ES/661010 - Clase BG 07.18-20 - Nueva York

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



661010BG - Nueva York, 10 octubre 1966 - 44:16 minutos



Prabhupāda: Udārāḥ sarva...

udārāḥ sarva evaite
jñānī tv ātmaiva me matam
āsthitaḥ sa hi yuktātmā
mām evānuttamāṁ gatim
(BG 7.18)

Ahora, estábamos discutiendo en nuestra última reunión acerca de las cuatro clases de hombres que son adversos a la adoración a Dios y cuatro clases de hombres que aceptan la adoración a Dios. Hasta ahora cuatro clases de hombres que se dedican a adorar a Dios, se les reconoce como udārāḥ, “muy magnánimo”. Tales personas son muy magnánimas. Sarva evaite. Evaite. De ellos, de esas cuatro clases de hombres, al igual que angustiados, pobres, curiosos y filósofos, estas cuatro clases de hombres, si son piadosos en el fondo, comienzan a adorar a Dios. Pero los afligidos y los pobres pueden abandonar la adoración de Dios si se sienten frustrados.

Pero aquellos que son curiosos y filósofos, no renuncian a la adoración de Dios o al trabajo de investigación en la ciencia de Dios. No se rinden. Continúan. Por lo tanto, el Señor Kṛṣṇa dice que, de estas cuatro clases, una que está realmente en el conocimiento de la ciencia de Dios y que busca la verdad, es muy querido por Él. Ahora, de ese erudito investigador, el Señor dice:

bahūnāṁ janmanām ante
jñānavān māṁ prapadyante
vāsudevaḥ sarvaṁ iti
sa mahātmā sudurlabhaḥ
(BG 7.19)

Este trabajo de investigación sobre la ciencia de Dios tiene que ser procesado nacimiento tras nacimiento. Bahūnāṁ janmanām ante significa: después de muchos nacimientos. La realización de Dios es muy fácil, pero al mismo tiempo, es muy difícil. Fácil para aquellos que lo aceptan como verdad, y difícil para aquellos que están tratando de entender a fuerza de su conocimiento. Con el avance del conocimiento, ellos tienen que aceptar en quien tener fe, después de terminar su trabajo de investigación. Entonces eso toma muchos, muchos nacimientos. Bahūnāṁ janmanām ante.

Hay diferentes tipos de trascendentalistas. Se llaman tattva-vit. Tattva-vit significa alguien que conoce la Verdad Absoluta. En el Śrīmad-Bhāgavata se dice: vadanti tat tattva-vidas tattvaṁ yaj jñānam advayam (SB 1.2.11). Tattva-vit, los trascendentalistas, lo llaman Verdad Absoluta que es yaj jñānam advayam, donde no hay dualidad.

En el conocimiento trascendental no hay dualidad. No hay... nada es diferente de nada. Todo está al mismo nivel. Eso se llama... aquel que conoce ese conocimiento, se le llama tattva-vit. Ahora, el tattva-vit dice que la Suprema Verdad Absoluta es reconocida en tres aspectos: brahmeti paramātmeti bhagavān iti śabdyate. Brahmeti, el Brahman impersonal; Paramātmā, la Súperalma localizada; y Bhagavān. Bhagavān significa la Personalidad de Dios.

Así que son tres ángulos de visión. Al igual que desde un lugar distante, si ven una montaña, la verán como algo nublado. Si avanzan más, en la misma montaña verán algo verde. Y si entran en esa montaña, encontrarán tantas variedades, tantos árboles, tantos animales. Entonces, el objetivo es el mismo, pero bajo diferentes ángulos de visión, desde la distancia, diferentes personas tienen una concepción diferente de la Verdad Absoluta.

Otro ejemplo: al igual que el Sol tiene: la luz del Sol, el disco solar y el planeta solar. Uno que está bajo la luz del Sol, o que está estudiando la luz del Sol; uno que está estudiando el disco solar y uno que está entrando en el planeta solar… al igual que estamos tratando de ingresar al planeta Luna, de manera similar, pueden ingresar al planeta Sol, siempre que tengan la cualificación.

