ES/690217 - Clase BG 06.16-24 - Los Angeles

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



690217BG-Los Angeles, 17 febrero 1969 - 49:57 Minutos



Devotos: Todas las glorias a Śrī Guru y Gaurāṅga.

Tamal Kṛṣṇa: Verso 16: “No hay ninguna posibilidad de convertirse en yogī, ¡oh, Arjuna!, si se come demasiado o se come muy poco, ni si se duerme demasiado o no se duerme lo suficiente (BG 6.16)”.

Prabhupāda: Sí, eso está muy bien. (risas) No se prohíbe nada porque, al fin y al cabo, el proceso de yoga tiene que ponerlo en práctica con el cuerpo. Sacar el mejor partido de una mala compra. ¿Lo ven? El cuerpo material es la fuente de todos los sufrimientos, de todas las miserias. En realidad, el alma espiritual no padece esas miserias. Al igual que el estado normal de la entidad viviente es la buena salud. La enfermedad se produce debido a determinadas contaminaciones infecciosas. La enfermedad no es nuestra vida normal.

De la misma forma, la actual situación de la existencia material es una situación de enfermedad para el alma. Y ¿qué enfermedad es esa? La enfermedad es el cuerpo. Porque este cuerpo no es para mí, no es mi cuerpo. Al igual que la ropa, ustedes no son la ropa. Pero aquí estamos vestidos de maneras distintas. Hay quien lleva ropas rojas, hay quien va vestido de blanco, hay quien va vestido de amarillo. Pero yo no soy el color... Del mismo modo, este cuerpo: “Yo soy blanco, soy negro, soy indio, soy estadounidense, soy hindú, soy musulmán, soy cristiano”, esas cosas no son mi posición. Todas esas son condiciones enfermas. Y lo que estamos tratando de hacer es liberarnos de la enfermedad. Eso es el sistema de yoga. Vincularnos de nuevo al Supremo. Porque yo soy su parte integral.

El mismo ejemplo: Si por una u otra causa me cortan el dedo y éste cae al suelo, pierde todo valor. Mi dedo, cuando me lo cortan y queda tirado en el suelo, pierde todo valor. Pero ese mismo dedo, tan pronto como se une al cuerpo, tiene un valor de millones y trillones de dólares. Un valor incalculable. Del mismo modo, ahora estamos desconectados de Dios, de Kṛṣṇa, debido al condicionamiento material. Hemos olvidado, no es que estemos desconectados.

La conexión existe. Dios nos abastece de todo lo que necesitamos. Al igual que un preso estatal está desvinculado de la sociedad civil, ha entrado bajo la jurisdicción de lo penal. En realidad no está desconectado. El gobierno lo está cuidando todavía. Pero a nivel legal está desconectado. De la misma forma, nosotros no estamos desconectados. No podemos estarlo. Porque nada existe sin Kṛṣṇa. ¿Cómo puedo yo estar desconectado? La desconexión consiste en que al olvidar a Kṛṣṇa, en lugar de ocuparme en actividades conscientes de Kṛṣṇa, me dedico a tantas actividades, actividades de una conciencia insensata. En lugar de pensar que soy un sirviente eterno de Dios, de Kṛṣṇa, pienso que soy el sirviente de mi sociedad, de mi país, que soy el sirviente de mi marido, el sirviente de mi mujer, que soy el sirviente de mi perro o de tantas otras cosas. Eso es olvido.

Y ¿cómo se ha producido? Debido al cuerpo. En resumen, la mala conciencia, la conciencia errónea en su conjunto, ha llegado a existir debido al cuerpo. Como he nacido en los Estados Unidos, pienso que “soy americano”. Y debido a que yo me considero americano, el gobierno de los Estados Unidos me llama: “Sí, tú, ven a luchar. Tienes que dar tu vida. Ve al centro de reclutamiento”. ¿Por qué? Por el cuerpo. Por eso, la persona inteligente debe saber: “Estoy sufriendo todas estas miserias en la vida, debido al cuerpo”.

No debemos actuar entonces, de manera que este aprisionamiento en el cuerpo material, continúe vida tras vida. Sea un cuerpo americano, cuerpo hindú, cuerpo de perro, cuerpo de cerdo, el que sea, hay tantos cuerpos... Hay 8.400.000 formas corporales. Eso es lo que se llama yoga. Cómo liberarse de esta contaminación del cuerpo. Pero la primera instrucción, la primera enseñanza es entender que “yo no soy el cuerpo”. Ese es el principio básico de las enseñanzas del Bhagavad-gītā: aśocyān anvaśocas tvaṁ prajñā-vādāṁś ca bhāṣase (BG 2.11).

