ES/Prabhupada 0279 - En realidad estamos sirviendo al dinero



Extracto clase BG 7.2 -- San Francisco, 11 septiembre 1968

Ahora aquí, en este capítulo, eso se explica explícitamente, quién es el Supremo objeto de adoración. Estamos adorando. Según nuestra capacidad, estamos adorando a alguien. Al menos estamos adorando a nuestro jefe. Supongamos que trabajo en una oficina o en una fábrica, tengo que adorar al jefe, tengo que cumplir con su orden. Y todo el mundo está adorando. Ahora, quién es el Supremo objeto de adoración, Kṛṣṇa, y cómo Él es el Supremo objeto de adoración, eso se explica en este capítulo. Ya svarūpaṁ sarva karaṁ ca yac ca dhiyāṁ tad ubhaya-viṣayakaṁ jñānaṁ vyaktum atra bhakti-pratijñānam.

Por consiguiente, si entendemos que aquí está el controlador Supremo, aquí está el Supremo objeto de adoración, entonces los problemas de nuestra vida se resuelven de inmediato. Estamos buscando. El otro día les conté una historia de que un devoto musulmán quería servir al más grande. Estaba sirviendo al Nawab, luego fue al emperador Barsa, luego del emperador a Haridāsa, una persona santa, y de Haridāsa fue ascendido a adorar a Kṛṣṇa en Vṛndāvana.

Entonces deberíamos ser curiosos y lo suficientemente inteligentes. Estamos sirviendo. Todos, estamos sirviendo, al menos estamos sirviendo a nuestros sentidos. Todo el mundo, prácticamente, si no están sirviendo a ningún jefe o amo, están sirviendo a sus sentidos. Supongamos que estoy sirviendo a alguien como mi jefe, realmente no estoy sirviendo su dinero o sea, no estoy al servicio de su persona, estoy sirviendo a su dinero.

Si él dice: “Desde mañana tienes que trabajar gratis, ahora estás recibiendo veinte dólares al día, a partir de mañana no tengo dinero, tendrás que trabajar gratis”. “Ah, no, no, señor. Yo no voy a venir. Porque no le estoy sirviendo a usted, estoy sirviendo a su dinero”. Así que en realidad estamos sirviendo al dinero. Y ¿por qué razón están sirviendo al dinero? Porque con el dinero podemos satisfacer nuestros sentidos. Sin dinero, no podemos satisfacer nuestros formidables sentidos. Si quiero beber, si quiero disfrutar de tal o cual cosa, entonces necesito dinero. Por eso, en última instancia, estoy sirviendo a mis sentidos.

Por consiguiente Kṛṣṇa se llama Govinda. Y en última instancia, queremos satisfacer nuestros sentidos, y go significa sentidos. Aquí está la persona, la Suprema Personalidad de Dios. Si sirven a Kṛṣṇa, entonces sus sentidos estarán satisfechos. Por eso su nombre es Govinda. En realidad, queremos servir a nuestros sentidos, pero los verdaderos sentidos, los sentidos trascendentales, son Kṛṣṇa, Govinda. Por lo tanto, bhakti, el servicio devocional, significa purificar los sentidos, para emplearlos en el servicio del supremo puro. El Señor es el Supremo puro. En el Bhagavad-gītā, en el Décimo Capítulo, encontrarán que Arjuna describe a Kṛṣṇa como: pavitraṁ paramaṁ bhavān (BG 10.12): “Tú eres el Supremo puro”.

Así que, si queremos servir los sentidos del Supremo puro, entonces tenemos que volvernos puros también. Porque sin... Ser puro significa espiritual. Vida espiritual significa una vida pura, y vida material significa vida contaminada. Tal como tenemos este cuerpo, el cuerpo material. Es un cuerpo impuro.

Por lo tanto, sufrimos de enfermedades, sufrimos de vejez, sufrimos por el nacimiento, sufrimos por la muerte. Y en nuestra verdadera forma pura, la forma espiritual, no existe tal sufrimiento. No hay nacimiento, no hay muerte, no hay enfermedades y no hay vejez. En el Bhagavad-gītā han leído: nityaḥ śāśvato 'yaṁ na hanyate hanyamāne śarīre (BG 2.20). Nityaḥ. Aunque soy el más viejo, porque estoy cambiando mi cuerpo... Soy, como alma, puro. No tengo nacimiento, no tengo muerte, sino que simplemente estoy cambiando de cuerpo. Por eso soy el más viejo. Así, aunque soy el más viejo, tengo un espíritu nuevo. Soy siempre fresco. Esta es mi posición