Entonces, en la luz del Sol, en el disco solar o en el planeta Sol, están en el Sol, pero hay grados. Aquel que está bajo la luz del Sol, no puede afirmar que: “Estoy en el planeta Sol”. No puede afirmar eso. Uno que está en el planeta del Sol, está mejor situado que uno que está bajo su luz. Es así, que la luz del Sol se compara con la refulgencia brahman, brahma-jyoti; y el disco solar se compara con la Súperalma; y el planeta Sol, en su interior, se compara con la Suprema Personalidad de Dios.

Al igual que en este planeta tienen tanta variedad de personas, de manera similar, según la literatura védica, entendemos que en el planeta Sol también hay variedad de entidades vivientes, pero sus cuerpos están hechos de fuego. Tal como nuestro cuerpo está hecho de tierra, de manera similar, sus cuerpos están hechos de fuego. Hay cinco elementos en la naturaleza material: tierra, agua, fuego, aire y éter.

En diferentes planetas, hay diferentes atmósferas y diferentes cuerpos también. No piensen que todos y cada uno de los planetas son de la misma calidad. No. De la misma calidad en el sentido que allí están presentes estos cinco elementos. Sin estos cinco elementos, no existe nada material. En algún lugar el fuego es prominente. En algún lugar el aire es prominente. En algún lugar el agua es prominente. En algún lugar la tierra es prominente. Entonces, en este planeta, o en algún otro planeta terrenal, la tierra es predominante. Del mismo modo, también hay otros planetas. No piensen que otros planetas están vacíos. No.

En lo que respecta a la literatura védica… al igual que los científicos modernos, están calculando que la Luna está llena de polvo. Pero según la literatura védica, la Luna no está llena de polvo. También hay entidades vivientes superiores. Y de... la razón práctica también, pueden entender que un poco de polvo no puede ser tan brillante para que esté iluminando toda la Tierra. No es posible. De todos modos, dejen que el científico continúe con su propio trabajo de investigación. Hasta ahora tenemos la información de la literatura védica, de que todos los planetas, el planeta Sol, el planeta lunar, Venus, todos están llenos de entidades vivientes, y tienen diferentes tipos de cuerpo.

Así como no es imposible con cierto tipo de cualificación entrar en diferentes tipos de planetas, de manera similar, pueden entrar en el planeta donde el Señor Supremo también está allí. Eso también es posible. Lo encontrarán en el Bhagavad-gītā:

yānti deva-vratā devān
pitṝn yānti pitṛ-vratāḥ
bhūtejyā yānti bhūtāni
(yānti) mad-yājino 'pi mām
(BG 9.25)

Aquellos que están adorando, cualificándose a sí mismos para entrar en los planetas superiores, pueden entrar en los planetas superiores. Aquellos que están tratando de cualificarse para entrar en los planetas pitṛ, oh, ellos pueden entrar allí. Del mismo modo, aquellos que están tratando de cualificarse para entrar en el planeta del Señor Supremo, también pueden entrar allí. Nuestro proceso, la conciencia de Kṛṣṇa, es cualificarnos para entrar en el planeta de Kṛṣṇa, que se conoce como Goloka Vṛndāvana. Tenemos una descripción de ese planeta. Porque para cualquier cosa, si quieren entender, antes que nada, tienen que escuchar. Al igual que antes de venir a su país, tuve algo de experiencia al escuchar: “Oh, Estados Unidos es tal y tal. Nueva York es tal y tal”. Alguien podría haber ido allí, y explicar que: “El clima de Nueva York es así”. Esto es por haber oído. Escuchar es la primera experiencia.

Del mismo modo, si quieren obtener experiencia del planeta donde Dios vive, entonces tienen que escuchar. No hay otra manera. No se puede experimentar de inmediato. Eso no es posible. No se puede experimentar ni siquiera en estos planetas materiales. No tienen conocimiento de lo que son otros planetas, pero pueden escuchar en la descripción de las Escrituras.

