ES/680619 - Clase BG 04.09 - Montreal

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



680619BG-Montreal, 19 junio 1968 - 51:49 minutos



Prabhupāda:

om ajñāna-timirāndhasya jñānāñjana-śalākayā
cakṣur-unmīlitaṁ yena tasmai śrī-gurave namaḥ
śrī-caitanya-mano-'bhīṣṭaṁ
sthāpitaṁ yena bhū-tale
svayaṁ rūpaḥ kadā mahyaṁ
dadāti sva-padāntikam
vande 'haṁ śrī-guroḥ śrī-yuta-pada-kamalaṁ śrī-gurūn vaiṣṇavāṁś ca
śrī-rūpaṁ sāgrajātaṁ saha-gaṇa-raghunāthānvitaṁ taṁ sa-jīvam
sādvaitaṁ sāvadhūtaṁ parijana-sahitaṁ kṛṣṇa-caitanya-devaṁ
śrī-rādhā-kṛṣṇa-pādān saha-gaṇa-lalitā-śrī-viśākhānvitāṁś ca
he kṛṣṇa karuṇā-sindho
dīna-bandho jagat-pate
gopeśa gopikā-kānta
rādhā-kānta namo 'stu te
janma karma (ca) me divyam
evaṁ yo vetti tattvataḥ tyaktvā
dehaṁ punar janma naiti
mām eti kaunteya
(BG 4.9)

Kṛṣṇa está explicando cómo uno puede entrar muy fácilmente en el mundo espiritual o el Reino de Dios. La sencilla fórmula es que quien entiende la aparición, la desaparición y las actividades del Señor como divyam, trascendentales, con perfecto conocimiento de la Verdad Absoluta... Simplemente por esta comprensión uno puede inmediatamente entrar en el reino espiritual.

Conocer la Verdad Absoluta no es posible por medio de nuestros sentidos actuales. Esto es también otro hecho. Porque en este momento estamos materialmente afectados... No los sentidos materiales. Nuestros sentidos son originalmente espirituales, pero están cubiertos por la contaminación material. Por lo tanto, el proceso consiste en purificarlos, purificar la cobertura de nuestra existencia material. Y eso también se recomienda simplemente mediante una actitud de servicio. Sevonmukhe hi jihvādau svayam eva sphuraty adaḥ (Bhakti-rasāmṛta-sindhu 1.2.234). Todo depende de nuestro proceso de entrega y de ocuparnos en el servicio del Señor. Luego poco a poco, el Señor Se revela al devoto. Este es el proceso.

¿Qué es el nacimiento del Señor? No se trata del nacimiento del Señor o de las entidades vivientes. Este tema ya lo hemos hablado en la última reunión, que el Señor y las entidades vivientes, ambos son eternos. No se trata del nacimiento y la muerte.

El mismo ejemplo, tal como el Sol. La puesta del Sol y la salida del Sol. (alguien arregla la grabadora-larga pausa) La puesta del Sol y la salida del Sol aumentan, es simplemente un ajuste de nuestra propia posición. En realidad, no hay ni puesta del Sol, ni salida del Sol. El mismo ejemplo es aplicable a nuestra aparición y desaparición, así como a la aparición y la desaparición de Dios. Somos eternos. Existimos eternamente, pero la aparición significa de este cuerpo, la aparición de este cuerpo.

La diferencia entre la aparición de Dios y de mi aparición es que yo aparezco en distintos cuerpos, según me ofrece la naturaleza material, de acuerdo con mi karma y Dios aparece en Su cuerpo original. Esa es la diferencia. Y porque Dios aparece en Su propio cuerpo original, no olvida el pasado, el presente y el futuro. Y en lo que a nosotros se refiere, debido a que aparecemos en diferentes cuerpos materiales, olvidamos nuestro pasado, presente y futuro. Esta es la diferencia. Y en este verso se menciona aquí específicamente que janma karma me divyam (BG 4.9). Divyam significa divino, espiritual, trascendental. Nuestra aparición y desaparición es diferente de la aparición y desaparición del Señor.

