ES/690114 - Clase BG 04.39-42 - Los Angeles

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



690114BG - Los Ángeles, 14 enero 1969 - 56:14 minutos



Prabhupāda: (al lado) ...los devotos reunidos.

Revatīnandana: Capítulo Cuatro, verso treinta y nueve... (inaudible)

Prabhupāda: ¿Página?

Revatīnandana: Ciento treinta y uno. “Un hombre fiel que se consagra al conocimiento trascendental y que subyuga los sentidos es merecedor de obtener ese conocimiento, y al adquirirlo, encuentra rápidamente la suprema paz espiritual” (BG 4.39).

Significado: “Ese conocimiento en estado de conciencia de Kṛṣṇa puede adquirirlo una persona fiel que cree firmemente en Kṛṣṇa. Se dice que uno es fiel cuando piensa que simplemente por actuar con conciencia de Kṛṣṇa puede lograr la máxima perfección”.

Prabhupāda: Sí. La fe... hay diferentes tipos de fe, pero en la conciencia de Kṛṣṇa, la condición preliminar de la fe es creer que simplemente sirviendo a Kṛṣṇa, todo estará completo. Kṛṣṇe... hay un verso en...

(al lado) No está funcionando.

En el Caitanya-caritāmṛta hay un verso:

śraddhā śabde viśvāsa kahe sudṛḍha niścaya
kṛṣṇe bhakti kaile sarva-karma kṛta haya
(CC Madhya 22.62)

Hay diferentes tipos de actividades —karma, jñāna, yoga, especialmente. Todo, todas las actividades, se agrupan bajo tres categorías. Una es karma, actividades fruitivas. La gente trabaja para obtener algún resultado deseado para la gratificación de los sentidos. Eso es en general. Todo el mundo trabaja para conseguir algo de dinero, y el dinero significa satisfacer mis sentidos, mis demandas de los sentidos. Esto se llama “karma”.

Entonces, de entre muchos millones de tales karmīs, o trabajadores, uno es jñānī, o un hombre con conocimiento. Cuando un hombre llega a la plataforma del conocimiento, cuando se frustra por trabajar duro y probar todos los resultados del karma, cuando uno no está satisfecho, entonces llega a la plataforma del conocimiento. Conocimiento significa indagación: “¿Qué soy? ¿Por qué estoy frustrado? ¿Por qué estoy confundido? ¿Cuál es mi posición?”. Esa es la plataforma del conocimiento.

De muchos miles de esas personas que han alcanzado el conocimiento realmente, que han entendido cuál es la posición de estas entidades vivientes, brahma-bhūtaḥ, se les llama liberados. Y de entre muchos miles de esas personas liberadas, una puede comprender qué es Kṛṣṇa. Esta es la posición.

Entender este hecho, que simplemente comprometiéndose en las actividades de la conciencia de Kṛṣṇa todo se logra completamente, esto se llama fe. Fe, fe fuerte, fe inquebrantable. Esa es la última instrucción del Bhagavad-gītā. Sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja (BG 18.66):

“Abandona todo otro compromiso. Simplemente entrégate a Mí”. Eso es conocimiento. Uno que ha alcanzado este conocimiento... ahora, este es el comienzo. Este es el peldaño en la conciencia de Kṛṣṇa, que simplemente... uno que está firmemente convencido de que: “Simplemente ejecutando los deberes en la conciencia de Kṛṣṇa, todas los demás deberes se harán bien”.

Uno tiene que entender, no hay que aceptarlo a ciegas, no se impone a nadie. Por eso el Bhagavad-gītā está ahí. Pruébenlo, compréndanlo escrupulosamente, con todos sus argumentos, y verán que es sublime. Es sublime.

“Un hombre fiel que está absorto en el conocimiento trascendental”.... Este es el conocimiento trascendental que: “Simplemente cumpliendo mis deberes en la conciencia de Kṛṣṇa, todos los demás deberes serán realizados”. Significa que seré perfecto en las actividades fruitivas, seré perfecto en el conocimiento, seré perfecto en el avance místico y seré perfecto para comprender la Verdad Absoluta. Esto se llama fe firme e inquebrantable.

Fe... No me refiero a la fe ciega. Este Bhagavad-gītā no es fe ciega. Todo se explica paso a paso, científicamente, con autoridad. Traten de entender. Y si afortunadamente se vuelven fieles, entonces sus vidas son exitosas.

Continúa.

Revatīnandana: “Esta fe se adquiere por medio del desempeño del servicio devocional y del canto de Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, Kṛṣṇa Kṛṣṇa, Hare Hare/ Hare Rāma, Hare Rāma, Rāma Rāma, Hare Hare, que limpia el corazón de uno de toda suciedad material. Y, por encima de esto, se deben controlar los sentidos. Una persona que es fiel a Kṛṣṇa y que controla los sentidos, puede lograr fácilmente y sin demora la perfección del conocimiento de conciencia de Kṛṣṇa”.

