ES/730419 - Clase SB 01.08.27 - Los Angeles



730419SB-Los Ángeles, 19 abril 1973 - 38:57 minutos



Prabhupāda: (dirige el canto de Jaya rādhā-mādhava) (oraciones prema-dhvanī) Muchas gracias.

(pausa)

Pradyumna: Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. Oṁ namo bhagavate vāsudevāya. (dirige el canto del verso) (Prabhupāda y los devotos repiten)

namo 'kiñcana vittāya
nivṛtta-guṇa-vṛttaye
ātmārāmāya śāntāya
kaivalya-pataye namaḥ
(SB 1.8.27)

Prabhupāda: Ahora las mujeres. (las mujeres cantan) Está bien. Ahora, significado de las palabras.

namaḥ —todas las reverencias a Ti; akiñcana-vittāya —a la propiedad del pobre en lo material; nivṛtta —completamente trascendental a las acciones de las modalidades materiales; guṇa —modalidades materiales; vṛttaye —afecto; ātma-ārāmāya —aquel que está autosatisfecho; śāntāya —el más gentil; kaivalya-pataye —al amo de los monistas; namaḥ —postrándome.

Traducción: “Mis reverencias a Ti, que eres la propiedad del empobrecido en lo material. Tú no tienes nada que ver con las acciones y reacciones de las modalidades materiales de la naturaleza. Tú estás autosatisfecho y, por consiguiente, eres el más gentil de todos y el amo de los monistas”.

Prabhupāda: Namaḥ akiñcana-vitta. Los materialmente empobrecidos. Esa es la primera cualidad del devoto. Una persona que no posee nada del mundo material, su única posesión es Kṛṣṇa, eso es akiñcana-vitta. Akiñcana significa alguien que ha perdido todos los bienes materiales. Porque mientras tengan un… un leve rastro de la idea de que: “Yo quiero ser feliz materialmente de esta forma”, tendrán que aceptar un cuerpo. La naturaleza es tan bondadosa que de cualquier manera que quieran disfrutar del mundo material, les dará un cuerpo adecuado bajo la dirección del Señor.

Porque el Señor está situado en el corazón de todos, y Él lo sabe todo, sabe que todavía quieren algo material. Él se los dará: “Sí, tómalo”. Kṛṣṇa quiere que obtengan plena experiencia de que, mediante las ganancias materiales, nunca serán felices. Eso es lo que hace Kṛṣṇa, plena libertad. Aunque tenemos una cantidad mínima de libertad, debido a que somos partes integrales de Kṛṣṇa, Kṛṣṇa tiene plena libertad, pero esa cualidad, la libertad, está también en mí porque soy parte integral de Kṛṣṇa. La composición química. La gota de agua de mar también tiene un poquito de sal, aunque no es comparable con la sal que contiene el agua del mar, pero el elemento químico, la sal, está ahí. Esa es nuestra comprensión. Janmādy asya yataḥ (SB 1.1.1). Lo que sea que tengamos en una cantidad mínima, está eso mismo en plenitud en Kṛṣṇa. En plenitud.

Como Kṛṣṇa dice: mṛtyuḥ sarva-haraś ca aham. Tenemos la propensión a tomar las cosas de los demás. Pueden decir que eso es robar, tenemos esa propensión. ¿Por qué? Porque también la tiene Kṛṣṇa. A Kṛṣṇa se le conoce con el nombre de ladrón de mantequilla. El principio, el robar. Y, a no ser que Él tenga esa propensión a robar, ¿cómo la vamos a tener nosotros? Pero los robos de Kṛṣṇa y los nuestros son diferentes. Debido a que estoy contaminado con la materia, mi robo es algo abominable, mientras que esa misma actividad, ese mismo robo en el plano espiritual absoluto es tan hermoso que es placentero: Madre Yaśodā disfruta de las actividades de Kṛṣṇa al robar. Esa es la diferencia, material y espiritual. Cualquier actividad en el plano espiritual es completamente buena, y cualquier actividad en el plano material, es completamente mala. Esa es la diferencia. En este mundo, las supuestas moralidad, bondad, son todas malas. Y en el mundo espiritual, la supuesta inmoralidad también es buena. Eso tenemos que entenderlo.