“Mi querido Arjuna, tú estás hablando muy bien, como si fueses una persona muy culta, muy avanzada. Pero estás hablando desde el plano corporal, es todo una tontería”. “Yo soy el padre de este, éstos son mis familiares, mi esto lo otro, cómo voy a matarles, cómo voy a hacerlo, no puedo”. Toda la atmósfera de la conciencia se basa en el cuerpo. Por eso Kṛṣṇa, inmediatamente después de que es aceptado por Arjuna como maestro espiritual, inmediatamente le está riñendo, tal y como el maestro riñe al discípulo: “Tú, tonto, estás hablando con gran sabiduría, como si supieses tantas cosas, pero lo que te planteas es corporal”.

En todo el mundo hay personas que se presentan como si fuesen muy avanzadas en lo que se refiere a educación. La ciencia, la filosofía, esto o lo otro, la política, tantas cosas. Pero lo que se plantean es corporal. Es como en el ejemplo del buitre: El buitre vuela muy alto. Vuela a diez o doce kilómetros de altura. Es maravilloso, algo que ustedes no pueden hacer. Y además posee unos ojos maravillosos. El buitre tiene unos ojos muy pequeños.

Pero tan poderosos, que desde diez kilómetros de distancia, puede ver, se da cuenta, detecta donde hay una carcasa, un cadáver, una carroña. De modo que tiene tal capacidad. Puede elevarse, puede ver muy alto, puede ver desde muy lejos. Oh... pero ¿Cuál es su objeto? La carroña. Nada más. Su perfección consiste en descubrir una carcasa, una carroña, un cadáver, y comérselo. Eso es todo.

Nosotros, del mismo modo, podemos elevarnos mucho en lo que se refiere a educación, pero ¿cuál es nuestro objetivo? ¿Qué estamos viendo? Cómo disfrutar de los sentidos del cuerpo. Eso es todo. Y la propaganda anuncia: “Oh, él se ha elevado con el sputnik a mil kilómetros de altura”. Pero ¿qué hace allí? ¿A qué se dedica allí? A complacer los sentidos y nada más. Y eso es animal. Y la gente no se plantea cómo se está enredando con ese concepto corporal de la vida.

Así que lo primero que tenemos que saber, es que “las condiciones miserables de la existencia material, se deben al cuerpo”. Al mismo tiempo, el cuerpo no es permanente. Supongamos que yo lo identifico todo con el cuerpo. La familia, la sociedad, el país, esto o aquello, tantas cosas. Pero, ¿durante cuánto tiempo? No es permanente. Es asat. Asat significa que dejará de existir. Asann api kleśada āsa dehaḥ (SB 5.5.4).

“Simplemente una fuente de problemas”. No es permanente, y simplemente nos causa problemas. Eso es inteligencia. Cómo liberarnos de éste cuerpo.

La gente viene y nos dice: “No me encuentro en paz, tengo problemas. Mi mente no está en paz, no está tranquila”. Pero cuando le ofrecen la medicina, no la aceptan. Lo que quieren es algo muy sabroso, eso es lo que han entendido, nada más. Hay mucha gente que viene a vernos: “Swamiji, yo me encuentro en esta situación”. Y tan pronto como le sugerimos la medicina, no la acepta. Porque lo que quieren es una medicina que puedan aceptar. Y ¿cómo podemos ofrecérsela? ¿Por qué van al médico entonces? Se receta su propio tratamiento... ¿Lo ven?

Este verso sugiere entonces que el cuerpo es inútil. Pero eso no significa que no debamos cuidarlo. Es como cuando viaja de un lugar a otro en su automóvil. Usted no es el automóvil, pero debido a que tiene que usar el automóvil para su trabajo, también tiene que cuidar del automóvil. Pero no debe preocuparse hasta el punto en que simplemente se absorbe en lo que le pasa al automóvil y no se preocupa de nada más. Hay personas que están tan apegadas a su automóvil, que se pasan todo el día limpiándolo. Ya ven, limpiándolo, le sacan brillo.

No debemos estar demasiado apegados al cuerpo. Pero debido a que con este cuerpo tenemos que poner en práctica la conciencia de Kṛṣṇa, debemos mantenerlo sano también. Eso se llama yukta-vairāgya. No debemos descuidarlo. Debemos bañarnos con frecuencia, debemos tomar con frecuencia o a intervalos regulares, una buena comida, kṛṣṇa prasāda. Mantener la mente y el cuerpo sanos. Eso es necesario.

De modo que el movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa, no dice que simplemente, en forma artificial, renuncien a tonterías. Que renuncien a algo y para compensar, pueden tomar unas cuantas drogas, o darse a la embriaguez, no... Tienen que comer bien, Kṛṣṇa les ha dado una buena comida. Frutas, cereales, leche... con todo ello pueden prepararse cientos y miles de platos muy sabrosos. Y eso es lo que estamos haciendo. Esa es la finalidad por la que los invitamos a nuestra fiesta del amor. Para que sustituyan todos esos alimentos insensatos que comen por kṛṣṇa prasāda. Lo que comen no es sano. Esta comida es sana. “Comida sana, sabrosa”.