Uno tiene que aprender este tema. Y ¿cómo se puede aprender? Simplemente mediante una actitud de servicio. Sevonmukhe. No podemos aprender este tema trascendental mediante el desafío. Si somos sumisos, si estamos ocupados en Su servicio, entonces, por Su Divina Gracia, Él se revela a Sí Mismo. Todo conocimiento del Señor es revelación. Por nuestro conocimiento experimental no podemos entender lo que es Dios. Ataḥ śrī-kṛṣṇa-nāmādi na bhaved grāhyam indriyaiḥ (CC Madhya 17.136). Nuestros sentidos están ahora contaminados materialmente, por lo tanto, no podemos entender lo que es Dios, qué es Su aparición, ni qué es Su desaparición. Esto no es posible. Todo consiste en aceptar el proceso purificador de los sentidos. Sarvopādhi-vinirmuktaṁ tat-paratvena nirmalam (CC Madhya 19.170).

Uno tiene que ser purificado por liberarse de todas las designaciones. Este es el primer paso. Estamos ahora bajo diversas designaciones. Cada uno de nosotros está pensando que: “Soy este cuerpo y porque yo soy este cuerpo y este cuerpo se produce bajo ciertas condiciones, en una cierta familia por cierto padre y madre, en una cierta sociedad, en un determinado país, una cierta tierra, por lo tanto tengo, tienen tantas designaciones”. Pero tenemos que volvernos, ante todo, libres de las designaciones. Esta es la primera calificación para entender la ciencia de Dios. Tenemos que volvernos libres de todas las designaciones.

Y ¿cómo uno puede llegar a ser libre? Esto es la conciencia de Kṛṣṇa. Yo no soy ni de India, ni soy americano, ni soy blanco, ni soy negro, ni soy cristiano, ni soy hindú, ni mahometano. Caitanya Mahāprabhu se describió a Sí Mismo como sigue. Él dijo: “Yo no soy un brāhmaṇa, no soy un kṣatriya, no soy un vaiśya, no soy un śūdra, no soy un brahmacārī, no soy un cabeza de familia, no soy un vānaprastha, o no soy un sannyāsī en la orden de renuncia”. Entonces ¿qué eres? Caitanya Mahāprabhu dijo: gopī-bhartuḥ pada-kamalayor dāsa-dāsānudāsaḥ (CC Madhya 13.80): “Yo soy el sirviente del sirviente del sirviente del sirviente de Kṛṣṇa”. Esta debe ser mi verdadera identificación. Esta es una identificación muy buena. En la conciencia de Kṛṣṇa nos dirigimos a nuestros contemporáneos como “prabhu”. Prabhu significa amo. Y la verdadera idea es que “tú eres mi amo, yo soy tu sirviente”. Exactamente todo lo contrario. Aquí, en el mundo material, todo el mundo quiere situarse a sí mismo como el amo. “Yo soy tu amo, tú eres mi sirviente”. Esa es la mentalidad de la existencia material. Y la existencia espiritual significa “yo soy el sirviente, tu eres el amo”. Ahí ven. Exactamente todo lo contrario.

La atracción de māyā, la última trampa de māyā está en esta concepción material de la vida, que tantas identificaciones: “Yo soy esto, yo soy eso, soy aquello, soy un hombre grande, soy rico, “soy primer ministro, etcétera, etcétera. Cuando nos sentimos frustrados en todos estos intentos, entonces tratamos de ser Dios. Yo soy Dios. Esta es la última trampa de māyā. Pero esta filosofía de la conciencia de Kṛṣṇa es todo lo contrario. ¿Qué decir de Dios? Uno tiene que pensar de sí mismo como el sirviente del sirviente del sirviente del sirviente del sirviente de Dios.

De una manera es muy difícil. Por consiguiente, Caitanya Mahāprabhu indica que ¿quién puede llegar a ser consciente de Kṛṣṇa? Kīrtanīyaḥ sadā hariḥ (CC Adi 17.31). ¿Quién puede cantar Hare Kṛṣṇa muy bien? Tṛṇād api sunīcena. Tṛṇād api sunīcena significa aquel que se siente más bajo que la hojarasca en la calle, yo soy inferior. Humilde, muy humilde. Tṛṇād api sunīcena taror api sahiṣṇunā. Más tolerante que un árbol.