Prabhupāda: Controlar los sentidos significa... eso también es conocimiento. Porque esta vida materialista significa gratificación de los sentidos. Hemos satisfecho nuestros sentidos no sólo en esta forma de vida humana, sino en otras formas de vida. Cuando uno llega a la comprensión de que estas actividades de gratificación de los sentidos son inútiles, entonces puede entender. Cuando uno entiende que: “He tratado de satisfacerme en diferentes formas de gratificación de los sentidos”...

Al igual que la gente está intentando lo mismo que tiene en casa... al igual que una mujer desnuda. Siguen yendo al teatro para ver la danza desnuda. ¿Lo ven? ¿Qué es eso? No tienen ni idea. Lo mismo. Punaḥ punaś carvita-carvaṇānām (SB 7.5.30).

Masticando lo masticado, tratando de averiguar en qué danza desnuda hay placer. Eso es todo. Cuando uno llega al conocimiento de que: “He visto tantos tipos diferentes de danzas desnudas y de mujeres desnudas. ¿Qué he conseguido? ¿Qué he ganado? ¿Qué satisfacción hay? ¿Por qué no estoy satisfecho?”. Eso es conocimiento. Eso es conocimiento.

Al igual que Bilvamaṅgala Ṭhākura. Ustedes han escuchado la historia de Bilvamaṅgala Ṭhākura. Hay muchas historias. Le gustaba mucho su novia, una prostituta. Cuando una noche al acercarse a ella bajo de torrentes de lluvia y con grandes dificultades, la mujer fue comprensiva.

Ella dijo: “Bilvamaṅgala, estás muy atraído por esta carne y huesos. Oh, si te hubieras sentido así de atraído por Kṛṣṇa, cómo habrías sido”. Oh, inmediatamente regresó: “Sí”. Así que inmediatamente regresó y fue a Vṛndāvana.

Estos son los puntos de conocimiento. ¿Lo ven? Uno... cuando uno es golpeado con ese conocimiento de que: “¿Qué he ganado? He probado vida tras vida, horas tras horas, días tras días esta gratificación de los sentidos. ¿Qué he conseguido?”. Esto es conocimiento. Entonces comienza la búsqueda.

Continúa.

Revatīnandana: “Pero las personas ignorantes e infieles que dudan de las Escrituras reveladas, no adquieren conciencia de Dios sino que caen. Para el alma que duda no hay felicidad ni en este mundo ni en el otro” (BG 4.40).

Prabhupāda: Sí. El que duda, no tiene felicidad en este mundo, y qué hablar del siguiente.

Revatīnandana: “Aquel que realiza servicio devocional y renuncia a los frutos de sus acciones, y cuyas dudas han sido destruidas por el conocimiento trascendental, está verdaderamente situado en el ser. Así pues, a él no lo atan las reacciones del trabajo, ¡oh, conquistador de riquezas!” (BG 4.41).

Significado: “Aquel que sigue la instrucción del Bhagavad-gītā tal como la imparte el Señor, la propia Personalidad de Dios, se libera de todas las dudas, por la gracia del conocimiento trascendental”.

Prabhupāda: Porque todo está explicado al dedillo. Pueden tener respuesta a todas las preguntas de este Bhagavad-gītā, capítulo a capítulo. Todo está completamente contestado. Sí.

Revatīnandana: “Él, como parte integral del Señor y con plena conciencia de Kṛṣṇa, ya se encuentra en posesión del conocimiento acerca del ser. En virtud de ello, está indudablemente por encima del cautiverio de la acción”.

Verso cuarenta y dos: “Por lo tanto, las dudas que te han surgido en el corazón debido a la ignorancia, deben ser cortadas con el arma del conocimiento. Armado con el yoga, ¡oh, Bhārata!, levántate y pelea”.

Prabhupāda: La duda estaba en la mente de Arjuna en el campo de batalla, y había necesidad de predicar el Bhagavad-gītā. Continúa.

Revatīnandana: “El sistema de yoga que se enseña en este capítulo se denomina sanātana-yoga, o las actividades eternas que realiza la entidad viviente. Este yoga tiene dos divisiones de sacrificios: una se denomina el sacrificio de las posesiones materiales, y la otra se denomina el conocimiento acerca del ser, que es una actividad espiritual pura”.

“Si el sacrificio de las posesiones materiales no se acopla con la iluminación espiritual, entonces dicho sacrificio se vuelve material. Pero aquel que realiza esos sacrificios con un objetivo espiritual, o en carácter de servicio devocional, hace un sacrificio perfecto”.

“Cuando llegamos a las actividades espirituales, encontramos que éstas también se dividen en dos: la comprensión del ser propio (o la posición constitucional de uno), y la verdad relativa a la Suprema Personalidad de Dios. Aquel que sigue el sendero del Bhagavad-gītā tal como es… tal como es…”.

Prabhupāda: “Tal como es”.