Como bailar con las esposas de otros en la oscuridad de la noche, es algo inmoral. Todo el mundo lo sabe. Por lo menos en la civilización védica no está permitido. Una mujer joven se va a ver a un hombre joven en plena noche para bailar con él, esto en la India nunca se permitiría. Sigue estando prohibido. Pero vemos que todas las gopīs, tan pronto como escuchaban la flauta, inmediatamente iban. Desde el punto de vista material es inmoral, pero desde el concepto espiritual, es la más grande moralidad. Es como Caitanya Mahāprabhu dice: ramyā kācid upāsanā vraja-vadhū-vargeṇā yā kalpitā (Caitanya-manjusa): “Oh, no hay forma mejor de adoración que la concebida por las vraja-vadhūs, las doncellas de Vṛndāvana”.

Caitanya Mahāprabhu era muy estricto en lo que se refiere a las mujeres. Incluso en su vida familiar, nunca gastó una broma a ninguna mujer. Y a él le gustaba bromear, pero siempre con hombres. Nunca jugó ninguna broma con mujeres. No. Quizás solo una vez le hizo una broma a Su esposa, Viṣṇu-priya. Cuando Śacīmātā estaba buscando algo, ella… Y él simplemente dijo una palabra en broma: “Tal vez su nuera lo ha tomado”. Esa es la única broma que encontramos en toda Su vida. Por lo demás, fue muy estricto. Cuando Él era sannyāsī, ninguna mujer podía acercarse a Él para ofrecerle reverencias, Le ofrecían reverencias desde lejos. Pero Él dice: ramyā kācid upāsanā vraja-vadhū-vargeṇā yā kalpitā. Dice que no existe un concepto mejor de adoración que el concebido por las vraja-vadhūs. Y ¿cuál era el concepto de las vraja-vadhūs? Querían amar a Kṛṣṇa, a cualquier costo. Y eso no es inmoral. Eso tenemos que entenderlo. Todo en relación…

Como Prahlāda Mahārāja. Están matando a su padre y Prahlāda Mahārāja está mirando. ¿Es moral? ¿Les gustaría ver cómo matan a su padre en su presencia y ustedes contemplándolo, no protestan? ¿Es moral eso? Nadie aprobaría, que eso fuese moral. No. Pero en realidad sucedió que Hiraṇyakaśipu estaba siendo asesinado… la imagen está aquí. Y Prahlāda Mahārāja está tratando de ponerle guirnaldas al que mata a su padre. “Mi querido señor, que matas a mi padre, toma esta guirnalda. Estás matando a mi padre. Eres muy buen muchacho”. (risas) Ya ven. Esto es, esto es comprensión espiritual. Nadie aprobaría… que si no pueden proteger a su padre, deben protestar, deben gritar: “Hey, aquí están matando a mi padre. Por favor vengan. Ayuda...”. Pero no. Está preparado con el collar de flores. Y cuando lo mataron, le dijo a Nṛsiṁha-deva: “Mi querido Señor, ahora mi padre está muerto, así que todos están felices. Ahora por favor, retira esa actitud iracunda”.

Nadie se siente ya desdichado. Uso esta misma palabra. Modeta sādhur api vṛścika-sarpa-hatyā (SB 7.9.14). Modeta sādhur api. Un sādhu, una persona santa, nunca consiente que se mate a otra persona. Nunca. Ni siquiera a un animal, el sādhu no lo aprueba. ¿Por qué se debe matar al animal? Esa es la tarea del sādhu. Pero Prahlāda Mahārāja dice: modeta sādhur api. Él sādhu, la persona santa, también está complacido. ¿Cuándo? Cuando se mata un escorpión o una serpiente. También ellos son entidades vivientes. El sādhu nunca se siente satisfecho con la muerte de otra entidad viviente, pero Prahlāda Mahārāja dice que: “Incluso el sādhu se siente complacido cuando se mata una serpiente o un escorpión. Mi padre es como una serpiente y un escorpión. Ahora lo has matado; por eso, todo el mundo es feliz”. Todo el mundo lo era… tal demonio, que simplemente causa problemas a los devotos, un demonio muy peligroso, cuando se mata a un demonio de esa categoría, hasta las personas santas están satisfechas, aunque las personas santas no quieren que se mate a nadie.