Saben que los árboles son muy tolerantes. Les están dando refugio, les están dando sombra, y les están dando protección de las aves (?) y tantas cosas, les dan frutos. Toman la madera, las hojas, las flores, pero los árboles no protestan. Ellos están de pie en silencio. Por lo tanto, son muy tolerantes. El ejemplo de la tolerancia son los árboles. Así que Caitanya Mahāprabhu dijo que uno tiene que ser más humilde que la hierba o la hojarasca en la calle, más tolerante que un árbol y amāninā, y rechazar todo tipo de alusiones respetuosas de los demás, pero ofreciendo todo el respeto a los demás. No está dispuesto a aceptar ningún respeto de los demás, pero está dispuesto a dar todo el respeto a los demás.

Así se explican todas estas cosas. Significa en otras palabras que me niego totalmente a ser cualquier cosa de este mundo material. Supongamos que alguien me insulta: “Usted es un sinvergüenza. Usted es tal y tal”. Pero si yo sé que (no) soy este cuerpo, que no tengo nada que ver con este cuerpo, entonces pueden llamarme “sinvergüenza” o “Su Señoría”, es lo mismo para mí, porque yo no soy este cuerpo.

Un hombre se llama... Es licenciado, con maestría o doctorado, Ph.D. ¿Qué es este doctorado, Ph.D., o maestría? Es la designación de este cuerpo. Tan pronto como el cuerpo se acaba mis designaciones, todas mis maestrías, Ph.D. se acaban. Entonces tengo que aceptar otro cuerpo. No sé qué clase de cuerpo voy a tener que aceptar. No se trata de aceptar. Qué tipo de cuerpo va a ser impuesto por la naturaleza. Prakṛteḥ kriyamāṇāni guṇaiḥ karmāṇi sarvaśaḥ (BG 3.27). La naturaleza está obligándoles a aceptar cierto tipo de cuerpo. Hay un buen gobierno, prakṛti, el gobierno de la naturaleza. No pueden rechazarlo.

Existen 8.400.000 diferentes tipos de cuerpos, especies de cuerpos. Y por nuestras actividades, tal como preparemos nuestra mentalidad en el último momento de nuestra muerte, entonces obtenemos un cuerpo similar. Llevamos la mente, la mente es el cuerpo sutil. Así pues, la mentalidad me lleva a una cierta posición en el vientre de una madre, en donde consigo estos ingredientes materiales burdos suministros y de nuevo desarrollo un cierto tipo de cuerpo y salgo del vientre de la madre y empiezo a actuar según ese cuerpo. Este es el proceso.

Uno tiene que aprender este movimiento de conciencia de Kṛṣṇa muy cuidadosamente. Es muy bueno y muy científico. Y si simplemente tratamos de entender mi posición, tratamos de entender a Dios y cuál es mi relación con Dios, janma karma me divyam, simplemente mediante la comprensión de esto me vuelvo cualificado para entrar en el reino espiritual. Y en cuanto entro en el reino espiritual, entonces, tal como se dice en este verso, tyaktvā deham, después de abandonar este cuerpo, tyaktvā dehaṁ punar janma... (BG 4.9). Punar janma significa de nuevo nacer en este mundo material. Na eti, na, nunca más. Esta continuada repetición de aceptar diferentes tipos de cuerpos, se acaba simplemente mediante la comprensión de lo que es Dios, cómo aparece, cómo desaparece y cuáles son Sus actividades. Simplemente por esta comprensión. Tyaktvā dehaṁ punar janma naiti mām eti kaunteya (BG 4.9), o so 'rjuna. Él viene a Mí. Y en otro lugar se dice lo mismo, mām upetya tu kaunteya: “Uno que viene a Mí”, mām upetya tu kaunteya duḥkhālayam aśāśvatam (BG 8.15), nāpnuvanti: “Aquel que viene de vuelta a Mí, va de vuelta al hogar, que vuelve a Dios, nunca vuelve otra vez a esta miserable vida condicionada de condición materialista”.