Revatīnandana: “...Bhagavad-gītā tal como es, puede entender muy fácilmente estas dos importantes divisiones del conocimiento espiritual. Para él no existe ninguna dificultad en obtener conocimiento perfecto acerca del ser como parte integral del Señor”.

Prabhupāda: Porque el tema del Bhagavad-gītā es conocer cinco cosas: saber qué son estas entidades vivientes, qué es Dios, qué es la naturaleza y qué es el tiempo y el trabajo. Estos cinco temas están ahí: Dios, las entidades vivientes, la naturaleza, el tiempo y el trabajo. Estas cosas están ahí.

Todo el mundo se dedica a algún tipo de trabajo, y hay un control del tiempo. Sus vidas, mi vida, la vida de todos está controlada por el tiempo. Tenemos que vivir tantos años, no más que eso. Para estudiar el tiempo, para estudiar nuestro trabajo, entonces lo que es Dios, lo que soy, y lo que es esta naturaleza material —estas cinco cosas están muy bien explicadas. Uno tiene que estudiarlo. Entonces uno se vuelve perfecto en el conocimiento, y puede actuar en consecuencia.

Revatīnandana: “Y esa comprensión es provechosa, pues dicha persona puede entender fácilmente las actividades trascendentales del Señor”.

“Al comienzo de este capítulo, el propio Señor Supremo discutió Sus actividades trascendentales. Aquel que no entiende las instrucciones del Gītā es infiel, y se debe considerar que está haciendo mal uso de la independencia fragmentaria que el Señor le ha otorgado”.

“Aquel que, a pesar de dichas instrucciones, no entiende la verdadera naturaleza del Señor como la eterna, bienaventurada y omnisciente Personalidad de Dios, es ciertamente el necio más grande de todos. Mediante la aceptación gradual de los principios del proceso de conciencia de Kṛṣṇa, puede disiparse la ignorancia”.

“El estado de conciencia de Kṛṣṇa se despierta mediante diferentes tipos de sacrificios en honor de los semidioses, mediante el sacrificio en honor del Brahman, mediante el sacrificio a través del celibato, mediante el sacrificio en la vida de casado, en el control de los sentidos, en la práctica del yoga místico, en la penitencia, en la renuncia a las posesiones materiales, en el estudio de los Vedas y en la participación en la institución social denominada varṇāśrama-dharma”.

“Todos éstos se conocen como sacrificios, y todos ellos están basados en la acción regulada. Pero dentro de todas esas actividades, el factor importante es la autorrealización. Aquel que busca ese objetivo es el verdadero estudiante del Bhagavad-gītā“.

Prabhupāda: Sí. La autorrealización, “qué es lo que soy”. Si uno apunta a ese objetivo, entonces su estudio del Bhagavad-gītā es bueno. Sí.

Revatīnandana: “pero aquel que duda de la autoridad de Kṛṣṇa, fracasa. Por consiguiente, a uno se le aconseja estudiar el Bhagavad-gītā, o cualquier otra Escritura, bajo la guía de un maestro espiritual genuino, con servicio y entrega”.

“Un maestro espiritual genuino forma parte de la sucesión discipular eterna, y no se aparta en absoluto de las instrucciones del Señor Supremo, tal como se le impartieron hace millones de años al dios del Sol, de quien las instrucciones del Bhagavad-gītā han descendido al reino terrenal”

Prabhupāda: No es muy difícil. Al igual que en este Bhagavad-gītā la Suprema Personalidad de Dios dice que Él es el Supremo, y aconseja: man-manā bhava mad-bhaktaḥ: “Sólo trata de pensar solamente en Mí, siempre”. Man-manā bhava mad-bhaktaḥ: “Y conviértete en Mi devoto”.

Mad-yājī: “Sólo adórame a Mí”. Māṁ namaskuru: “Sólo inclínate ante Mí”. Simplemente si uno puede hacer estos cuatro procesos, Él dice: mām evaiṣyasi asaṁśayaḥ (BG 18.68): “Seguramente, sin ninguna duda, vendrás a Mí”.

¿Hay alguna dificultad? Estos muchachos, estas muchachas, ¿qué están haciendo? Man-manā bhava. Están cantando “Kṛṣṇa”. Eso significa pensar en Kṛṣṇa. Son devotos de Kṛṣṇa. Se inclinan ante la Deidad de Kṛṣṇa. Están comiendo Kṛṣṇa prasādam.

El proceso es muy fácil, pero no queremos seguir la instrucción del Bhagavad-gītā, sino que simplemente falsamente estoy orgulloso de que: “Estoy leyendo el Bhagavad-gītā“. Hay tantos lectores del Bhagavad-gītā incluso en su país. Tantos. Lo sé. Pero la verdadera instrucción no la seguirán. Ellos interpretarán de alguna manera, de esta manera, de aquella manera. O algún sinvergüenza, quiero decir, comentarista también inducirá al lector: “Oh, aquí Kṛṣṇa dice que te conviertas en devoto de Kṛṣṇa —no es a este Kṛṣṇa; hay otro Kṛṣṇa”. Sólo vean.

