ES/761029 - Clase SB 05.05.07 - Vrndavana

His Divine Grace A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupāda



761029SB-Vrndavana, 29 octubre 1976 - 32:58 minutos



Pradyumna: Traducción: “Una persona puede ser muy sabia y muy erudita, pero si no entiende que el esfuerzo por complacer los sentidos es una inútil pérdida de tiempo, esa persona está loca. Habiendo olvidado sus propios intereses, trata de ser feliz en el mundo material, centrando sus intereses entorno a su hogar, que se basa en las relaciones sexuales y que le trae todo tipo de miserias materiales. De ese modo esta persona no es mejor que un necio animal”.

Prabhupāda:

yadā na paśyaty ayathā guṇehāṁ
svārthe pramattaḥ sahasā vipaścit
gata-smṛtir vindati tatra tāpān
āsādya maithunyam agāram ajñaḥ
(SB 5.5.7)

Para comprender el verdadero interés personal en la vida, tenemos que ser vipaścit, personas cultas, eruditas. Todo mundo trabaja, sobre todo los karmīs, los jñānīs, los yogīs y los devotos mixtos, pero trabajan por su interés personal. Los devotos también, mientras existe el ser, la persona, también habrá el interés de la persona. Hay una pequeña diferencia, y es que los devotos trabajan por el interés del súper ser. Está el yo, pero se buscan los intereses del súper ser. Mientras que los karmīs, jñānīs, yogīs, trabajan por el propio interés individual. El interés del propio ser tiene que existir. Ésa es la diferencia entre la lujuria o el deseo de disfrute y el amor, prema. La diferencia entre lujuria o deseo de disfrute y el amor, se explica en el Caitanya-caritāmṛta. Parece casi lo mismo, pero Kṛṣṇadāsa Kavirāja Gosvāmī nos da una definición muy clara: ātmendriya-prīti-vāñchā-tāre bali 'kāma' (CC Adi 4.165). Cuando aspiramos a complacer nuestros propios sentidos, eso se llama kāma o lujuria. Y kṛṣṇendriya-prīti-vāñchā dhare 'prema' nāma: y cuando lo que nos interesa es satisfacer los sentidos de Kṛṣṇa, eso es prema. Y el ejemplo concreto se da en el Bhagavad-gītā, al principio Arjuna pensaba en el interés de su familia: “¿Cómo puedo matar a mis hermanos, a mis sobrinos, a mi maestro, a quienes me han enseñado, a mi abuelo?”, él pensaba en función de sus intereses familiares.

Para las personas materialistas, hay dos variedades de interés propio, de interés del ser. Uno es el interés concentrado y el otro es el interés expandido. Es como un niño, si le dan algo de comida, un pastel, inmediatamente se lo comerá, si es un poco generoso, se lo dará también a sus amigos. Antes que nada, él quiere comer, y después sus amigos: “Oh, estás comiendo, dame algo”. “Está bien, toma tú también”. Entonces esto se llama interés extendido, y el principio es el interés personal, anna brahman: “Yo debo…”. La autoconservación es la primera ley de la naturaleza. Y eso lo encontramos en nuestras actividades cotidianas. Supongamos un gran líder político, al comienzo puede estar interesado en su familia, en los miembros de su familia, pero a veces se plantea también los intereses nacionales, los intereses de todos los habitantes de su país o de su sociedad, o su comunidad. Y entonces surgen las luchas entre una comunidad y otra comunidad, una familia y otra familia, una nación y otra nación, porque la extensión del interés personal no hace que las cosas sean perfectas. Esa extensión de nuestros propios intereses debe llegar hasta Viṣṇu. En este caso será perfecta. Pero eso no lo saben, porque no tienen idea de la existencia de Viṣṇu, el Señor Supremo o Kṛṣṇa. Na te viduḥ svārtha-gatiṁ hi viṣṇum (SB 7.5.31). Ellos no lo saben. Piensan que: “He extendido mis intereses personales a mi país, a mi familia. Ahora soy un gran hombre”. Y también la gente le rinde honores. De eso tenemos experiencia práctica. Pero eso es un interés personal extendido. Eso no es verdadera filantropía.