Kṛṣṇa es akiñcana-vitta. Kṛṣṇa es el único consuelo para aquel que lo ha perdido todo materialmente. Kṛṣṇa es tan bondadoso que si alguien quiere prosperidad material y, al mismo tiempo, quiere ser un devoto… eso se explica en el Caitanya-caritāmṛta, que: “Si una persona me quiere, y al mismo tiempo, quiere prosperidad material, es un necio. Son así de necios”. Por eso, a la gente les asusta tanto el acercarse al cultivo de la conciencia de Kṛṣṇa: “Oh, esto será el final de mi prosperidad material”. Porque ellos no quieren… no quieren eso. Quieren seguir con… por lo general, van a la iglesia, van al templo a pedir prosperidad material: “Dios, danos nuestro pan de cada día”. Eso es prosperidad material. O: “Dame esto, dame aquello”. Pero también a ellos se les considera piadosos, porque han acudido a Dios.

La clase atea no acuden a Dios. Dicen: “¿Por qué debo acudir a Dios? Yo crearé mi propia riqueza. Mediante el avance de la ciencia seré feliz”. Son duṣkṛtinaḥ, son muy pecaminosos, los que hablan así: “Para mi prosperidad, dependeré de mi propia fuerza, de mi propio conocimiento”. Son duṣkṛtinaḥ. Pero quienes piensan: “Mi prosperidad depende de la misericordia de Dios”, son piadosos. Son piadosos. Porque, después de todo, sin la aprobación de Dios, no se puede lograr nada. Es un hecho. Tāvad tanur idaṁ tanūpekṣitānām. Eso se afirma también en… hemos descubierto tantos métodos para disminuir nuestra condición de sufrimiento, pero si no se cuenta con la aprobación de Dios, esas propuestas de contrarrestar el sufrimiento fracasarán.

El ejemplo es… como han descubierto buenas medicinas, un médico muy calificado. Está bien. Pero cuando un hombre enfermo, pide al médico: “¿Puede garantizar la vida de este paciente?”. Nunca dirá: “No, puedo hacerlo. No puedo hacer eso. Hago lo mejor que puedo, eso es todo”. Eso significa que la última palabra la tiene, está en manos de Dios. “Yo soy simplemente un instrumento. Si Dios no quiere que vivas, entonces todas mis medicinas, todo mi conocimiento científico, mi conocimiento médico, fallarán”. La última palabra la tiene Kṛṣṇa. Esto no lo saben los necios. Son… por eso, reciben el calificativo de mūḍha, sinvergüenzas. Que sea lo que sea que estén haciendo, está muy bien, pero, si en última instancia no cuenta con la aprobación de Dios, de Kṛṣṇa, fracasarán. Ellos no saben eso. Por eso son mūḍhas. Pero el devoto sabe que: “Sea cual sea la inteligencia que yo tenga, puedo tratar de ser feliz, pero si Kṛṣṇa no lo aprueba, nunca seré feliz”. Esa es la diferencia entre devoto y no devoto.

Kṛṣṇa dice que: “Todo el que trata de acercarse a Mí para volverse consciente de Kṛṣṇa, pero al mismo tiempo quiera ser feliz materialmente, no es una persona muy inteligente”. Eso significa que está perdiendo el tiempo. Nuestra principal tarea es cómo volvernos conscientes de Kṛṣṇa. Esta es la principal misión de la vida humana. Pero si perdemos nuestro tiempo en mejoras materiales y nos olvidamos de cantar, entonces eso es una pérdida, una gran pérdida. Y de esa mentalidad, Kṛṣṇa dice: āmi vijña tare kene viṣaya diba (CC Madhya 22.39): “Este sinvergüenza me pide algo de prosperidad material mediante su práctica de servicio devocional. ¿Por qué voy a darle prosperidad material? Más bien, lo que sea que tenga, se lo quitaré”. Si. (risas) No es cosa de risa. Cuando nos lo quita, nos ponemos muy tristes. Pero esa es la prueba.