Del mismo modo, tenemos experiencia al escuchar de Kṛṣṇaloka de las Escrituras autorizadas:

cintāmaṇi-prakara-sadmasu kalpa-vṛkṣa-
lakṣāvṛteṣu surabhīr abhipālayantam
lakṣmī-sahasra-śata-sambhrama-sevyamānaṁ
govindam ādi-puruṣaṁ tam ahaṁ bhajāmi
(BS 5.29)

Estas son las descripciones de Kṛṣṇaloka. Hay muchos, muchos buenos libros, especialmente este libro, Brahma-saṁhitā. Está la descripción. Cintāmaṇi-prakara-sadmasu. Oh, allí las casas están hechas de piedra de toque. En ese sentido, los árboles, las vacas, todo… el cómo, de qué tipo son, cuál es su calidad y lo que ellos… a qué ocupación se dedican, todo, todo está allí.

Aquí en el Bhagavad-gītā, el Señor Kṛṣṇa dice: bahūnāṁ janmanām ante jñānavān māṁ prapadyante. Hay muchos trascendentalistas. Eso significa aquellos que están tratando de entender a la Suprema Verdad Absoluta. Hay diferentes tipos de procesos espirituales, los que se han analizado en tres grupos. Aunque son muchos más todavía, se han puesto en tres grupos. ¿Cuáles son? Los primeros son el impersonalista, brahmavādī, el Brahman impersonal.

Al igual que el mismo ejemplo: Sus ojos se deslumbran ante el Sol. No se ve nada. Si van volando en avión sobre este planeta, el planeta Tierra, y si hay pleno Sol, no verán nada excepto el Sol. Pero eso no significa que no haya nada más allá de la luz del Sol. Pero los ojos están deslumbrados por la luz del Sol.

Al igual que durante el día no encuentran las estrellas debido al deslumbrante Sol, pero no por eso van a creer que, por no ver los planetas o estrellas durante el día, no hay nada. No. Del mismo modo, aquellos que están tratando de entender la Verdad Absoluta, en primer lugar, se van a dar cuenta del brahma-jyoti . En el Bhagavad-gītā encontrarán acerca de ese brahma-jyoti, brahmaṇaḥ ahaṁ pratiṣṭhā. Al igual que la luz del Sol.

Los impersonalistas, brahmavādī, se dan cuenta de eso, brahma-jyoti. Y los yogīs perciben la Súperalma. Īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ hṛd-deśe arjuna tiṣṭhati (BG 18.61): Īśvara, el Señor Supremo, con Sus porciones plenarias, está situado en el corazón de todos”. Estamos sentados juntos. Varias veces hemos descrito esto, que dos pájaros están sentados en el mismo árbol. Las dos aves significan: una, la Súperalma; y la otra, la entidad viviente individual.

Mediante el proceso yóguico, al concentrar nuestra mente, al enfocar nuestra mente en la Súperalma, uno puede experimentar esa expansión parcial y plenaria del Señor, la Súperalma. Al igual que en el mismo ejemplo del Sol, al mediodía, si preguntan a miles y miles de personas dispersas a miles y miles de millas de distancia, todos dirán que: “El Sol está sobre mi cabeza”. Del mismo modo, el Señor Supremo también está representado por la concepción de la Súperalma en el corazón de todos. No sólo en el corazón de todos, sino incluso en cada átomo Él está representado. Entonces, esa comprensión es la segunda etapa. Y la tercera etapa es comprender a la Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa.

Por lo tanto, se dice aquí que estas etapas... bahūnāṁ janmanām ante. Bahūnām significa después de muchos, muchos, muchos nacimientos. La comprensión espiritual no se logra en un solo nacimiento. Si uno es afortunado, oh, puede lograrlo en un segundo. Puede lograrlo en un segundo. Pero en general, se necesitan muchos, muchos años y muchos, muchos nacimientos para darse cuenta de lo que es Dios, de lo que es la Verdad Absoluta. Así como Kṛṣṇa dice que:

ahaṁ sarvasya prabhavo
mattaḥ sarvaṁ pravartate
iti matvā bhajante māṁ
budhā bhāva-samanvitāḥ
(BG 10.8)

“Yo soy el origen de todo”. Al igual que en el Vedānta-sūtra se dice que la Verdad Absoluta es aquella de quien todo nace o todo emana. En el Bhagavad-gītā encontrarán que el Señor dice: ahaṁ sarvasya prabhavaḥ: “Yo soy el origen de todo”.

