ES/SB 10.11: Los pasatiempos infantiles de Krsna 3
Texto 10.11.1: Śukadeva Gosvāmī continuó: ¡Oh, Mahārāja Parīkṣit!, cuando los árboles yamalaarjuna cayeron, todos los pastores del vecindario escucharon el terrible sonido ycorrieron al lugar, temerosos de que hubiera sido un rayo.
Texto 10.11.2: Cuando vieron los árboles yamala-arjuna derribados en el suelo, se sintieron confusos, porque, aunque podían constatar el hecho de que los árboles habían caído,no podían dar con la causa.
Texto 10.11.3: Kṛṣṇa seguía atado al ulūkhala, el mortero que arrastraba tras de Sí. Pero, ¿cómoiba a haber derribado Él los árboles? ¿Quién lo había hecho? ¿Dónde estaba lacausa de aquel suceso? Reflexionando en todas esas cosas asombrosas, los pastoresestaban dudosos y confusos.
Texto 10.11.4: Entonces todos los pastorcillos dijeron: Fue Kṛṣṇa quien lo hizo. Cuando pasó porentre los dos árboles, el mortero quedó atravesado. Kṛṣṇa tiró del mortero, y losdos árboles cayeron. Después de eso, dos hombres muy hermosos salieron de losárboles. Lo hemos visto con nuestros propios ojos.
Texto 10.11.5: Debido al intenso cariño paternal, Nanda y los pastores de vacas no podían creerque Kṛṣṇa hubiera arrancado los árboles de aquella forma maravillosa. Así, lesera imposible tener fe en las palabras de los niños. Algunos de ellos, sin embargo,dudaban: «Según las predicciones, Kṛṣṇa es como Nārāyaṇa. Bien podría haberlohecho Él».
Texto 10.11.6: Al ver que su hijo estaba atado al mortero de madera y que lo arrastraba tras de Sí,Nanda Mahārāja sonrió y liberó a Kṛṣṇa de Sus ataduras.
Texto 10.11.7: Las gopīs solían decir: «Mi querido Kṛṣṇa, si bailas Te daré la mitad de un dulce».Diciendo esas palabras o dando palmadas, las gopīs animaban a Kṛṣṇa de distintasformas. En esas ocasiones, Él, aunque era la Personalidad de Dios, supremamentepoderoso, sonreía y bailaba conforme a sus deseos, como si fuese un muñeco ensus manos. A veces, cuando ellas Se lo pedían, cantaba en voz muy alta. De esemodo, Kṛṣṇa estaba sometido por completo a las gopīs.
Texto 10.11.8: A veces, madre Yaśodā o sus amigas gopīs decían a Kṛṣṇa: «Tráeme esto», o «Tráemeaquello». A veces Le ordenaban que les trajese una tarima‚ un medidor o unos zapatosde madera, y Kṛṣṇa, al recibir la orden de Sus madres, trataba de llevarles lo quepedían. Sin embargo, otras veces, como si no fuera capaz de levantar esos objetos, Se limitaba a tocarlos y quedarse quieto a su lado. Solo por dar placer a Sus familiares, Segolpeaba el cuerpo con los brazos para demostrar que tenía fuerza de sobra.
Texto 10.11.9: Para los devotos puros que, por todo el mundo, podían entender Sus actividades,la Suprema Personalidad de Dios, Kṛṣṇa, mostró hasta qué punto puede sometersea Sus devotos, Sus sirvientes. De ese modo, aumentó el placer de los vrajavāsīs conSus actividades infantiles.
Texto 10.11.10: Una vez, una vendedora de fruta anunciaba a voces: «¡Oh, habitantes de Vṛndāvana!,¡vengan aquí si quieren comprar un poco de fruta!». Al escucharla, Kṛṣṇa tomó inmediatamente un puñado de granos de cereal y fue a cambiárselos por fruta, comosi tuviese necesidad de ella.