Así lo dice el propio Kṛṣṇa a Yudhiṣṭhira Mahārāja: yasyāham anugṛhṇāmi hariṣye tad dhanaṁ śanaiḥ (SB 10.88.8). Yudhiṣṭhira Mahārāja preguntó indirectamente a Kṛṣṇa: “Nosotros dependemos completamente de Ti, pero aun así sufrimos tanto materialmente, nos han quitado el reino, han insultado a nuestra esposa, han tratado de quemarnos en una casa”. Y Kṛṣṇa dijo: “Sí, esa es Mi misión principal”. Yasyāham anugṛhṇāmi hariṣye tad dhanaṁ śanaiḥ: “Cuando yo favorezco a alguien de manera especial, entonces le privo de todos sus medios de sustento”. Es muy peligroso. Si. Yo he tenido experiencia práctica en relación con esto. Si. Ese es el favor especial de Kṛṣṇa. No deseo contarlo, pero es un hecho. (risas) Es un hecho.

Entonces Kṛṣṇa dice que: “Cualquiera que esté tratando de acercarse a Mí para volverse consciente de Kṛṣṇa, al mismo tiempo que quiera ser feliz materialmente, no es muy inteligente”. Eso significa que está perdiendo el tiempo. Nuestro principal deber es cómo volvernos conscientes de Kṛṣṇa. Este es el principal deber de la vida humana. Pero si perdemos nuestro tiempo en la mejora material y nos olvidamos de cantar, entonces eso es una pérdida, una gran pérdida. Esa mentalidad, dice Kṛṣṇa: āmi vijña tare kene viṣaya diba (CC Madhya 22.39): “De modo que este sinvergüenza me está pidiendo algo de prosperidad material mediante el servicio devocional. ¿Por qué debo darle prosperidad material? Más bien, lo que sea que tenga, se lo quitaré”. Si. (risas) No se está riendo. Cuando nos lo quitan, nos ponemos muy malhumorados. Pero esa es la prueba.

Mi Guru Mahārāja me ordenó cuando tenía veinticinco años: “Ve y predica”. Pero yo pensé: “Primero que nada, voy a volverme rico y usaré ese dinero para predicar”. Es una larga historia. Tuve buenas oportunidades para hacerme muy rico en los negocios. Y un astrólogo me dijo que: “Tú deberías ser como Birla”. Hubo algunas oportunidades, muy buenas oportunidades. Fui gerente en una enorme fábrica de productos químicos. Inauguré mi propia fábrica, el negocio tuvo mucho éxito. Pero todo se vino abajo. Me vi obligado a llegar a esta situación a cumplir la orden de mi Guru Mahārāja.

Devotos: Jaya. Hari bol.

Prabhupāda: Akiñcana-vittāya. Cuando todo acabó, entonces me decidí por Kṛṣṇa: “Tú eres el único…”. Por eso, Kṛṣṇa es akiñcana-vitta. Cuando una persona se ve privada de todas sus opulencias materiales… y ahora me doy cuenta de que no he perdido, he ganado. He ganado. Es un hecho. Perder las opulencias materiales por el amor de Kṛṣṇa no es perder. Es la mayor de las ganancias. Por eso el verso dice: akiñcana-vitta. Cuando la persona es akiñcana, cuando no tiene nada, o lo pierde todo, entonces Kṛṣṇa es la única riqueza para esa persona. Porque es un devoto. Como dice Narottama dāsa Ṭhākura:

hā hā prabhu nanda-suta, vṛṣabhānu-sutā-juta
karuṇā karaha ei-bāra
narottama-dāsa koy, nā ṭheliha rāṅgā pāy
tomā bine ke āche āmāra
(Narottama dāsa Ṭhākura)

Esa es la posición: “Kṛṣṇa, excepto Tú, no tengo nada que pedir. No tengo nada, no poseo nada. Por favor no me dejes porque Tú eres mi única posesión”. Esa posición es muy buena. Cuando ya no dependemos de nada material, cuando simplemente dependemos de Kṛṣṇa, esa es la posición de primera categoría del proceso de conciencia de Kṛṣṇa. Por eso Kṛṣṇa recibe este calificativo: akiñcana-vittāya: “Cuando una persona materialmente se vuelve muy pobre, Tú eres su única riqueza”.