Por lo tanto, si creen que Kṛṣṇa es el... o la Suprema Personalidad de Dios lo es todo, y si se rinden, si lo adoran, entonces todo el asunto, todo el relato, se cierra en un segundo. Pero si no creen —”Oh, quiero ver lo que realmente es Dios”— entonces tienen que ir por etapas: primera comprensión, esta refulgencia impersonal de Brahman; luego la segunda comprensión, el Paramātmā; y luego, en la tercera etapa, se dan cuenta: “Oh, aquí está la Suprema Personalidad de Dios”. Eso llevará tiempo.

Pero hay que ser constantes. Si uno abandona el trabajo de investigación justo después de dar unos pasos de avance, eso no ayudará. Uno tiene que seguir, seguir adelante con firmeza: “¿Qué es Dios? Ya lo veré”. Eso se llama jñānī, jijñāsu, filósofo, inquisitivo.

Para esos curiosos y filósofos, si continúan su trabajo de investigación, lo que es Dios, entonces pasará un tiempo, y después de muchos, muchos nacimientos, bahūnāṁ janmanām ante, no inmediatamente, sino después de muchos, muchos nacimientos. Bahūnāṁ janmanām ante jñānavān. Jñānavān significa aquellos que están en conocimiento. No tontos, aquellos que están realmente en conocimiento, jñānavān. Jñāna significa conocimiento, y vān significa que uno tiene conocimiento. Se le llama jñānavān. Jñānavān māṁ prapadyate. Al final de su trabajo de investigación, descubren que Kṛṣṇa, la Suprema Personalidad de Dios, es el destino. Él es la raíz de todo.

Y cuando entienden completamente por su investigación filosófica, entonces ¿qué hacen? Vāsudevaḥ sarvam iti. Vāsudeva… otro nombre de Kṛṣṇa, la Suprema Personalidad de Dios es Vāsudeva. Vāsudeva significa “uno que vive en todas partes”. Se llama Vāsudeva. Vāsudevaḥ sarvam iti. Cuando se entiende esto: “Él es el Señor Supremo. Dios es la raíz de todo”, entonces, ¿qué hacen? Māṁ prapadyate; se rinden. Se rinden. Ese proceso de rendición es el objetivo final. O lo hacen de inmediato o lo hacen por trabajos de investigación de muchos, muchos nacimientos, pero el proceso, el objetivo final, es que tienen que rendirse, que: “Eres grande, yo soy Tu subordinado”. Ese es el proceso.

Cualquier hombre inteligente puede hacerlo de inmediato. Si uno entiende que: “En última instancia, tendré que rendirme al Señor Supremo, y el Señor Supremo está aquí, hablando personalmente el Bhagavad-gītā, entonces, ¿por qué no rendirme de inmediato? Si en última instancia, después de muchos, muchos nacimientos, tengo que llegar a este punto, de rendirme, entonces, ¿por qué debería tomarme tantos problemas por muchos, muchos nacimientos? ¿Por qué no de inmediato?”.

Si aceptamos este principio, esta inteligencia, entonces Dios se realiza en un segundo. Pero si no lo hacen, entonces continúan con el trabajo de investigación por muchos, muchos, muchos, muchos nacimientos. Pero tendrán que llegar a este punto. Vāsudevaḥ sarvam iti sa mahātmā. Vāsudeva, el Señor Supremo, la Personalidad de Dios, lo es todo. Él es la raíz. Él es el origen de todo. Janmādy asya yataḥ (SB 1.1.1). El Vedānta-sūtra dice: janmādy asya yataḥ anvayād itarataś ca artheṣu abhijñaḥ svarāṭ. Estas descripciones están ahí.