Coman kṛṣṇa prasāda, sabroso prasāda. Si su lengua quiere unos platos sabrosos y agradables, les podemos dar cientos, miles, ofrecidos a Kṛṣṇa. Samosā, y estas bolas dulces, rasagullā, tantas cosas... No se les prohíbe. Pero no coman demasiado. “Oh, que sabroso, voy a comer media docena de rasagullās”. No, no hagan eso. Eso no es bueno, eso es gula. Simplemente deben tomar lo necesario para mantener al cuerpo sano. Nada más. Deben dormir lo suficiente para mantener al cuerpo sano. Nada más. Yuktāhāra vihārasya yogo bhavati siddha (BG 6.17).

Eso se llama yukta. Debemos comer simplemente para mantenernos con buena salud. Debemos dormir simplemente para mantenernos con buena salud. Si pueden reducir esas cosas, está muy bien. Pero no corran el riesgo de enfermarse.

Porque al principio, estamos acostumbrados a comer vorazmente. Así que no traten de comer menos artificialmente. Coman, pero traten de reducirlo al mínimo. Por eso se recomienda ayunar. Cada mes hay por lo menos dos ayunos obligatorios. Y hay otros días de ayuno. Cuanto más puedan reducir su sueño y su alimentación, mantienen buena salud. Sobre todo para fines espirituales. Pero no de forma artificial. No de forma artificial. Pero cuando progresan, cuando avanzan, de forma natural no sentirán.

Así como Raghunātha dāsa Gosvāmī. Es un ejemplo. Raghunātha dāsa Gosvāmī era el hijo de un hombre muy rico. Y se fue de su casa para unirse al Señor Caitanya. Así que su padre, él era el único hijo, el hijo muy amado, tenía una esposa muy buena. Y lo dejó todo. Dejarlo significa que fue a escondidas, sin decir nada. De una manera u otra se las arregló para huir de su casa. Y el padre entendió que había ido a ver al Señor Caitanya a Purī. Él envió cuatro sirvientes, porque era muy rico. Y cuatrocientas rupias. Hace quinientos años, cuatrocientas rupias representaban veinte veces lo que valen ahora.

Y al principio lo aceptó: “Oh, mi padre me ha enviado esto, muy bien”. Y ¿cómo se gastaba el dinero? Él invitaba a todos los sannyāsīs, en Jagannātha Purī había muchos sannyāsīs, miembros de la orden de vida de renuncia. Y cada mes ofrecía un banquete. Al cabo de unos días el Señor Caitanya preguntó a su secretario, Svarūpa Dāmodara: “Oh, ahora no recibo nunca las invitaciones de Raghunātha. ¿Qué ha pasado?”. “Oh, Señor, ha dejado de aceptar el dinero que le envía su padre”.

“Oh, eso está muy bien”. Él pensó: “Yo he renunciado a todo y estoy aquí, disfrutando del dinero de mi padre, qué tontería”. Se negó, y pidió a los sirvientes volver a casa: “No quiero dinero”. “Y ¿cómo se las arregla para vivir?”. “Oh, él espera en la escalera del Templo de Jagannātha, y cuando los sacerdotes vuelven a casa con su prasāda, le dan algo y él se siente satisfecho”. Caitanya Mahāprabhu dijo: “Oh, eso está muy bien”.

Después Caitanya Mahāprabhu preguntaba, se interesaba por cómo le iba. Pero al cabo de unos días Raghunātha dāsa Gosvāmī dejó de quedarse a esperar en la puerta. Entonces Caitanya Mahāprabhu preguntó a su secretario: “Ya no veo a Raghunātha esperando en la puerta. ¿Qué hace ahora?”. “Ah, no Señor, ha dejado de quedarse allí esperando porque ha pensado: “Oh, yo espero aquí como una prostituta a que venga alguien y me dé algo. No, no me gusta eso”. “Oh, eso está muy bien. ¿Y qué hace para comer?”. “Oh, recoge el arroz que desechan en la cocina, y se lo come”.

Y para animar a Raghunātha dāsa Gosvāmī, un día Caitanya Mahāprabhu fue a su habitación: “Raghunātha, he sabido que comes cosas muy sabrosas y que no me estás invitando”. Y Raghunātha no contestaba. Caitanya Mahāprabhu buscaba adónde había metido el arroz. Y lo encontró e inmediatamente se puso a comer: “Oh, Señor no comas eso, eso no es adecuado para Ti”. “Oh, es prasāda de Jagannātha. ¿Cómo dices que no es adecuado?”. Simplemente para animarle. Él no pensaba: “Oh, estoy comiendo estos desechos”. ¿Lo ven?

