ES/740128 - Clase SB 01.16.35 - Hawai


His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda


740128SB-Los Angeles, 28 enero 1974 - 30:50 minutos



Pradyumna: (dirige el canto del verso) (Prabhupāda y los devotos repiten)

kā vā saheta virahaṁ puruṣottamasya
premāvaloka-rucira-smita-valgu-jalpaiḥ
sthairyaṁ samānam aharan madhu-māninīnāṁ
romotsavo mama yad-aṅghri-viṭaṅkitāyāḥ
(SB 1.16.35)

(cortado) (dirige el canto de los sinónimos)

Traducción: ¿Quién puede tolerar, entonces, los tormentos de estar separado de esa Suprema Personalidad de Dios? Él pudo conquistar la gravedad y apasionada ira de amadas Suyas tales como Satyabhāmā, mediante Su dulce sonrisa amorosa, Su agradable mirada y Sus sinceros ruegos. Cuando Él recorría mi superficie [de la Tierra], yo me sumergía en el polvo de Sus pies de loto, y de ese modo quedaba cubierta de grama suntuosamente, que parecía ser mi vello que estaba erizado por el placer”.

Prabhupāda: Kā vā saheta virahaṁ puruṣottamasya. Puruṣottama. Hay dos palabras, puruṣa y prakṛti. Prakṛti significa “la disfrutada” o “la energía”, y puruṣa significa “el disfrutador” y... o “el poderoso”. Nosotros somos prakṛti. Nosotros, las entidades vivientes, somos prakṛti. Así lo afirma el Bhagavad-gītā: prakṛteḥ hi me parām vidhi, apareyam itas tu prakṛti me...

Devoto: Prakṛtiṁ vidhi me parām.

Prabhupāda: Prakṛtiṁ vidhi me parā (BG 7.5). Puruṣāṁ śāśvatam: Kṛṣṇa es la Persona Suprema y el disfrutador supremo, puruṣa. El puruṣa tiene diferentes aspectos: expansión personal, su rasgo personal, la Suprema Personalidad de Dios. Y también tiene dos tipos de rasgos como expansión: svāṁśa, vibhinnāṁśa, Sus expansiones personales y las expansiones separadas. Todos nosotros somos expansiones separadas, vibhinnāṁśa, pequeñas partículas. Es como la luz del Sol. La luz del Sol es una combinación de partículas centellantes, moléculas muy pequeñas. La luz del Sol significa que no es homogénea, está formada por pequeñas partículas brillantes, que son partes integrales del Sol. Del mismo modo, nosotros, las entidades vivientes, somos así: pequeñas partículas, partes integrales de Dios. También nosotros estamos brillando, brillando. No somos obscuros. Pero debido a nuestro contacto con la naturaleza material, ahora estamos cubiertos. Por ello, nuestra cualidad luminosa ahora se ha detenido. Ahora esa capacidad de brillar no existe. Eso se debe a que hemos olvidado nuestra relación con el puruṣa Supremo, puruṣottama, uttama puruṣa. Uttama, madhyama y adhyama. Hay tres grados de puruṣa. Nosotros pertenecemos al grado más bajo, adhyama. Entonces, debido a que somos adhyama puruṣa, existe la posibilidad de que a veces nuestro brillo se vea cubierto. Pero podemos revivir de nuevo nuestro brillo y brillar con la Persona Suprema. Como el Sol y la luz del Sol brillan juntos, del mismo modo, nosotros podemos volver de nuevo a nuestra propia posición constitucional, Kṛṣṇa es como el Sol y entonces nosotros como partículas brillantes, nuestra vida será un éxito. Eso es lo que se necesita.

Por eso, Kṛṣṇa, el puruṣottama viene, para llevarnos de regreso. “¿Por qué tú estás cubierto ahora, tu brillo está cubierto? Te pones triste. Estás sufriendo una triple condición miserable de existencia material. ¿Por qué estás aquí pudriéndote?”. Sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja (BG 18.66). Kṛṣṇa viene personalmente. Él está en el corazón de todos. Él nos instruye. Él está dispuesto a instruirnos, pero Él sólo va a instruir a las personas que se han ocupado en servicio devocional. Kṛṣṇa está allí, existe, del mismo modo que está el amo y los trabajadores también. El jefe habla a las personas importantes, no a la personas comunes. Del mismo modo, el jefe está ahí en el corazón de todos:

īśvaraḥ sarva-bhūtānāṁ
hṛd-deśe arjuna tiṣṭhati
brahmāyan sarva-bhūtāni
yantrārūḍhāni māyayā
(BG 18.61)

Cualquier cosa que obtengamos para el disfrute de nuestros sentidos, eso es con la sanción, la sanción del puruṣa, la Persona Suprema. El aspecto paramātmā es madhyama puruṣa. Él es purusottama. Puruṣottama es la Persona Suprema, y la Persona Suprema mediante Su expansión en la forma de Súperalma está presente en el corazón de todos. Īśvaraḥ sarva-bhūtānām. Él nos guía como un amigo. Él nos guía como un amigo, pero habla directamente con la entidad viviente tan pronto como nosotros nos purificamos debido al servicio devocional. Teṣāṁ satata-yuktānāṁ bhajatāṁ prīti-pūrvakam (BG 10.10). Y tenemos que alcanzar esa cualidad, entonces Kṛṣṇa, puruṣottama, nos hablará desde dentro, tal y como habló desde dentro a Brahmā: tene brahma hṛdā ādi-kavaye (SB 1.1.1).

