ES/SB 8.8.25

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Su Divina Gracia A. C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada


TEXTO 25

tasyāḥ śriyas tri-jagato janako jananyā
vakṣo nivāsam akarot paramaṁ vibhūteḥ
śrīḥ svāḥ prajāḥ sakaruṇena nirīkṣaṇena
yatra sthitaidhayata sādhipatīṁs tri-lokān


PALABRA POR PALABRA

tasyāḥ—de ella; śriyaḥ—la diosa de la fortuna; tri-jagataḥ—de los tres mundos; janakaḥ—el padre; jananyāḥ—de la madre; vakṣaḥ—el pecho; nivāsam—la morada; akarot—hizo; paramam—suprema; vibhūteḥ—de la opulenta; śrīḥ—la diosa de la fortuna; svāḥ—propios; prajāḥ—descendientes; sa-karuṇena—con misericordia favorable; nirīkṣaṇena—por mirar a; yatra—en donde; sthitā—permanecer; aidhayata—aumentó; sa-adhipatīn—con los grandes directores y líderes; tri-lokān—los tres mundos.


TRADUCCIÓN

La Suprema Personalidad de Dios es el padre de los tres mundos, y Su pecho es la morada de madre Lakṣmī, la diosa de la fortuna, la propietaria de toda opulencia. Con su mirada favorable y misericordiosa, la diosa de la fortuna puede aumentar la opulencia de los tres mundos, junto con sus habitantes y sus directores, los semidioses.


SIGNIFICADO

Conforme al deseo de Lakṣmīdevī, la diosa de la fortuna, la Suprema Personalidad de Dios le dio Su pecho por residencia, para que ella, con su mirada, pudiese favorecer a todos, desde los semidioses a los seres humanos corrientes. En otras palabras, como su morada está en el pecho de Nārāyaṇa, la diosa de la fortuna ve, de modo natural, a todo devoto que adora a Nārāyaṇa. Cuando ella descubre a un devoto con disposición a ofrecer servicio devocional a Nārāyaṇa, se siente naturalmente inclinada a bendecirle con toda clase de opulencias. Los karmīs tratan de recibir el favor y la misericordia de Lakṣmī, pero, como no son devotos de Nārāyaṇa, su opulencia es inestable. La opulencia de los devotos que están apegados al servicio de Nārāyaṇa no es como la opulencia de los karmīs. La opulencia de los devotos es permanente, como la del propio Nārāyaṇa.