De ese modo, Raghunātha dāsa Gosvāmī fue reduciendo su comida. Y al final, sólo cada dos días tomaba un poquito de mantequilla. Eso es lo que tomaba. Y ofrecía reverencias postrándose cientos de veces, y cantaba tantísimas veces: Saṅkhyā-pūrvaka-nāma. Lo han escuchado cuando cantamos la canción de los seis Gosvāmīs. Saṅkhyā-pūrvaka-nāma-gāna-natibhiḥ kālāvasānī-kṛtau (Ṣaḍ-gosvāmy-aṣṭaka).

De modo que tenemos ejemplos muy buenos de lo que significa reducir al mínimo. Reducir al mínimo todas las necesidades materiales. Hasta reducirlas a nada. ¿Lo ven? Pero eso no es posible para todos. No traten de imitar a Raghunātha dāsa Gosvāmī. Pero ellos, debido a que eran acompañantes, eran los compañeros del Señor Caitanya, cada uno de ellos mostró algún ejemplo. Ejemplos únicos de cómo se puede progresar en conciencia de Kṛṣṇa. Pero lo nuestro no es imitarles, sino tratar de seguirles. Tratar de seguirles en la medida de lo posible. No de forma artificial.

Por eso este verso dice: “No hay posibilidad de llegar a ser un yogī...”. Si tratan de volverse inmediatamente Raghunātha dāsa Gosvāmī imitándole, fracasarán. El progreso que habrán podido hacer se habrá terminado. No, no, eso no. Tienen que comer. Pero no coman demasiado. Eso es todo. Comer demasiado no es bueno. Si son elefantes, coman cien kilos, y si son hormigas, coman un granito. No coman cien kilos imitando al elefante. ¿Lo ven? Dios ha dado comida al elefante y a la hormiga. Pero, si de verdad son elefantes, entonces coman como elefantes. Pero si son hormigas, no coman como elefantes, porque tendrán problemas.

De modo que este verso dice: “No hay posibilidad de llegar a ser un yogī, oh Arjuna, si se come demasiado o demasiado poco”. Es un plan muy bueno. No coman demasiado poco, coman lo que necesitan. Pero no coman de más. Comer es como dormir. No duerman de más. Si pueden mantenerse en buena salud, una salud perfecta... pero traten de reducirlo. Supongan que están durmiendo diez horas. Pero si yo me mantengo sano durmiendo cinco horas, ¿por qué voy a dormir diez? Ese es el proceso. No hagan las cosas de forma artificial.

En lo que al cuerpo se refiere, tenemos cuatro exigencias. Comer, dormir, aparearnos y defendernos. El defecto es que en la civilización moderna, piensan que estos procesos de comer y dormir, si podemos aumentarlos, eso es muy bueno. Si podemos pasar el sábado y el domingo, todo el día durmiendo: “Oh, es un gran beneficio, disfrutamos”. Esa es la civilización. Ellos lo ven como una oportunidad para disfrutar de la vida, dormir. Treinta horas al día. No, no la hagan. Redúzcanlo. Traten de reducirlo, pero no de forma artificial.

Continúa.

Tamal Kṛṣṇa: Verso 17: “Aquel que es regular en sus hábitos de comer, dormir, recrearse y trabajar, puede mitigar todos los sufrimientos materiales mediante la práctica del sistema de yoga (BG 6.17)”.

Prabhupāda: Simplemente... No hay necesidad, no se trata de ir a una supuesta clase de yoga y pagar cinco rupias o cinco dólares, para mantenerse en buen peso, para bajar grasas, etc., para mantenerse sano. Para mantenerse sano, simplemente tienen que practicar. La práctica es ésta: “Coman lo que necesiten, duerman lo que necesiten”. Tendrán una salud excelente. No hay necesidad de ninguna ayuda adicional. Simplemente por practicar esto mantendrán todo en orden.

Tamal Kṛṣṇa: Verso 18: “Cuando el yogī disciplina sus actividades mentales, mediante la práctica del yoga, y se sitúa en la trascendencia, libre de todos los deseos materiales; se dice que está bien establecido en el yoga (BG 6.18)”.

Prabhupāda: Sí. Mantengan la mente en equilibrio. Esa es la perfección del yoga. Y mantener la mente en equilibrio... ¿Eso cómo van a hacerlo? En el campo material no pueden mantener la mente en equilibrio. No es posible. Pongamos por ejemplo este Bhagavad-gītā. Si lo leen todos los días cuatro veces, no se cansarán. Pero prueben con cualquier otro libro. Después de llevar una hora leyendo, se cansan. Este canto: “Hare Kṛṣṇa”. Pueden cantar todo el día y toda la noche y danzar, y no se cansarán. Pero prueben con otro nombre. Al cabo de media hora, se terminó, es una molestia. ¿Lo ven?