Texto 10.11.11: Casi todos los granos que Kṛṣṇa llevaba en la mano se Le cayeron por el caminomientras corría a toda prisa hacia la vendedora. Ella, sin embargo, Le llenó lasmanos con fruta. Entonces, su cesto se llenó de joyas y oro.
Texto 10.11.12: Cierto día, después de que Kṛṣṇa arrancase los árboles arjuna, Rohiṇīdevī fue allamar a Rāma y a Kṛṣṇa, que habían ido a orillas del río y estaban completamenteabsortos en jugar con los demás niños.
Texto 10.11.13: Kṛṣṇa y Balarāma Se habían apegado tanto a Su juego con los demás niños que noregresaron cuando Rohiṇī Los llamó. Ella entonces envió a madre Yaśodā a buscarlos, pues madre Yaśodā era más cariñosa con Kṛṣṇa y Balarāma.
Texto 10.11.14: Kṛṣṇa y Balarāma estaban tan apegados a Su juego con los demás niños que, aunque era muy tarde, seguían jugando. Madre Yaśodā fue entonces a llamarlos paraque fuesen a comer. Debido al cariño y al amor extático que sentía por Kṛṣṇa yBalarāma, la leche fluía de sus senos.
Texto 10.11.15: Madre Yaśodā dijo: Mi querido hijo Kṛṣṇa, Kṛṣṇa de ojos de loto, ven aquí y bebela leche de mi pecho. ¡Oh, cariño mío!, debes de estar muy cansado con el hambrey la fatiga de jugar tanto tiempo. Ya no tienes que seguir jugando.
Texto 10.11.16: Mi querido Baladeva, alegría de nuestra familia, por favor, ven inmediatamente conTu hermano menor, Kṛṣṇa. Los dos han comido esta mañana, y ahora deben comerun poco más.
Texto 10.11.17: Nanda Mahārāja, el rey de Vraja, les está esperando para comer. ¡Oh, mi queridohijo Balarāma!, Les está esperando. Así pues, vengan para complacernos. Todos losniños que están jugando contigo y con Kṛṣṇa deben regresar ya a sus hogares.
Texto 10.11.18: Madre Yaśodā dijo además a Kṛṣṇa: Mi querido hijo, llevas todo el día jugando ytienes todo el cuerpo cubierto de polvo y arena. Así pues, regresa, ven a bañarte y aasearte. Hoy la Luna está en conjunción con la auspiciosa estrella de Tu nacimiento.Por lo tanto, sé puro y da vacas en caridad a los brāhmaṇas.
Texto 10.11.19: Mira a todos Tus amiguitos, que son de Tu misma edad. Están muy limpios, y susmadres les han adornado con hermosas alhajas. Debes venir aquí, y una vez que Tehayas bañado, que hayas tomado Tu almuerzo y estés bien adornado con alhajas,podrás volver a jugar con Tus amiguitos.
Texto 10.11.20: Mi querido Mahārāja Parīkṣit, llevada de su intenso amor y cariño, madre Yaśodā,la madre de Kṛṣṇa, consideraba a Kṛṣṇa, que era la expresión máxima de todaopulencia, su propio hijo. Así tomó a Kṛṣṇa y a Balarāma de la mano y Les llevóa casa, donde cumplió con sus deberes bañándoles, vistiéndoles y dándoles decomer.
Texto 10.11.21: Śrī Śukadeva Gosvāmī continuó: Cierto día, considerando los grandes trastornosvividos en Bṛhadvana, todos los pastores de vacas adultos, bajo la dirección deNanda Mahārāja, se reunieron para tomar medidas destinadas a acabar con losconstantes trastornos que sufrían en Vraja.
Texto 10.11.22: En aquella reunión de todos los habitantes de Gokula, un pastor llamado Upananda,que era el más maduro en edad y en conocimiento, y que tenía mucha experienciaen consideraciones de momento, circunstancias y país, hizo la siguiente sugerenciapara beneficio de Rāma y Kṛṣṇa.