¿Lo ven? Kṛṣṇa dice directamente que: man-manā bhava mad-bhaktaḥ (BG 9.34), y el comentarista dice: “No a Kṛṣṇa”.

¿Cómo puede la gente entender, como ven, una interpretación errónea? Por lo demás, si simplemente estudian el Bhagavad-gītā, comprenden estos cinco principios —qué es Dios, qué soy yo, qué es la naturaleza material y qué es el tiempo y qué es el trabajo. Entonces están en pleno conocimiento. Estas cinco cosas están muy bien explicadas en el Bhagavad-gītā. Intenten comprender.

“¿Qué soy yo?” Eso se explica en el Bhagavad-gītā. Kṛṣṇa dice: mamaivāṁśo jīva-bhūtaḥ (BG 15.7):

“Todas son Mis partes y porciones”. Eso es bueno, muy bueno. Es muy fácil de entender. Parte y porción, eso significa que yo soy parte —Él es el todo. La parte nunca es igual al todo, pero la parte es igual en cantidad... digo, calidad. Como una parte, una pequeña parte del agua del océano. Esta también es salada, y toda el agua del océano también es salada.

Cualitativamente la pequeña parte y la partícula del agua del océano tiene la misma calidad. No es diferente. Químicamente, si analizan esa gota de agua de mar, la composición química de esa agua y de la inmensa agua es la misma. La única diferencia es que el océano es muy grande, y la pequeña partícula de agua es muy pequeña. Esa es la diferencia.

Si yo soy parte de Dios, por lo tanto, las cualidades que tengo, Dios tiene la misma cualidad. Ahora estúdiense a sí mismos. Entonces pueden entender qué es Dios. Las mismas cualidades están ahí, pero son ilimitadas, las nuestras son limitadas. No es difícil entender a Dios. ¿Por qué están desconcertados para entender a Dios?

Dios también es —y está confirmado en el Bhagavad-gītā y en toda la literatura védica— Dios es igual que nosotros, una persona, una persona individual, pero muy poderosa. Esa es la diferencia. Mi poder... hay diferentes tipos de poder. Su poder es diferente al de otro hombre. El de otro hombre es diferente al de otro hombre, continúen, continúen, continúen. Cuando encuentren al hombre supremo, o a la Suprema Personalidad, Él es Dios.

Hay una muy buena descripción en el Brahma-saṁhitā: īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ. (BS 5.1). Cada persona individual está tratando de controlar, de convertirse en controlador. Al igual que alguien trata de convertirse en presidente de su estado. ¿Cuál es la idea detrás de esto? Convertirse en controlador. Gastan millones de dólares para conseguir ese puesto. Quiero ser un hombre de negocios muy rico como Rockefeller o Ford. ¿Cuál es la idea? Para convertirse en controlador. Quiero gobernar sobre los miembros de mi familia: Quiero ser controlador. Si no tengo a nadie a quien controlar, consigo algún perro para controlar. Esta es mi, quiero decir, capacidad. Quiero controlar.

Todos son controladores en diferentes grados. Y el Brahma-saṁhitā dice que Dios es el controlador supremo. Eso es todo. Él también es controlador. Pero no hay nadie más que pueda controlarlo a Él. Él lo controla todo. Īśvaraḥ paramaḥ kṛṣṇaḥ. Īśvara significa controlador. Parama significa el supremo. Una descripción muy buena y sencilla de Dios.

Si Dios... alguien dice: “Yo soy Dios”. Yo soy Dios en este sentido, que Dios es como yo. Al igual que si ustedes dicen: “Soy estadounidense”, su presidente también es estadounidense, exactamente son como el presidente, estadounidense. No hay ningún peligro. Pero si dicen: “Soy tan poderoso como el presidente Nixon”, eso no es aplicable.

Del mismo modo, “Yo soy Dios” significa que soy cualitativamente uno con Dios. No significa que soy tan poderoso como Dios. Eso no significa. Él es el controlador supremo. Yo tengo la capacidad de control, o yo controlo en mi círculo limitado, pero Él es el controlador supremo.

Si comprenden, no es muy difícil entender que es Dios, que son ustedes, que es esta naturaleza material, que es el tiempo y que es el trabajo. Y si entienden estas cinco cosas, entonces están en pleno conocimiento.

Continúa.

Revatīnandana: “Uno debe, pues, seguir el sendero del Bhagavad-gītā tal como se expresa en el propio Gītā, y cuidarse de personas egoístas en busca de engrandecimiento personal, que alejan a los demás del sendero verdadero. El Señor es, en definitiva, la Persona Suprema, y Sus actividades son trascendentales. Aquel que entiende esto es una persona liberada, desde el mismo comienzo de su estudio del Gītā“.