Tenemos que capacitarnos para hablar con la Persona Suprema y Él nos dará consejos. Nos está dando consejos. Está dispuesto a darnos consejos desde dentro y desde fuera, desde dentro como la Súperalma y desde fuera en la forma del maestro espiritual. Por eso la Escritura dice: guru-kṛṣṇa-kṛpāya bhakti-latā-bīja (CC Madhya 19.151). Se necesitan ambas cosas: guru y Kṛṣṇa. Si somos sinceros, si realmente queremos a Kṛṣṇa, Kṛṣṇa está en sus corazones. Él les ayudará a encontrar al maestro espiritual, Su representante. Y mediante la instrucción del maestro espiritual, desarrollarán cada vez más su conciencia de Kṛṣṇa, su posición original. A esto se le llama servicio devocional o bhakti-latā. Bhakti-latā-bīja. Es como una pequeña enredadera, primero hay que sembrar la semilla y regarla, luego poco a poco brota y poco a poco, quiero decir, crece. Del mismo modo, por la misericordia de Kṛṣṇa y Su representante, el guru, el maestro espiritual, obtienen la semilla del bhakti-latā, el servicio devocional, y si la siembran dentro del corazón, mālī haya sei bīja kare āropaṇa. Al igual que si toman una semilla, una buena semilla, y si la siembran y vierten agua poco, poco, entonces crecerá y se convertirá en un enorme árbol o una gran enredadera y les dará los frutos. Y los disfrutarán. De manera similar, el maestro espiritual da el bhakti-latā-bīja en colaboración con Kṛṣṇa. Eso se llama iniciación. La iniciación significa sembrar la semilla del servicio devocional. Pero si piensan que después de recibir la iniciación: “Ya soy perfecto. Ahora de nuevo, las tonterías que estaba haciendo, seguiré haciéndolas”, entonces será inútil. Será inútil. Supongamos que obtienen una semilla, si no la cuidan adecuadamente, si no la riegan como es debido, entonces no va a crecer, se va a secar.

mālī hañā sei bīja kar āropaṇa
śravaṇa-kīrtana-jale karaye secana
(CC Madhya 19.152)

Entonces, esta iniciación significa que por la misericordia de Kṛṣṇa a través de Su agente, el maestro espiritual, van a recibir la semilla del bhakti-latā. Y tienen que cuidar esta semilla siguiendo las instrucciones. No es que: “Ahora ya tengo un maestro espiritual y ya he recibido la iniciación, misión cumplida. Ahora puedo hacer toda clase de tonterías”. No. En esta ceremonia de iniciación, prometemos no hacer vida sexual ilícita, no comer carne, nada de juegos de azar, nada de tomar drogas, alcohol, etc., lo van a prometer ante el fuego. La ceremonia de fuego significa que el fuego también es una representación del yajña-puruṣa, el yajña-puruṣa come a través del fuego, puruṣottama. Entonces, está el fuego, está el maestro espiritual, están los śāstras, está Kṛṣṇa, y todos ellos son testigos. Al igual que ante el juez del tribunal superior, la persona va y promete: “Sí, hablaré... todo lo que voy a decir ante este tribunal es la verdad”. Y el juez conoce esta promesa, y emite su veredicto conforme a ello. Del mismo modo, estas promesas deben cumplirse, de lo contrario, será inútil. Esa es su misión, guru-kṛṣṇa... por la misericordia del guru, por la misericordia de Kṛṣṇa, obtienen todo. Ahora, que lo utilicen como es debido, eso depende de ustedes. Guru-kṛṣṇa-kṛpāya bhakti-latā-bīja (CC Madhya 19.151). Puedo darles algo muy bueno, pero lo guardan bajo llave en su tesoro y nunca lo usan, entonces ¿qué será? Mālī haya sei bīja kare āropaṇa. Tienen que sembrarla y echarle agua y ver que esté creciendo bien. Esto se explica muy bien en Rupa-śikṣā, mālī hay sei bīja kare āropaṇa. Así que no piensen que después de la ceremonia oficial de iniciación su misión y la suya han terminado. No. Eso es el comienzo de nuestra misión. No es el final, es el comienzo. Si no van más allá de esto, ādau guru-āśrayaḥ... el comienzo es refugiarse en un guru. Eso es el comienzo. Y adau guru-āśrayam sad-dharma-pṛcchā, después el estudiante tiene que ser muy inquisitivo, sad-dharma-pṛcchā. Sādhu-mārga-anugamanam. Encontrarán todas estas instrucciones en el Néctar de la Devoción.