Por eso, fijar la mente significa mantener la mente en Kṛṣṇa. Y ahí se acaba todo el yoga. Es un yogī perfecto. No tienen que hacer nada más. Simplemente fijen su mente. Sa vai manaḥ kṛṣṇa-padāravindayor vacāṁsi vaikuṇṭha (SB 9.4.18).

Si hablan, hablen de Kṛṣṇa. Si comen, coman de Kṛṣṇa. Si piensan, piensen en Kṛṣṇa. Si trabajan, trabajen para Kṛṣṇa. Y de ese modo, esta práctica del yoga acabará siendo perfecta. No de otra manera. Y esa es la perfección del yoga. Es libre de todo deseo material. Si simplemente desean para Kṛṣṇa, ¿qué sentido tiene cualquier otro deseo material? Se habrá terminado. Todos los deseos materiales se habrán terminado.

No tendrán que esforzarse por ello de forma artificial: “Oh, yo nunca más volveré a mirar a una muchacha hermosa, cerraré los ojos”. Eso no lo pueden hacer. Pero si fijan su mente en conciencia de Kṛṣṇa, están danzando con muchas muchachas hermosas. Y eso es correcto, como hermanos y hermanas. No pasa nada. Eso es práctico, es la perfección del yoga. No lo pueden lograr de forma artificial. Simplemente, en el estado de conciencia de Kṛṣṇa, tienen toda la perfección. Traten de entenderlo. Plena perfección. Porque eso es el plano espiritual. El plano espiritual es eterno, es bienaventurado y está lleno de conocimiento. Por eso no hay malas interpretaciones.

Sí, continúa.

Tamal Kṛṣṇa: Verso 19: “Del mismo modo que una lámpara no tiembla en un lugar donde no hay viento...”.

Prabhupāda: Aquí está el ejemplo, tan solo vean.

Tamal Kṛṣṇa: Verso 19: “Así, el trascendentalista que tiene la mente controlada, permanece siempre estable en su meditación en el ser trascendental (BG 6.19)”.

Prabhupāda: En esta habitación, debido a que no hay corrientes de aire, pueden ver que la llama arde de forma estable. Del mismo modo, la llama de sus mentes arderá tan estable como esta llama si absorben la mente en conciencia de Kṛṣṇa. Entonces, del mimo modo que esta llama no se agita, sus mentes no se agitarán. Y ¿cuál es entonces la perfección del yoga?

Tamal Kṛṣṇa: Versos 20 al 23: “En la etapa de la perfección, denominada trance o samādhi, la mente se abstiene por completo de las actividades mentales materiales, mediante la práctica del yoga (BG 6.20-23)”.

Prabhupāda: Samādhi no significa buscar el vacío. Eso es imposible. Kleśo 'dhikaratas teṣām avyaktāsakta-cetasām (BG 12.5).

Hay yogīs que dicen que hay que detenerse, que tienen que quedarse completamente inmóviles. Pero ¿cómo es posible que yo me quede inmóvil? Soy un espíritu móvil, eso no es posible. Inmóvil significa que cuando están firmemente establecidos en Kṛṣṇa, no hay más movimientos materiales. Eso es inmovilidad. Esas tendencias materiales no volverán a molestarles. Eso se llama inmovilidad. Pero sus movimientos hacia las actividades de Kṛṣṇa, aumentarán. Y cuanto más aumentan sus movimientos, sus actividades conscientes de Kṛṣṇa, automáticamente se quedan inmóvil en las actividades materiales. Ese es el proceso. Pero si quieren quedarse inmóviles…

Es el mismo ejemplo. El niño es un ser inquieto, no pueden hacer que el niño deje de moverse. Denle algo, denle un juego, denle una imagen bonita. Ahí entonces lo verán ocupado, no se mueve. Esa es la manera. La gente es inmóvil... no inmóvil, ¿cómo se dice? Móviles, se mueven. Pero si quieren que queden inmóviles, entonces denles una ocupación de Kṛṣṇa. Entonces estarán inmóviles. Y ese es el estado de comprensión. ¿Por qué alguien va a ocuparse en conciencia de Kṛṣṇa? A no ser que yo entienda: “Yo soy de Kṛṣṇa”. “Yo no soy de esta materia, no soy de esta nación, no soy de esta sociedad, no soy de este sinvergüenza. Soy simplemente de Kṛṣṇa”. Inmóvil. Conocimiento completo.

Esa es mi posición. Yo soy parte integral. Mamaivāṁśo jīva (BG 15.7).