Prabhupāda: Sí. Simplemente si entienden que: “Yo tengo también, lo que se llama, capacidad para controlar, y Dios es el controlador supremo”, simplemente si entienden esto, entonces inmediatamente se liberan, simplemente si entienden que Él es el controlador supremo, Él es la Persona Suprema. Simplemente esta comprensión. Eso se dice al principio de este “Conocimiento Trascendental”: janma karma me divyaṁ yo jānāti tattvataḥ (BG 4.9).

Dios también trabaja. Él también está creando, yo también estoy creando. Yo estoy creando un sputnik, un planeta de juguete, y Dios está creando innumerables e ilimitados planetas. Esa es la diferencia. Yo también puedo crear algo, pero no es un poder creativo tan bueno como el de Dios. Pero tengo algo de poder creativo. Tengo la tendencia a disfrutar. Del mismo modo, Dios tiene la tendencia al disfrute.

No hay nada diferente de ustedes, Dios. La única diferencia es que Él es ilimitado, yo soy limitado. Yo soy muy pequeño, Él es muy grande. Él es infinito, yo soy infinitesimal. Vibhu, aṇu. La palabra sánscrita es vibhu. Vibhu significa lo grande. Dios es grande. Asamordhva. Nadie puede ser igual a Dios, nadie puede ser más grande que Dios. Eso significa que todos están subordinados a Dios.

Estos simples entendimientos los liberarán. Janma karma (ca) me divyaṁ yo jānāti tattvataḥ, tyaktvā deham (BG 4.9). Esta liberación significa que después de dejar este cuerpo, ya no van a aceptar ningún cuerpo material. Son transferidos inmediatamente al mundo espiritual, y obtienen su cuerpo espiritual. Tyaktvā dehaṁ punar janma naiti mām eti kaunteya. Estas cosas ya están explicadas.

Traten de entender qué es Dios y qué son ustedes, qué es esta naturaleza material, cuál es su relación con la naturaleza material, con Dios, con los demás, qué es este factor tiempo, qué es el trabajo. Entonces tienen pleno conocimiento y se liberan.

Está bien.

Revatīnandana: “Así terminan los significados de Bhaktivedanta al Cuarto Capítulo del Śrīmad-Bhagavad-gītā en relación con El Conocimiento Transcendental”.

Prabhupāda: ¿Podemos parar aquí? Hare Kṛṣṇa. (los devotos ofrecen reverencias)

¿Alguna pregunta?

Devoto (1): Cuando enumeró... cuando en el Gītā enumeró las diferentes clases de sacrificios, dijo que los sacrificios a los semidioses pueden llevarnos a la conciencia de Kṛṣṇa. ¿Cómo es esto?

Prabhupāda: Sí. Sí. Porque a veces la gente se inclina a hacer algunos sacrificios para apaciguar a los semidioses, por lo que estas prescripciones están ahí. Al igual que a alguien se le recomienda que: “Si quieres curarte de tu enfermedad, entonces adora al dios del Sol. Si quieres conseguir una esposa muy buena y hermosa, entonces adora a Umā, la esposa del Señor Śiva”.

De este modo... “Si quieres ser muy culto, entonces adoras a la diosa del conocimiento”. Estas prescripciones están allí en la literatura védica, por lo que la gente... al igual que en los días modernos quieren tener todas estas cosas por las actividades materiales, por lo que se recomiendan de una manera diferente. Pero el objetivo es el mismo.

Pero cuando uno puede entender... eso también es mandato en los Vedas, que: akāmaḥ sarva-kāmo vā mokṣa-kāma udāra-dhīḥ (SB 2.3.10):

“O estás deseando alguna prosperidad material o estás deseando el servicio devocional o estás deseando la liberación”... Hay tres tipos de liberación, digo, deseos. Un deseo es que una persona desea alguna opulencia material. Y entonces uno desea... uno se frustra; quiere la liberación. U otro, aquellos que son trascendentalmente avanzados, quieren estar comprometidos con la conciencia de Kṛṣṇa. Hay tres clases de deseos.

El Bhāgavata dice que o bien te conviertes en akāma... desear avanzar en la conciencia de Kṛṣṇa no es un deseo material. Allí se llama akāma. Eso no es deseo material. Y otras dos cosas, desear la liberación y desear la opulencia material, eso es material.

El Bhāgavata dice: akāmaḥ sarva-kāmo vā mokṣa-kāma udāra-dhīḥ. (SB 2.3.10): “Si estás realmente avanzado con el conocimiento, ya sea que desees prosperidad material o desees la liberación de la esclavitud material o desees estar comprometido con la conciencia de Kṛṣṇa, simplemente trata de estar comprometido con el servicio devocional del Señor Supremo”. Si quieres alguna prosperidad material, eso también se puede lograr mediante el servicio devocional.

Eso también se explica. Creo que lo obtendrás en el Quinto Capítulo, que: catur-vidhā bhajante māṁ sukṛtinaḥ arjuna (BG 7.16).