Aquí lo mismo está siendo presentado por la misma Suprema Personalidad de Dios, por Su misericordia pura, a las almas condicionadas. Todos somos almas condicionadas. Estamos bajo las tres miserias de este mundo material, y el Señor Supremo nos está dando la oportunidad de salir de ello mediante este proceso de entrega. Entonces, si tomamos el proceso de entrega de inmediato, la realización de Dios es un asunto de un segundo. De lo contrario, tendré que continuar con este trabajo de investigación por muchos, muchos, muchos, muchos, muchos nacimientos.

Otra pregunta es... se puede plantear que: “Si la Suprema Personalidad es la meta final, y uno tiene que rendirse a Él, entonces ¿por qué hay tantos procesos diferentes de adoración en el mundo?”. Esta cuestión puede plantearse. Eso se responde aquí, en el siguiente verso:

kāmais tais tair hṛta-jñānāḥ
prapadyante madre-devatāḥ
taṁ taṁ niyamam āsthāya
(BG 7.20)

Hay diferentes tipos de hombres bajo diferentes mezclas de los modos de la naturaleza, y en general, no están dispuestos a la liberación de esta etapa material. Solo quieren obtener algo del poder espiritual. Al igual que alguien que va con un svāmī: “Oh Swāmījī, ¿puede darme un medicamento? Estoy sufriendo de esta enfermedad”. Él piensa: “Un médico es muy caro. Vayamos con un svāmī que pueda hacer el milagro, y mi enfermedad se curará”. Sí.

A veces vamos y ... por supuesto, en su país, tales svāmīs no se encuentran muy fácilmente, pero en la India hay muchos llamados svāmīs, que van con personas inocentes y predican: “Si puedes darme una onza de oro, la puedo convertir en cien onzas de oro”. Oh, la gente piensa que... todos buscan: “¿Cuántas onzas de oro tengo en mi casa?”. Así que todos le traen: “Tengo algo, diez onzas, me puedes dar quinientas onzas”. Y de esta manera el svāmī recoge todo el oro de la aldea, y mientras realiza la ceremonia, desaparece y...

Esta es nuestra enfermedad. Cuando vamos a ver a un svāmī, cuando vamos a un templo, cuando vamos a la iglesia, nuestro corazón está lleno de deseos materiales. Queremos algún beneficio material. Practicamos yoga solo para mantener la salud en forma. Es todo. Eso es todo. Bueno, para mantener su salud, ¿por qué se refugian en el yoga? Oh, se pueden mantener mediante el ejercicio ordinario, mediante dietas reguladas y siguiendo algunas reglas de salud.

No hay necesidad de practicar yoga. Pero la gente es... por kāmais tais tair hṛta-jñānāḥ, ese deseo material: “Quiero mantenerme en forma para disfrutar de la vida. Oh, déjame tomar este yoga, o déjame ir a la iglesia, déjame tener un svāmī como mi maestro espiritual, proveedor de pedidos”. Estas cosas están sucediendo en todo el mundo.

Tal clase de hombres adoran diferentes tipos de dioses con un deseo, con un deseo material. No tienen idea de cómo salir de esta situación. Quieren usar este mundo material a su mejor capacidad. Esa es su idea. Al igual que en… en la literatura védica hay diferentes recomendaciones. “Si quieres curar tu enfermedad, entonces adora al Sol”.

Eso es un hecho. Supongamos que si estás enfermo, simplemente te mantienes al sol, te curarás. Te curarás. Eso es un hecho. De la misma manera, "Si quieres ser hermoso, entonces adora a tal o cual dios. Si quieres un buen aprendizaje, educación, entonces adoras a tal o cual dios".

Hay diferentes tipos de … por eso, a veces se malinterpreta que: “Los hindúes tienen muchos, muchos dioses, no un solo Dios, y son paganos”. Pero en realidad esta adoración no es a Dios, sino que hay semidioses, los semidioses son adorados. No son Dios, Dios es uno, pero son semidioses. Semidioses significa que también son entidades vivientes como ustedes y como yo, pero tienen algo de poder.

Al igual que aquí también adoramos a algunos semidioses, a algún oficial del gobierno. También es un hombre como yo, pero tiene algo de poder, y para aprovechar un poco de ese poder, lo adoro. Quiero su favor. Del mismo modo, este tipo de adoración de diferentes tipos de dioses, el Bhagavad-gītā condena esto. No son obligatorios.