Mām upetya tu kaunteya duḥkhālayam... Y esta existencia material es duḥkhālayam, es un lugar de miserias. Esto es māyā. Estamos viviendo en esta condición, esta vida condicionada de la existencia material, que está llena de miserias, pero por el hechizo de māyā, la ilusión, estamos pensando, estamos planeando que somos felices. Esto se llama māyā. Māyā significa... Ya he explicado varias veces lo que se entiende por māyā. Māyā significa “lo que no es”. Estoy pensando que estoy haciendo progreso, estoy pensando que soy feliz, estoy pensando que soy civilizado, que soy avanzado. Pero māyā significa que esta forma de pensar, de manera positiva, no es correcta. No, no son avanzados, no son civilizados, no son realmente sabios porque no saben lo que son. Piensan que son este cuerpo. Por lo tanto, todo, todo lo que están pensando, eso es todo nulo y vacío. Māyā. Esto se llama māyā. Esta māyā es muy fuerte.

Es muy difícil de superar esta māyā, pero la fórmula es muy simple. Esto también se indica en el Séptimo Capítulo del Bhagavad-gītā: daivī hy eṣā guṇamayī mama māyā duratyayā (BG 7.14). Esta māyā, esta ilusión es muy fuerte de vencer o superar. No es fácil. Māyā está capturándoles de tantas maneras. Tal como, el último momento, en el último momento, cuando son muy sabios, entienden su posición espiritual, ahaṁ brahmāsmi: “Yo soy Brahman, no soy materia. Yo no soy materia, soy alma espiritual”. Pero incluso en esta etapa, que “yo soy Brahman”, existe una acción de māyā. ¿Cuál es la acción de māyā? Por darse cuenta uno mismo de que: “Yo soy Brahman”, están pensando que “yo soy el Supremo Brahman”. Eso significa que están todavía en la ignorancia. Aún en la ignorancia. No son el Supremo Brahman.

Por lo tanto, el Bhagavad-gītā está explicando muy bien: brahma-bhūtaḥ prasannātmā (BG 18.54). Lo primero es cuando comprenden realmente el Brahman, o han comprendido su identificación que no son materia, que son espíritu, el primer síntoma es prasannātmā, se vuelvan inmediatamente gozosos, sin ninguna ansiedad. Brahma-bhūtaḥ prasannātmā na śocati na kāṅkṣati (BG 18.54). No hay ninguna lamentación, no hay ningún anhelo.

Samaḥ sarveṣu bhūteṣu, y ven a cada entidad viviente en igual nivel porque tienen visión espiritual. No se ve el cuerpo, se ve el espíritu. No se ve un perro, se ve que: “Oh, hay un alma espiritual”. Él no ve un brāhmaṇa, él ve, “Oh, es la misma alma espiritual”. Él no ve un americano, ve el alma espiritual. Él no ve un indio, ve el alma espiritual. Por lo tanto, paṇḍitāḥ sama-darśinaḥ (BG 5.18). Paṇḍitāḥ, aquellos que realmente son eruditos están viendo a todos con la misma visión, la visión espiritual. Esto es la realización del Brahman.

La realización del Brahman no significa que “mi hermano es Brahman y yo soy Brahman, y todos los demás no son Brahman”. Esto no es la realización del Brahman. La realización del Brahman significa que analiza la existencia espiritual de todas las entidades vivientes. Eso es la realización del Brahman. Samaḥ sarveṣu bhūteṣu. Entonces esa unidad no es todavía suficiente. Significa que tienen que ocuparse en actividades del Brahman. Esa es la perfección. Por lo tanto, se dice que samaḥ sarveṣu bhūteṣu mad-bhaktiṁ labhate parām (BG 18.54). Después de esta realización del Brahman, comienza el verdadero servicio devocional. La realización del Brahman significa que “yo soy un alma espiritual y el Señor es el Espíritu Supremo”. Nityo nityānāṁ cetanaś cetanānām (Kaṭha Upaniṣad 2.2.13).