No, ya lo hemos discutido. Hay cuatro clases de personas que se acercan en la conciencia de Kṛṣṇa. ¿Cuáles son? Arto arthārthī jijñāsu: los que están afligidos, los que necesitan dinero, los que son inquisitivos y los que están, quiero decir, buscando o avanzando en el conocimiento, o los sabios. De estos cuatro, el hombre sabio es muy bien aceptado por Kṛṣṇa.

Al igual que Dhruva Mahārāja. Dhruva Mahārāja quería algo de prosperidad material, así que adoró a Kṛṣṇa. Pero al final, cuando vio a Kṛṣṇa, entonces dijo: “No quiero más esta prosperidad material”. Svāmin kṛtārtho 'smi varaṁ na yāce (CC Madhya 22.42):

“Mi querido Señor, ahora estoy plenamente satisfecho. No quiero ninguna prosperidad material”.

El asunto es que uno puede ser impulsado por cualquier deseo, pero si se acerca directamente a la Suprema Personalidad de Dios, entonces sus deseos serán satisfechos —al mismo tiempo, en última instancia, llegará a la plataforma de la conciencia de Kṛṣṇa. Si realiza correctamente los sacrificios... no son necesarios, pero incluso están apegados a esas cosas, si lo hacen bien, entonces en última instancia irán.

Hum. Si, continua.

Devoto (2): ¿Hubo un calendario vaiṣṇava que se originó en la cultura védica que es diferente de nuestro calendario que usamos hoy?

Prabhupāda: ¿Hay algún estudio del calendario justo ahora, nuestro? ¿Por qué preguntas sobre el calendario ahora? No estamos discutiendo sobre el calendario. Cuando discutamos sobre el calendario, planteas esa pregunta. No es una pregunta muy importante ahora. Eso significa que no estás escuchando con atención. Estás pensando en el calendario. Deberías estar muy atento: “¿Qué discusiones están teniendo lugar?”. El calendario no es una discusión muy importante en esta reunión.

¿Si?

Madhudviṣa: Prabhupāda, en el significado...

Prabhupāda: Nuestra pregunta, invitar a preguntar, significa que hemos discutido algo —si hay alguna dificultad, para aclarar eso, no para traer alguna otra pregunta que se pueda poner después. De lo contrario, cualquiera puede poner cualquier pregunta. Oh, esto no es una asamblea para responder preguntas. Esta es una asamblea para entender lo que estamos estudiando. Sí. Continúa.

Madhudviṣa: Prabhupāda, en el verso número cuarenta y dos, el significado del verso número cuarenta y dos, divide las actividades espirituales en dos, a saber, la comprensión del propio yo o de la posición constitucional de uno, y la verdad relativa a la Suprema Personalidad de Dios. Esta primera división, ¿es la realización de Paramātmā y la segunda división es la realización de la Suprema Personalidad de Dios?

Prabhupāda: Sí. Eso ya lo he explicado, que nuestra relación con Dios es que yo soy infinitesimal, y Él es infinito. Esto es el conocimiento. Yo soy muy pequeño, y Él es muy grande. “Dios es grande”. Esa es la definición de todo teísta. No puedo ser igual a Dios. Esto es conocimiento trascendental.

Pero desafortunadamente, estamos declarando: “Yo soy Dios”. Esto es una locura. ¿Cómo puedes ser Dios? ¿Sabes lo que es Dios? Debido a que no sabes lo que es Dios, por lo tanto estás afirmando que: “Yo soy Dios”. ¿Qué has hecho? ¿Cuál es su testimonio de que eres Dios?

¿Simplemente declarando: “Yo soy Dios”, te conviertes en Dios? Esto no es conocimiento: menos inteligente, ningún conocimiento sobre Dios. Esto es conocimiento: que Dios es grande, Dios es infinito, yo soy finito, soy infinitesimal. Eso es conocimiento.

¿Sí?

Madhudviṣa: Entonces, ¿la realización del rasgo impersonal del Absoluto no se clasificaría como una actividad espiritual?

Prabhupāda: Bueno, los impersonalistas, no tienen actividades espirituales prácticamente. Tienen algunas actuaciones ritualistas para llegar a la plataforma de negativización de esta condición material. Como para averiguar... como para tomar leche. Entonces tienes que encontrar donde está la mantequilla. Si conoces el proceso, entonces puedes encontrar la mantequilla. Pero si no conoces el proceso, puedes decir: “Oh, esto es simplemente leche. ¿Dónde está la mantequilla?”. Debes conocer el proceso.

Del mismo modo, los impersonalistas, piensan que: “Yo soy Brahman, pero no soy esta materia”. Eso es un hecho. Yo soy espíritu, no soy esta materia. Pero esa comprensión no es suficiente. ¿Cuál es mi posición como espíritu? Entonces, cuando llegamos al espíritu supremo, el todo-espíritu, eso es la perfección del conocimiento. La concepción impersonal es simplemente una negación de estas variedades materiales. Pero por encima de eso, está la variedad espiritual. Y eso es el verdadero conocimiento. Eso es conciencia de Kṛṣṇa.