El Señor dice: kāmais tais tair hṛta-jñānāḥ prapadyante anya-devatāḥ. Una persona no se rinde a la Suprema Personalidad de Dios, sino que adora diferentes tipos de dioses. ¿Por qué? Ahora, kāmais tais tair hṛta-jñānāḥ: “Han perdido su sentido por la lujuria, la lujuria material”. Es todo. Porque nuestra vida, esta vida material, se basa simplemente en la lujuria. Queremos disfrutar de este mundo. Amamos este mundo material, porque quiero satisfacer mis sentidos.

Esta lujuria es el reflejo pervertido de mi amor a Dios. En mi constitución original, estoy hecho para amar a Dios, pero porque he olvidado a Dios, por lo tanto, amo la materia. El amor está ahí. El amor está ahí. O aman estos asuntos o aman a Dios, pero no pueden salir de esta propensión amorosa. Como a veces vemos, uno que no tiene hijos, ama a un gato, ama a un perro. ¿Lo ven? ¿Por qué? Porque quiere amar algo. En ausencia de la realidad, pone su fe y amor en los gatos y perros.

El amor está ahí, pero ese amor ahora está representado en forma de lujuria. Y esta lujuria, cuando estamos desconcertados en la lujuria, nos enojamos. Nos enfurece. Y cuando estamos en ira, entonces la siguiente etapa es la ilusión. Y cuando estamos ilusionados, estamos condenados. Este proceso está sucediendo.

Tenemos que revertir el proceso. Kāmais tais tair hṛta-jñānāḥ. No debemos perdernos en los sentidos, influenciados por esta lujuria material. Tenemos que revertirnos a nosotros mismos, tenemos que rectificar la lujuria y convertirla en amor. Y si amamos a Dios, entonces amamos todo. Y sin amar a Dios, si queremos amar otra cosa, eso es una tontería. No pueden amar. Por eso, encontramos prácticamente que hay tanto amor entre un muchacho y una muchacha, y justo después de dos años, oh, el divorcio: “Vete al infierno”. Porque no hay amor. Es simplemente lujuria.

No sabemos qué es el amor. Simplemente estás jugando con la lujuria, y la lujuria, tan pronto como no satisface sus sentidos, sino hay satisfacción, entonces hay ira, o krodha, cólera. Y luego ilusión. Entonces, por ira ... se separa de mí, yo me separo de usted. Así que básicamente no hay amor.

Estas personas que se han convertido en los muñecos de juego de esta lujuria, se les llama “aquellos que han perdido su buen sentido”. Kāmais tais tair hṛta-jñānāḥ. Hṛta-jñānaḥ significa: “Aquel que ha perdido su buen sentido”. Quieren adorar esto o aquello o esto o aquello, esto o aquello. Pero taṁ taṁ niyamam āsthāya prakṛtyā niyatāḥ svayā. Hay reglas y regulaciones. En las Escrituras, para adorar a muchos otros semidioses hay reglas y regulaciones.

Entonces, ¿por qué? Pueden preguntarse: “¿Por qué la literatura védica recomienda la adoración de otros semidioses?” Hay necesidad. Hay necesidad, porque la gente es... en general, quiere amar algo, por lo que se les da alguna oportunidad. Estos semidioses son tratados como diferentes oficiales del Señor Supremo. Al igual que el gobierno tiene muchos funcionarios en diferentes ramas de la administración, de manera similar … los que no saben, eso es otra cosa. Del mismo modo, para este mundo material, hay diferentes directores, gerentes. Ahora, al igual que Indra, está controlando la nube. Candra, él está controlando esta luz. Sūrya, él está controlando el calor.

Todos ellos son oficiales del gobierno, u oficiales de Kṛṣṇa. En realidad, están actuando. Simplemente, nos alejamos: “Oh, esta es la naturaleza. Esto es naturaleza, naturaleza”. Oh, la naturaleza no es el sirviente de mi padre. También está el padre de la naturaleza, el maestro de la naturaleza también. Encontrarán en el Bhagavad-gītā: mayādhyakṣeṇa prakṛtiḥ sūyate sa-carācaram (BG 9.10).