Él es el Supremo Espíritu, la principal entidad viviente, y nosotros somos innumerables, sin número. Asaṅkhya. Las entidades vivientes son innumerables. Esto se expresan en la literatura védica. Se utiliza esta misma palabra, asaṅkhya. Asaṅkhya significa sin ninguna estimación numérica. Y Dios es uno. Dios es uno, pero las entidades vivientes son muchas. Nityo nityānāṁ cetanaś cetanānām. Eko bahūnāṁ yo vidadhāti kāmān. Ese uno es el Uno Supremo que está suministrando todas las necesidades de las entidades vivientes.

Del mismo modo, como tienen en la Biblia, oran en la iglesia: “Oh Dios, danos nuestro pan de cada día. Perdona nuestras faltas”. Porque Él es el principal. Él está suministrando las necesidades, Él está dando protección, Él les está dando todo. Necesitan luz solar. Dios ha creado la luz del Sol para ustedes. Necesitan agua, Dios ha creado inmensa cantidad de agua para ustedes. Necesitan aire, existe una cantidad inmensa de aire para ustedes. Así que Él está ayudándoles prácticamente. Eko bahūnāṁ yo vidadhāti kāmān. Ese uno está suministrando todo lo que necesitamos.

Usted puede pensar que tienen que mejorar sus condiciones económicas, pero realmente la situación económica, lo que tienen que disfrutar, ya está allí. No tienen que esforzarse. ¿Lo ven? Aquellos que no son seres humanos, los animales, los pájaros, las bestias y los gusanos, los árboles, no tienen ningún problema económico. Yo veo en India a los gorriones están cantando y bailando y comiendo. Aquí también veo a los mismos gorriones. No tienen ningún problema económico porque dependen totalmente de ley de la naturaleza. Y porque nosotros hemos violado las leyes de la naturaleza, tenemos problemas económicos. Nosotros hemos creado nuestro problema económico.

Toda la filosofía es consciente de Kṛṣṇa. Si todo el mundo, no todo el mundo, incluso un cierto porcentaje de la población se vuelve consciente de Kṛṣṇa, la faz del mundo cambia. Simplemente por entender, como se dice aquí, janma karma me divyam (BG 4.9). Karma. Sus actividades.

Ahí lo ven. Él ha creado el Sol, ha creado la Luna, lo ha creado todo. ¿Cómo reclamamos que este planeta nos pertenece? Se nos ha dado para vivir. Eso es todo. Porque somos hijos de Dios, por lo tanto, tenemos derecho a disfrutar de la propiedad de Dios. Esta es la verdadera paz. Somos... Tal como el hijo de un hombre rico tiene el derecho, quiero decir, de disfrutar de la propiedad del padre... Pero si desobedece, si se vuelve desobediente al padre, tiene problemas. Nuestra posición es así misma. No entendemos lo que es Dios, qué somos, cuál es nuestra relación con Dios, qué es esta naturaleza material, cómo está actuando. Estas cosas son realmente conocimiento.

Uno debe saber. El Īśopaniṣad explica muy bien: īśāvāsyam idaṁ sarvam (ISO mantra 1), todo, lo que están viendo, todo pertenece a Dios. No lo reclamen para sí mismos. Del mismo modo, el Bhagavad-gītā también dice: bhoktāraṁ yajña-tapasāṁ sarva-loka-maheśvaram: “Yo soy el propietario de todos los planetas”. Así que este planeta particular también es propiedad de Dios. En realidad, es propiedad de Dios. Nosotros vamos y venimos, pero la propiedad permanece ahí. Es algo muy simple. Así que si no aceptamos que Dios es el propietario último de todo... Esto es el comunismo espiritual. Y todas las entidades vivientes son Sus hijos. Todo el mundo tiene derecho a vivir a costa de Dios. Nadie debe usurpar la propiedad de otros. Este es el sistema. Tena tyaktena bhuñjīthā (ISO mantra 1). Simplemente traten de disfrutar lo que se les asigna a ustedes. Dios les ha dado una cierta porción de tierra. “Los estadounidenses, está bien, tienen esta tierra. Sean felices. No invadan a otros”. “Ustedes, la gente de India, está bien, vuélvanse felices aquí”. De esta manera tenemos que pensar. Esto es la conciencia de Kṛṣṇa.