La negación... al igual que no hay fiebre. En la condición de enfermedad uno está tratando de salir de la condición febril. Mediante el tratamiento medicinal uno sale de la fiebre. Pero eso no es una condición saludable. Eso no es definitivo. Hay una negación de la fiebre. Eso se admite. Eso está bien. Pero esa es la etapa de convalecencia. Puedes recaer de nuevo. Cuando llegas al estado de salud, esa es tu vida. La negación de la fiebre no es tan buena como tu vida saludable.

La negación de esta idea materialista, el impersonalismo, no es un conocimiento completo. Porque soy alma espiritual, estoy activo incluso en esta condición material enferma. Cuán activo debo ser en mi condición saludable. Ese es el verdadero conocimiento. La condición saludable no significa que estoy muerto. Esto no es un tratamiento.

Si algún médico viene y le dice al paciente: “Oh, estás sufriendo mucho. Muy bien, déjame cortarte el cuello para que no sufras. Todo se detendrá”, ¿es eso un buen tratamiento? (risas) Hay que detener su fiebre y mantenerlo en su vida sana. Eso es un tratamiento. Simplemente parar, simplemente negar, anular, eso no es un tratamiento...

No puedes permanecer vacío, porque eres activo. Si te conviertes a la fuerza en vacío, ¿cuánto tiempo puedes permanecer en el vacío? Tan pronto como el llamado vacío se acaba, vuelves a esta actividad de nuevo. Tienes que estar situado en tus actividades reales. Eso es necesario. Esas actividades reales son las actividades conscientes de Kṛṣṇa. Y eso no es impersonal. Eso es personal.

Devota (1): Cuando en el Bhagavad-gītā se dice que el mahā-mantra limpia el corazón y el alma, ¿significa eso que cuando uno, por ejemplo, dice las palabras, sólo el sonido, eso limpiará su corazón? ¿O debe intentar, por ejemplo, recordar a Kṛṣṇa con cada palabra y cada sonido?

Prabhupāda: No. Simplemente cantando tu corazón se limpiará. Sí. Sigue cantando. Por eso damos el principio regulador de que uno debe cantar al menos dieciséis rondas.

Devota (1): ¿Debemos tratar de ir rápido con el fin de hacerlas, con el fin de completar las rondas?

Prabhupāda: Lo primero es que se debe cantar sin ninguna ofensa. ¿Lo ves? Al principio puede haber tantas ofensas, pero el canto será perfecto cuando estés libre de diez clases de ofensas. Puedes entender esos diez tipos de ofensas —lo he explicado varias veces— de tus hermanos espirituales. Sí.

Sí. ¿Sí?

Invitado: Soy nuevo aquí. Nunca he estado aquí antes, así que perdóneme si mis preguntas son ingenuas. Pero si todo lo que se requiere es cantar para ser puro, entonces ¿por qué se requieren instrumentos musicales, y un altar y flores y cosas de este tipo?

Prabhupāda: ¿Hum?

Viṣṇujana: “Si todo lo que se requiere es cantar Hare Kṛṣṇa, ¿por qué tenemos las imágenes y las ropas y los instrumentos y el altar y el Señor Jagannātha?”.

Prabhupāda: Porque somos personalistas. No somos impersonales. Se trata de variedades espirituales. Usted está hablando de ninguna variedad. ¿No es así? Usted me preguntaba: “¿Por qué hay tantas variedades?”. Esta es su simple pregunta.

Invitado: No sólo eso. ¿Por qué se afeitan las cabezas?

Prabhupāda: Eso también es otra variedad. Usted quiere menos variedad. ¿No es así?

Invitado: No. Estoy preguntando por qué son necesarias. ¿Por qué son necesarias?

Prabhupāda: No son necesarias para una persona que está avanzada. Pero en la etapa preliminar tenemos esas necesidades. Esto crea una atmósfera. Pero al mismo tiempo, estas variedades no son, quiero decir, variedades materiales, son variedades espirituales.

El lugar al que estamos tratando de acercarnos, Vaikuṇṭha, allí los habitantes son así. Tienen esta tilaka, tienen... por supuesto, nosotros no tenemos cuatro manos, pero ellos tienen cuatro manos. También tienen dos manos. Y están vestidos así. Estas cosas no son variedades materiales, al igual que el canto no es una vibración material.

Además de eso, cualquier camino que siga, tiene que seguir los principios regulativos tal y como son promulgados por las autoridades. En nuestra sucesión discipular, los anteriores ācāryas, han aconsejado que debe tener su ropa así, debe tener su cabeza así, su... tenemos que seguir eso. Mahājano yena gataḥ sa panthāḥ (CC Madhya 17.186).

Nuestro principio es seguir las huellas de las autoridades. Estas cosas no son no autorizadas. Se siguen desde tiempos inmemoriales: esta vestimenta, esta tilaka, este canto. Todo. Así como ve la imagen del Señor Caitanya, estamos siguiendo los mismos principios. Esto se representaba hace quinientos años. Estamos siguiendo el mismo principio. No estamos introduciendo nada nuevo. Simplemente estamos siguiendo las huellas de nuestros predecesores. Eso es todo.