Hoy algunos de ustedes van a recibir iniciación. Este es el comienzo de su vida espiritual. Pero si no se preocupan por un mayor desarrollo, eso depende de ustedes. Pueden caer. Porque māyā es muy fuerte. Māyā colocará tantos impedimentos. No quiere que vayan de regreso al hogar, de vuelta a Dios tan fácilmente. Esa es la función de māyā. Daivī hy eṣā guṇamayī (BG 7.14). Esa es la función de la policía. La función de la policía es ver que el criminal en realidad, ha vuelto a su conciencia original para convertirse en ciudadano respetuoso de la ley. De lo contrario, la policía seguirá castigándolo. Esa es la función de la policía. Del mismo modo, esta māyā es la policía. Su función es castigarles. Y esto sucede a cada instante. Ei rūpe brahmāṇḍa brahmite kona bhāgyavān jīva (CC Madhya 19.151).

Así que vida material significa estar dentro de la jurisdicción de māyā, y ella siempre nos está castigando. Anādi-bahirmukha jīva kṛṣṇa bhuli gela ataeva māyā tare gola bhagiya. Porque hemos tratado de olvidar a Kṛṣṇa y eso no es bueno para nosotros. Eso se explica también en el Śrīmad-Bhāgavatam:

ya eṣāṁ puruṣaṁ sākṣād
ātma-prabhavam īśvaram
avajānanti na bhajanty
sthānād bhraṣṭāḥ patanty adhaḥ
(SB 11.5.3)

Les doy un ejemplo práctico. Este dedo es parte integral de mi cuerpo, pero si se enferma, ya no puede seguir actuando como dedo mío. Se convierte simplemente en una causa de sufrimiento. Y si en algún momento el médico aconseja: “A menos que se corte este dedo, toda la mano se va a envenenar”, y debe cortar para salvar los otros dedos. Del mismo modo, todos somos partes integrales del Señor Supremo. Cuando somos desobedientes, cuando nos enfermamos... desobedecer a Dios significa estar enfermo, porque siempre tenemos que obedecer a alguien, incluso en nuestro mal llamado estado de desobediencia, no nos importa Dios. Está bien, no les importa Dios, pero van a tener que preocuparse por alguien más. Eso es obligatorio. No pueden decir: “A mí no me importa nadie”. Eso no es posible. Si no les preocupa Dios, van a tener que preocuparse por otros. Si no les importa, si no les preocupa la ley del estado, entonces van a tener que preocuparse del departamento de policía. Nunca se puede decir “soy independiente”. Eso no es posible. Así que, nuestra posición consiste en haber olvidado a Dios y ser pateados constantemente por māyā. La māyā nos ha dado los sentidos, y los sentidos nos están dictando, nos están ordenando constantemente: “Haz esto, haz aquello, haz esto, haz aquello”, y nos hemos convertido en sirvientes de nuestros sentidos.

Hay dos cosas. Constitucionalmente son sirvientes. No piensen que son el amo. Pero cuando olvidan o abandonan el servicio del Señor, entonces se convierten en sirvientes de sus sentidos, de māyā. Esa es su posición. Entonces, cuando voluntariamente renuncien a este servicio de los sentidos y se entreguen al Señor de los sentidos, Hṛṣīkeśa... otro nombre de Kṛṣṇa es Hṛṣīkeśa. Hṛṣīka-īśa. Hṛṣīka significa sentidos. Senayor ubhayor madhye rathaṁ sthāpaya me 'cyuta (BG 1.21). Acyuta y hṛṣīkeśa,... así pues Hṛṣīkeśa es el amo de los sentidos, Kṛṣṇa. Cuando nosotros en nuestras condiciones actuales olvidamos al amo de nuestros sentidos, entonces, lo que hacemos es aceptar a los sentidos como nuestro amo, esta es nuestra situación. Hemos olvidado al amo de los sentidos, pero hemos aceptado a los sentidos como amos. Entonces eso es... eso tiene que ser purificado, no ser los sirvientes de los sentidos, sino ser los sirvientes del amo de los sentidos. Entonces también llegan a ser amos de los sentidos. Ese proceso purificatorio se denomina servicio devocional o bhakti. Así lo explica el Nārada Pañcarātra: sarvopādhi vinirmuktaṁ tat paratvena nirmalam (CC Madhya 19.170).