Texto 10.11.23: Upananda dijo: Mis queridos amigos pastores de vacas, si queremos hacer un bien aeste lugar, Gokula, debemos irnos de aquí, pues ya hemos visto que constantementesurgen causas de perturbación, y que todas ellas son intentos de matar a Rāma y aKṛṣṇa.
Texto 10.11.24: De alguna forma, por la misericordia de la Suprema Personalidad de Dios, el niñoKṛṣṇa Se salvó de las garras de la rākṣasī Pūtanā, que estaba decidida a matarle.Después, y de nuevo por la misericordia del Dios Supremo, no fue aplastado porla carreta de mano que se desplomó sobre Él.
Texto 10.11.25: Y, de nuevo, el demonio Tṛṇāvarta, en la forma de un torbellino, se llevó al niñopor esos peligrosos cielos para matarle; sin embargo, cayó y se estrelló contra unaroca. También en ese caso, por la misericordia del Señor Viṣṇu o de Sus sirvientes,el niño volvió a salvarse.
Texto 10.11.26: El otro día, sin ir más lejos, ni Kṛṣṇa ni ninguno de los niños que jugaban con Élmurieron pese a la caída de los árboles, aunque estaban muy cerca, o incluso entrelos dos árboles. Eso también debemos considerarlo misericordia de la SupremaPersonalidad de Dios.
Texto 10.11.27: Todos esos siniestros han sido causados por algún demonio cuya identidad desconocemos. Antes de que venga aquí a causar más molestias, debemos irnos con losniños a otro lugar, hasta que esas perturbaciones dejen de producirse.
Texto 10.11.28: Entre Nandeśvara y Mahāvana hay un lugar llamado Vṛndāvana. Es un lugar idóneo,porque en él hay abundancia de hierba, plantas y enredaderas para las vacas y demásanimales. Tiene hermosos jardines y altas montañas, y ofrece muchos recursos parala felicidad de todos los gopas y gopīs, así como para nuestros animales.
Texto 10.11.29: Por lo tanto, vayámonos inmediatamente, hoy mismo. No hay por qué esperar más.Si están de acuerdo conmigo, preparemos los carros de bueyes, situemos las vacaspor delante y vayámonos.
Texto 10.11.30: Tras escuchar el consejo de Upānanda, los pastores de vacas lo aceptaron porunanimidad. «Muy bien —decían—, muy bien». Entonces resolvieron sus asuntosdomésticos, subieron a los carros sus ropas y demás objetos, y partieron inmediatamente hacia Vṛndāvana.
Texto 10.11.31-32: Cuando todos los ancianos, mujeres y niños, con todo el mobiliario doméstico,estuvieron en los carros de bueyes, y una vez que las vacas estuvieron frente a loscarros, los pastores de vacas tuvieron la precaución de empuñar sus arcos y flechas yde hacer sonar sus cuernos. ¡Oh, rey Parīkṣit!, de esa forma, acompañados del sonido de los cuernos, los pastores de vacas, con sus sacerdotes, comenzaron el viaje.
Texto 10.11.33: Las esposas de los pastores, montadas en los carromatos, iban muy bien vestidas,con ropas de excelente calidad. Sus cuerpos, y en especial sus senos, estaban maquillados con polvo de kuṅkuma fresco. En el camino se deleitaban en cantar lospasatiempos de Kṛṣṇa.
Texto 10.11.34: Muy complacidas de escuchar los pasatiempos de Kṛṣṇa y Balarāma, madreYaśodā y Rohiṇīdevī, para no separarse de Kṛṣṇa y Balarāma ni por un momento,se subieron con ellos en un carromato. En esa situación, todos tenían un aspectomuy hermoso.