La filantropía es cuando centramos nuestro interés en los intereses de Kṛṣṇa. Esa es la verdadera filantropía. En caso contrario, no es más que kāma. No se puede ni hablar de prema. Pero se hace pasar como prema, deśa-bhakti, amor por la humanidad. ¿Mmm? Son cosas que se dan en todo el mundo, pero todo esto son cosas imperfectas. Los supuestos filantropía, altruismo, humanitarismo, son todos… imperfectos, na te viduḥ svārtha-gatiṁ hi viṣṇum (SB 7.5.31). Eso no es interés personal. No es el interés personal… Es como si con estos dedos, yo tomo un buen pastel, un rasagullā. Pero si los dedos piensan que: “Nosotros lo hemos obtenido, nosotros lo usaremos”, todos los dedos juntos, lo estropean. Pero si los dedos piensan: “Démoslo al estómago”, eso será del interés de todos. Tan pronto como el rasagullā va al estómago, la energía se distribuye no solo a estos dedos de la mano derecha, sino también a los dedos de la mano izquierda. Esta es la ley que ellos no conocen. Esta ley no la conocen. Y por eso es yadā na paśyanti, paśyaty ayathā guṇehām. Todo el mundo se esfuerza a nivel comunitario, nacional e individual por su propio interés. Eso no es bueno. Svārthe pramattaḥ. No saben cuál es su verdadero interés personal.

Yadā na paśyaty ayathā guṇehāṁ svārthe. Todo el mundo debe estar interesado, pero svārtha. Eso es svārtha, que, si obtienen una comida sabrosa, si la llevan al estómago, eso es verdadero svārtha. No se resuelve solamente el interés de los dedos que han recogido el alimento, tasmin tuṣṭe jagat tuṣṭaḥ. Yathā taror mūla, prāṇopahārāc ca yathendriyāṇām (SB 4.31.14). Si ponen el alimento de esta manera, no de una forma necia, tenemos que poner el alimento dentro del cuerpo. Y en el cuerpo hay nueve agujeros: la boca, los ojos, los oídos y los genitales, el recto, el ombligo. Hay nueve orificios. Si algún sinvergüenza dice que cualquier agujero servirá, que puede poner el alimento por cualquier agujero… A veces se hace así. Cuando una persona no puede comer, el alimento pasa al cuerpo a través del recto, a través de la nariz. Y eso es muy penoso. Pero el verdadero proceso es, es un solo proceso, se pone el alimento dentro del cuerpo por la boca. Entonces tendrá que llegar al estómago, y a partir de ahí la energía se distribuirá, todos serán felices. De manera similar, si servimos a Kṛṣṇa, si cumplimos las órdenes de Kṛṣṇa y lo satisfacemos, tal como Él dice: sarva-dharmān parityajya mām ekaṁ śaraṇaṁ vraja (BG 18.66), esa es la perfección de la vida. Si actuamos de otra manera, olvidando a Kṛṣṇa… El verso dice: gata-smṛtir vindati tatra tāpān. Si olvidamos a Kṛṣṇa, si hacemos nuestro propio plan para satisfacernos a nosotros mismos, a la comunidad, a la sociedad, a la nación, eso es olvido, y el resultado será gata-smṛtir vindati tatra tāpān. Lo único que consiguen son problemas. En realidad, eso está ocurriendo. El mundo entero esta sumido en el olvido de Kṛṣṇa, de Dios. El olvido de Kṛṣṇa, y están haciendo muchos planes para ser felices, pero el resultado es vindati tāpān, simplemente sufrimiento, simplemente sufrimiento. Nunca dará resultado.