“Todas estas entidades vivientes son Mis partes integrales”. Y tan pronto como entienden: “Yo soy parte integral de Kṛṣṇa”, inmediatamente quedan inmóviles en lo que se refiere a las actividades materiales.

Sí.

Tamal Kṛṣṇa: “Esto se caracteriza por la propia habilidad de ver al ser con la mente pura, y en saborear y gustar...”.

Prabhupāda: Eso es la mente pura. Mente pura significa entender: “Yo pertenezco a Kṛṣṇa”. Eso es la mente pura. La mente, ahora mismo mi mente, está contaminada. ¿Por qué? Porque yo pienso que pertenezco a esto, que pertenezco a lo otro, o lo de más allá. Pero cuando mi mente está fija, firmemente establecida: “Yo soy de Kṛṣṇa”, esa es la perfección. Sí

Tamal Kṛṣṇa: “...y en saborear y regocijarse en el ser. Y en ese estado de júbilo, el yogī se sitúa...”.

Prabhupāda: Ese regocijarse en el ser significa que Kṛṣṇa es el Súper-ser. La práctica del yoga. Yo soy un ser individual. Y cuando estoy en samādhi con Viṣṇu, el Súper-ser, el Súper-yo, entonces esa es la estabilidad de mi mente. Cuando el ser, o el yo y el Súper-yo disfrutan. El disfrute no se da en solitario. Tiene que haber dos. ¿Tienen alguna experiencia de disfrutar en solitario? No. De modo que el disfrute en solitario no es posible. El disfrute significa dos. Kṛṣṇa y ustedes. La Súperalma y el alma individual. Esa es la manera. No pueden disfrutar solos. No es su posición.

Sí, continúa.

Tamal Kṛṣṇa: “El devoto se sitúa en una felicidad trascendental ilimitada y disfruta a través de los sentidos trascendentales. Establecido así, nunca se aparta de la verdad, y al conseguir esto piensa que no hay nada mejor. Al situarse en esa posición, nunca se desconcierta, ni siquiera en medio de la mayor de las dificultades”.

Prabhupāda: En la peor de las dificultades. Si están convencidos de que: “Yo soy parte integral de Kṛṣṇa”, entonces, incluso aunque se encuentren en la situación más difícil de su vida, eso es entrega. Saben que Kṛṣṇa les protegerá. Hagan todo lo que puedan, usen su inteligencia, pero en Kṛṣṇa. Varasa neha pitaro nṛsiṁha. Si Kṛṣṇa no les protege, ningún otro remedio puede protegerles.

No hay medida de protección que les sirva. No piensen... Supongamos que estamos enfermos. Y hay muchos médicos expertos que les dan un tratamiento. Les ofrecen buenas medicinas. ¿Supone eso alguna garantía para sus vidas? No. No hay garantía. Si Kṛṣṇa no los cuida, pese a todos esos buenos médicos y buenas medicinas, morirán. Y si Kṛṣṇa les protege, pese a que no tengan un tratamiento de expertos, sobrevivirán.

De modo que quien está firmemente establecido en Kṛṣṇa, está plenamente entregado. Y una de las características de esa entrega, es que: “Kṛṣṇa me protegerá”. Entonces es feliz. Es como el niño. Él está plenamente entregado a los padres y tiene confianza. “Aquí está mi padre, aquí está mi madre”. De modo que es feliz. Kadāham aikāntika-nitya-kiṅkaraḥ (Stora-ratna 43).

Si saben que hay alguien que es su patrón, que es su salvador, ¿no se sienten feliz? Pero si lo hacen todo por sí mismos, bajo su propia responsabilidad, ¿se sienten felices? Del mismo modo, si están convencidos en conciencia de Kṛṣṇa, de que: “Kṛṣṇa me protegerá”, y si son fieles a Kṛṣṇa, eso es lo que se entiende por felicidad. No pueden ser felices de otra manera. No es posible. Eko bahūnāṁ vidadhāti kāmān (Kaṭha Upaniṣad 2.2.13).

Así son las cosas. Incluso en su actitud rebelde Kṛṣṇa les brinda protección. Sin la protección de Kṛṣṇa no pueden vivir ni por un segundo. Él es tan bondadoso. Pero cuando lo reconocen, cuando lo admiten, entonces se vuelven felices. Ahora Kṛṣṇa les está brindando Su protección, pero ustedes no lo sabe porque han tomado su vida a su propio riesgo.

Por eso Él les ha dado libertad: “Muy bien, haz lo que quieras. En la medida de lo posible, te protegeré”. Pero cuando se entregan plenamente, toda la carga pasa a Kṛṣṇa. Es una situación especial. Una protección especial. Es como un padre. El hijo que ha crecido ya no se preocupa por el padre y actúa libremente. ¿Qué puede hacer el padre? “Muy bien, haz lo que quieras”. Pero si el hijo depende completamente de la protección del padre, éste lo cuida más, lo protege más.