Al igual que estamos tratando de entender el Bhagavad-gītā tal y como lo entendió Arjuna. Arjuna fue oyente directo de Kṛṣṇa. Tal como él entendió el Bhagavad-gītā, nosotros estamos tratando de entender de esa manera. Kṛṣṇa dijo: sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja (BG 18.66), que: “Tú abandonas todos los demás compromisos, sólo ríndete a Mí”. Y ¿qué estamos predicando? También estamos diciendo que: “Entrégate a Kṛṣṇa”. Kṛṣṇa dijo: “Ríndete a Mí”, porque Él mismo es la Persona Suprema. Y nosotros estamos repitiendo: “Ríndete a Kṛṣṇa”.

¿Cuál es la diferencia? No hay ninguna diferencia. Mahājano yena gataḥ sa panthāḥ (CC Madhya 17.186). El camino espiritual consiste en seguir las huellas de los predecesores, de los grandes ācāryas que se han realizado. Entonces usted se vuelve perfecto. No imitar, sino seguir. La imitación es algo diferente.

Esto no es imitación, sino seguir las huellas. El que quiere convertirse en devoto, tiene que seguir ciertas reglas y regulaciones que son promulgadas por personas autorizadas en esta línea. No podemos negarlo. Por lo tanto, es necesario.

¿Sí?

Devota (2): En el Gītā Kṛṣṇa dice muchas veces: “Debes rendirte a Mí”. ¿Por qué la gente dice: “No, hay algo más”?

Prabhupāda: Porque quieren algo nuevo. Esto es muy antiguo. Hay una canción de un gran dramaturgo de la India. Él canta: ekṭā navana kichu koro. Eso significa: “Haces algo, inventas algo nuevo. Inventas algo nuevo, y entonces te vuelves muy popular”. ¿Lo ves? Ese es el camino de los pensamientos modernos. Inventas algo nuevo. No es moderno, esto es lo que sucede.

Al igual que hay una versión en la literatura védica: na cāsāv muni yasya mataṁ na bhinnam (CC Madhya 17.186|).

Si quieres ser un muni o un sabio, debes proponer alguna teoría nueva. De lo contrario, no eres un filósofo. Un filósofo no se cuenta como tal a menos que desafíe a todos los demás filósofos y plantee alguna teoría nueva. Y eso es lo que ocurre. Na cāsāv muni yasya mataṁ na bhinnam. ¿La filosofía de quién vas a aceptar? Cada día encontrarás una nueva filosofía. Entonces, ¿a quién seguir?

Por lo tanto, por disgusto, cada uno está tratando de seguir su propio principio, lo que le gusta. Y hay algunas actividades misioneras, que también defienden que: “Puedes hacer lo que quieras, y obtendrás a Dios”. Las personas están tratando de esta manera.

Pero nuestro proceso es diferente. Estamos siguiendo los viejos principios. No decimos algo nuevo. El antiguo dicho, como dijo Kṛṣṇa hace cinco mil años: sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja (BG 18.66).

Así que nada nuevo. Simplemente estamos repitiendo. Eso, nuestro Hare Kṛṣṇa, es también repetición: Hare Kṛṣṇa, Hare Kṛṣṇa, Kṛṣṇa Kṛṣṇa, Hare Hare.

¿Qué es esa frase inglesa, “Poner el vino viejo en botella nueva”, o ¿cómo es eso? (risas) Es vino viejo. Simplemente se pone en botellas nuevas. Eso es todo. Y ¿qué es lo nuevo? No hay nada nuevo en el mundo. El Sol salía por el lado oriental, sigue saliendo por el lado oriental. El Sol se ponía en el lado occidental, todavía se pone por ese lado.

Tus antepasados, abuelos, también comían, tú también estás comiendo. Ellos también murieron, y nosotros también moriremos. ¿Qué hay de nuevo? ¿Ellos murieron y tú no morirás? ¿Qué novedad podemos dar? Nada. Tienes que seguir por ley natural los viejos principios. Ellos murieron, yo tendré que morir. Ellos comieron, yo estoy comiendo. Ellos engendran hijos, yo también estoy engendrando. Entonces, ¿cuál es la diferencia? ¿Qué es lo nuevo?

Todo sigue en los viejos principios. Es simplemente nuestra imaginación que estamos haciendo algo nuevo. No hay nada nuevo. Āhāra-nidrā-bhaya-maithunaṁ ca sāmānyam etat paśubhir narāṇām (Hitopadeśa 25).

Estamos bajo leyes tan estrictas de la naturaleza, no hay margen para inventar algo nuevo. Eso no es posible. Tenemos que seguir los antiguos principios por la fuerza, por la ley de la naturaleza.

(pausa) Esta bien. Canten Hare Kṛṣṇa. (fin)