El mismo ejemplo, yathā taror mūla-niṣecanena tṛpyanti tat-skandha-bhujopaśākhāḥ (SB 4.31.14). El proceso consiste en verter agua en la raíz del árbol, entonces el árbol crecerá de una forma exuberante. Pero si no conocen el proceso, si se ponen a regar hoja por hoja, rama por rama, ramita por ramita, no harán otra cosa que simplemente perder el tiempo. Pueden decir: “Estoy echando agua sobre esta hoja, sobre esa hoja, sobre esa...”. Tomará… No pueden. Hay tantas hojas en el árbol que no es posible hacerlo individualmente. Pero si ponen el agua, si vierten el agua en la raíz, entonces es muy fácil, y todas las hojas, las ramitas, las flores y los frutos, se nutren. De eso se trata. Yathā taror mūla-niṣecanena tṛpyanti tat-skandha-bhujopaśākhāḥ, prāṇopahārāc ca yathendriyāṇām (SB 4.31.14). Y al ofrecer comida al estómago, todos los indriyas, los sentidos, se vuelven vigorosos, fuertes. De manera similar, sarvārhaṇam acyutejyā, si satisfacen a Kṛṣṇa, acyuta ijyā, entonces toda la sociedad, toda la comunidad, todos los seres vivos, todos estarán satisfechos. Si simplemente impulsan este movimiento para la conciencia de Kṛṣṇa, entonces todas las diferentes actividades de la sociedad humana se realizarán muy bien. Pero si se dedican a este nacionalismo, a este comunismo, nunca será perfecto.

Tenemos el ejemplo en nuestro país. En muchos países, no solo nuestro país. En su país también, al presidente Kennedy le mataron. A muchos otros presidentes también —en nuestro país mataron a Gandhi— porque así no se puede satisfacer a todo el mundo. No es posible. Esos supuestos socialismo, comunismo, altruismo, humanitarismo nunca podrá satisfacer a todos. No es posible. Kāmādīnāṁ kati na katidhā pālitā durnideśās teṣāṁ jātā mayi na karuṇā na trapā nopaśāntiḥ (CC Madhya 22.16). Estos diferentes tipos de “ismos”, buscan simplemente satisfacer distintos deseos. No es el programa.

dharmaḥ svanuṣṭhitaḥ puṁsāṁ
viṣvaksena kathāsu yaḥ
notpādayed yadi ratiṁ
śrama eva hi kevalam
(SB 1.2.8)

Eso es simplemente una pérdida de tiempo. Estamos repitiendo lo mismo, na te viduḥ svārtha-gatiṁ hi viṣṇuṁ durāśayā ye bahir-artha-māninaḥ (SB 7.5.31). Durāśayā. La gente trata de ser feliz mediante tantos bahir-artha, tantos deseos externos. Artha, artha significa el verdadero interés. Y anartha, anarthopaśamaṁ sākṣād bhakti-yogam adhokṣaje (SB 1.7.6). Artha significa cómo satisfacer a Kṛṣṇa. Eso es artha. Las Escrituras dicen arthadam. Arthadam. Pueden alcanzar el verdadero interés de la vida.

kaumāra ācaret prājño
dharmān bhāgavatān iha
durlabhaṁ mānuṣo janma
adhruvam apy arthadam
(SB 7.6.1)

La forma de vida humana, aunque adhruvam… Todos, no podemos continuar con este cuerpo todo el tiempo. Se acabará, dehāntara-prāptiḥ (BG 2.13), otro cuerpo. Y esta es la regla general para todas las entidades vivientes, ya sea que tengan un cuerpo de perro o un cuerpo de cerdo o un cuerpo humano. No van a permanecer, no van a perdurar. Tienen que cambiarlo. Por eso se llama adhruvam. Pero la ventaja especial de esta forma de vida humana —dice Prahlāda Mahārāja—, es que, aunque es adhruvam, no va a permanecer, pero es arthadam, pueden ver satisfecho su verdadero interés personal.

kaumāra ācaret prājño
dharmān bhāgavatān iha
durlabhaṁ mānuṣaṁ janma
tad apy adhruvam arthadam
(SB 7.6.1)

Debemos entender esto, que, aunque tenemos un cuerpo, y el perro también tiene un cuerpo, estamos compuestos de la misma forma, kṣitir āp tej marud vyoma: mente, inteligencia y ego… No hay diferencia. El perro tiene mente, y yo tengo mente, ustedes tienen su mente. El perro tiene inteligencia, nosotros también tenemos inteligencia. El perro come, nosotros también comemos. El perro duerme, también nosotros dormimos. En lo que se refiere a la constitución corporal no hay diferencia. Y a nivel superficial, si cortan mi cuerpo saldrá sangre, si cortan el cuerpo de un animal saldrá sangre. De modo que, en todos los aspectos, en lo que concierne al cuerpo material, son lo mismo, ya sea que se trate del ser humano o de un pequeño insecto. La misma construcción fisiológica, anatómica, todo es igual. Pero la diferencia es que en uno de los cuerpos no hay arthadam, pero en el cuerpo humano si hay arthadam. Pueden llegar a comprender su posición, y pueden actuar en consecuencia, pueden hacer que su vida sea un éxito. Esa es la ventaja especial de la forma de vida humana.

