ES/Prabhupada 0131 - Es muy natural rendirse al padre



Extracto clase BG 7.11-16 -- Nueva York, 5 octubre 1966

Esta locura, esta alucinación, esta ilusión de este mundo material, es muy difícil de superar. Es muy difícil. Pero el Señor Kṛṣṇa dice: mām eva ye prapadyante māyām etāṁ taranti te. Si alguien voluntariamente, o entendiendo su miserable vida, si se entrega a Kṛṣṇa: “Mi querido Kṛṣṇa, te olvidé por tantas vidas. Ahora entiendo que Tú eres mi padre, Tú eres mi protector. Me entrego a Ti”. Al igual que un niño perdido va al padre: “Mi querido padre, fue por mi error que me alejé de tu protección, pero he sufrido. Ahora vengo a ti”. El padre lo abraza: “Mi querido hijo, vamos. Estaba tan ansioso por ti todos los días. Oh, estoy muy feliz de que hayas vuelto”. El padre es muy amable.

Estamos en la misma posición. Tan pronto como nos entreguemos al Señor Supremo... eso no es muy difícil. La entrega de un hijo al padre, ¿es un trabajo muy difícil? ¿Creen que es un trabajo muy difícil? Un hijo se rinde a su padre. Es bastante natural. No hay ofensa. El padre siempre es superior. Así que, si toco los pies de mi padre, si me inclino ante mi padre, es glorioso. Es glorioso para mí. No hay ofensa. No hay dificultad. ¿Por qué no debemos rendirnos a Kṛṣṇa?

Este es el proceso. Mām eva ye prapadyante. “Todas estas entidades vivientes desconcertadas, cuando se entregan a Mí”, māyām etāṁ taranti te, “ya no tienen las miserias de la vida”. Se ponen de inmediato bajo la protección del padre. Encontrarán al final del Bhagavad-gītā: ahaṁ tvāṁ sarva-pāpebhyo mokṣayiṣyāmi mā śucaḥ (BG 18.66).

Cuando el padre... cuando el niño viene al pecho de su madre, la madre lo protege. Si hay algún peligro, la madre está preparada para dar su vida primero, luego la vida del niño. Del mismo modo, cuando estamos bajo la protección de Dios, entonces no hay temor.