La conciencia de Kṛṣṇa no es nada, quiero decir, extraordinario. Simplemente pensar en todo con respecto a Kṛṣṇa. Eso es la conciencia de Kṛṣṇa. Nirbandhaḥ kṛṣṇa-sambandhe yuktaṁ vairāgyam ucyate. En el Bhakti-rasāmṛta-sindhu, Śrī Rūpa Gosvāmī dice que vinculen todo con Kṛṣṇa. Entonces serán libres, serán libres. Vincúlenlo todo. Tal como aquí en la sociedad de la conciencia de Kṛṣṇa, ¿qué estamos haciendo? Nosotros estamos vinculando todo con Kṛṣṇa.

Así como aquí hay un dictáfono. Lo estamos utilizando, lo que está bien, pero ¿cómo lo estamos utilizando? Estamos grabando conversaciones acerca de Kṛṣṇa. Este apartamento, este... Se utiliza para Kṛṣṇa. Este cuerpo está siendo utilizado para Kṛṣṇa. Estamos preparando alimentos para Kṛṣṇa. De esta manera, si desarrollan su conciencia en contacto con Kṛṣṇa, eso se llama conciencia de Kṛṣṇa.

No es nada artificial, que estoy pensando, meditando: “Yo soy el Señor Supremo y estoy moviendo el Sol, estoy moviendo el...”. Estas cosas ridículas están sucediendo, la meditación. Pensando artificialmente que “estoy moviendo el Sol, estoy moviendo la Luna, yo soy el Señor. Yo soy el...”. Simplemente perdiendo el tiempo. Simplemente traten de comprenderse a sí mismos como eternos sirvientes de Dios. Entonces serán perfectos. Y podrán disfrutar muy bien de la propiedad de Dios. No habrá ninguna aflicción en absoluto. Los animales inferiores, las aves, las bestias, están disfrutando, y ustedes los seres humanos, ¿no van a poder disfrutar? ¿Están luchando los unos con los otros? ¿Qué es esto? ¿Es esto el progreso? ¿Es esto civilización?

El Bhāgavata dice: harāv abhaktasya kuto mahad-guṇāḥ. Cualquier persona que no está en la conciencia de Kṛṣṇa, ¿qué cualificación, buena calificación puede tener? Esto significa que no tiene ninguna buena calificación. ¿Por qué? Él ha pasado el examen de maestría, él es un gran científico, tiene muy buena cualificación. El Bhāgavata dice: no. ¿Por qué? Mano-rathenāsati dhāvato bahiḥ. Porque se encuentra en la plataforma mental, por lo tanto es un gran científico, ha descubierto la bomba atómica, la bomba atómica. ¿Qué es eso? Matanzas a gran escala. Y él está orgulloso de su conocimiento científico. Mano-rathena. Mano-rathena significa que está rondando en el plano mental, que: “Esto creará cosas maravillosas”. Pero “cosas maravillosas” significa, que todo el mundo tiene miedo, “¡Oh, es la bomba atómica! Él la ha creado”. ¿Por qué? Porque él no es un devoto. No está en la conciencia de Kṛṣṇa. Si hubiera estado en la conciencia de Kṛṣṇa, lo hubiera pensado antes: “¿Oh, estoy creando un arma tan peligrosa? ¿Va a matar a tantas personas inocentes?”. Porque es, harāv abhaktasya kuto mahad-guṇāḥ. Por lo tanto, el Bhāgavata dice, un hombre que no está en la conciencia de Kṛṣṇa, no puede tener ninguna buena cualificación. Esto es un hecho.