Oh, hay normas. Hay reglas y regulaciones para llevar a cabo esta naturaleza de la manera correcta. Estos semidioses, son algunos oficiales poderosos. Es todo. Pero no son Dios. Dios es uno. Pueden convertirse en... si se vuelven muy poderosos, cualificados, entonces pueden convertirse en el regente del planeta Sol. Pueden convertirse en el regente del planeta Luna. Hay innumerables, miles y millones de planetas, y son... al igual que aquí también, seleccionan un presidente para controlar su país, o cualquier otro país, o uno se convierte en el controlador de toda la Tierra, de manera similar, hay diferentes controladores. Se les llama semidioses.

Kāmais tais tair hṛta-jñānāḥ. Adorar a los semidioses significa que gradualmente, gradualmente se convertirá en conciencia de Kṛṣṇa. Si ustedes... si uno es completamente desobediente, entonces no hay posibilidad. La obediencia se enseña allí. Al igual que un oficial de policía, está parado en la intersección. Tan pronto como muestre su mano, oh, tienen que parar. Pueden ser millonarios, eso no importa, pero tienen que mostrar respeto al policía porque es un oficial del gobierno. Si no lo hacen, entonces serán multados. Si es un suboficial, su posición puede no ser muy alta. Eso no importa. Hay que mostrar respeto. Del mismo modo, estos semidioses, son oficiales del Señor Supremo.

Por lo tanto, mostrar respeto al agente en la calle significa mostrar respeto al gobierno, no a esa persona en particular. Estas cosas están ahí en las literaturas védicas. Pero si quieren algún favor del oficial de policía, entonces también se están enredando, y ese oficial de policía también se está enredando. Tienen que seguir las reglas. Pero uno que está directamente en contacto con el Señor Supremo, no requiere adorar a ningún otro…

Porque en realidad... supongamos que un hombre está personalmente en contacto con su presidente. Eso no significa que desobedecerá al policía. No. Naturalmente obedecerá, aunque tenga contacto directo. Del mismo modo, aquellos que están en contacto directo con la Suprema Personalidad de Dios, no tienen desprecio por estos semidioses, pero saben que el poder supremo lo tiene la Suprema Personalidad de Dios. Tienen ese conocimiento. Su rendición está allí en el Señor Supremo, no aquí. Pero no van a mostrar ninguna falta de respeto.

Un verdadero devoto, no muestra ninguna falta de respeto ni siquiera a la hormiga, y ni hablar de los semidioses, porque sabe que: “Toda entidad viviente es parte integral del Señor Supremo. Son sus diferentes partes solamente. En relación con el Señor Supremo todos son respetables”. Por lo tanto, a un devoto se le enseña a dirigirse a todos sus contemporáneos como prabhu: “Mi querido señor, mi querido señor”. Esa es la posición en la conciencia de Kṛṣṇa. No son altivos. Son muy sumisos.

Hay seis… veintiséis cualificaciones de un devoto real del Señor. Son muy amables. Son muy obedientes. Son sobrios, equitativos, todo, tienen todas las buenas cualidades. Yasyāsti bhaktir bhagavaty akiñcanā sarvair guṇais tatra samāsate surāḥ (SB 5.18.12).

Uno, si se convierte en devoto del Señor, todas las buenas cualidades se desarrollarán automáticamente, porque él es bueno. Por naturaleza, una entidad viviente es perfectamente bueno, pero debido a la contaminación de la lujuria, se ha vuelto vicioso. Se ha vuelto vicioso. Por naturaleza no es vicioso, es perfecto. Porque él es parte integrante del oro, es oro. Al cubrirse externamente se ha convertido en algo sin sentido.

Este es el proceso. Estamos tratando de introducir en la sociedad moderna la conciencia de Kṛṣṇa, y eso nos hará perfectos, felices, y después de dejar este cuerpo entraremos en el reino de Dios, donde hay vida eterna, bienaventuranza y pleno conocimiento.

Muchas gracias. Si hay alguna pregunta que quieran hacer... (fin)