el Señor está también dentro del átomo (aṇḍāntara-stha-paramāṇu-cayāntara-stham). Él está en Mathurā, en Vaikuṇṭha, y en lo más profundo del corazón. Por lo tanto, debemos entender claramente que Él no vivió como un niño común en el corazón o en el vientre de Devakī. Ni nació como un niño humano corriente, aunque aparentase hacerlo para confundir a Kaṁsa y a los asuras. Los asuras cometen el error de pensar que Kṛṣṇa nació como un niño cualquiera y abandonó este mundo como cualquier otro hombre. Las personas que tienen conocimiento de la Suprema Personalidad de Dios rechazan esos conceptos de los asuras. Ajo 'pi sann avyayātmā bhūtānām īśvaro 'pi san (Bg. 4.6). Como se afirma en el Bhagavad-gītā, el Señor es aja, innaciente, y es el controlador supremo de todo. A pesar de ello, Él nació como hijo de Devakī. Este verso explica la potencia inconcebible del Señor, que advino como la Luna llena. Comprendiendo la especial importancia del advenimiento del Dios Supremo, nunca debemos considerar que Su nacimiento es como el de un niño corriente.