Por eso las Escrituras dicen: yadā na paśyaty ayathā guṇehām. Estamos luchando, guṇe, en el mundo material. Guṇamayī. Māyā, māyā recibe el nombre de guṇamayī. Guṇe significa en māyā. Īhā, īhā significa aspiración. Todo el mundo se esfuerza de acuerdo con las diferentes modalidades de la naturaleza material. Todo mundo trabaja conforme a sattva-guṇa, rajo-guṇa, tamo-guṇa. Es decir, que todo es guṇe īhā. Mientras no somos conscientes de que: “Estoy trabajando bajo la influencia de la naturaleza material en diferentes estados de vida, todo ello es inútil”. Tan pronto como ven que todo ello es inútil, sahasā vipaścit, esa es la verdadera iluminación. Y tan pronto como vemos, gracias a la guía del maestro espiritual, del maestro espiritual genuino, gracias a la guía personal de Kṛṣṇa, tan pronto como llegamos a entender esto, que simplemente estamos perdiendo el tiempo, simplemente perdiendo nuestro tiempo, śrama eva hi kevalam (SB 1.2.8). Cuando, al comienzo, entendí una única canción de Bhaktivinoda Ṭhākura: māyā-jāle baddha ho'ye ācho miche kāj lo'ye, Bhaktivinoda lo ha dicho. Muchas veces lo ha dicho.

māyār bośe jāccho bhese'
khāccho hābuḍubu bhāi
jīv kṛṣṇa-dās, ei viśvās,
korle a 'ār duḥkho nāi

Muy instructivas, las canciones de Bhaktivinoda Ṭhākura son muy instructivas, sencillas. También las de Narottama dāsa Ṭhākura.

Entonces:

hari hari biphale janama goṅāinu
manuṣya-janama pāiyā, rādhā-kṛṣṇa nā bhajiyā,
gjāniyā śuniyā biṣa khāinu

Se lamenta, dice: “Mi Señor, he recibido esta forma de vida humana. Desafortunadamente, simplemente la desperdicié”. ¿Por qué? Rādhā-kṛṣṇa nā bhajiyā manuṣya-janama pāiyā, rādhā-kṛṣṇa nā bhajiyā. “Es exactamente como beber veneno a sabiendas”. A veces nos envenenamos sin saberlo, comemos algo envenenado o tomamos algún veneno. Pero quien toma veneno a sabiendas, eso significa que se está suicidando. Él lo sabe. De manera similar, en esta forma de vida humana, si no llegamos a esta comprensión, sahasā vipaścit, de que: “Sin conciencia de Kṛṣṇa, simplemente estoy tomando veneno”, entonces desperdiciamos nuestra vida. Gata-smṛtir vindati tatra tāpān. Simplemente nos veremos en unas circunstancias miserables. Así funciona la naturaleza material, daivī hy eṣā guṇamayī mama māyā dur... (BG 7.14). No pueden escapar de las estrictas leyes de la naturaleza material. Seguirán sufriendo, sufriendo. Mṛtyu-saṁsāra vartmani (BG 9.3). Sufrirán una y otra vez, en este cuerpo y en el siguiente cuerpo, y en el siguiente cuerpo. Así es la naturaleza. Pero ahaṅkāra-vimūḍhātmā kartāham iti manyate (BG 3.27). Estos sinvergüenzas llevados por el prestigio falso, el conocimiento falso, la educación falsa, piensan que: “Soy independiente, puedo hacer lo que quiera”, ahaṅkāra-vimūḍhātmā kartāham (BG 3.27). Tenemos que renunciar a esto. Entonces vipaścit, sahasā vipaścit. De lo contrario, tenemos que continuar con esta miserable condición de vida. Gata-smṛtiḥ: porque hemos olvidado nuestra verdadera posición.