Ahora bien, ¿cómo hemos llegado a ser sirvientes de nuestros sentidos? Debido a tantas falsas identificaciones: “Soy estadounidense, soy hindú, soy musulmán, soy cristiano, yo soy esto, soy aquello, soy...”. Tantas designaciones. Y esas falsas designaciones significa ser sirviente de los sentidos. Falsa identificación significa convertirse en sirviente. Entonces tenemos que olvidar nuestra designación. Desde este punto de vista de la iniciación, todo el mundo debe considerar que: “Ya no soy más americano, ya no soy más hindú, ya no más esto o aquello”. “No soy hindú, no soy cristiano, soy un sirviente de Kṛṣṇa”. Entonces estarán libres de las falsas identificaciones: “Soy un sirviente de Kṛṣṇa”, jīvera svarūpa haya nitya kṛṣṇa dāsa (CC Madhya 20.108-109). Entonces quedan libres de falsas identificaciones e inmediatamente se purifican. Sarvopādhi vinirmuktaṁ tat paratvena nirmalam. Nirmalam significa impecable, inmaculado. En ese momento, se vuelven inmaculados, se vuelven hṛṣīkena... reciben sus sentidos, y entonces sus sentidos se ocupan en el servicio del amo de los sentidos. Eso se llama bhakti. Hṛṣīkena hṛṣīkeśa sevanaṁ bhaktir ucyate (CC Madhya 19.170).

Estas cosas están muy detalladas y bien explicadas en nuestros libros. Así que los que van a recibir iniciación, tienen que hacer un voto de no caer nunca más. Tomarse con mucha fuerza de los pies de loto de Kṛṣṇa y así no caerán. Mām eva ye prapadyante māyām etāṁ taranti te (BG 7.14). Así que tengan determinación. No hagan de esto una farsa que: “Hoy soy iniciado y mañana lo dejo todo de nuevo y me vuelvo a dejar crecer el pelo y luego me voy al infierno”. No. No hagan eso. Si quieren ser serios, entonces el camino está despejado para ir de regreso al hogar.

māṁ ca 'vyabhicāreṇa
bhakti-yogena sevate
sa guṇān samatītyaitān
brahma-bhūyāya kalpate
(BG 14.26)

Tan pronto como se ocupan en servicio devocional, se purifican de toda contaminación material. Sa guṇan samatītyaitān. Nos causan problemas las tres modalidades de la naturaleza material, pero si nos atenemos estrictamente a nuestro servicio devocional... no es muy difícil seguir los cuatro principios regulativos. Nada de vida sexual ilícita. No se trata de dejar de tener vida sexual, sino de no tener vida sexual ilícita. Por desgracia, son tan desdichados que aunque ya tienen una esposa, se van con otra mujer, y aunque la mujer ya tiene un marido, se va con otro hombre. Tan desdichados. Esas cosas deben detenerse si quieren ser serios; sino será una farsa y no pueden hacer lo que quieran. No puedo darles protección. Eso no es posible.

Por lo tanto, tienen que seguir estas reglas y regulaciones si son sinceros. Entonces reciben la iniciación. De no ser así, no hagan una farsa. No hagan de esto una farsa. Eso es lo que les pido. Hay que tener mucha determinación, bhajante māṁ dṛḍha-vratāḥ. Se utiliza esta palabra en el Bhāgavatam: dṛḍha-vratāḥ, una fuerte determinación: “Sí, en esta vida voy a ir de regreso al hogar, de vuelta a Dios”. Esa es determinación. Y ¿cuál es la dificultad? No hay dificultad. Canten el mantra Hare Kṛṣṇa. Van a recibir las cuentas, el rosario, dieciséis rondas. Pueden terminarlas, por lo mucho en dos o tres horas, y tienen veinticuatro horas. Por supuesto, si quieren dormir veintitrés horas, eso es otra cosa. Tienen que reducir al mínimo su sueño. Si no pueden terminar dieciséis rondas, entonces no deben dormir ese día, no deben comer. ¿Por qué no se olvidan de comer? ¿Por qué entonces se olvidan de cantar Hare Kṛṣṇa? Esto es negligencia, aparādha, ofensa. Más bien, deben olvidarse de dormir y comer y deben terminar dieciséis rondas. A esto se le llama determinación. A esto se le llama determinación. Sean bienvenidos a esta ceremonia a recibir iniciación, pero si ustedes quieren ser descuidados, si quieren dejarlo de lado, si quieren hacer de esto una farsa, eso es asunto suyo. Y yo no puedo darles ninguna protección.

Muchas gracias.

Devoto: Todas las glorias a Śrīla Prabhupāda. (cortado)

Devoto: ¿Preguntas, Prabhupāda?

Prabhupāda: ¿Hum?

Devoto: ¿Ninguna pregunta?

Prabhupāda: No hay preguntas ahora. (fin)