Texto 10.11.35: De ese modo llegaron a Vṛndāvana, donde la vida es agradable en todas las estaciones. Allí dispusieron un lugar donde vivir provisionalmente, formando una medialuna con sus carros.
Texto 10.11.36: ¡Oh, rey Parīkṣit!, a la vista de Vṛndāvana, Govardhana y las orillas del río Yamunā,Rāma y Kṛṣṇa sintieron un gran placer.
Texto 10.11.37: De ese modo, Kṛṣṇa y Balarāma, actuando como niños pequeños y balbuceandoSus primeras palabras, daban placer trascendental a todos los habitantes de Vraja.Con el paso del tiempo, crecieron lo bastante como para cuidar de los terneros.
Texto 10.11.38: No muy lejos del lugar en que vivían, Kṛṣṇa y Balarāma, que tenían toda clase de juguetes, jugaban con otros pastorcillos de vacas y cuidaban de los terneros más pequeños.
Texto 10.11.39-40: A veces, Kṛṣṇa y Balarāma tocaban la flauta, a veces lanzaban a los árboles unascuerdas y piedras ideadas para coger fruta, a veces Se limitaban a tirar piedras, y a veces, acompañados del tintineo de Sus campanitas tobilleras, jugaban al fútbol confrutas de bael y āmalakī. A veces Se cubrían con sábanas e imitaban a las vacas y lostoros, luchando unos con otros y rugiendo en voz muy alta. A veces imitaban las voces de los animales. Así jugando, se divertían como dos niños humanos corrientes.
Texto 10.11.41: Un día en que Rāma, Kṛṣṇa y los demás pastorcillos habían llevado los terneros aorillas del río Yamunā, un nuevo demonio se presentó en el lugar para matarles.
Texto 10.11.42: Cuando vio que el demonio había adoptado la forma de un ternero y que se habíamezclado con los demás animales, la Suprema Personalidad de Dios indicó aBaladeva: «Ahí tenemos otro demonio». Entonces, muy despacio, fue acercándoseal demonio como si no conociera sus intenciones.
Texto 10.11.43: Entonces, Śrī Kṛṣṇa sujetó al demonio por las patas traseras y la cola, hizo girarel cuerpo del demonio con mucha fuerza hasta que murió, y lo lanzó a lo alto deun árbol kapittha, que se vino abajo junto con el cuerpo del demonio, que habíaadoptado una forma enorme.
Texto 10.11.44: Al ver el cadáver del demonio, todos los pastorcillos exclamaron: «¡Bien hecho,Kṛṣṇa! ¡Muy bien, muy bien! ¡Muchas gracias!». En el sistema planetario superior,todos los semidioses, sintiéndose complacidos, derramaron lluvias de flores sobrela Suprema Personalidad de Dios.
Texto 10.11.45: Tras la muerte del demonio, Kṛṣṇa y Balarāma terminaron Su desayuno y, mientras cuidaban de los terneros, siguieron paseándose de un lugar a otro. Kṛṣṇa yBalarāma, las Supremas Personalidades de Dios, que mantienen la creación entera,cuidaban ahora de los terneros como dos pastorcillos corrientes.
Texto 10.11.46: Un día, Kṛṣṇa, Balarāma y los demás niños, cada uno de ellos con su correspondiente grupo de terneros, llevaron a los animales a una alberca para que bebiesen. Cuando los terneros acabaron de beber, también los niños saciaron su sed conaquellas aguas.
Texto 10.11.47: Junto a la alberca, los niños vieron un cuerpo gigantesco que parecía el pico de unamontaña derribado y roto por un rayo. La simple vista de aquel descomunal serviviente les hacía sentir miedo.
Texto 10.11.48: Aquel demonio de enorme cuerpo se llamaba Bakāsura, y había adoptado la formade un pato con un pico muy aguzado. Al llegar allí, se tragó a Kṛṣṇa.