Eso se explica en el Bhagavad-gītā, allí verán, samo 'haṁ sarva-bhūteṣu (BG 9.29): “Yo soy ecuánime con todos”, na me dveṣyaḥ: “No tengo ningún enemigo, nadie es enemigo mío”. ¿Cómo pueden sentir envidia? Todos son hijos de Kṛṣṇa. ¿Cómo van a ser enemigos de Kṛṣṇa? Es Su hijo, no es posible. Él es amigo de todos. Pero nosotros no aprovechamos Su amistad. Y esa es nuestra enfermedad. Nuestra enfermedad. Él es amigo de todos. Samo 'haṁ sarva-bhūteṣu. Pero quien Lo reconoce, puede entender que: “Kṛṣṇa me protege de ésta manera”. Esa es la vía de la felicidad.

Continúa.

Tamal Kṛṣṇa: “Esto en verdad es estar libre de hecho, de todos los sufrimientos que surgen del contacto material. Este yoga debe practicarse con determinación y con un corazón libre de miedos”.

Verso 24: “La práctica del yoga debe llevarse a cabo con determinación y con fe. Y no hay que dejarse apartar de la senda. Se deben abandonar sin excepción, todos los deseos materiales que nacen del ego, y de ese modo, controlar todos los sentidos, en todas direcciones, con la mente (BG 6.24)”.

Significado: “El practicante de yoga debe ser determinado y debe cultivar sus prácticas con paciencia y sin desviarse”.

Prabhupāda: Esa determinación pueden ponerla en práctica, o pueden alcanzarla realmente, quienes no se entregan a la vida sexual. Su determinación es fuerte. Por eso al comienzo, el verso decía: “Sin vida sexual”. Esa es la determinación. O una vida sexual controlada. Si se entregan a la vida sexual, entonces, esa determinación no vendrá. Su determinación será inestable. Ya ven. Por lo tanto, la vida sexual debe controlarse o abandonarse. Si es posible, debe abandonarse por completo. Sino, debe controlarse. Entonces tendrán determinación. Porque al fin y al cabo, esa determinación, es una cuestión física. Esos son los métodos para obtener determinación.

Continúa.

Tamal Kṛṣṇa: “Es necesario estar seguro del éxito final y seguir la senda con gran perseverancia. Sin desanimarse si hay alguna demora en el logro del éxito”.

Prabhupāda: Determinación significa que hay que continuar con paciencia y perseverancia. “No estoy obteniendo el resultado deseado... ¿Qué es esto de la conciencia de Kṛṣṇa? Lo dejo”, no. La determinación es un hecho. Porque Kṛṣṇa está diciendo esto, debe ocurrir. Hay un ejemplo muy bueno. Hay una muchacha que está casada, tiene un esposo, y ella desea tener un hijo, y si ella piensa: “Ahora estoy casada, tengo que tener un hijo inmediatamente”, ¿es posible? Tiene que tener paciencia.

Simplemente tiene que ser una esposa fiel, tiene que servir a su marido y que su amor crezca. Y debido a que son marido y mujer, es seguro que tendrán hijos. Pero no sea impacientes. Del mismo modo, cuando se dedican al cultivo de conciencia de Kṛṣṇa, tienen garantizada la perfección. Pero tendrán que tener paciencia, determinación. “Debo practicar, no debo ser impaciente”. Esa impaciencia se debe a la pérdida de determinación. Y ¿a qué se debe esa pérdida de determinación? Al exceso de vida sexual. Esas son las consecuencias.

Continúa.

Tamal Kṛṣṇa: “El éxito es seguro para el practicante estricto. En relación con el bhakti-yoga, Rūpa Gosvāmī dice: “El proceso del bhakti-yoga se puede llevar a la práctica con éxito, mediante un entusiasmo de todo corazón, la perseverancia, la determinación, y siguiendo los deberes prescritos en compañía de devotos, y ocupándose completamente en las actividades de la bondad”.

Prabhupāda: Sí, continúa.

Tamal Kṛṣṇa: “En lo que respecta a la determinación debemos seguir el ejemplo de mamá gorriona, que perdió sus huevos en las olas del mar. Una vez una gorriona puso sus huevos en la orilla del mar, y el gran mar se los llevó con sus olas. La gorriona se vio muy afectada y pidió al mar que le devolviese los huevos. Pero el mar ni siquiera la escuchó. Así que la gorriona decidió secar el mar. Ella comenzó a…”.

