ES/SB 4.22.38


Su Divina Gracia A. C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada


TEXTO 38

yasminn idaṁ sad-asad-ātmatayā vibhāti
māyā viveka-vidhuti sraji vāhi-buddhiḥ
taṁ nitya-mukta-pariśuddha-viśuddha-tattvaṁ
pratyūḍha-karma-kalila-prakṛtiṁ prapadye


PALABRA POR PALABRA

yasmin—en la cual; idam—este; sat-asat—el Señor Supremo y Sus diversas energías; ātmatayā—siendo la raíz de toda causa y efecto; vibhāti—manifiesta; māyā—ilusión; viveka-vidhuti—liberado mediante una madura reflexión; sraji—en la cuerda; —o; ahi—serpiente; buddhiḥ—inteligencia; tam—a; nitya—eternamente; mukta—liberado; pariśuddha—libre de contaminación; viśuddha—pura; tattvam—verdad; pratyūḍha—trascendental; karma—actividades fruitivas; kalila—impurezas; prakṛtim—situado en el plano de la energía espiritual; prapadye—entrega.


TRADUCCIÓN

La Suprema Personalidad de Dios Se manifiesta a la vez como causa y efecto dentro del cuerpo, pero aquel que ha trascendido la energía ilusoria mediante una madura reflexión, con la cual despeja el equívoco de confundir una serpiente con una cuerda, puede entender que Paramātmā es eternamente trascendental a la creación material y que está situado en el plano de la energía interna pura. De modo que el Señor es trascendental a toda contaminación material. Solo a Él hay que entregarse.


SIGNIFICADO

La afirmación contenida en este verso se hace específicamente para desafiar la conclusión māyāvāda de la unidad sin diversidad entre el alma individual y la Superalma. La conclusión māyāvāda es que la entidad viviente y la Superalma son uno; no hay diferencia. Los māyāvādīs proclaman que no hay existencia separada fuera del Brahman impersonal, y que el sentimiento de separación es māyā, una ilusión que nos hace confundir una cuerda con una serpiente. Los filósofos mayāvādīs suelen presentar el argumento de la cuerda y la serpiente. Esa es la razón de que en este verso se mencionen de forma específica esas palabras, que representan la filosofía vivarta-vāda. En realidad, Paramātmā, la Superalma, es la Suprema Personalidad de Dios, y está eternamente liberado. En otras palabras, la Suprema Personalidad de Dios vive en el cuerpo junto con el alma individual, como se afirma en los Vedas, donde se les compara a dos amigos sentados en un mismo árbol. Con todo, Paramātmā está por encima de la energía ilusoria. La energía ilusoria recibe el nombre de bahiraṅgā śakti, o la energía externa, y la entidad viviente se denomina taṭasthā śakti, o potencia marginal. Como se explica en el Bhagavad-gītā, tanto la energía material, que se presenta como tierra, agua, aire, fuego, cielo, etc., como la energía espiritual, la entidad viviente, son energías del Señor Supremo. A pesar de que las energías son idénticas a su fuente, la entidad viviente, el alma individual, que es propensa a caer bajo la influencia de la energía externa, considera que la Suprema Personalidad de Dios y ella son uno.

En este verso también es significativa la palabra prapadye, pues se refiere a la conclusión del Bhagavad-gītā (18.66): sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja. En otro pasaje, el Señor dice: bahūnāṁ janmanām ante jñānavān māṁ prapadyate (Bg. 7.19). Las palabras prapadye y śaraṇaṁ vraja se refieren a la entrega del alma individual a la Superalma. El alma individual, cuando se entrega, puede entender que la Suprema Personalidad de Dios, aunque está en el corazón del alma individual, es superior a ella. El Señor siempre es trascendental a la manifestación material, aunque parezca que Él y la manifestación material son lo mismo. Según la filosofía vaiṣṇava, Él es uno y diferente a la vez. La energía material es una manifestación de Su potencia externa, y, siendo la potencia idéntica a su fuente, parecería que el Señor y el alma individual fuesen uno; pero en realidad, el alma individual está sometida a la influencia de la energía material, mientras que el Señor siempre es trascendental a esa energía. Si el Señor no fuese superior al alma individual, no tendría sentido hablar de prapadye, entregarse a Él. Esa palabra, prapadye, se refiere al proceso de servicio devocional. Nadie puede aproximarse a la Verdad Absoluta mediante simples especulaciones no devocionales acerca de la cuerda y la serpiente. Por lo tanto, se subraya que, a la hora de entender la Verdad Absoluta, el servicio devocional es más importante que la reflexión o la especulación mental.