Akiñcana-vittāya. Namaḥ akiñcana-vitta… nivṛtta-guṇa-vṛttaye: “El resultado es que cuando la persona Te considera su única propiedad, inmediatamente se libera de las actividades de esta naturaleza material”. Lo cual significa que inmediatamente se sitúa en la posición trascendental del absoluto. Akiñcana-vittāya nivṛtta-guṇa-vṛttaye, ātmārāmāya (SB 1.8.27): “En ese momento está muy feliz contigo, tal como Tú, Kṛṣṇa, estás feliz contigo mismo”.

Porque en Kṛṣṇa no hay diferencia entre el cuerpo y el ser. Él es simplemente el ser, el alma espiritual. Ahora tenemos el cuerpo y el ser. Yo soy el ser, pero poseo este cuerpo. Y después, cuando realmente dependemos de Kṛṣṇa, tal y como Kṛṣṇa está satisfecho en el ser en sí mismo, también nosotros podemos estar satisfechos en el ser, con Kṛṣṇa. Kaivalya, kaivalya-pataye namaḥ. Los filósofos māyāvādīs, ellos son monistas y quieren volverse uno con el Supremo. Del mismo modo que el Supremo está satisfecho en sí mismo, ellos también quieren estar satisfechos en el ser, volviéndose uno con el Supremo. También nuestra filosofía es la misma: kaivalya. Pero nosotros dependemos de Kṛṣṇa. Nosotros no nos volvemos uno con Kṛṣṇa. Eso es unidad. Si simplemente aceptamos regirnos por la orden de Kṛṣṇa, entonces no hay desacuerdo, eso es unidad.

Los filósofos māyāvādīs piensan que: “¿Por qué debo mantener mi existencia individual separada? Me voy a fundir en...”. Eso no es posible. Porque nosotros hemos sido creados, no creados, desde el mismo comienzo. Somos partes integrales separadas. Somos partes integrales separadas. Por eso, Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā: “Mi querido Arjuna, tú, Yo y todas estas personas aquí reunidas en este campo de batalla, en el pasado éramos individuos, ahora, en el presente, somos individuos, y en el futuro, continuaremos siendo individuos. Todos somos individuos”. Nityo nityānāṁ cetanaś cetanānām (Kaṭha Upaniṣad 2.2.13). Él es el nitya Supremo, la Fuerza Viviente Suprema entre muchas, innumerables fuerzas vivientes. Nosotros somos jīvas, incontables, ananta. No hay posibilidad de contar cuántos somos. Sa anantyāya kalpate (CC Madhya 19.140). Somos ananta, incontables entidades vivientes y Kṛṣṇa es también una entidad viviente, pero Él es la principal. Esa es la diferencia. Nityo nityānā

Es como cuando hay un líder. El líder es uno, y los seguidores, son muchos. De manera similar, Kṛṣṇa es la Entidad Viviente Suprema, y nosotros somos entidades vivientes subordinadas y dependientes. Esa es la diferencia. Dependemos, lo podemos entender: si Kṛṣṇa no nos proporciona alimento, nos morimos de hambre. Es un hecho. No podemos producir nada. Eko yo bahūnāṁ vidadhāti kāmān (Kaṭha Upaniṣad 2.2.13).

Kṛṣṇa es el que nos mantiene y nosotros somos los mantenidos. Por eso, Kṛṣṇa es el predominador y nosotros somos los predominados. Esa es nuestra posición constitucional natural. Por eso, si queremos ser falsos predominadores en el mundo material, todo ello es una ilusión. Eso debemos abandonarlo. Debemos abandonarlo. Siempre debemos tratar de ser predominados por Kṛṣṇa. Eso es una vida exitosa.

Muchas gracias.

Devotos: Hari bol. (fin del audio) ¡Todas las glorias a Prabhupāda! (reverencias) (Video - 26:30) (kīrtana) (fin)