Texto 10.11.49: Al ver que el gigantesco pato había devorado a Kṛṣṇa, Balarāma y los demás niñosquedaron prácticamente inconscientes, como sentidos sin vida.
Texto 10.11.50: Kṛṣṇa, que era el padre del Señor Brahmā pero que hacía el papel de hijo de un pastor de vacas, Se volvió como el fuego, quemando la raíz de la garganta del demonioBakāsura, que tuvo que vomitarle inmediatamente. Cuando el demonio vio queKṛṣṇa, pese a haber sido tragado, estaba ileso, Le atacó de nuevo con su aguzadopico, sin aguardar ni un instante.
Texto 10.11.51: Al ver que el demonio Bakāsura, el amigo de Kaṁsa, se empeñaba en atacarle, Kṛṣṇa,el líder de los vaiṣṇavas, cogió con Sus manos las dos mitades del pico del demonioy, ante todos los pastorcillos de vacas, partió al demonio por la mitad con la mismafacilidad con que un niño divide en dos una brizna de hierba vīraṇa. Al matar aldemonio de esa forma, Kṛṣṇa dio gran satisfacción a los habitantes del cielo.
Texto 10.11.52: En ese momento, los habitantes celestiales del sistema planetario superior derramaron sobre Kṛṣṇa, el enemigo de Bakāsura, una lluvia de flores mallikā-puṣpa, unasflores que se cultivan en Nandana-kānana. También Le felicitaron con el sonido detimbales y caracolas celestiales, y con ofrendas de oraciones. Al ver todo aquello, lospastorcillos de vacas no salían de su asombro.
Texto 10.11.53: Del mismo modo que los sentidos se serenan cuando se recobra la conciencia,cuando Kṛṣṇa Se liberó de aquel peligro, todos los niños, con Balarāma entre ellos,pensaron que habían vuelto a la vida. Después de abrazar a Kṛṣṇa con su concienciaya serena, reunieron a sus terneros y regresaron a Vrajabhūmi, donde proclamaronen voz muy alta lo ocurrido.
Texto 10.11.54: Los pastores de vacas y sus esposas, cuando escucharon el relato de la muertede Bakāsura en el bosque, estaban muy asombrados. Al ver a Kṛṣṇa, después deescuchar el relato, Le dieron una efusiva bienvenida, pensando que Él y los demásniños regresaban de las fauces de la muerte. Ahora que Kṛṣṇa y los demás niñosestaban a salvo, les miraban sin decir nada, y no querían apartar la vista de ellos.
Texto 10.11.55: Nanda Mahārāja y los pastores de vacas reflexionaban: Es de lo más sorprendenteque este niño, Kṛṣṇa, Se haya visto en tantos peligros mortales y que, por la graciade la Suprema Personalidad de Dios, hayan sido los mismos que causaban el peligroquienes acabaron muriendo en vez de Él.
Texto 10.11.56: Aunque los daityas que Le pusieron en peligro de muerte eran realmente feroces,ninguno de ellos pudo matar a este niño, Kṛṣṇa. Al contrario, por haber venido amatar niños inocentes, tan pronto como se acercaron, fueron ellos mismos quienesmurieron, como moscas que se precipitan en el fuego.
Texto 10.11.57: Las palabras de las personas que poseen pleno conocimiento del Brahman nuncaresultan falsas. Es muy maravilloso que todo lo que Garga Muni predijo, lo estemosviviendo ahora palabra por palabra.
Texto 10.11.58: De ese modo, Nanda Mahārāja y los pastores de vacas disfrutaban de gran placertrascendental comentando los pasatiempos de Kṛṣṇa y de Balarāma, y ni siquierapercibían las miserias materiales.
Texto 10.11.59: De ese modo, Kṛṣṇa y Balarāma pasaron Su infancia en Vrajabhūmi ocupados enactividades y juegos infantiles. Así, jugaban al escondite, a construir un puenteimaginario sobre el océano, y a saltar de un lado a otro como los monos.