Y ¿cuál es nuestra posición? Nuestra posición es como la describe Caitanya Mahāprabhu: jīvera svarūpa haya nitya-kṛṣṇa-dāsa (CC Madhya 20.108-109). Nuestra verdadera posición es que soy un sirviente eterno de Kṛṣṇa. Gata-smṛtiḥ, eso lo he olvidado. Y por ello, bhuliyā tomāre saṁsāre āsiyā peye nānā-vidha byathā. La canción de Bhaktivinoda Ṭhākura: “Mi Señor, olvidándote, he venido al mundo material y simplemente estoy sufriendo”. Peye nānā-vidha byathā. Eso mismo se explica en las Escrituras védicas, eso mismo nos enseña el devoto avanzado, iluminado y liberado. Lo mismo: ese olvido. Hemos olvidado cuál es nuestra posición. Temporalmente, debido a que he adquirido este cuerpo en la India, pienso: “Soy hindú, así que mi interés es la India”. Y alguien más piensa: “Mi interés es estadounidense, mi interés es brāhmaṇa, mi interés es śūdra, mi interés es esto, mi interés es aquello”. Hemos creado tantos intereses. Eso tiene que rectificarse.

vyavasāyātmikā buddhir
ekeha kuru-nandana
bahu-śākhā hy anantāś ca
buddhayo 'vyavasāyinām
(BG 2.41)

Sean profesionales. La gente dice: “Habla como si fuera un profesional. ¿Por qué estás diciendo tonterías?”. Entonces Kṛṣṇa dice: “Sí”. El hombre de negocios tiene un interés, el verdadero hombre de negocios: yavasāyātmikā vbuddhir ekeha kuru-nandana. Aquel que está realmente interesado en una forma profesional de obtener algún beneficio, arthadam, entonces lo único que le interesa es cómo volverse consciente de Kṛṣṇa. De lo contrario inventarán tantos intereses. Bahu-śākhā hy anantāś buddhi avyavasāyinām. Quien no es un verdadero hombre de negocios, que es un sinvergüenza, crea tantas ramas de intereses diferentes. Pero el único interés es cómo satisfacer a Kṛṣṇa. Este es nuestro único deber. Pero olvidando esa actividad, gata-smṛtir vindati tatra tāpān: en todo lo que hacemos, no hacemos más que sufrir. Tāpān āsādya, en realidad está saboreando una condición miserable. Entonces, ¿cómo actúan? Esta es la conclusión de este verso, la conclusión es como se ven frustrados en cada paso que dan, al mismo tiempo que trabajan arduamente.

Vemos que la gente trabaja muy duro, día y noche. Van a los negocios o van a la oficina desde la mañana a las cinco hasta las diez de la noche, trabajan. En las grandes ciudades, vean cómo van los pasajeros diariamente, cómo van colgados en los autobuses, así van. ¿Por qué? ¿Por qué están trabajando tan duro? No es nada sencillo. ¿Por qué trabajan tanto? La respuesta es maithuna, entregarse a la vida sexual, eso es todo. No tienen otra felicidad que la de las relaciones sexuales que disfrutarán por la noche. Por ello trabajan sin parar. De lo contrario, no hay otra felicidad. Todo es cero. La única felicidad positiva, él piensa de ese modo. Yan maithunādi-gṛhamedhi-sukhaṁ hi tucchaṁ kaṇḍūyanena karayor iva duḥkha-duḥkham (SB 7.9.45). Esa es la única felicidad. No es un secreto. La gente está trabajando muy duro, simplemente maithunyam agāram. Es una prisión, agāram. Agāram significa empaquetado, encadenado con cadenas de hierro. Y la única felicidad es maithunyam agāram. Y esto es abominable, tuccham. Yan maithunādi-gṛhamedhi-sukhaṁ hi tuccham. Entonces, ¿cómo ha llegado a aceptar esta clase más baja de felicidad como el objetivo de la vida? Ajñaḥ, sinvergüenza. La conclusión es ajñaḥ. No se vuelvan ajñaḥ; sean inteligentes. Y kṛṣṇa yei bhaje, sei baḍa catura. No sean sinvergüenzas, no se queden como…

Muchas gracias.

Devotos: Jaya Śrīla Prabhupāda. (fin)