Yasyāsti bhaktir bhagavaty akiñcanā sarvair guṇais tatra samāsate surāḥ (SB 5.18.12). Y aquel que tiene una fe inquebrantable en Dios, tiene todas las buenas cualificaciones de los semidioses. Hay muchos ejemplos. Lo ven. En su mayoría, ustedes son cristianos, y lo saben. El Señor Jesucristo, cuando estaba siendo crucificado, él estaba rogando: “Mi Señor, estos tontos no saben lo que están haciendo. Por favor perdónales”. Simplemente vean cuán cualificado era. Porque es un devoto de Dios.

La conciencia de Kṛṣṇa es tan buena, tan perfecta, que si la adoptan en su vida práctica se vuelven inmediatamente perfectos en esta vida. Tal como se dice aquí, tyaktvā dehaṁ punar janma naiti (BG 4.9). Simplemente comprendan. Tienen tiempo suficiente. Son todos hombres jóvenes, muchachas jóvenes. Por favor, traten de entender la ciencia de la conciencia de Kṛṣṇa y su vida será perfecta. Tan perfecta, que después de dejar este cuerpo, tyaktvā deham, este cuerpo, punar janma naiti, no habrá más nacimiento en esta miserable condición de la existencia material. Entonces ¿cuál será el resultado? Tyaktvā dehaṁ punar janma naiti mām eti (BG 4.9): “Él viene a Mí”. Así que es muy fácil acabar con todos los problemas de la vida en este corto período de nuestra vida. Simplemente entender a Kṛṣṇa.

Muchas gracias. (cortado)

Invitado: ... (inaudible) de realizar.

Prabhupāda: En otras palabras, aquel que se ocupa realmente en servicio devocional, ya ha realizado brahma-sukha. Eso significa que... Tal como a un hombre al que se le ofrece: “Si se vuelve un juez del alto tribunal, obtendrá $4.000, o $15.000 de salario por mes”. Pero si uno está recibiendo $16.000 por mes, eso significa que ya se ha vuelto juez del alto tribunal, de una manera diferente. Eso significa que aquel que está seriamente ocupado en servicio devocional, ya ha realizado el Brahman. Ya está en el plano del Brahman.

Esto también se confirma en el Bhagavad-gītā: māṁ ca yo 'vyabhicāreṇa bhakti-yogena sevate (BG 14.26). Si alguien está seriamente ocupado en el servicio devocional, avyabhicāreṇa, sin ningún defecto... Eso significa según las reglas y regulaciones que se mencionan. Las reglas y regulaciones se requieren mientras no desarrollamos ese amor por Dios. Cuando realmente uno desarrolla amor por Dios, ya no hay cuestión de reglas y regulaciones. Automáticamente obedece todas las reglas y regulaciones.

Aquel que está seriamente ocupado en servicio devocional, māṁ ca yo 'vyabhicāreṇa bhakti-yogena sevate sa guṇān samatītyaitān (BG 14.26). Él ya es trascendental a las reacciones de las diferentes modalidades de la naturaleza material. Ya lo es. Brahma-bhūyāya kalpate. Por lo que debe de entenderse que ya es Brahman realizado. No es que tienen que... Esto es lo espiritual. Material, supongamos que si tienen que aceptar el cargo de magistrado del Tribunal Supremo, entonces tendrán que cualificarse poco a poco. Pero espiritualmente, si se ocupan inmediatamente en el servicio del Señor, se vuelven un juez del Tribunal Supremo inmediatamente. Son brahma-bhūtaḥ. Esa es la diferencia entre la materia y el espíritu. Es incondicional. Ahaituky apratihatā.

Simplemente tenemos que estar de acuerdo: “Mi Señor, desde hoy, dedico mi vida a Tu servicio”, son inmediatamente brahma-bhūtaḥ. Inmediatamente, a partir de ese momento. Es algo tan bueno. No es que deban esperar algún tiempo para volverse brahma-bhūtaḥ. Aquellos que realmente están ocupados en el servicio devocional espiritual del Señor, debe entenderse que ya están en el plano de la etapa de brahma-bhūtaḥ. ¿Está claro? Sí. (Cortado) ¿Pregunta? ¿Pregunta? ¿Sí? No (kīrtana) (fin)