Prabhupāda: Ya ven, un gorrión que trata de secar el mar. (risas) Eso se llama determinación. Es como nuestro Gandhi. Declaró la guerra a los británicos. Una guerra que era no violenta, no colaboración. ¿Lo ven? Ahí estaba su determinación. “Tengo que echar de aquí a los ingleses”. Y lo hizo. ¿Y cuál es el arma? La no violencia. “Muy bien, lucha, atácame, yo no te voy a atacar”. ¿Lo ven? Él llegó a ser... ¿cómo es esto? Determinación. La gente se reía. “Gandhi ha declarado la guerra a los ingleses, que son tan poderosos. Al imperio británico”. Y en realidad, después de perder la India, los ingleses perdieron todo su imperio. Porque era la joya del imperio británico. Perdieron todas sus posesiones en el Lejano Oriente, sus posesiones en Egipto, sus posesiones en el canal de Suez, lo perdieron todo. La determinación es algo muy bueno.

Continúa.

Tamal Kṛṣṇa: “Comenzó a sacar el agua con su pequeño pico. Y todos se reían de ella por su determinación, tan imposible. Las noticias de su actividad se difundieron y finalmente llegaron a oídos de Garuḍa, el gigantesco pájaro que sirve de montura al Señor Viṣṇu”.

Madhudviṣa: “Se llenó de compasión por su hermano pájaro, así que fue a ver a la gorriona y le prometió su ayuda. Así pues, Garuḍa pidió de inmediato al océano que le devolviese los huevos, ya que de lo contrario, él mismo emprendería el trabajo del pájaro. El océano se asustó con esto y le devolvió los huevos. De esa forma, la gorriona llegó a ser feliz por la gracia de Garuḍa (BG 6.24, significado)”.

Prabhupāda: Sí.

Madhudviṣa: “Si…”.

Prabhupāda: Así que Garuḍa vino a rescatarla. Continúa.

Madhudviṣa: Así mismo, la práctica del yoga, especialmente el bhakti-yoga con conciencia de Kṛṣṇa, puede que parezca una cuestión muy difícil. Pero si alguien sigue los principios con gran determinación, es seguro que el Señor lo ayudará, pues “Dios ayuda a aquellos que se ayudan”.

Prabhupāda: Eso es todo. Muchas gracias. ¿Alguna pregunta?

Viṣṇujana: Prabhupāda, cuando usted dijo que la determinación es importante para lograr el éxito y yo solamente quiero mantener esa determinación siempre. Quiero decir, ¿cómo se alimenta el fuego de este entusiasmo y determinación? Cuando se trata de tantas cosas con las que se puede disf…

Prabhupāda: Bueno, determinación significa que tú también serás entusiasta. Esa es una parte de la determinación Eso es todo. Utsāhād dhairyāt, tat-tat-karma… (Upadeśāmṛta 3).

Utsāha, ese entusiasmo es el verdadero comienzo de la determinación. A menos que seas entusiasta, ¿cómo puedes continuar tu determinación? Así que determinación, entusiasmo, paciencia, trabajando en los principios regulativos. Estas son las diferentes funciones de la determinación. Determinación significa una palabra de todas estas cosas, entusiasmo, paciencia, trabajo duro, con confianza. Estas son diferentes características de la determinación.

Madhudviṣa: Prabhupāda, ¿somos capaces de determinar cuánto es suficiente para dormir y cuánto es suficiente para comer?

Prabhupāda: ¿Eh?

Madhudviṣa: Cuando intentamos experimentar, intentamos reducirlo hasta que sentimos que no podemos mantener nuestra salud... porque muchas veces nos engañamos a nosotros mismos. Decimos: "Sí, necesito tanta comida, necesito dormir siete u ocho horas", pero en realidad, sabe, es solo que estamos racionalizando… (inaudible).

Prabhupāda: ¿Determinación en tomar alimentos?

Devotos: (risas)

Prabhupāda: No. ¿Cuál es tu pregunta…

Madhudviṣa: ¿Podemos, podemos confiar en nuestra propia, nuestra propia racionalización? ¿Podemos confiar en nosotros mismos para tratar de determinar cuánta comida necesitamos?

Prabhupāda: Bueno, eso debe ser, la racionalización debe estar allí. (tosiendo) pero si cometes un error al tomar menos comida, ese error no es malo.

Devotos: (risas)

Prabhupāda: (risas) No estés determinado a tomar más. Supongamos que has tomado algo de comida que es menos de lo que deberías tomar, por lo que ese error no es malo. (risas) Pero si tomas más, ese error es malo. Entonces, la racionalización, si piensas que tus actividades racionales no son adecuadas. Entonces cometes un error de este lado, menor. No cometer errores al otro lado.

Hm. No, esa confianza, al igual que la racionalización, siempre está ahí, pero uno debe ser lo suficientemente inteligente para saber cuánto necesita comer para mantener su cuerpo en forma. Eso está ahí en todos, generalmente no hay error.

Hmm. ¿Alguna otra pregunta? Está bien, canten. (fin)